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Una ecografía del bebé de Aley Meyer, de Evansaville, Indiana, EE.UU, parece mostrar una imagen de Jesús en la cruz según lo publicado por 14 Noticias el 20 de abril de 2016.
Aley Meyer dijo que ella comenzó a notar ese detalle en la imagen en la ecografía sólo después que alguien se lo señaló durante el baby shower.
Esta imagen se hizo viral en Facebook y otras redes.
Ella cree que puede ser un mensaje de Dios porque había estado preocupada y tomando muchos medicamentos por su enfermedad de Chron.
Esto se une a la información publicada este enero de 2016 de una mujer de Córdoba, Argentina, llamada Fanny, que había perdido varios embarazos por trombofilia.
Fanny divulgó su ecografía, que parece mostrar la cara de Jesucristo en la parte de abajo, cuando leyó que una mujer había visto una imagen diabólica en su ecografía, publicado por el Daily Mirror.
Fanny cuenta a Día a Día
“Lamentablemente he perdido varios embarazos hasta que llegó Alfonsina. Desde el comienzo del embarazo tuve muchas complicaciones, en un principio con una primera ecografía me afirmaron que el embarazo no era viable, tenía mucha pérdida y es más: quisieron ingresarme para un legrado, pero desistí porque no tengo obra social y era un instituto privado”.
Y continúa:
“En cada ecografía surgía algo nuevo, todo amenazaba y nos asustaba. Pero jamás dejé de perder la fe. Depositaba toda mi confianza en Dios, quien desde antes del embarazo y durante me dio varias señales”.
Lo interesante del caso es que antes de la ecografía de la imagen de Jesús, dice que soñó varias veces con el Sagrado Corazón de Jesús y que concurría a misa para pedir por su embarazo.
A los seis meses le tomaron la ecografía en la que salió la imagen de Jesucristo, y ella dice:
“Al llegar a casa nos dimos cuenta que claramente en la parte inferior de la imagen se ve el rostro de Cristo. Sin dudas supe que él no nos había abandonado”.
El 21 de septiembre de 2015 nació Alfonsina y Fanny cuenta:
“La partera me dijo: ‘Fanny otro milagro más. El cordón umbilical tiene un nudo ciego’. Si pasaban unos días más ese nudo iba a impedir que el bebé respirara”.