Manipulación por el miedo y uso del poder económico.
Los ataques a la civilización cristiana han cursado los últimos 20 siglos.
Todas fueron amenazas, pero ninguna se consolidó en algo permanente.
Dios siempre intervino y volvió a encauzar su creación.
Y en el momento actual estamos cursando quizás el ataque más peligroso, porque abarca a todo el planeta y los atacantes tienen ya el dominio sobre la mayoría de las instituciones.
Aquí hablaremos sobre las bases que tiene el plan, de donde viene la fortaleza de su poder y cuáles son las descabelladas propuestas que tienen para reiniciar el mundo, sacándolo fuera de los parámetros de Dios.
En su libro «La era tecnotrónica» publicado en 1970, Zbigniew Brzezinski, ex asesor de seguridad nacional del presidente Carter dijo que,
«La era tecnotrónica implica la aparición gradual de una sociedad más controlada».
(estamos hablando que lo dijo hace 50 años)
«Una sociedad así estaría dominada por una élite, sin las restricciones de los valores tradicionales»
Y agrega algo que ya se está haciendo realidad
«Pronto será posible ejercer una vigilancia casi continua sobre cada ciudadano y mantener archivos completos actualizados que contengan incluso la información más personal sobre el ciudadano».
Y esto aplica para todo el planeta.
Y es hacia donde dirigen el mundo los políticos influyentes, porque Jean-Claude Junker, presidente de la Unión Europea hasta 2019, dijo hablando sobre la omnipresencia del globalismo, «quienes promuevan el nacionalismo insensato pagarán el precio», en un clara amenaza contra las desviaciones.
Por lo tanto el nuevo orden mundial será globalizado, pero no será ni democrático ni representativo y se basará en la vigilancia por medios digitales.
Y la pandemia ha sido la excusa para dar un gran salto adelante en este proyecto de terminar con la civilización cristiana, que está basado en la familia, viviendo éstas en naciones, con sus propias expresiones culturales y en libertad.
El actor central de este proceso, ha sido el Foro Económico Mundial, que es una entidad privada que está reuniendo desde hace 50 años a políticos, monarquías, grandes capitalistas, representantes de multinacionales, etc, o sea las élites del mundo.
Y lo hacen para conspirar contra la civilización cristiana.
Sostienen que los gobiernos ya no son los actores dominantes en el escenario mundial y que ha llegado el momento de un nuevo paradigma para la gobernanza internacional.
El Foro Económico Mundial, postula que un mundo globalizado es mejor gestionado por una coalición de corporaciones multinacionales, organizaciones multilaterales como la ONU y organizaciones de la sociedad civil seleccionadas.
Y consideran que el destino de la ONU no es ser la expresión de los gobiernos nacionales, sino el eje de un sistema de gobernanza del mundo entre agentes públicos y privados.
Y de hecho han estado trabajando durante años para desmantelar las democracias nacionales.
Las reuniones del Foro Económico Mundial, si fueron antes parte de una gran conspiración, ahora son un real golpe de estado silencioso a la civilización occidental.
En un video de enero del 2021 https://youtu.be/uPYx12xJFUQ, titulado el «¿Que es el Gran Reinicio?» que proponen, admiten que han utilizado la pandemia para dar un gran salto adelante en su proyecto globalizador.
Un video que por otra parte tiene al momento de grabar este video nuestro, 6 mil me gusta y 53 mil no me gusta.
Lo que muestra que su proyecto no está anclado en la opinión pública, sino en el poder político y económico que tienen quienes lo llevan adelante.
En febrero de 2021 lanzaron otro video donde decían que la pandemia había producido beneficios para la gente.
Pero al final lo tuvieron que borrar por la enorme cantidad de reacciones contrarias que generó.
Y en agosto de 2021 publicaron otro video titulado «Así es como pronto podría verse nuestra vida» https://twitter.com/i/status/1427721919483326470, que en su resumen de twitter se puede ver más claro el mensaje.
Y que en la versión de youtube, más larga, tiene el doble de no me gusta que de me gusta; twitter no contabiliza los no me gusta.
¿Y cuál es el mundo que planean estos globalistas para nosotros?
Dejan claro que no quieren que tu o tus hijos salgan de la casa.
Quieren que trabajes desde casa y quieren que tus hijos aprendan desde casa.
Pero no es sólo mientras dure la pandemia, sino que postulan que estos cambios serán tan permanentes, que las oficinas deberán ser reutilizadas y vecindarios enteros deberán ser rediseñados.
Tampoco quieren que salgas de casa para comprar comida.
Los algoritmos analizarán tus búsquedas web y tus hábitos de consumo, para predecir lo que deseas y lo recibirás.
Además, quieren que uses la máscara en tu propia casa cuando consigas esa comida.
Y como ellos prevén que las máscaras serán algo permanente, consideran que sus valiosos sistemas de reconocimiento facial para identificar a las personas no funcionarán bien.
Entonces no proponen que la gente deje de utilizar las máscaras, sino una tecnología que detecta la firma cardíaca única de cada individuo, utilizando un láser infrarrojo sobre nuestros corazones para identificarnos.
Esa tecnología dicen, que ya está disponible.
Quieren que no circules más allá de 15 minutos de tu casa, por eso prevén centros de esparcimiento cercanos a cada individuo.
Por lo tanto es un plan elitistas que tiene la visión de que la gente vivirá en ciudades inteligente
Y esas reuniones serán con desinfectante de manos y mascarillas permanentes.
Y deberás escanear el código QR que esté en el lugar de esparcimiento, para que sepan exactamente dónde te encuentras y con quién estás.
El objetivo obviamente es rastrearte de todas formas posibles para evitar cualquier conducta que ellos no desean que tengas.
El video sostiene que los confinamientos han mejorado la habilidad en los niños y que eso es bueno para ellos.
Y promueven que la educación del futuro sea una mezcla de aprendizaje remoto en pantallas y presencial.
Pero la realidad es que los niños de hoy no necesitan absolutamente mejorar sus habilidades digitales.
Todos sabemos que aprenden a usar teléfonos y tablets antes de aprender a caminar.
Quizás deberían hacer lo contrario, reducir sus habilidades digitales y mejorar sus habilidades sociales.
Los niños necesitan jugar, socializar y comunicarse con otros niños para desarrollarse adecuadamente.
Sin embargo este no es el destino para el que preparan a la raza humana, porque les aterra que las personas se junten, empiecen a despertar de este plan demoníaco, se rebelen y ellos pierdan el poder y sus privilegios.
La pandemia les ha permitido establecer restricciones permanentes en la circulación de las personas.
Los pases verdes sanitarios se parecen ya mucho a la marca de la bestia, porque en algunos países ya hay restricciones para entrar a los supermercados sin un pase verde.
Y ahora se están preparando para dar otra vuelta al torniquete a través de fogonear la alarma del cambio climático.
Todo esto sería imposible sin el adoctrinamiento generalizado por los medios de comunicación y las redes, que utilizan la propagación desenfrenada del miedo como su componente clave.
Un mensaje que comunica que el mundo iría al desastre si no actuamos globalizadamente, de la manera que ellos proponen.
La agenda globalista es clara, pasa por el control de las personas, si es posible mediante confinamientos utilizando la tecnología, la fundación de un gobierno mundial con la excusa del cambio climático, para llegar así a la cuarta revolución industrial que consagrará el transhumanismo.
Su visión de futuro, la nueva normalidad, es llevar a los humanos a una «raza inhumana», manipulada por el miedo, objeto de mensajes subliminales introducidos en su cerebro y más adelante conectados permanentemente a una supercomputadora central.
Si logran esto sería el fin de la civilización que Dios creó sobre la base de la libre asociación de las personas.
El plan es tan descabellado que no lo van a poder llegar a consolidar.
Dios no va a permitir que su creación se malogre por un puñado de seres humanos que quieren esclavizar al resto, convirtiendo al mundo en una colmena, reduciendo la cantidad de habitantes a lo que consideran lo ideal para su plan y cambiando sus cuerpos para que se adapten mejor a las necesidades productivas.
Esto también indica que estamos en el final de los tiempos, en un cambio de época.
Bueno hasta aquí lo que queríamos hablar sobre el proyecto del gran reinicio que tienen las elites, para que quede claro que supone un quiebre con el orden institucional vigente hasta ahora y con el plan que Dios tiene para la humanidad.
Y es por eso que nuestra generación está en el centro de la batalla más significativa por la que haya pasado la humanidad.
Y me gustaría preguntarte cuál crees que son los pies de barro de esta propuesta de las elites globalistas.
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