Medio Oriente, persecución, economía, reforma de la Iglesia…
Siempre las expresiones sobre un líder mundial como el papa Francisco son importantes de leer, y más porque en la última entrevista concedida a un medio de comunicación habló sobre los grandes temas mundiales.
El Papa habló básicamente sobre cinco grandes temas de importancia internacional: la persecución de los cristianos en el mundo, la paz en el Medio Oriente, el antisemitismo, las reformas en la Iglesia Católica y la crisis económica.
El periódico La Vanguardia de España publicó la entrevista exclusiva con el papa Francisco el jueves pasado, que la resumimos en sus puntos más importantes aquí, pero puede leerla integra aquí.
CRISTIANOS PERSEGUIDOS
Pocos hablan de este tema y hay quienes ponen en duda las estadísticas de que más cristianos son asesinados por odio a la fe en la actualidad que en la época de las peores persecuciones del Imperio Romano.
«Los cristianos perseguidos – dijo – son un problema que me preocupa como pastor. Yo sé mucho acerca de la persecución pero no parece prudente contar aquí para no ofender a nadie. Pero hay lugares donde está prohibido tener una Biblia o enseñar catecismo o llevar una cruz… Hay una cosa que sí quiero dejar claro: estoy convencido de que la persecución de los cristianos hoy es más fuerte que en los primeros siglos de la Iglesia. Hoy más mártires cristianos que en aquella época. No es una fantasía, lo dicen los números».
LA PAZ EN MEDIO ORIENTE Y LA DIPLOMACIA DE LA ORACIÓN
¿Es esto posible? ¿Sirve de algo? En primer lugar, dice el Papa, un cristiano no puede no tener el corazón en Tierra Santa, porque,
«para nosotros todo comenzó allí. Es como el cielo en la tierra, un adelanto de lo que nos espera en el más allá, en la Jerusalén celestial».
Sobre la reunión con los presidentes de Israel y Palestina, el Papa Francisco nos recuerda que
«aquí, en el Vaticano, había 99 por ciento de las personas que dijeron que no se podía hacer, y luego el uno por ciento creció… algo que nunca había ocurrido poco a poco fue tomando forma».
El Pontífice agregó que el fundamentalismo, no sólo en el Medio Oriente, hace daño incluso cuando no recurre al terrorismo, porque ya la misma «mentalidad del fundamentalismo es la violencia en nombre de Dios.»
EL ANTISEMITISMO
La negación del Holocausto, que niega que el Holocausto ocurriera y los críticos del Venerable Pío XII (1876-1958).
Durante el viaje a Tierra Santa del Papa Francisco, una parte de la prensa israelí ha reavivado la polémica habitual sobre el Papa Pacelli. Francisco respondió que
«sobre Pío XII, el Papa que guió a la Iglesia durante la Segunda Guerra Mundial, tiraron de todo. Sin embargo, muchos judíos fueron escondidos en conventos en Roma y otras ciudades italianas, incluso en la residencia de verano de Castel Gandolfo. Allí, en la habitación del Papa, nacieron 42 niños, hijos de judíos y otros refugiados perseguidos. No es que Pío XII no haya cometido ningún error, también yo hago muchos, pero su papel debe leerse en el contexto de la época. ¿Era mejor denunciar con el riesgo de otras pérdidas o intentar salvar vidas?».
«Me da una urticaria existencial», añade el Papa, «cuando veo que se la agarran con la Iglesia y Pío XII, y se olvidan de las grandes potencias. ¿Usted sabe que ellos sabían perfectamente que había una red ferroviaria de los nazis para llevar judíos a los campos de concentración? Tenían fotos. Pero nadie bombardeó las vías del tren».
Francisco reitera lo manifestado en Tierra Santa, que «el cristianismo no se puede vivir si no reconoce las raíces judías», y que un cristiano no puede ser anti-semita. Hoy el antisemitismo es «una red que se extiende a la derecha como a la izquierda», incluso se puede «esconder mejor en las corrientes políticas de derechas».
En la Iglesia, en todo caso, no hay lugar para los que niegan el Holocausto, llamados «locos» por el Papa.
LAS REFORMAS EN LA IGLESIA
Se le preguntó si él será recordado como el Papa de una profunda revolución en la Iglesia, Francisco respondió citando una canción italiana «debemos pedir como en aquella canción: prendi questa mano zingara…».
Más en serio, el Papa Francisco nos invita a no contraponer la reforma y la tradición. Cada reforma en la Iglesia
parte «de leer a fondo el pasado y ver lo que contiene». Por lo tanto, de «ir a las raíces, reconocerlas y ver lo que tienen que decirnos hoy».
El Papa reconoce que, si hay algo nuevo, es su estilo que en ocasiones no se ajusta a los protocolos y también socava la seguridad. Pero Francisco prefiere tomar algunos riesgos en términos de seguridad – «es verdad que cualquier cosa puede pasar, pero a mi edad no tengo mucho que perder» – y mantener el hábito de un contacto directo y amistoso con los que van a escucharle.
No es sólo una cuestión de estilo la llamada a la pobreza, sino que es
«el corazón del evangelio. No se puede entender el Evangelio sin pobreza». Advirtió, sin embargo: la pobreza «debe distinguirse del pauperismo», que es sólo su retórica falsa.
LA CRISIS ECONÓMICA MUNDIAL Y EL «PENSAMIENTO ÚNICO» QUE LOS PODERES QUIEREN IMPONER
«Cuando veo las imágenes de niños desnutridos en diversas partes del mundo, creo que estamos en un sistema económico global que no es bueno. Está demostrado que con las sobras podrían alimentar a las personas que pasan hambre. En el corazón de cualquier sistema económico debe estar el ser humano. En su lugar, se pone el dinero, el dios del dinero, en el medio de todo. Hemos caído en el pecado de la idolatría, la idolatría del dinero. La economía se mueve en un deseo espasmódico de tener más y más, y para llegar allí, se ha generado una cultura del derroche».
Tampoco se trata sólo de economía. Los mismos poderes imponen un
«pensamiento único que quita la riqueza de la diversidad de pensamiento y, por tanto, la riqueza de un diálogo entre las personas.»
OTROS TEMAS
«La Vanguardia «, que se publica en Barcelona, también preguntó sobre el separatismo de Cataluña de España.
«Cada caso – dice el Papa – tiene que ser estudiado en sí mismo. Escocia, Padania, Catalunya…».
El Papa Francisco, también se refirió a los aspectos personales. Dijo que la renuncia al ministerio petrino del Papa Benedicto XVI «ha abierto una puerta, ha creado una institución», que es la del Papa Emérito, y que él está dispuesto a renunciar el día en que considere que su salud no lo hace más capaz de dirigir la Iglesia.
Al final Francisco dice que le gustaría ser recordado por los historiadores como «un buen tipo, que ha hecho lo que podía».
Fuentes: La Vanguardia, La Nuova Bussola Quotidiana, Signos de estos Tiempos