¡La más novedosa y última revelación a una mística sobre el Rosario!
La palabra Rosario proviene del latín rosarius, que significa “guirnalda” o “ramo de rosas”.
Es una palabra adecuada para un ramo de oraciones ofrecidas a Dios, porque el Rosario es una oración extremadamente eficaz para lograr efectos milagrosos otorgados por Dios, cuando le encontramos la vuelta para recitarlo bien.
Y el secreto es que se trata tanto de una oración como de una meditación.
Y que se dirige al Padre, a la Santísima Virgen y a la Santísima Trinidad, pero que en su texto es una meditación centrada en Cristo, vista por los ojos de Su madre.
Nuestra Señora entregó el Rosario para que le demos buen uso y junto con su hijo han explicado sus gracias y cómo rezarlo eficazmente.
Aquí hablaremos sobre los beneficios de rezar el Rosario, y expondremos la última catequesis que María y Jesús hicieron a la mística Catalina Rivas, sobre las indicaciones de Rosario y las instrucciones para rezarlo con más frutos.
Las oraciones centrales del Rosario son el Padrenuestro, el Avemaría y el Gloria.
El Padre Nuestro es la oración que Jesús enseñó a rezar en la Biblia, se reza 5 veces en cada uno de los misterios del Rosario al igual que el Gloria.
Y la poderosa oración a Nuestra Madre, el Avemaría, se reza 50 veces.
Cuando oras Santa María Madre de Dios ruega por nosotros pecadores, Nuestra Madre viene al instante a tu lado para orar contigo.
Viene como Nuestra Señora de Gracia con sus manos extendidas.
Los rayos de luz que salen de sus manos perforan tu cuerpo, te sanan y te llenan de gracia.
Y ella no viene sola, trae ángeles con ella. Y no sólo uno o dos, porque recuerda que ella es la Reina de los Ángeles. Los coros de los ángeles vienen con ella.
Y ella y Jesús están unidos en Su corazón, porque no se pueden separar; Jesús la trae a ella y viceversa.
Y Jesús no se puede separar de la Trinidad, por lo que Él trae al Padre y al Espíritu Santo con Él.
Y donde está la Santa Trinidad, se nos representa toda la creación, de modo que cuando rezamos el Rosario, cada uno está rodeado de una tal belleza y luz como no se puede imaginar en esta vida.
Esto sucede porque el Rosario no es una oración de factura humana, sino que vino sugerida o entregada por el Cielo.
En el año 1214 Santo Domingo de Guzmán, el fundador de los dominicos, estaba angustiado porque fracasaba en su intento de convertir a los herejes cátaros albigenses.
Se lo atribuía a la profundidad y gravedad de la pecaminosidad de los herejes y al mal ejemplo de los católicos.
Así que se fue solo al bosque, y lloró y oró continuamente por tres días para aplacar la ira del Dios Todopoderoso.
Azotó su cuerpo y torturó su carne. Y por el ayuno, el dolor y el agotamiento, entró en un estado de coma.
Y en esa circunstancia Domingo experimentó una aparición de María Santísima.
La Virgen apareció en la capilla sosteniendo un Rosario en Su mano y le enseñó a Domingo a recitarlo.
Y le dijo que lo predicara por todo el mundo, prometiéndo que muchos pecadores se convertirían y obtendrían abundantes gracias.
El rosario se mantuvo como la oración predilecta de los cristianos durante casi dos siglos.
Y cuando la devoción empezó a disminuir, la Virgen se apareció a otro dominico, Alano de la Rupe, en el siglo XV, y le dijo que reviviera la devoción.
La Virgen le prometió también que se necesitarían volúmenes inmensos para registrar todos los milagros logrados por medio del Rosario y reiteró las promesas dadas a Santo Domingo.
Es entonces cuando revela las promesas para quien lo rece con devoción.
Y luego aparecerán las promesas a quien lo lleve consigo.
Todas estas promesas las puedes leer en un artículo cuyo link te dejo en la descripción de este video.
Domingo y sus seguidores predicaron por toda Europa, alentando a los laicos a rezar el Rosario con regularidad.
Y muchos Papas también han fomentado esta devoción. Un ejemplo notable proviene de Pío V del siglo XVI.
En ese momento, los musulmanes turcos buscaban conquistar la Europa cristiana y estaban teniendo un éxito significativo en sus esfuerzos. Europa estaba en peligro real.
Entonces Pío V pidió a todos los fieles que rezaran el Rosario y pidieran la intercesión de María para que se detenga la amenaza turca.
Lanzó una gesta de rezo del Rosario en el momento de la famosa Batalla de Lepanto el 7 de octubre de 1571.
En la que a la postre las fuerzas cristianas derrotaron a una flota turca muy superior, y terminaron efectivamente con la amenaza de conquista por parte de los musulmanes.
Y para reconocer la eficacia del rezo del Rosario y agradecer a la Santísima Madre por su intercesión, Pío V instituyó la Fiesta del Santo Rosario, para celebrarse cada mes de octubre.
Y Nuestra Señora y Jesús han realizado diversas catequesis sobre el Rosario a través del tiempo, para explicar cómo funciona su eficacia y cómo rezarlo para obtener las gracias.
La última catequesis se la realizaron a la mística boliviana Catalina Rivas, cuyo contenido tuvo el imprimatur del Obispo de Cochabamba.
Jesús le dijo a Catalina, refiriéndose al Rosario, “Apruebo mucho la oración humilde”
Y le agregó,
“Pídanme lo más que puedan y sin cansancio, alegres o tristes, no importa, porque todo pasará, y lo que queda es el acto de humilde confianza que merece Mis premios”.
Y Nuestra Señora le hizo una serie de revelaciones imponentes.
Le dijo, “Yo lo recito con ustedes, con cada uno de mis hijos”.
Y aseveró que por simple acto de rezar el Rosario, “Tienen el regalo de contarse entre Mis hijos más queridos. Y tienen el premio de Mi permanente intervención a favor de ustedes.”
Y le explicó cómo es esto, “En cada Ave María ganan una caricia Mía.”
“Cada cuenta del Rosario dicha con amor, cada comunión en la cual encomiendan a Mi Hijo la conversión de los pecadores, salva un alma”.
Mientras que Jesús dijo, “Cada decena del Santo Rosario que repiten, los ángeles la recogen y la depositan como ofrenda a los pies de Mi Santa Madre».
María le dijo también,
“Como Madre de Jesús, tengo potestad para hacerles la promesa de amparar a quien rece diariamente el Rosario ofreciéndolo al Padre, por las llagas dolorosas de Mi Hijo”.
Y Jesús le reveló a Catalina lo siguiente,
“Cuando rezan el Rosario por alguien, cada cuenta es una gota de sangre Mía y esas gotas caen sobre la persona por la que se ofrece.
Es por eso que las almas del purgatorio se salvan con sus Rosarios, porque imploran Mi sangre salvadora.”
Y agregó Jesús, “Si al menos un miembro de la familia lo reza todos los días, Ella salvará a esa familia. Y esa promesa está rubricada por la Divina Trinidad.”
Jesús también le explicó que en el momento en que entregamos un Rosario a otra persona o lo tomamos, Él se hace presente y da Su bendición, dejando sobre todo la paz y la fe.
María también habló de la protección que brinda el Rosario, “No se preocupen tanto por los ataques del enemigo, están protegidas por Mí en tanto reciten el Rosario.
Conmigo, nada deben temer, el demonio no se acercará a un alma consagrada debido a los corazones de Jesús y Mío.”
Y también aclaró, “Hay momentos en los que Mi adversario los paraliza con la desconfianza, que siembra dudas.
Pero oren, no permitan que nada turbe la dicha de entregar sus corazones, de consagrarse diariamente a Jesús y a Mí”.
Jesús y María pidieron a Catalina rezar el Rosario en todo momento, “Que no se desprendan sus manos del Rosario, oren aún cuando piensen que ya no pueden hacerlo.
Oren en reparación por su patria, oren porque se acaben los odios y las venganzas.
Oren para que las sectas no destruyan a la Iglesia de Cristo, oren por sus propias familias.
Hagan reparación por los pecados de sus seres queridos».
También la Santísima Virgen instruyó sobre la forma de rezar el Rosario, “Hijitos, recen con frecuencia el Santo Rosario, pero háganlo con devoción y con amor; no lo hagan por rutina o por temor, porque se confundirán”.
Y explicó el método que Ella recomienda, “Recen el Santo Rosario meditando antes cada misterio.
Y luego récenlo muy despacio, para que llegue a Mis oídos como un suave susurro de amor.
Háganme sentir su amor de hijos en cada palabra que reciten.
No lo hagan por compromiso, ni para complacer a sus hermanos.
Háganlo con alegría, paz y amor, con humilde entrega y sencillez de niños”.
Le pidió a Catalina que todos los viernes hiciera de su hogar ‘La Casa del Rosario Reparador’.
Y a cambio de esta reparación a Su Doloroso Corazón Inmaculado, recibirá abundantes gracias y bendiciones.
Mientras que Jesús pidió, “Repitan a Mi Madre con frecuencia en cada Misterio del Rosario: ‘¡Virgen María, Madre Nuestra Inmaculada, muéstranos Tu poder, derrota al enemigo!’”.
La Virgen dijo además que pongamos rosarios bendecidos en todas las habitaciones,
“Pongan imágenes, rosarios, crucifijos benditos en todas sus habitaciones, rocíen con agua bendita todos los cuartos periódicamente y sobre todo, tengan la certeza de que estoy protegiéndolos.”
“Hijita, habrá muchos ataques, pero no deben preocuparse. La oración, el ayuno y la Comunión son el más poderoso exorcismo para ustedes, Mi enemigo no puede nada contra la persona que está en gracia”.
Bueno, hasta aquí lo que queríamos hablar sobre las revelaciones que hicieron Jesús y María sobre el Rosario, y sobre las instrucciones que dieron de la forma para rezarlo más eficazmente.
Y me gustaría preguntarte si rezas el Rosario con frecuencia y cómo lo haces, y cual es la parte de las revelaciones que mencionamos aquí que te impactaron más.
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