ORACIÓN PREPARATORIA
¡Oh santísima Virgen de Villaviciosa, Madre de Dios y Madre nuestra! A Vos acudimos, llenos de confianza y de fervor, para bendecir vuestro santo nombre, que aprendimos a pronunciar en el regazo de nuestras madres; para alabar vuestros singulares y altísimos privilegios, que os hacen bendita entre todas las mujeres; y para daros gracias por los muchos beneficios, que hemos recibido de vuestra poderosa y maternal mano, esperando alcanzar lo que de todo corazón os pedimos en este triduo, si es para mayor gloria de Dios, provecho nuestro y salvación de nuestras almas. Así sea.
(A continuación se rezan cinco “Ave Marías” en reverencia de las cinco letras, con que se compone el dulce nombre de María. Seguidamente se pide la gracia, que se desee obtener y por Ultimo se dice la Oración final).
Ver la historia en Nuestra Señora de Villaviciosa, España ( 4 de septiembre)
ORACIÓN PARA EL PRIMER DIA
¡0h misericordiosísima Virgen Maria, Madre y Protectora nuestra! Vos que habéis sido auxilio en todas las necesidades, que llenaron de angustia el corazón de nuestros padres, a quienes favorecisteis con vuestra sagrada imagen de Villaviciosa, no desamparéis ahora a sus hijos, que con tanto fervor os llaman. Oíd los ruegos que os presentamos y rogad a vuestro Santísimo Hijo que nos favorezca en esta vida mortal, librándonos de todos sus peligros y abriéndonos los tesoros de su santa gracia. No nos abandonéis, Señora nuestra, en los caminos difíciles de este mundo, encaminando nuestros pasos por la senda de la bienaventuranza eterna. Así sea.
ORACIÓN PARA EL DIA SEGUNDO
¡Oh benignísima Virgen Maria, Reina y Señora Nuestra! Vos que sois Madre de misericordia en medio de los trabajos y tribulaciones de esta vida, os rogamos que seáis también consuelo y esperanza nuestra en la hora suprema de la muerte. Vos, señora, que con el titulo de Villaviciosa, sellasteis los labios de nuestros padres en su Ultima hora, siendo vuestro nombre alivio de su agonía, os suplicamos, Madre nuestra, que lo mismo que queremos estar a vuestro lado en esta vida, alabando vuestro nombre, así mismo estéis Vos a nuestro lado en la hora de nuestra muerte, amparándonos con el manto de vuestra maternal misericordia. Así sea.
ORACIÓN PARA EL DIA TERCERO
¡Oh amorosísima Virgen Maria, Abogada y Protectora nuestra! Vos que sois Madre de bondad en nuestra vida y Madre de esperanza en nuestra muerte, os suplicamos que vengáis en nuestro auxilio en el día terrible del juicio eterno. Vos, Señora, a quien con el dulce nombre de Villaviciosa os alaban en el Cielo los bienaventurados que en la Tierra con este nombre os invocaron, os suplicamos nos llevéis de vuestra mano al juicio de vuestro Divino Hijo para que oigamos de sus labios palabras de perdón y misericordia. Así sea.
ORACIÓN FINAL
¡Oh soberana Virgen Maria, Madre amorosa y compasiva de los hombres! Vos, Señora, que habéis sido, de generación en generación, consuelo y auxilio de nuestros padres, que con tanto fervor os alabaron, no desamparéis hoy a sus hijos, que con el mismo fervor os veneran. Oíd, Madre nuestra, los ruegos de nuestras almas y haced que consigamos las gracias, que os pedimos, si es para mayor gloria de Dios, honor vuestro y bien de nuestras almas. Así sea.