Jesús Explicó que Pasará en estos Tiempos y qué hacer [mensajes a Olivita Arias]

Habló sobre el final de los tiempos y que hacer en la tribulación.

Dios no hace nada sin avisarle a su pueblo, dice el libro de Amós en la Biblia.

¿Y cómo nos avisa?

En todos los tiempos ha elegido sus mensajeros.

En el Antiguo Testamento fueron conocidos con el nombre de profetas, a quienes el pueblo y los sacerdotes no les creían e incluso los martirizaban.

Pero que la historia muestra que fueron fundamentales para llevar el mensaje de Dios y hacer advertencias.

Y hoy ese lugar lo ocupan los que llamamos videntes, a quienes tampoco los propios fieles y sacerdotes les creen y hasta se burlan de ellos.

Son en realidad testigos que dan testimonio de lo que manda decir el Cielo.

Y en general gente humilde, algunas veces niños.

Y un caso es el de la colombiana Olivita Arias, que murió anciana en el 2015.

Aquí hablaremos sobre los mensajes que recibió Olivita Arias, a la que el Señor le dijo que no terminaría su vida sin que viera el inicio del Final de los Tiempos, a los que ella identificó al final de su vida.

Matilde Oliva Arias, conocida como Olivita Arias, fue una humilde campesina colombiana de Garagoa, pobre y analfabeta.

A quien el Señor le dio mensajes sobre los últimos tiempos, sobre la necesidad urgente de convertirse, y la llevó a ver el infierno, el cielo y el purgatorio.

Fue entrevistada exhaustivamente por sacerdotes e incluso por obispos.

Fue motivo de burla para algunos y de llamada de atención para otros.

También fue motivo de asombro para teólogos y estudiosos, quienes quedaban confundidos ante tanta sabiduría escondida en una mujer sencilla y supuestamente ignorante.

La casita donde ella vivió hoy se llama Casita de Nazareth y está convertida en un santuario que se puede visitar. https://www.casitadenazareth.com/

Jesucristo le prometió que su vida no terminaría sin que viera el inicio del fin de los tiempos, promesa que según ella ya se ha cumplido.

Y en los días previos a su fallecimiento, que sucedió el 27 de julio de 2015, dejó dicho que después de su muerte vendrían los acontecimientos que le fueron revelados.

También le dijo que nos preocupáramos cuando viéramos dos Papas en Roma.

Y cuando eso se cumplió, ella comenzó a pedir oración por la Iglesia, porque dijo, «se acercan tiempos difíciles».

¿Cómo comenzaron las apariciones?

Todo comenzó el 3 de diciembre de 1987.

Caminaba a su casa en Garagoa, y de pronto vio un señor muy hermoso que estaba sentado.

Tenía ojos claros, era muy alto e imponente, amable.

Llevaba como un bastoncito, posiblemente un cetro, y un libro grande y brillante, que más adelante explicó que era el libro de la vida.

Entonces todo se iluminó y ella cayó de rodillas, creyendo que era un ángel o un santo.

Se identificó como Jesús de Nazaret y le dijo que venía caminando por el mundo entero llamándonos a la conversión.

La llamó por su nombre y le dijo,

«Yo estoy por el mundo con Mi madre y estoy dando el último aviso».

Y le agregó,

«Mi Madre y yo estamos caminando tras Mis ovejas, muchas están descarriadas y Yo vengo pronto a juzgar a este mundo».

Y le dio una misión a Olivita,

«Vengo a darte un mensaje para que lo hables a donde vayas y muchos crean sin ver.

Algunos se burlarán, pero otros reconocerán mi voz, entenderán mi mensaje y me seguirían».

Y en un momento Jesús se sienta en una piedra, lo ve ensangrentado y llorando, y le dice que llora, porque Su sangre derramada por todos aquellos que se fueron al infierno, se perdió.

Olivita fue llevada al infierno por Jesús y dice que es real no una fantasía.

Dice que de pronto se abrió un hueco y viajaron a un lugar que dice es horrible y que si el Señor no la hubiese sostenido, hubiera muerto de terror.

Vio un lago de azufre hirviendo y multitudes sufriendo.

Vio que cada uno paga según sus pecados y sufre más con el órgano que pecó.

Había allí una figura horrible, como de dos metros, con ojos rojos, sonrisa malévola, todos le temían.

Y le preguntó al Señor quien era, y le dijo que era satanás, el rey del infierno.

Y además le explicó que ese lugar fue creado para satanás y sus ángeles caídos, mientras que para los hombres fue creado el cielo, pero ellos lo rechazaron y por eso muchos caen en el infierno.

También Olivita fue llevada a ver el cielo.

Vio el trono de Dios. El Padre a un lado, el Hijo al otro, el Espíritu Santo encima y Su madre a un lado.

También vio caminos de jardines de distintos colores y que allí no hay noche, sino que todo está iluminado.

Vio muchísimos ángeles que cantaban y tocaban todo tipo de instrumentos.

Vio a muchísimos santos, muchísimos sacerdotes, y a unos Obispos.

E incluso vio a una hermana suya ya en el cielo.

Y le preguntó por sus otras hermanas y Él dijo que todavía estaban en el purgatorio purificándose.

El Señor le dijo que suele llevar a los videntes a conocer Su gloria.

Para mostrarles lo que les tiene preparado.

Porque ellos están difundiendo su mensaje por el mundo, cumpliendo su misión.

Y le dijo que no se preocupara, que los que quieran creer que crean y los que no, no lo hagan, que lo importante es centrarse en divulgar lo que Él les pide.

El Señor le habló de los pecados y sus consecuencias.

Le dijo que Dios va a sacudir el mundo por culpa del pecado de cercenar vidas antes de nacer y los tantos pecados nuevos que lo ofenden.

Habló también de los pecados del divorcio, las uniones libres, y separarse de la Iglesia para seguir a pastores protestantes.

Se quejó de la falta de pureza en la juventud, que no hacen caso a sus padres, y que el demonio los alejó de la Iglesia, la Eucaristía y la confesión, y los tiene entretenidos mirando cosas de pecado.

Le pidió además que dijera que debemos alistar el alma, tenerla como una rosa blanca, no como carbón.

Porque nos preocupamos de tener buenas casas, limpias y ordenadas, pero no nos preocupamos por limpiar nuestras almas, ni por cuidar la casa del Señor.

Y el ángel de la guarda de cada uno llora mucho por el alma del que custodian, porque el demonio se la quiere quitar y él quiere llevarla a Dios.

Le habló también sobre los sacerdotes.

Le dijo que tenemos que orar por ellos porque el enemigo quiere quitárnoslos y pronto llegará el día en que no los tendremos.

Satanás quiere que todas las ovejas sean de él y que no haya nadie que las lleve a Dios.

Y Nuestra Señora se le apareció con una serie de consejos que ella debía divulgar para la conversión y afianzar la fe.

Reparación de cada primer viernes y sábado del mes.

Consagración y oración diaria a los dos corazones.

Misa diaria, si es posible, y prepararse bien para recibir la Eucaristía.

Hacer reverencia con rodilla al piso al recibir la Santa Comunión y evitar las malas palabras, conversaciones ociosas y de doble sentido, chistes vulgares, evitar mentiras, inclusive las piadosas, y no escuchar chismes ni murmuraciones.

Ir a la confesión regular 1 vez a la semana o al menos al mes, o inmediatamente que se cae en pecado mortal y tener el propósito de no pecar más.

Dejar la televisión, radio y música vulgares y entregarlo como ayuno.

Rezo diario del Santo Rosario.

Perdonar, y no codiciar cosas, personas o talentos de otros.

Orar y ayunar por sus hijos, y por la salvación de las almas pecadoras.

El Señor le dijo que estamos en los últimos tiempos y estamos viviendo las profecías que se han explicado en el pasado.

Estamos en la tribulación y sin conversión no habrá paz en el mundo.

Vendrán grandes terremotos en el mundo entero.

Y una purificación en Colombia y en todos los países.

También le habló de la persecución a los cristianos.

Pero nos advierte que nada nos faltará y que Él nos defenderá, pero que estemos preparados.

Además el Señor le dijo que está preparando casas de refugio, pero son pocas, porque pocos quieren escuchar Su llamado.

El Señor también le habló de los 3 días de oscuridad, que según lo que se sabe sería la culminación de la tribulación y la purificación.

Dice que se oscurecerá el sol, la luna y las estrellas.

Él pondrá una señal en el cielo y el que no quiso convertirse para ese día, ya será muy tarde.

Habrá grandes trastornos en la naturaleza y el Señor sacará a todos los impíos y dejará solo a los buenos.

Bueno hasta aquí lo que queríamos contarte sobre Olivita Arias, uno de los instrumentos que el Señor usó para hacernos llegar su mensaje de conversión y advertirnos cual es la hoja de ruta de lo que sucederá en la Tierra.

Y me gustaría preguntarte si conoces gente humilde que tiene un contacto especial con el cielo y funcionan de alguna manera como instrumentos que nos traen mensajes de Dios.

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