Profecías Exclusivas traducidas al español del sacerdote brasileño Padre Oliveira.
La experiencia que tenemos es que los grandes acontecimientos que suceden en el mundo en general no vienen de improviso, sino que Dios da señales previas, y a veces en forma muy redundante.
Hoy asistimos a una avalancha de visiones y mensajes transmitidos por videntes, que apuntan básicamente a lo mismo.
No podemos negar esto ni mirar para otro lado, porque la Biblia dice que pasaría en estos tiempos.
En Hechos de los Apóstoles 2:17 se lee «sucederá en los últimos días, dice Dios: derramaré Mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros jóvenes verán visiones y vuestros ancianos soñarán sueños».
Y hay un sacerdote brasileño, de muy bajo perfil, que desde hace años recibe mensajes, sueños y visiones sobre el futuro.
Aquí hablaremos sobre una visión que tuvo el padre Oliveira en el 2020 sobre los hechos que sucederían en el mundo de ahí en adelante, hasta culminar en el 2029.
Muchas de las cosas que profetizó ya se cumplieron y otras están por cumplirse y en curso.
Él cataloga estos años como de «pruebas», que culminará con una gran señal del Cielo.
El padre Oliveira es un sacerdote brasileño que vive en Rio Grande do Sul.
Durante años ha recibido visiones místicas y revelaciones proféticas de Dios.
Este sacerdote no quiere aparecer, pero permite que se comparta el contenido para que la gente pueda aprender y cambiar su vida.
El 12 de marzo de 2020, sólo un día después que la OMS declarara al Covid-19 como una pandemia, tuvo una visión sobre los años futuros.
Todavía no había sucedido el confinamiento, ni el cierre de las Iglesias en todo el mundo, no había ninguna vacuna, y recién 2 años después Rusia invadiría Ucrania.
Ese día se despertó en medio de la noche y sintió un fuerte deseo de ir a la capilla.
Levantó la vista del altar y comenzó a tener una visión, el globo terrestre girando, con el número de años pasando, y debajo vio una serie de imágenes.
Sacó su diario espiritual y comenzó a tratar de describir lo que estaba visualizando.
Cuando transcribió las imágenes, describió lo que pensó que era su significado.
Las descripciones que escribió en su diario son las que siguen.
Vi el número 2020. La primera imagen era la de toda la gente del mundo y todo lo demás paralizado.
Lo interpreté así: ‘El año 2020 será conocido como el año que no ha pasado. La gente verá este año como un año estancado’.
Luego vi obispos cerrando las puertas de las iglesias y una multitud decepcionada observándolos desde afuera.
En esta multitud, muchos tenían una luz sobre sus cabezas y otros apuntaban hacia la iglesia.
Interpreté: ‘La cobardía de los pastores de la Iglesia no será olvidada. Los fieles laicos recibirán muchas gracias especiales que despertarán muchas conciencias. Muchos laicos harán serias denuncias, por los pecados de los obispos’.»
Luego la imagen cambia.
«Vi al Santo Padre sentado en una mesa, con las manos en la cabeza, angustiado y llorando.
Interpreté: ‘El Santo Padre sufrirá mucho. Ya está sufriendo. Su mayor sufrimiento estará en su propia conciencia’.
A partir de ese momento, el globo comenzó a girar y pasaron los años, y siguieron muchas imágenes de sufrimiento.
Había tantos que no podía escribir. Uno de ellos fue el de la gente pobre en las calles.
Interpreté: ‘Este año abre un período de pruebas.
Los próximos años serán de caos y dificultades. El final de 2020 estará marcado por muchas dificultades económicas’.
Vi el número 2021 y luego las banderas de China, EE. UU., Francia y Alemania ondeando, como una multitud en el fútbol.
Interpreté: ‘Habrá cierta tensión en el escenario mundial e involucrará a China, Estados Unidos, Francia y Alemania’.
Vi al Papa mirando la bandera rusa.
Interpreté: ‘El Papa se acercará a Rusia.
No sé si irá a Rusia, pero miraba la bandera rusa con cierta esperanza’.
Vi la bandera de China. De repente se rompe y algo como barro comienza a salir de ella.
Interpreté: ‘Muchas cosas ocultas se revelarán en China, o desde China’.
Vi que un grupo de personas vestidas de negro quemaban la bandera estadounidense.
Interpreté: ‘Estados Unidos será atacado y llamado enemigo de la humanidad’.
La expresión enemigos de la humanidad vino claramente a mi mente en ese momento.
Vi mucha gente con pistolas en sus manos y luego vi una carrera por las calles.
Interpreté: ‘La industria armamentista crecerá y el clima de guerra estará en pleno apogeo’.
Luego vi a un sacerdote con una bandera roja siendo expulsado de una iglesia por laicos.
La iglesia era parecida a una que conozco, igual que la del centro de la ciudad donde vivo.
Por la similitud, creo que esta parte se refiere a Brasil.
Interpreté: ‘En Brasil, en 2021, se expondrá el comunismo infiltrado en la Iglesia’.
Luego vi a muchos sacerdotes y obispos quitándose sus ropas sacerdotales. En este momento sentí una gran tristeza.
Interpreté: ‘Se verá o se revelará una gran apostasía o escándalo, o herejía’.
Luego vi que se abría una ventana y luego hubo una gran pausa. Durante esta pausa, vi gente preparándose para algo, abasteciéndose de comida.
Interpreté: ‘Llegará una ventana o período de paz entre 2021 y 2022, pero esa paz será como una falsa paz, por poco tiempo. Creo que es un período de preparación’
Vi los números 2021 y 2022 y, justo debajo, personal militar reunido. Pero estaban como si estuvieran escondidos, en una reunión secreta.
Interpreté: ‘En este período, creo que comenzarán los primeros conflictos, pero el mundo no lo sabrá, no será público’.
No sé por qué, pero tengo la sensación de que esta imagen es bastante metafórica. Este es un conflicto que no se verá abiertamente.
Entonces vi un gran fuego en la parte superior del globo terrestre.
Me pregunté: ‘¿Habrá alguna catástrofe en el hemisferio norte?’.
Luego vi al presidente de Rusia señalando el globo terráqueo y riéndose. Interpreté: ‘Rusia mostrará su malicia’.
Algo sucederá que confirmará una posición del presidente de Rusia. Su expresión era como cuando dices: ‘¡Te lo dije! ¡Te lo advertí!’
Vi a Benedicto XVI siendo preparado para el entierro.
Me pregunté: ‘¿Irá el Papa Emérito a la casa del Padre en 2022?’.
Luego vi a Francisco muy reacio a firmar cualquier documento.
Miró el mapa, en el que solo aparecía Occidente: Europa, América, África, y dudó en firmar el documento.
Interpreté: ‘El Santo Padre tendrá que tomar una decisión muy importante que podría cambiar el rumbo de Occidente’.
Luego vi la bandera de Brasil manchada de sangre o pintura roja.
Apareció la Virgen María, tomó la bandera y la agitó, sacudiendo la tierra de la bandera.
Interpreté: ‘En Brasil habrá un período violento, o una gran embestida del comunismo, pero la Virgen vendrá al rescate del país’.
El globo siguió girando y vi los números 2022 y 2023.
Luego vi enormes batallones marchando, pero lo raro fue que hubo un silencio muy grande. Como en la imagen de la reunión militar, volví a sentir esa sensación de que algo no era exactamente eso.
Me pregunté: ‘¿Habrá el comienzo de una guerra? ¿Estará en silencio?’
Nuevamente fue la sensación de un conflicto que no se sentirá ni se verá ni se escuchará. Aquí fue muy difícil de entender.
Entonces vi al Papa corriendo hacia un avión. Iba acompañado de seguridad y casi corría. No vi la cara del Papa.
Sentí: ‘El Papa tendrá que irse de Roma por alguna razón urgente’.
En ese momento, el globo dio vueltas y vi los números 2023 y 2024. Luego solo vi guerra. Vi gente viendo escenas de guerra en la televisión.
Me pregunté: ‘¿Verá el mundo los horrores de la guerra en 2024? ¿Aparecerá esto en las televisiones? ¿O será un conflicto que no veremos, no siendo exactamente físico?’
La certeza de un conflicto me parecía clara, pero la naturaleza del mismo no lo era.
Luego hubo un salto cronológico. En el globo, vi pasar los números del 2024 al 2029 y una gran luz apareció en el cielo.
Interpreté: ‘Habrá conflictos o problemas hasta el 2029. En ese año habrá alguna señal en el cielo’.
Luego vi que se izaba la bandera japonesa y la gente la aplaudía.
Interpreté: ‘Japón hará algo que no se olvidará’.
El país hará algo que será aplaudido.
Entonces el globo se detuvo en 2029 y vi a mucha gente mirando al cielo.
Interpreté: ‘En 2029, el mundo mirará al cielo y los conflictos y guerras en la Tierra tendrán que parar’.
Después de eso, no vi nada más. Me llama la atención que, nuevamente, el año 2029 aparecía como el final o cierre de algo.
Le llama la atención porque el primero de julio de 2016 el Padre Oliveira había tenido una visión del infierno.
Los demonios lo estaban atacando y un ángel lo protegió.
Le preguntó quién era y solo le mostró una enorme hoz, y en ella aparecían escritos los números 33 + 12, como un fuego incandescente.
Y el padre Oliveira interpreta,
Me pareció una advertencia de que los próximos años serían años difíciles para los sacerdotes.
Tenía 33 años en ese momento, creo que 33 + 12 son los próximos doce años, o el tiempo que me tomaría hasta los 45, es decir, hasta el 2029.
El ángel de las túnicas oscuras, en mi opinión, era el ángel de los últimos tiempos.
La guadaña, antes que un signo de muerte, es un signo de cosecha, por lo tanto, el final de un período, lo que me hace pensar en un tiempo de combate hasta 2029.
Bueno hasta aquí lo que queríamos hablar sobre las visiones que tuvo el padre Oliveira, en el año 2020, sobre lo que sucedería en el mundo hasta el año 2029.
Y me gustaría preguntarte qué conclusión sacas de lo que vendrá en estos años y como interpretas lo que sucederá en el año 2029 según el padre Oliveira.
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