Una devoción que emergió en Portugal y se hizo grandiosa en Brasil.

Todo comenzó el 22 de mayo de 1180, cuando en Portugal, Don Fuas Roupinho salió con algunos compañeros a una partida de caza. El venado que perseguía se tiró a un acantilado y su caballo iba a hacer lo mismo cuando imploró a María y ésta apareció y lo salvó. Don Fuas construyó una Capilla que dio origen a la advocación Nuestra Señora de Nazaré.

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Los marinos portugueses llevaron la devoción a Brasil. Y esta tuvo un importante arraigo en el Estado amazónico de Pará, donde el segundo domingo de octubre se realiza la procesión del Cirio de Nazaré, que pasa por ser la mayor procesión de Brasil y dicen que del mundo, con más de 2 millones de fieles.

aparicion de la virgen a fuas roupinho

 

EL HÉROE DE LA LUCHA CONTRA LOS MUSULMANES, DON FUAS ROUPINHO

En el distante siglo XII, Portugal ya era nación soberana, sin embargo, escaramuzas y combates terrestres eran frecuentes. Además, los navíos moros aún eran señores de la costa, y esto constituía un gran peligro para todos.

El rey Don Alfonso Enríquez, preocupado en alejar esa amenaza que pesaba sobre sus súbditos, llamó a un vasallo de confianza, el alcalde mayor de Porto de Mos, y lo hizo comandante de las pocas naves de guerra que entonces tenía Portugal.

Para muchos, pareció una temeridad que la flotilla cristiana enfrentase a los experimentados marineros y corsarios árabes. Sin embargo, la Providencia cuidó a los lusos, y la escuadra mora sufrió clamorosa derrota a lo largo del Cabo Espichel.

Era la primera victoria de la marina portuguesa y su comandante Don Fuas Roupinho pasó a la historia. Sin embargo, su nombre sería recordado por las generaciones posteriores, no tanto por el combate marítimo, sino por haber sido objeto de un favor celeste, un verdadero milagro operado en nombre de María Santísima.

ermita de nazare de fuas roupinho

Ermita de Nazare en Portugal

 

MARÍA SALVA A DON FUAS

Tiempo después de la batalla naval, Don Fuas se encontraba en la región de Nazaré, área costera distante poco más de 100 kilómetros de Lisboa, repleta de altos despeñaderos, de donde se visualiza un fabuloso mar azul.

Era una mañana de septiembre de 1182, y estando la región en paz, el impetuoso caballero se dedicaba a una de sus actividades predilectas: la caza.

Una pesada neblina cubría los campos y el litoral, y cuando el cazador ya estaba presto a desistir de la empresa debido a la falta de visibilidad, vio el bulto de un gran ciervo corriendo en la bruma e inmediatamente salió a alcanzarlo.

La neblina hacía muy difícil la persecución, rocas y árboles surgían, por así decir, de la nada, iban por terrenos desconocidos, pero el tenaz Don Fuas no desistía.

Súbitamente, el ciervo dio un gran salto, y el caballo, que lo iba siguiendo, se disponía a hacer igual movimiento.

En ese momento el caballero se percató, con espanto, que el ciervo se lanzaba de uno de los peñascos costeros, entrando en el abismo para perecer en el choque con las rocas marinas, y su caballo iba hacer lo mismo…

¡Demasiado tarde para retroceder! En pocos segundos, el propio perseguidor tendría el mismo trágico destino. No había escapatoria.

Sintiéndose perdido, de su afligido pecho brotó un clamor de súplica a la única que podría socorrerlo en tal situación: “¡Señora Salvadme!”

Entonces apareció milagrosamente en el aire, bondadosa y sonriente la Virgen María, con su Divino Hijo en los brazos. A un ligero gesto suyo, las patas traseras del caballo se pegaron a la piedra, salvando la vida del caballo y de su jinete. Y desapareció del mismo modo tan inesperado como apareció.

De rodillas en el suelo y lleno de emoción, Don Fuas Roupinho prometió construir en ese lugar una capilla en honra a quien milagrosamente lo salvó: Nuestra Señora de Nazaré. Y así lo hizo.

Esto sucedió en la actual villa de Nazaré localizada en el distrito de Leiria, región Centro y subregión del Oeste, con cerca de 14 mil habitantes, y que según las crónicas su orígen fue villa de pescadores.

El milagro marcó tan profundamente las almas que incluso el poeta Camões, en su inmortal obra “Las Lusiadas”, hace referencia a él.

Algunos antiguos comentaristas entienden que el ciervo que atrajo a Don Fuas Roupinho, habría sido un demonio bajo la forma de animal. La interpretación tiene sentido.

Con su operación naval, que expulsó a los corsarios de aquellas costas, el valiente caballero trajo paz para todos. Y el espíritu maligno, enemigo de la paz, intentó vengarse de él, precipitándolo en el terrible despeñadero. De eso lo libró su devoción a la Madre de Dios.

Hasta los días de hoy la tradición señala una de las rocas de los Montes Pederneiras, la cual proyecta sobre el abismo las marcas atribuidas a la herradura del caballo de don Fuas.

Nazaré se destaca por las diversas edificaciones religiosas, como el Santuario de Nuestra Señora de Nazaré.

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Santuario de Nazare en Portugal

 

RECUERDO INDELEBLE DE LA BONDAD DE MARÍA

El Pequeño oratorio que construyó Don Fuas quedó conocido con el nombre de Capilla de la Memoria, y esta devoción se propagó rápidamente.

Casi doscientos años después, en 1377, el rey Don Fernando la hizo ampliar y elevar a la condición de Matriz.

La intercesión de Nuestra Señora de Nazaré, tan apropiada a los hombres en situación de peligro y de imprevistos, se tornó apreciada sobre todo por los grandes navegantes que de Portugal se lanzaban a la conquista de los océanos.

Hombres como Vasco da Gama, al partir en su primer viaje a la India, y Pedro Álvarez Cabral, en la expedición que descubriría el Brasil, no se atrevieron a lanzarse al mar sin antes ir en peregrinación a Nuestra Señora de Nazaré.

ns de nazare primer plano en iglesia

 

LA VIRGEN DE NAZARÉ LLEGA A BRASIL

Los navegantes portugueses llegaron a Brasil y contaron esta historia en el Brasil, la Virgen de Nazaret fue asimilada a la Virgen milagrosa que habria salvado a un cazador amazonico.

Y mientras el peregrinaje de Nuestra Señora de Nazaret iba perdiendo su esplendor en Portugal, creció en Brasil, especificamente en Belem, donde hizo otro milagro, fue el vehículo para la devoción a María más grande del mundo: la procesión del Cirio de Nazaré.

En la ciudad de Belem tiene lugar el que se considera el evento más multitudinario del mundo en honor de la Virgen María: el Cirio de Nazaré.

Más de 2 millones de fieles procesionan alrededor de una pequeña figura de la Virgen María – Nuestra Señora de Nazaré – a través de las calles de Brasil el segundo domingo de octubre.

El Cirio de Nazaré es el mayor acontecimiento religioso del año de Brasil, y tiene lugar en la desembocadura del Amazonas en la capital del estado norteño de Pará, Belem.

Es una procesión católica romana típica con una serie de celebraciones y tradiciones que han surgido alrededor de ella, que atrae gente de todo Brasil, casi doblando el tamaño de la pequeña ciudad portuaria de Belem.

cirio de las aguas

Cirio de las aguas

 

COMO ES EL EVENTO

En la gran procesión se lleva la imagen de madera de Nuestra Señora de Nazaret, que el día anterior fue transportada desde Vila de Icoaraci en la romería fluvial, llamada Cirio das Aguas, una parada de centenares de barcas por la bahía de Guajará; hay que tener en cuenta que es la patrona de los marineros.

La talla es depositada en la Catedral de la Sé para que al día siguiente, colocada sobre unas andas decoradas con flores, empiece la citada procesión, escoltada por carrozas y devotos descalzos que portan una cuerda en representación del vínculo con la madre de Cristo e intentan tocar a la Virgen; los niños se disfrazan de ángeles y se mezclan todas las clases sociales, tardándose casi seis horas en recorrer los cinco kilómetros de distancia.

Su destino es el Santuario de Nazaré, donde quedará expuesta durante las dos semanas siguientes para que los peregrinos puedan visitarla y rezar.

Mientras, se da paso a la otra cara de la fiesta, la de la diversión, a base de música, baile, cabalgatas, fuegos artificiales y tradiciones folklóricas amazónicas propias de ese estado de Pará.

Eso sí, la Virgen de Nazaret está siempre presente, ya que se levantan altares en su honor por todas partes: casas, bares, comercios, etc.

vista noctura de cirio de nazare fondo

 

LA DEVOCIÓN A MARÍA ABRAZA A TODAS LAS RELIGIONES

Es una exhibición pública de gran devoción, que ha persistido y prosperado como una pieza central de la cultura regional amazónica, manteniendo niveles consistentes de participación año a año, mientras el catolicismo pierde terreno rápidamente frente a las confesiones evangélicas, en una dramática

Pero en Brasil, donde las tradiciones africanas e indígenas se fundieron con el cristianismo durante siglos y donde el catolicismo tiene profundas raíces culturales, las identidades religiosas no son tan claras.

“Muchos de los fieles de las iglesias pentecostales acompañan al Cirio”, dijo Raymundo Heraldo Maues, profesor de antropología y experto en Cirio de la Universidad Federal de Pará.

“Las auto-definiciones de la gente casi nunca están totalmente alineadas con lo que otros piensan que las creencias y prácticas normativas deben ir con esas autodefiniciones”, dijo.

La mayoría de las iglesias evangélicas en la región piden fuertemente que sus seguidores se mantengan alejados del Cirio, pero las advertencias a menudo caen en oídos sordos. Pero otros no son tan duros porque han aprendido a no ir contra la corriente. Los miembros de las Asambleas de Dios, la mayor iglesia pentecostal en Brasil, distribuyen comida y agua a lo largo de la procesión.

“Nosotros estamos en contra del Cirio”, dijo Wanessa Nunes, 20 años, quien se crió como católica, pero ahora asiste a una iglesia Bautista cercana que ordena rehuir al festival. “Dicen que cualquier conexión que usted tiene con esto es idolatría”. Sin embargo, ella participa en la procesión e incluso “pasa la cuerda”, ayudando a tirar de la figura hacia la Basílica de Nazaré.

Los practicantes de Umbanda, religión brasileña que mezcla las tradiciones indígenas de África con las cristianas, también participan.

“En la Umbanda, adoramos a los santos, por lo que es normal para nosotros celebrar el Cirio”, dijo el residente de Belem Edson Elias.

cirio de nazare llegando al santuario de nazare

 

PROCESIÓN DE SEIS HORAS

Durante la procesión del segundo domingo de octubre, los fieles se empujan para echar un vistazo, o para tocar la cesta o la cuerda, de la pequeña figura de madera de Nuestra Señora de Nazaré – conocida localmente como “Nuestra Reina de la Amazonía” o “Nuestra Pequeña Santa”– instalada detrás de un vidrio.

Los que se posicionaron cerca del centro de la procesión soportaron un ritmo pesado de casi seis horas para una distancia corta, en medio de multitudes rebosantes y un calor opresivo.

Algunos se arrastran durante toda la ruta de rodillas, para pedir a la Virgen un favor o darle las gracias por una intercesión.

Muchos se derrumban en el camino. Numerosas estaciones de la Cruz Roja (20 o más) se alinean en la ruta, asistidos por cientos de voluntarios que se precipitan en el tumulto para llevar a los caídos a la seguridad.

cirio de nazare con iglesia de fondo

 

ESTÁ EN EL PATRIMONIO HISTÓRICO DE LA UNESCO

El Cirio se celebra desde hace más de 200 años, el primero fue inspirado por un hombre local llamado Plácido José de Souza, quien tropezó con una estatua tallada perdida de la Virgen María al lado de un arroyo.

Según la historia, cada vez que llevaba la figura a larga distancia con él, ella obstinadamente volvía al lugar donde él la había descubierto – el lugar donde ahora se encuentra la basílica. Ver Devoción más Multitudinaria del Mundo: Nuestra Señora de Nazaret de Belem, Brasil (2º domingo de octubre)

La imagen original ahora permanece encerrada, para no arriesgar daños en las calles.

En su versión actual, el Cirio ya no es sólo un evento religioso, sino que ha crecido hasta incorporar celebraciones culturales, e incluso contraculturales.

“No es sólo religiosa, sino que forma parte de la cultura del estado de Pará”, dice el gobernador de Belem.

La iglesia y la ciudad trabajaron juntas para cumplir los procedimientos e inscribirlo en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.

El Cirio, al igual que muchos festivales religiosos brasileños, trae consigo una parte profana junto con lo sagrado, que incluye música en vivo y fiestas de baile, incluso participando los gays.

En suma, una experiencia emocionante, espiritual y catárquica que está incluida en el Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO y que tiene como centro a la Virgen María, que no deja caer la devoción a la Iglesia fundada por el Señor.

Fuentes:

 

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