Categories
ARTÍCULOS DESTACADOS Enfermedades Felicidad NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Noticias bis Salud Signos de estos Tiempos SIGNOS DE ESTOS TIEMPOS Signos Globales de estos Tiempos

Las diferencias de salud entre los que piensan que la felicidad es ser hedonista y los altruistas

Evaluación de dos tipos de felicidad.

 

He aquí un importante estudio que pone luz sobre las consecuencias de cada búsqueda de la felicidad. Aquellos que han amasado grandes fortunas y poder y viven una vida hedonista, se declaran como felices y son hoy el modelo que muestra la sociedad occidental, pero también quienes viven una vida virtuosa y abnegada declaran que son felices, pero no son el modelo más popular en estos momentos.

 

felicidad

 

¿Son dos tipos de felicidad o hay alguno de estos grupos que se está muntiendo a si mismo? Si los dos estilos de vida producen felicidad, ¿qué consecuencias tienen sobre la salud física?

De esto se trata una investigación que un profesor de Medicina y otro de Psicología emprendieron.

¿QUE BUSCABA LA INVESTIGACIÓN? 

Los investigadores principales profesora Barbara L. Fredrickson y el Dr. Stephen Cole se dispusieron a probar cómo los sentimientos de felicidad (una buena salud psicológica) impactan al sistema inmune humano (salud física).

Su referente guía era la hipótesis de una investigación anterior en la que un grupo de participantes psicológicamente infelices -todos sufriendo de estrés crónico o pobre salud psicológica -uniformemente exhibieron efectos negativos en el sistema inmune o una salud corporal comprometida: un aumento de la expresión de los genes que causan una mayor susceptibilidad a las enfermedades inflamatorias y una disminución en la expresión de los genes que causan una mayor vulnerabilidad a enfermedades infecciosas.

Con esta tesis como telón de fondo, Fredrickson y Cole estaban ansiosos por explorar dos preguntas relacionadas: ¿Todos los tipos de felicidad, como todos los tipos de infelicidad son iguales?

¿Todas las personas que se describen como «felices» disfrutan de los efectos celulares uniformemente positivos que impulsen su sistema inmunológico y la salud en general?

¿COMO HICIERON LA INVESTIGACIÓN?

Para obtener respuestas, los investigadores reclutaron a 80 participantes y los testearon adjudicándoles un bienestar hedónico frente a un tipo bienestar eudaimonicos (felicidad entendida como la plenitud del ser).

De los 80 participantes, a 63 se les atribuye sentimientos de felicidad sobre todo en los placeres de corto plazo, auto-gratificantes, de actividades como comer, beber, tener sexo, o amasar poder, fama y fortuna. Son los hedónicos.

Los 17 participantes restantes acreditan su sentido de bienestar en su mayor parte a la felicidad a largo plazo que proviene de las actividades de auto-sacrificio, altruistas como la construcción de un buen matrimonio, la crianza de los niños, ayudar a los pobres, alimentar a los hambrientos, la construcción de viviendas para los sin techo. Son los eudemónicos

¿CUAL FUE EL RESULTADO?

Cuando los dos grupos de personas aparentemente igual de felices se pusieron a prueba para las correlaciones genéticas en sus células del sistema inmune, mostraron resultados positivos de salud desigual:

(1) El grupo de 17 participantes, que experimentaba sobre todo la felicidad a largo plazo del bienestar del virtuosismoa, mostró efectos positivos en el sistema inmunológico: menos vulnerabilidad a las enfermedades inflamatorias e infecciosas o buena salud inmunológica.

(2) El grupo de 63 participantes, que experimentaba principalmente sentimientos de bienestar por actividades placenteras hedónicas, evidenció resultados negativos en el sistema inmunológico o  salud corporal crónicamente estresada, como los infelices del estudio antes citado .

O sea que en este último grupo, el de los hedonistas, hay una sensación de felicidad psicológica que no se trsnmite al bienestar corporal.

¿QUÉ HACER CON ESTOS RESULTADOS DISPARES?

Dos puntos de vista de la filosofía moral clásica nos ayudan a evaluar estos resultados.

En primer lugar, la felicidad viene en dos formas: La especie transitoria de bienestar que la gente disfruta a través de la persecución del hedonismo o el placer y el tipo duradero de florecimiento psicosomático que los seres humanos experimentan desde la eudamonia o vivir bien, o sea la felicidad entendida como plenitud del ser .

En segundo lugar, la forma permanente de la felicidad se origina en la fuente de una vida virtuosa. La profundidad del propio «río» de la felicidad, aunque percibido como ampliamente satisfactoria, está necesariamente limitada por el volumen y la calidad del agua que la alimenta.

Así, en este estudio, cuando los participantes hedonistas describen su río de la felicidad en términos de «bienestar total», es esencial comparar las descripciones optimistas frente a su poca profundidad del agua de la fuente que la alimenta.

Quizás la falta de los hedonistas de virtud, intelectual y moral compromete su capacidad para estimar correctamente el tamaño y la profundidad de su pequeño río de bienestar. Sus acciones se basan en opiniones equivocadas de lo que consiste la verdadera felicidad. Estas opiniones pueden haber provenido de errores o ignorancia intelectual o deliberada práctica mal formada.

Lo más probable, sin embargo, es que la perspectiva equivocada de los hedonistas en la realización humana surgió de pasiones desordenadas y deseos que nublaron su concepción de lo que son los apetitos sin freno y los verdaderamente buenos y que verdaderamente los hacen felices.

Fuentes: Hermana Renee Mirkes para True and Charity Forum, Signos de estos Tiempos

 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Apostasía ateismo Cristianismo Hemeroteca SdeT Musulmanes NOTICIAS Noticias 2011 Relativismo Religion e ideologías

El hedonismo, el relativismo cultural y el totalitarismo islámico amenazan la civilización de Europa [2011-07-01] SdeT

Este “Mensaje a Europa” ha sido entregado personalmente al Sr. Othmar Karas, diputado europeo y Vicepresidente del PPE (Partido Popular Europeo), el 31 de mayo de 2011, por el P. Henri Boulad durante su última visita a Bruselas.

El mismo texto – en su versión definitiva- fue enviado por correo electrónico el mes siguiente al Sr. Herman van Rompuy, y también al Sr. José Manuel Barroso, Presidente del Parlamento Europeo. El Padre Boulad también expresó el deseo de hablar personalmente en el Parlamento Europeo en una próxima reunión.

Henri Boulad critica el absolutismo del relativismo cultural y el totalitarismo islámico, así como el hedonismo que impera en Europa. También describe certeramente el futuro no lejano al que se acerca Europa, si persiste en abandona la sabiduría basada en valores humanistas y universales.

El autor, que tiene como objetivo cambiar el mundo, lleva una lucha sin cuartel para evitar el colapso de Occidente. Él cree que es imprescindible hablar, moverse, mover cielo y tierra para evitar lo peor.

«Los valores europeos duramente ganados después de siglos de lucha, ¿Europa se arriesgará a liquidarlos simplemente por efecto de una inmigración que en última instancia conduce a un cambio fundamental en la composición de la sociedad? … En nombre de la tolerancia, Europa está abriendo sus puertas a la intolerancia. En nombre de la democracia, el riesgo es ver vivir a sus hijos y nietos en una sociedad totalmente diferente en la que los no creyentes o creyentes de otras religiones, los dhimmis, tendrán menos derechos que la mayoría de la población».

El Padre Henri Boulad dirige Centro Cultural Jesuita de Alejandría. En una entrevista en Radio Canada hace unos años, dijo: «O el Islam se reforme o nos dirigimos hacia una conflagración».

MENSAJE A EUROPA

La existencia de la Unión Europea es un milagro. ¿Quién podría haberse imaginado en las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial que pueblos tan diversos que se han odiado durante siglos, podrían un día formar una sola entidad? Es por eso que, como cristiano de Oriente, me gustaría reconocer con la más profunda admiración a los creadores y fundadores de este increíble logro.

La Europa de hoy es «la flecha ascendiente de la evolución», para usar una expresión muy familiar a Teilhard de Chardin. Esta posición de liderazgo de Europa supone una enorme responsabilidad frente a la humanidad. Debido a que Europa no sólo es responsable de sí misma: es también lo es del resto del planeta.

Este planeta que [Europa] colonizó y explotó en el pasado, para bien o para lo peor, en el presente se trata de servirle promoverlo, ayudarlo a engrandecer [al planeta]. Europa tiene una deuda con el resto del mundo, que le dio mucho, y que a su vez debe dar mucho.

Europa es una visión y misión, un proyecto y una responsabilidad. Europa es un humanismo. Pero no cualquier tipo de humanismo: un humanismo espiritual, es decir, abierto a la trascendencia, a un más allá, al progreso. Pero, ¿qué progreso? No es un mero desarrollo técnico-científico, sino un desarrollo moral y espiritual, la promoción del hombre, una humanización del planeta. De lo contrario, el estancamiento, el círculo se cierra. La ausencia de un horizonte absoluto, infinito, sólo puede llevar al escepticismo, al pesimismo, al mal. De todas cosas Occidente está hoy enfermo.

Europa está hecha de una herencia triple: Greco-romana, judeo-cristiana, moderna y laica. Esta modernidad ha surgido a través de una sucesión de mutaciones: Renacimiento, la Reforma, la Revolución Francesa, la Ilustración, las revoluciones sociales del siglo XIX. Todo ello ha se cristalizado en la Carta Internacional de los Derechos Humanos, los principales elementos de la libertad, la igualdad, el laicismo, la separación de poderes, la justicia social …

Este valor fundamental, que constituye el alma de Europa, es desarrollar, fructificar.

Pero también defender, porque está doblemente amenazada.

Desde el interior, porque la noción de un progreso miope tiende a engendrar una sociedad materialista, hedonista, egoísta, que trata de ahogar en un entretenimiento constante para llenar el vacío que lo habita.

Desde el exterior, como consecuencia del obvio cambio demográfico, Europa se expone a la situación que prevalece en mayoría de los 57 países de mayoría musulmana: una reducción de la libertad religiosa, o inexistente, una libertad de expresión sujeta a las limitaciones de la Shari´a, como se indica en la Declaración Islámica de los Derechos Humanos en El Cairo (1990).

En nombre de la tolerancia, Europa está abriendo sus puertas a la intolerancia. En nombre de la democracia, el riesgo es ver vivir a vuestros hijos y nietos en una sociedad totalmente diferente en la que los no creyentes o creyentes de otras religiones, los dhimmis, tendrán menos derechos que la mayoría de la población.

Esto significaría un retorno a los peores momentos de la dominación religiosa de tipo medieval que conoció Europa en el pasado y de la que se ha liberado felizmente.

Los valores europeos duramente ganados después de siglos de lucha, ¿Europa se arriesgará a liquidarlos simplemente por efecto de una inmigración que en última instancia conduce a un cambio fundamental en la composición de la sociedad? ¿El reino de la «corrección política» debe impedirle denunciar el riesgo a largo plazo que tiene Europa? La diversidad es un factor teórico de enriquecimiento mutuo, pero la observación de los países de mayoría musulmana muestra que el multiculturalismo no tiene intención de prosperar.

¿Qué será, por lo tanto, de Europa y de las libertades en unas pocas décadas? No olvidemos estas reflexiones durante el debate sobre la adhesión de Turquía a Europa. Igual que para todos los organismos, hay un «umbral de tolerancia» más allá del cual todo el cuerpo se ve amenazado por el colapso, disolución, desintegración.
En este contexto, querer introducir Turquía en la UE es inconsciente. Este enfoque representa un verdadero suicidio para una Europa que lucha por salvar su identidad y no ya para construir. Turquía no es europea ni geográfica ni histórica ni cultural. Turquía siempre ha sido un peligro y una amenaza para Europa.

La defensa de los valores humanistas también se realiza en los países musulmanes, en los que Europa debe apoyar a los musulmanes moderados, a menudo víctimas del extremismo religioso basado en el rechazo de toda la contextualización de los textos sagrados, en nombre de la palabra inmutable de Dios.

Europa se ve amenazada en sus fundamentos, en su alma. Es el momento de tomar conciencia. Europa debe defender su identidad a toda costa. Esto no es un derecho sino un deber – el deber frente a las generaciones futuras de toda la humanidad.

La tendencia a decir que todo vale y todo tiene el mismo valor es peligrosa. ¡No todo es igual, incluso si probablemente se encuentran elementos de verdad en las diferentes escuelas de pensamiento! Hay una jerarquía de valores, culturas y civilizaciones. Una jerarquía que no excluye una complementariedad destinada a la armonía a partir de una base común. Esta es simplemente la «Declaración Universal de los Derechos Humanos» mencionada anteriormente.

Es verdadero y justo lo que hace a un hombre más humano. El Dalai Lama, a quien le pregunté qué era lo mejor de las religiones, respondió: «La mejor religión es la que hace al hombre mejor.» Se puede decir de cualquier cultura, civilización, de la sociedad. Esta es una evidencia de los hechos. Sólo importa lo que humaniza al hombre, haciendo que sea más responsable y respetuoso de los demás.

Europa es mucho más que una entidad económica, política y cultural, más que un club de ricos privilegiados. Ella no es para sí misma: es para el mundo, para la humanidad.

Frente a todo lo que amenaza su cohesión e identidad, es el momento para que Europa actúe. Lo que es imprescindible hoy en día es un comienzo, un despertar, una toma de conciencia, sin los cuales mañana podrá ser doloroso para las generaciones futuras.

Esto es para que Europa pueda recuperar y mantener una SABIDURÍA basada en valores humanistas y universales, único fundamento válido para la construcción de un nuevo orden mundial.

Henri Boulad, SJ
Cristiano egipcio de origen sirio,
Director del Centro Cultural Jesuita de Alejandría
Ex rector de la Universidad de los Jesuitas en El Cairo
Y ex vicepresidente de Caritas Internacioanl para el mundo árabe.
Alejandría, 27 de junio 2011

NOTAS

http://postedeveille.typepad.com/files/message-%C3%A0-leurope.pdf

http://www.postedeveille.ca/2011/06/message-e-leurope-de-henri-boulad-pretre-au-caire.html#comments

Fuente: Religión en Libertad


Más noticias relacionadas

Lea las últimas noticias de Signos de estos Tiempos

“Signos de estos Tiempos” un noticiario sobre categorías cristianas de análisis

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis: