El mayor ataque concentrado contra la civilización cristiana.

¿Podrán eliminar la presencia de Dios en el mundo?

¿Podrán quitar del corazón de la gente el amor de Dios?

¿Podrán suspender la voz de Dios en la mente de las personas?

No, es imposible.

Pero lo intentarán.

Lo están intentando.

En este momento nos hallamos ante el mayor esfuerzo por cambiar la matriz cristiana del mundo por una luciferina.

Han estado avanzando desde hace décadas.

Por eso es el caos en que se encuentra el mundo y la Iglesia.

Estamos en el momento justo, en el punto de quiebre.

Aquí hablaremos sobre cómo se está dando el mayor ataque en la historia de estos 2000 años para cambiar la matriz cristiana del mundo y por qué cosas concretas la quieren suplantar. 

En 1931 Aldous Huxley escribió «Un mundo feliz», una visión de pesadilla de una sociedad futura conocida como el «Estado mundial», gobernada por una élite que creó un personaje llamado «Gran Hermano» que controla todas las cosas.

Donde a los hombres se les ha quitado todo.

Su libertad, sus emociones, su individualidad y sus posesiones han sido erradicadas y las relaciones personales están restringidas.

Esto ya está en marcha a través del Foro Económico Mundial, que es la organización de los multimillonarios del mundo que está convocando a los políticos desde hace unos 50 años.

Su poder reside en el dominio del capital financiero, que hoy es el propietario del 80% de las acciones de las grandes corporaciones, incluyendo los medios de comunicación y las Big Tech.

Y que ahora ve que sus predicciones para el año 2030 están comenzando a cumplirse, porque han conseguido las condiciones para manejar a los políticos.

En su proyecto no hay lugar para el libre mercado y las elecciones individuales, sino que se busca el intervencionismo estatal y el colectivismo. 

Por lo que la libertad individual y la propiedad privada están en peligro.

Según sus planes para el 2030, la propiedad privada y la privacidad serán abolidas y los bienes de consumo también dejarían de ser propiedad privada.

Si esa proyección del Foro Económico Mundial se hiciera realidad, la gente tendría que alquilar las cosas al Estado, que sería el único propietario de todos los bienes. 

Y la oferta de bienes se racionaría de acuerdo con un sistema de los puntos de crédito social de cada persona, como en China. 

Que es el mecanismo para sancionar comportamientos indeseables en las personas e identificar a los no deseados que maneja el estado totalitario.

Porque cada movimiento personal se rastrearía electrónicamente a través de la bancarización de las transacciones.

Por otro lado, el plan supone que las grandes productoras de bienes serán las corporaciones multinacionales, pero en las que el gobierno tendrá una fuerte intervención en ellas como sucede en China.

Se explica entonces por qué el invitado de honor del Foro Económico Mundial 2021 fue Xi Jinping, el presidente de facto de la República Popular China.

Un régimen que prohíbe la propiedad, salvo de los comunistas, y que ha creado sociedades tan felices que huyen de ellas los que pueden.

Pero para que todo esto se pueda cumplir se necesita de un consentimiento social por las buenas o arrancado quirúrgicamente en una situación de caos.

Para ver en detalle la sociedad que nos quieren imponer y a la que nos está llevando, podemos ver las predicciones para el 2030 que el Foro de Davos lanzó en el 2016, bajo el slogan «no tendrás nada pero serás feliz», que ya de por sí es muy revelador.

En honor a la brevedad trataremos sólo las más significativas.

La primera predicción es que podrás alquilar cualquier cosa que necesites y te la llevará un dron a casa.

La parlamentaria danesa Ida Auken, en un artículo publicado en las páginas del Foro Económico Mundial en el 2016 ha dicho,

«No tengo nada. No tengo auto. No soy dueña de una casa. No tengo electrodomésticos ni ropa».

Y algo aún más radical,

«En nuestra ciudad no pagamos alquiler, porque otra persona está usando nuestro espacio libre siempre que no lo necesitamos. 

Mi sala de estar se usa para reuniones de negocios cuando no estoy allí».

Es la consagración de la cero privacidad.

La segunda predicción u operación que están realizando dice,

«Estados Unidos no será la primera potencia mundial. Un puñado de países lo sustituirán».

Esta operación no se trata de suplantar a Estados Unidos solamente, sino al sistema de libertad de mercado, de movimiento de las personas y privacidad por un sistema como el Chino.

Y esto ya se está produciendo incluso dentro de la gran potencia del norte, con políticas cada vez más estatistas y que restringen la libertad de expresión.

La tercera predicción es que los trasplantes de órganos se harán con órganos prefabricados. 

Se imprimirán en impresoras 3D.

No está mal esta meta si apuntara sólo a mejorar la salud de la población.

Pero en realidad apunta al transhumanismo, que es a lo que quieren llegar.

Quieren la fusión del cuerpo humano, que creó Dios a su imagen y semejanza, con las computadoras.

Quieren que cambiemos el cuerpo humano.

Y también quieren intervenir nuestro cerebro, como dijo el presidente de Chile, Sebastián Piñera, alabando la tecnología 5g porque podría ponernos pensamientos en nuestro cerebro que no son nuestros.

La cuarta meta dice «Comerás menos carne. No será un alimento básico. Para el bien del medio ambiente y de tu propia salud».

Ya no podremos opinar sobre nuestra dieta, nos obligarán a alimentarnos con lo que el «gran hermano» decida.

Y como consecuencia, caerá drásticamente la cantidad de animales en el mundo.

Pero Dios ha creado a los animales para que también sean nuestro alimento. 

La biblia nos relata la orden que Yahve le dio a Noé en Génesis 9:3 «Todo lo que se mueve y tiene vida os servirá de alimento».

Además las mascotas serán nuestra compañía.

La quinta meta dice, «mil millones de personas tendrán que desplazarse por el cambio climático. Tendremos que hacer un mejor trabajo de bienvenida e integración de esos refugiados»

No es espontáneamente por el cambio climático, porque operadores de este nuevo orden, como George Soros, están financiando a grupos que promueven la migración del tercer mundo a Europa, desde hace mucho.

El objetivo es quitar la identidad cristiana de Europa en ese caso.

Porque los que llegan son paganos o musulmanes, que en general no se asimilan a los valores de la cultura a la que llegan, como lo vemos en Europa.

Y esto genera conflictos, como se ve en los barrios musulmanes de Francia en los que no puede entrar la policía.

Todo esto en definitiva tiene el objetivo de diluir la cultura cristiana.

Esta quinta meta está relacionada con la sexta que dice que «los valores occidentales serán puestos a prueba». 

Que en buen romance significa que los valores cristianos insertos en la civilización occidental serán atacados para tratar de extinguirlos.

Y ese ataque ya lo están operando desde hace tiempo.

Nuevamente mencionemos a George Soros, que ha financiado a través de décadas a movimientos protestatarios contra los valores tradicionales de occidente, como las feministas, los que abogan por la terminación de la vida antes de nacer, los de la ideología de género, etc.

Lo que nos señala nuevamente que estos puntos que anunció el Foro de Davos no son meras predicciones, sino metas a las que quieren llegar y por las que han estado operando desde hace tiempo.

¿Y qué pasará con las personas que no acepten este reinicio del mundo sobre una matriz anti cristiana?

Ida Auken en el artículo que mencionamos nos da la pista.

Dice que aquellos que se sintieron obsoletos e inútiles, cuando los robots y la inteligencia artificial se hicieron cargo de gran parte de nuestros trabajos, viven fuera de los bienes de la sociedad.

En sus propias palabras, 

«Los que se enojaron con el sistema político y se volvieron contra él. Viven diferentes tipos de vida fuera de la ciudad.

Algunos han formado pequeñas comunidades de autoabastecimiento. 

Otros simplemente se quedaron en las casas vacías y abandonadas en pequeños pueblos del siglo XIX»

Esto que enumeramos ya parece estar en marcha, con el pase verde que amenaza con excluir a muchas personas de los bienes de la sociedad.

Pero la buena noticia es que a Dios nada se le escapa por lo que este proyecto totalitario difícilmente tenga éxito.

Tal vez tenga su cuarto de hora pero se vendrá abajo como un castillo de naipes.

Bueno hasta aquí lo que te queríamos contar sobre por qué el gran reinicio del mundo que está operando el Foro Económico Mundial va directamente contra la civilización cristiana que inspiró Dios. 

Su objetivo es quitar de las sociedades al Dios que se reveló en la Biblia.

Y me gustaría preguntarte cómo te imaginas que va a ser la vida de aquí al año 2030.

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