Numerosas revelaciones a la estigmatizada Cora Evans que está en proceso de canonización.

Cora Evans fue una mística estadounidense que vivió en el siglo XX.

Es poco conocida aún hoy en EE.UU., porque fue de muy bajo perfil.

Pero sus visiones son comparables a las que han tenido Ana Catalina Emmerick, María Valtorta y María de Agreda.

Aquí queremos contar sobre quién fue Cora Evans, los dones místicos que tuvo y las revelaciones que le hizo Jesús sobre las cosas que vendrán sobre la humanidad.

El Vaticano la ha declarado Sierva de Dios a Cora Evans, a instancias de los Obispos de EE.UU..

Y con eso han comenzado las investigaciones para su canonización.

El peso del trabajo lo llevó la Diócesis de Monterey, en California, que abrió el proceso de canonización en el 2010.

Mientras Michael McDevitt y Michael Huston formaron una asociación sin fines de lucro, llamada “La Humanidad Mística de Cristo”, para organizar retiros, imprimir sus revelaciones y promover la figura de Cora Evans y sus visiones.

Hay cosas que Cora Evans supo acerca de Jesús que no se conocían, como los nombres de las mascotas de su infancia, un conejo y un ratón adiestrado. 

Cora tuvo revelaciones de pormenores de la vida de Jesús y de los hechos históricos de los evangelios, que no están en la Biblia, como sucedió con Ana Catalina Emmerick, María Valtorta y María de Agreda, entre otros místicos

Por ejemplo, vio cuando Jesús conoció a San Pedro y a María Magdalena.

Además, Jesús le regaló a Cora un anillo de rubí, que luego usó en la vida real

También ella se bilocaba a China para bautizar a bebés; recordemos que cuando no hay sacerdote disponible un laico puede hacer el bautismo.

Arregló con Jesús para que cayeran pétalos de rosa del cielo, sobre las cabezas de los prisioneros en un campo de concentración alemán, durante la Segunda Guerra Mundial.

Y Jesús le profetizó que cuando ella le escuchara tocar el violín, significaría que se estaba muriendo y que era la hora de que fuera al cielo con Él.

Pero además tuvo revelaciones respecto a sucesos que vendrán, por ejemplo, respecto a la futura Era Dorada de la humanidad y las futuras apariciones de la Santísima Virgen.

En la que habrá una aparición, la más grande de todas, que sucederá durante la Era de Dorada y la guiará.

Y también le ha sido revelada la persecución final de la Iglesia. 

Cora Evans nació en 1904 y murió en 1957.

Fue bautizada y criada en la Iglesia Mormona en Utah. 

Se casó en el Templo Mormón de Salt Lake City, y esa ceremonia marcó el comienzo de su desencanto con la fe mormona. 

A ella le parecía artificial, se resistía al “Jesús falso” del mormonismo.

Después de eso, exploró otras religiones durante 10 años, antes de tropezar con el catolicismo mientras escuchaba un programa de radio de la Hora Católica, cuando estaba enferma en cama

Se convirtió al catolicismo en 1935, seguida por su esposo y sus dos hijas unos meses después. 

Tuvo su primera experiencia mística en 1938, un éxtasis durante el cual describió una unión íntima completa con Dios. 

En 1941, ella y su familia se mudaron al sur de California, para escapar de los prejuicios de su antigua comunidad mormona en Utah. 

Allí se vinculó con el Padre Frank Parrish, quien fue nombrado su director espiritual por el Provincial de la Sociedad de Jesuitas en Los Ángeles.

Y él luego nombraría a su sobrino Michael McDevitt, como el depositario de los escritos de miles de páginas de Cora, aún no publicados. 

El 24 de diciembre de 1946 Jesús reveló la misión que le tenía confiada a Cora.

Debía promocionar la Humanidad Mística de Cristo.

Para alentar a la gente a vivir con una conciencia marcada, de la presencia de Jesús en sus vidas diarias.

Jesús le dijo a Cora que necesitaba comenzar a orar tres veces al día, a fin de prepararse para un gran éxtasis que la llevaría a mayores profundidades del conocimiento, de las que jamás hubiera recibido.

Él le dijo que pronto estaría hablando cara a cara con Juan el Bautista.

Básicamente, se le otorgaría un pase entre bastidores para ver los eventos del Nuevo Testamento, a medida que se desarrollaban. 

Ella lo vería todo, con una condición, Jesús le dijo: “Quiero que uses el don de escribir que te he dado. Quiero que escribas con perfecta libertad todo».

Y a partir de ahí comenzaron los sucesos místicos.

Su hija, Dorothy Evans, recuerda que su madre caía en coma y los médicos apenas podían encontrar su pulso. 

En esos momentos, según ella, estaba con Jesús, y con otros santos, a veces visitando el cielo y el purgatorio.

Su hija añadió que experimentó las marcas dolorosas de estigmas que se parecían a las heridas en el cuerpo crucificado de Cristo.

Y registró el aroma a rosas que emanaba de ella en numerosas ocasiones, que es un fenómeno tradicionalmente asociado con las personas santas.

Cada vez empezó a tener más éxtasis. 

Durante estos períodos, su cuerpo se ponía rígido como un cadáver. 

Era imposible moverla durante esos momentos, al punto que  levantarla solo unos centímetros requería de varios hombres fuertes. 

Y a menudo tenía sus brazos rígidos extendidos sobre su cabeza durante horas, como Jesús en la cruz. 

Cora escribió 14 libros y hay decenas de cajas con materiales de sus visiones, que aún no se han publicado, ni investigado en profundidad.

En sus libros cuenta que Jesús confió a Cora, sobre una Edad de Oro que vendría a la Tierra, en la que los fieles vivirán una nueva santidad.

Le dijo Jesucristo a Cora, “en ese reino de oro, puedo morar personalmente si soy invitado, porque he dicho: “El reino de Dios está dentro de ti”. 

“Será en esta era gloriosa que Yo reinaré en victoria real a través de Mi morada en los corazones humanos”.

“A través de Mis verdaderos amigos continuaré Mi vida de Resurrección y bendeciré al mundo con la paz, que durará varios cientos de años”.

De modo que habla de una Era de Paz venidera a la Tierra, de cientos de años.?

Cora también reveló que antes de su Pasión, Jesús le habló a Su Madre de sus futuras apariciones en la Tierra.

Le pidió a Ella que apareciera para evangelizar a los alejados y confortar a los fieles. 

Y en especial le mostró la mayor aparición de todas, hacia el final.

El Señor le dijo, “habrán muchas grandes eras de Fe, así como eras de gran frialdad hacia Mí, mientras reposo en los altares del tiempo».

“En las generaciones de poca Fe, tú podrás participar como una madre activa de la gente mediante tu presencia personal en apariciones.

Mediante las cuales les podrás advertir sobre su descuido hacia Mí en el tabernáculo”.

“Sin embargo, antes de tomar este rol activo, debo tener tu consentimiento.  

Esto es tan necesario ahora como cuando tu voluntad Me permitió nacer en el mundo. 

Para muchas personas, tú serás verdaderamente la Puerta del Cielo, ya que tú señalarás el camino al altar, mediante apariciones.

Donde viviré en silencio y estaré prisionero hasta el fin de la historia”.

Y mientras Cristo hablaba con María, Él le permitió a Su Madre el don inmediato de videncia.

Mediante el cual Ella pudo ver todas sus futuras apariciones alrededor del globo.

Una tras otra se desvelaban ante sus ojos, como si no fueran más que un breve momento.

Y luego, como un gran pergamino que llega a su fin, Nuestra Madre María se detuvo a tomar aliento, mientras observaba la mayor aparición de todas.

Su magnitud y belleza superaban el entendimiento y sabiduría humanos.

El mundo entero parecía estar envuelto en la luz de un vapor dorado, que de ninguna manera se asemejaba al resplandor del sol terrestre.

Se asemejaba a una enorme custodia inclinada hacia la tierra, en un grado tal, que su Ocupante podría ser visto por todos en el mundo.

El centro de la custodia imaginaria aparecía sobre las naciones de China e India.

Finos vapores, como cuentas de fuego, llovían sobre la Tierra desde el centro de luz dorada. 

Millones de personas vieron esa aparición, aunque ninguna fue dañada o se asustó.

Esa aparición, que obviamente no ha ocurrido todavía, representaría, la ‘era gloriosa’ de Fe y Paz, que duraría varios cientos de años.?

Pero la Era Dorada también vería su fin, a medida que las fuerzas satánicas del infierno se apoderaran de la gente.

Y se verían milagros diabólicos que parecerían dados por Dios, pero que no eran de él, todo lo cual le fue mostrado.

Guerras y persecuciones tendrán lugar en el mundo entero y los sacerdotes serán perseguidos hasta que no quede ni uno. 

Y vio durante la hora final que los soldados ateos se complacerán en la búsqueda del último sacerdote.

Mediante los últimos inventos científicos, la gente de todo el mundo sabrá hasta el más mínimo detalle de esta búsqueda. 

En su libro “La hora final”, dijo Cora que el último sacerdote sería encontrado celebrando Misa en una cueva con unos pocos fieles.

Y cuando su liquidación fue anunciada, una celebración mundial, planeada con anticipación, produjo un gran gozo en la gente.

Ahí el Maestro dejó de hablar y la angustia se apoderó de Él.

Se sentó calladamente junto a Su madre, quien le susurró, “Benditos sean los adoradores en todas las eras que no tienen miedo a perecer por Ti”.

Luego de esto Jesús vendría por segunda vez a la Tierra y se produciría el Juicio Final.

Bueno hasta aquí lo que queríamos contar sobre Cora Evans, quien es, su estatura mística y algunas de las principales revelaciones que le fueron dadas por Jesús.

Y me gustaría preguntarte si crees que en tu vida se producirá esa gran aparición de la Virgen María sobre la Tierra, la mayor de todas, o será más adelante.

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