En Bélgica ya no es noticia una eutanasia.
Una pareja que había estado casada durante 64 años decidió por la eutanasia en Bélgica porque no podía soportar que uno muriera antes que el otro, y esta historia ‘no corrió como reguero de pólvora’ por los medios, como fue el caso de los gemelos que fueron sacrificados a principios de este año, probablemente porque la eutanasia en Bélgica ya no es noticia, porque ya se ha incorporado al paisaje y a la forma de vida belga.
Los países del norte de Europa cada vez dan menos valor a la vida, compitiendo entre Holanda y Bélgica por quien de ellos introduce legislaciones más “avanzadas”.
AHORA ES UNA PAREJA DE ANCIANOS
Otro caso de una pareja eligiendo la eutanasia para no quedar separados ha surgido en Bélgica. La semana pasada, Leopold Dauwe de 90 años, y su esposa Paula Raman de 89 años, fueron sacrificados, rodeados de sus hijos y nietos.
«Juntos caminamos el camino. Juntos nos fuimos», fue el mensaje en su tarjeta de memoria.
La pareja había estado casada durante 64 años y estaban juntos desde hace 70 años. Ninguno tenía una enfermedad terminal, pero ambos estaban en problemas de salud y vivían en un hogar de ancianos.
Desde 2002, Bélgica ha permitido el suicidio con ayuda médica para los pacientes adultos con enfermedades terminales sometidos a sufrimiento físico o mental intolerable.
Dirk Uyttendaele, yerno de la pareja, dijo a De Standaard que sus parientes estaban gravemente enfermos y que no había tratamiento disponible. Raman sufría de problemas cardíacos y Dauwe quedaba lentamente ciega y tenía una enfermedad pulmonar.
«Ninguno de los dos quería quedarse atrás cuando el otro muriera primero, y no tenían ninguna posibilidad de una muerte digna», dijo Uyttendaele. «Ellos estaban siempre en sus camas y su lucha por la vida sólo se haría más difícil el paso del tiempo», agregó.
«Ellos decidieron actuar antes de que [la muerte]. Toda la familia apoyó su decisión 100 por ciento«.
La familia explicó que Dauwe a menudo había dicho que si él llegara al punto en que no pudiera cuidar de sí mismo nunca más, iba ‘a saltar al río’. Raman, sin embargo, era profundamente religiosa y había sentido antes incómodidad con el concepto de suicidio asistido. Sin embargo, al final de su vida, cambió su punto de vista.
«Todavía soy católica, pero a mi manera», habría dicho, según DeStandaard.
EN LA PENDIENTE RESBALADIZA
En enero, gemelos sordos de 45 años, que tenía probabilidad de quedar ciegos, eligieron la eutanasia juntos porque no tenían nada por qué vivir. Ese caso fue noticia en todo el mundo, pero de la eutanasia de Leopold Dauwe y Paula Raman apenas se ha informado en absoluto, porque quizás la eutanasia esté formando parte del paisaje común.
Cuando los pacientes pueden optar por la eutanasia en Bélgica siguen ciertas regulaciones. Sin embargo, los legisladores están estudiando la ampliación de la ley para incluir a los menores gravemente enfermos y a pacientes que sufren de Alzheimer.
La extensión posible de la ley, en especial la inclusión de menores de edad, ha desatado aún más polémica. Thierry Giet, del partido socialista francófono de Bélgica, defendió la extensión, dice la agencia France Presse:
«La idea es actualizar la ley para tener más en cuenta las situaciones dramáticas y casos extremadamente angustiosas a los que debemos encontrar una respuesta».
Según AFP, hubo 1.432 casos de eutanasia en Bélgica en 2012, lo que representa el 2 por ciento de todas las muertes en el país.
Fuentes: Huffington Post, Signos de estos Tiempos