Durante la misión de los ángeles en los tiempos que vienen.
Hemos entrado en un período de tribulaciones en el mundo, eso no lo puede negar nadie en su sano juicio.
Y esto había sido predicho por las profecías católicas del fin de los tiempos.
Se puede discutir si la tribulación va a seguir adelante o no, pero no se puede discutir que se está dando y que había sido profetizada.
Y en este período que tenemos por delante, los ángeles de la guarda y los ángeles en general, serán muy importantes para guiarnos y protegernos.
Ya sabemos algunas cosas que se han revelado a videntes sobre cómo nos auxiliarán.
De modo que es el momento en que sepamos bien cómo tratar con nuestro ángel de la guarda, cómo trabajar con él, como discernir sus señales.
Aquí hablaremos sobre cómo detectar a los ángeles actuando alrededor nuestro, cómo vincularte más estrechamente a tu ángel de la guarda y cómo tratarlo.
El Señor nos ha dicho que debemos habituarnos a ver las señales de los tiempos.
Y muchos errores se cometen por no hacerlo en momentos peligrosos, especialmente por miedo.
Por ejemplo pensemos en anécdotas de judíos en Europa durante la 2a Guerra Mundial, que algunos judíos mismos no creían que existieran los campos de concentración y lo que sucedía en ellos, los consideraban como diríamos hoy teorías de la conspiración.
Y ya sabemos lo que sucedió.
Y ahora hay una cantidad de señales de que estamos en medio de una tribulación, el patógeno, los confinamientos, la desinformación organizada a través de los medios de comunicación y la censura, los pases de salud para hacer algunas actividades públicas.
Lo que sucede al mismo tiempo que se publican los planes que tienen las élites para reformar el mundo, que implican quitarte todo lo que tienes, como ellas mismas lo plantean públicamente con su lema «no tendrás nada, pero serás feliz».
Y varias cosas más que tu mismo puedes agregar, incluyendo la creciente discriminación y persecución de los cristianos.
Y otra señal es la franca apostasía o sea pérdida de fe entre los cristianos y la jerarquía de la Iglesia, quienes están más preocupados en solucionar problemas del mundo como las migraciones o el cambio climático, que en cumplir el mandato que dejó el Señor: vayan por el mundo y prediquen el evangelio.
Esto parece ser un proceso que se va a acentuar y encaja perfectamente con las profecías del Final de los Tiempos.
Que sigue con un gobierno mundial dirigido por la figura, visible o no, de un anticristo, que instaurará la marca de la bestia y perseguirá a los cristianos fieles.
Y la aparición de un falso profeta dentro de la Iglesia, que guiará a los fieles hacia el abandono de la doctrina que Cristo dejó a los apóstoles, y la cesación del santo sacrificio de la eucaristía o su transformación.
Aunque habrá un resto, como dice la biblia, que seguirá manteniéndose fiel a la verdadera doctrina.
En esos tiempos, que parecen acercarse, los ángeles tendrán una función fundamental, en especial nuestros ángeles de la guarda, para guiarnos y protegernos.
Últimamente la mayoría de los videntes en actividad han estado hablando de refugios físicos, para los cristianos fieles en peligro, a los que serían guiados por ángeles.
Los ángeles también protegerían estos lugares.
Y se ha dicho también que en caso de que no hubiera disponible algún sacerdote, ellos mismos se encargarían de distribuir la eucaristía.
Es el momento de creer en los ángeles, familiarizarse con ellos, aprender a comunicarse con ellos y ser sensibles a sus indicaciones.
Y por lo tanto debes aprender a ver sus señales y saber cómo actúan.
Los ángeles no pueden contradecir nuestro libre albedrío.
Pueden intentar convencerte como parte de su papel protector, pero no pueden imponernos su voluntad.
Cuanto más alineemos nuestra voluntad con la voluntad de Dios, más estaremos trabajando con nuestros ángeles guardianes, porque su único propósito es hacer la voluntad de Dios en el mundo.
Son sus mensajeros y siervos.
El teólogo jesuita Francisco Suárez, conocido como Doctor Eximius, identificó a principios del siglo XVII, seis formas en las que nuestros ángeles de la guarda nos ayudan según la Biblia.
Primero, nos protegen de daños corporales y espirituales.
Pueden hacer esto moviendo objetos físicamente. Sin embargo, sobre todo inculcan pensamientos que nos llevarán a evitar el daño y la tentación.
En segundo lugar, nos incitan a rechazar el mal y hacer el bien. También lo hacen estimulando pensamientos oportunos.
En tercer lugar, luchan contra los demonios que nos asaltan. Aunque no siempre lo hacen, porque en su providencia, Dios también permite que seamos tentados.
Cuarto, presentan nuestras oraciones a Dios.
Quinto, rezan por nosotros incluso cuando no lo hacemos.
Y en sexto lugar, si Dios lo permite, nos castigan para corregirnos.
¿Y cómo trabajar con ellos habitualmente?
Recuerda que los ángeles son seres espirituales, sin sexo, no son ni hombres ni mujeres, aunque a veces pueden corporizarse fugazmente, adoptando una figura masculina o femenina.
A veces trabajan ellos mismos operando y otras veces hacen que otros seres humanos hagan parte de su trabajo en casos particulares.
Debes quitarte de la cabeza los falsos entendimientos del ángel de la guarda que tienen los de la New Age.
Los ángeles no son dioses ni diosas, ni tu ángel de la guarda es tu «guía espiritual», tu alma, tu «verdadero yo», tu conciencia o tu «luz interior».
Los cristianos no adoramos a los ángeles, pero podemos honrarlos y venerarlos como grandes y hermosos espíritus creados por Dios.
Y debemos recordar que la Santísima Virgen María es más alta que los ángeles porque es la Madre de Dios, la theotokos, la portadora de Dios.
Por esto vino la rebelión de Lucifer.
Ten cuidado con la tendencia de la Nueva Era en las oraciones a ángeles, la canalización de ángeles y la adoración de ángeles.
Hay muchos en internet que afirman ser mensajeros de ángeles y proveedores de dones psíquicos angelicales.
Y combinan el culto a los ángeles con la astrología, la adivinación y otras corrientes ocultas.
Cuando te levantes saluda a tu ángel de la guarda porque él está a tu lado.
En tus oraciones, dale a tu ángel un gesto de reconocimiento, tu ángel está presente y orando contigo.
Porque quiere que ores y que adores a Dios.
Y él te ayudará en tus oraciones y adoración.
Cuando comiences un trabajo, invoca a tu ángel de la guarda pidiendo su ayuda y bendición. Te guiará para un buen trabajo y lo perfeccionará.
Cuando estés participando en una lectura santa, invoca a tu ángel de la guarda y él te ayudará a iluminar tu mente, amplificando los dones de sabiduría y perspicacia que recibiste cuando abriste tu corazón a la plenitud del Espíritu Santo.
Cuando sientas una tentación, invoca a tu ángel de la guarda para que te ayude a resistir la tentación.
Pídele que repela a satanás y sus secuaces y te proteja del pecado.
Cuando viajes, invoca al ángel de la guarda como tu compañero de viaje y protector.
Porque nuestra seguridad en los viajes se atribuye a nuestros ángeles de la guarda más de lo que podemos saber o ver.
Si eres padre, pide al ángel de la guarda de tus hijos que los proteja en su vida cotidiana.
Cuando tus seres queridos estén lejos, invoca a sus ángeles de la guarda para que los velen y los guíen.
Si alguna vez te invade la soledad, recuerda a este amigo que Dios te ha dado. Está contigo en todo momento.
Nunca estás solo.
La Madre Angélica, fundadora de EWTN, en sus programas de TV decía que mantenía una relación muy íntima con su ángel.
Le llamaba Fidelis, que en latín significa fiel, porque siempre le era fiel.
Y contó que tuvo una experiencia en que vio ángeles corporizarse para ayudarla.
Iba en un auto con un diácono y otras monjas al Monte Gargano, en Italia, y se encontraron en una encrucijada de caminos y no podían decidir qué camino tomar.
El lugar era totalmente desierto y no había indicaciones.
Y de repente apareció un auto a toda velocidad con 6 hombres jóvenes, a cual más bello y sonriente.
Y uno de ellos, de unos 22 años, se tiró del auto en marcha, algo imposible para un ser humano.
Les indicó, en perfecto inglés, que camino tomar, sin que ellos se lo hubieran preguntado.
Y luego salió corriendo a su coche caminando en un patrón que formaba una cruz de 5 metros, recorrió esa cruz siete veces, y luego desapareció.
Sin embargo no debes esperar que te suceda algo así de visible, porque en la mayoría de los casos la guía y el auxilio de los ángeles es invisible, viene por cosas que te pasan de improviso o por personas con las que te encuentras.
Bueno, hasta aquí lo que queríamos hablar sobre la importancia en estos momentos del auxilio de los ángeles, en especial de tu ángel de la guarda y cómo debes comunicarte con él para que te ayude.
Y me gustaría preguntarte qué cosas le pides a tu ángel de la guarda si es que dialogas con él.
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