En medio del evento “Monterrey Ora”.
La alcaldesa, Margarita Arellanes Cervantes, levantando las manos al cielo pidiendo,
“humildemente a Dios que entre a esta ciudad y la haga su habitación, señor Jesucristo, bienvenido a Monterrey».
Rodeada de aplausos, ovaciones, y “gritos de jubilo” por los congregantes de evento “Monterrey Ora”, Margarita Arellanes Cervantes, alcadesa de Monterrey, México, entregó simbólicamente las llaves de la ciudad norteña a Jesucristo,
pidiendo que “su reino de paz y bendición sea establecido”.
Tras el evento realizado por la Alianza de Pastores de la Ciudad de Monterrey, México, la alcadesa dijo:
“Abro las puertas de este municipio a Dios como la máxima autoridad, reconozco que sin su presencia y su ayuda no podemos tener éxito real”.
“Hemos sido en los últimos meses, y lo digo con humildad, testigos de un cambio positivo cada vez más evidente en nuestra ciudad y podemos decir que esto ha sucedido porque le hemos abierto las puertas a Dios”, afirmó la alcadesa.
“Es curioso como algunos se escandalizan si hablamos de Dios públicamente, hasta se muestran intolerantes, pero toleran y callan ante el odio y el mal, se vuelen pasivos sin proponer y construir un mejor país, se callan y enmudecen”.
“Vivimos en una nación que canta día a día que el destino de los mexicanos por el dedo de Dios se escribió, pero al mismo tiempo lo confinamos a actuar en secreto, ignorándolo casi en todas las esferas de la sociedad. Está de más explicar lo que una sociedad sin Dios puede tener: dolor, pobreza y violencia”.
Cervantes hizo la entrega de las llaves de esa ciudad a Jesucristo y levantando las manos al cielo pidió:
“humildemente a Dios que entre a esta ciudad y la haga su habitación, señor Jesucristo, bienvenido a Monterrey, la casa que nos has edificado, está es tu casa, gracias”, señaló.
Fuentes: Noticia Cristiana, Signos de estos Tiempos