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Un ladrón no puede entrar en una casa bien custodiada.

Esto es tan válido para una persona que intenta robar como para el maligno.

El maligno nos puede afectar cuando le damos permisos para hacerlo.

Cuando abrimos puertas a lugares y cosas que le permiten entrar.

A veces esas puertas son abiertas directamente por el propio individuo y hasta conscientemente.

Y otras veces las puertas permanecen abiertas debido a la historia del individuo sin que él haya tomado decisiones para abrirlas.

En este artículo hablaremos sobre las diversas formas en que podemos darle permiso el maligno para que entre nuestras vidas.

Y también finalmente cual es la estrategia para desembarazarnos de él, para liberarnos.

   

EL MUNDO DESCONOCIDO QUE NOS RODEA

Estamos rodeados de un mundo invisible denso en distintos seres.

Sabemos por la Biblia que hay principados y poderes como denomina San Pablo en Efesios 6: 12 que son malignos; son los ángeles caídos.

Pero también sabemos que hay ángeles buenos y entre ellos los ángeles de la guarda que tiene cada uno.

Y no se puede descartar que haya otros tipos de seres, aunque la Biblia no lo menciona; pero en realidad no tendría que mencionarlo necesariamente, porque no habla todo sobre todas las cosas, sino sólo de aquello que es importante para nuestra salvación.

Estos seres malignos de que hablamos, operan en sentido inverso a lo que quiere Dios.

Y la inversión se ve actuando claramente en que la cultura popular, que está cada vez más convirtiendo lo bueno malo y lo malo en bueno.

Especialmente se da una especie de epidemia entre los jóvenes.

Dios nos ha dado el principio de la oración y algunos métodos como por ejemplo el rosario para poder no caer en estas tentaciones.

Pero un signo malo es que se están popularizando otros métodos de oración que no podemos estar seguros hacia dónde apuntan.

Por ejemplo hoy se ven desarrollarse distintas formas de oración que toman la forma de meditación.

Y que provienen de religiones diferentes al cristianismo.

Por ejemplo a partir del budismo se ha desarrollado el centrado en la oración también es llamado oración centrada.

Del hinduismo vino el yoga y de la mitología griega la meditación en el laberinto.

Es seguro que estas técnicas de oración, meditación y contemplación han sido desarrolladas para adorar los dioses de otras religiones.

Por más que tratemos de separar las técnicas del contenido, eso nunca sucede en la práctica.

En realidad no sabemos si esos dioses son hechuras totalmente humanas o hay una presencia demoníaca detrás de ellos.

Y en este sentido podemos decir que también reina la confusión, porque en muchas parroquias se dan cursos o talleres para aprender técnicas de meditación que no son estrictamente católicas.

Quiénes las promocionan dicen que son compatibles con el catolicismo.

Sin embargo cada técnica no puede evaluarse abstractamente sino a través de sus fundamentos y sus raíces.

Estas técnicas, que no son estrictamente católicas, buscan formas metódicas de lograr la paz.

Pero sucede que son innecesarias porque Dios nos ha dado técnicas para usar.

Una técnica que une la contemplación, la meditación y la adoración es el Rosario.

Si te sientas con el Rosario en la mano en silencio y recorres los misterios repitiendo el Padre Nuestro y el Ave María estas rezando, adorando y contemplando el mensaje de Dios.

Y a su vez todo eso está trabajando en tu interior relajándote y dándote paz.

Por eso que se dice que el mayor beneficio inmediato de rezar el Rosario es la paz y la tranquilidad.

De modo que no hay que buscar en otro lado técnicas que no sabemos de dónde vienen, ya que Dios nos ha dado las instrucciones de cómo orar.

Sin embargo esta tendencia buscar cosas fuera del catolicismo crece.

Porque en realidad el mundo se está tratando de desembarazar de Dios.

   

DECRECE LA CREENCIA EN DIOS PERO SE MANTIENE LA CREENCIA EN LOS ESPÍRITUS Y EN EL DEMONIO

Diversas encuestas en occidente muestran que está haciendo más fácil para las personas no religiosas encontrar lo oculto y a satanás que encontrar a Dios.

Parece como si hubiera más prejuicios contra Dios que contra satanás.

Quizás porque Dios nos pide cumplir determinada moral mientras que el maligno nos permite no cumplir ninguna moral.

Mientras Dios se está desvaneciendo del imaginario colectivo, su enemigo está creciendo.

Ha habido innegablemente un declive de la alfabetización religiosa.

Pero le ha sobrevivido la creencia que existe un mundo sobrenatural alrededor nuestro que no se ve.

Y la superstición de creer en el poder de los objetos, que en definitiva conduce a la magia.

Hay una clara vulneración del primer mandamiento al atribuir poderes a cosas externas, que sólo pertenecen a Dios.

Naturalmente esto es promocionado por los espíritus malignos.

Quienes a su vez tienen su ejército humano, por ejemplo a través de las brujas.

Las brujas son personas que han elegido servir a satanás a cambio de poderes sobrenaturales para controlar a los demás secretamente.

Obviamente existen distintos tipos de brujerías.

Los sistemas más pesados son el satanismo, el vudú, la santería, la wicca.

Todo lo cual ha sido revestido de la copia de rituales cristianos.

Lo que constituye una forma de confusión y una estrategia de penetración en la sociedad.

El padre Gabriele Amorth dijo

“No es necesario convertirse en un satanista para servir al diablo y convertirse en uno de sus seguidores”

Y agregó

“Hay muchos por desgracia que no se consagran oficialmente a satanás, pero eligen seguir sus principios básicos y como resultado ponen sus alma en gran riesgo”.

Esto es lo que sucede con las prácticas de ocultismo.

Que están depositando la confianza en los poderes malignos sin que sus practicantes tengan una conciencia clara y precisa que lo están haciendo.

   

PRÁCTICAS NOCIVAS DE OCULTISMO

El ocultismo trata de prácticas secretas para conocer o actuar sobre el futuro que no son evidentes a simple vista.

Estas prácticas están condenadas por Dios, porque si Él quisiera que conociéramos el futuro, nos lo revelaría a través de sus profetas o con sus visiones.

Por eso la Biblia se ha condenado la adivinación, la nigromancia y también otras actividades que mencionaremos aquí

Veamos algunas de las más conocidas y que pueden comunicarnos con el mundo demoníaco.

   

HORÓSCOPOS

¿Que podría ser perjudicial de leer el horóscopo si todo es por diversión?

El horóscopo nos lleva a una dependencia de sus predicciones y a depositar la confianza en la adivinación.

Porque sería tonto leer el horóscopo si no tenemos ningún interés o si consideramos que es un engaño.

Además nos quita tiempo que podríamos usar en la oración.

Juan Pablo II dijo en septiembre de 1998,

“Si queremos plantearnos bien la vida tenemos que aprender a descifrar el designio de Dios leyendo el misterioso lenguaje de señales que el mismo nos pone en nuestra historia cotidiana.

Para alcanzar este objetivo no hacen falta horóscopos ni previsiones mágicas, hace falta más bien oración”.

Además debemos considerar que el plan del maligno es alejarnos de Dios lenta pero seguramente, y esta es una forma aparente mente inocua de hacerlo

   

LA ADIVINACIÓN

Predecir el futuro a través de bolas de cristal, hojas de té o las cartas es una forma peligrosa de divertirse.

Y es una blasfemia cuando el adivino utiliza el nombre de Dios para develar el futuro.

Dios nos revela el futuro a través de mensajes y señales que parten de Él.

Y también nos indica que no podemos controlar nuestro futuro sino que debemos confiárselo a Él.

Pero nuestra soberbia quiere saber el futuro para poder operar sobre él.

Busca caminos alternativos para conocerlo y para ello abre una puerta al demonio.

Con métodos como la invocación a los muertos, oráculos, la lectura de manos, el tarot y otras prácticas.

Si Dios quisiera que sepamos el futuro Él nos lo diría a través de Sus señales; especialmente a través de las cosas que nos suceden.

Y de hecho lo está haciendo a través de las distintas apariciones marianas, como por ejemplo la de Fátima.

La adivinación era una forma muy común de conocimiento que usaban los magos en Egipto, los sacerdotes de Apolo en Grecia y las sibilas en Roma.

Estos personajes interpretaban los signos naturales y leían señales por ejemplo en las entrañas de animales.

Aún hoy en el vudú, la santería y el kimbanda practican estas artes de adivinación y de acción.

La adivinación es un pecado grave contra el primer mandamiento.

Y varios concilios excomulgaron a los adivinos.

El Catecismo de la Iglesia Católica #2116 dice,

“Todas las formas de adivinación deben rechazarse”

Y en el #2117 dice,

“Todas las prácticas de magia o hechicería mediante la que se pretende domesticar las potencias ocultas para ponerlas a su servicio, y tener un poder sobrenatural sobre el prójimo son gravemente contrarias a la virtud de la religión”.

Pero no hay que confundir entre profecía y adivinación.

El #2115 del Catecismo de la Iglesia Católica dice,

“Dios puede revelar el porvenir a sus profetas o a otros Santos.

La diferencia estriba en que son los santos que toman la iniciativa y es Dios que da un mensaje que deben comunicar.

Y en el caso de la adivinación son los hombres que piden que les cuenten el futuro”

   

EL TAROT

Es un caso especial de adivinación que se basa en 78 cartas con imágenes.

Las cartas del tarot provienen del antiguo Egipto.

Estás cartas son para leer la vida de alguien y tienen imágenes para adivinar la vida de la persona.

Se trata de adquirir un conocimiento que no está disponible por medios naturales ni recurriendo a Dios.

En la ordenación de cartas que salen y en la interpretación de las mismas está presente el maligno orientando las explicaciones.

   

NIGROMANCIA

La nigromancia es invocar a los muertos para obtener un conocimiento.

Esto sucede en sesiones de espiritismo donde las personas se sientan alrededor de una mesa y se toman las manos invocando a los muertos.

Dios ha prohibido invocar a los muertos, aunque los muertos se pueden comunicar con la gente aún viva por iniciativa y permiso de Dios.

Esto es lo que explica las apariciones Marianas y de los santos en la Tierra.

En estas sesiones de espiritismo lo más probable que quienes se comuniquen con los espiritistas sean demonios.

Y que incluso faciliten a los espiritistas realizar ciertos prodigios para demostrar su veracidad.

   

LA OUIJA

La Ouija es un juego de mesa que permite a las personas comunicarse en teoría con personas del más allá.

Aunque en realidad se están comunicando con seres malignos.

Los demonios son expertos en fascinar a los seres humanos y saben que les gusta mucho el conocimiento esotérico.

El juego de la Ouija se puede transformar en una adicción que te puede llevar a la posesión demoníaca.

Los exorcistas dicen que jugar a la Ouija es una de las puertas más clásicas para la posesión.

Y nosotros lo hemos confirmado porque el hijo de una colaboradora nuestra sigue poseído, luego de 10 años y numerosos exorcismos, por haber jugado a la hija en la universidad.

Hay variantes de este juego como Charlie- Charlie o el juego de la copa.

   

EL JUEGO DE BLOODY MARY

Este juego es relativamente nuevo y es practicado por los adolescentes.

También conocido como María la Sangrienta e implica pararse frente a un espejo y repetir 13 veces Bloody Mary o María la Sangrienta.

En ese proceso el espejo muestra un cambio en el rostro y se dice que aparece el demonio.

Hay muchas versiones de este juego y en general supone que hay otras personas atrás tomadas de la mano invocando también a la entidad.

Esto es claramente un juego demoníaco y su nombre implica una burla a la Santísima Virgen.

   

LAS MALDICIONES

Cuando una persona está enojada u ofendida puede maldecir a otra persona considerándolo una actividad inofensiva, pero de descarga emocional.

Cuando alguien maldice a alguien le está diciendo al demonio que Dios permita haga algo malo contra su enemigo, en lugar de bendecirlo.

Pero además está invitando a satanás para que entre en sus propios problemas.

Las maldiciones también pueden ser mucho más estructuradas, como por ejemplo hacer un trabajo para perjudicar o matar a una persona.

El padre José Antonio Fortea ha dicho,

Una maldición es una acción que se hace para dañar a otro con la ayuda de los demonios.

Hay maldiciones específicas para matar, para para hacer que las cosas vayan mal en los negocios, para enfrentar a alguien, etc.

Las maldiciones son efectivas sólo si Dios permite que tengan efectos.

Y cuánto más se reza uno estará protegido contra esas cosas”

   

OBJETOS MALDITOS

En la mayoría de los países hay tiendas que venden artículos religiosos para hechicería. E incluso hierbas y pociones para tales hechizos.

Demás está decir que allí está la presencia del maligno.

Por lo que si uno quiere comprar una imagen de un santo católico debería ir a una tienda de artículos católicos y no ir a una de estas tienda de artículos de hechicería porque uno no sabe si las imágenes no están infestadas.

Porque así como los católicos tienen objetos bendecidos por los sacerdotes, también los súbditos del maligno maldicen objetos y los infestan.

Por eso hay que tener cuidado con aceptar regalos de extraños o al comprar antigüedades.

Si se descubriera un objeto infestado en la casa lo primero que hay que hay que hacer es rociarlo con agua bendita y con incienso. Y luego quemarlo.

Esto incluye discos y CD que tienen canciones satánicas.

    

ADICCIONES A DROGAS Y PORNOGRAFÍA

Las drogas y la pornografía son instrumentos del maligno.

En los tiempos antiguos las drogas se conocían como pociones que manejaban las brujas.

Estas alteran la mente y debilitan la voluntad.

Hacen a la persona más propensa a vincularse con malas influencias.

Es por esto que la Biblia prohíbe la embriaguez.

Se ha descubierto también que algunos narcotraficantes usan satanistas para maldecir las drogas, a fin de obtener protección del maligno y que sus clientes continúen con la adicción.

Los exorcistas también dicen que la pornografía es una puerta de entrada de los demonios.

Porque implica la adoración de imágenes sexuales acompañada de fantasías y de auto estimulación.

Es reminiscencia de las orgías griegas y romanas.

Las drogas el alcohol y la pornografía alteran la mente de tal forma que la persona pueda actuar aceptando las sugerencias extrañas del maligno, porque le parecen buenas.

   

QUÉ HACER CUANDO UNO ESTÁ VINCULADO CON UNA DE ESTAS FUENTES

Algunas personas, sin darse cuenta, caen en las tentaciones de vincularse con estas fuentes que atraen el mal.

Es como si fueran a comprar un producto a un almacén atendida por el demonio.

Cuando nos damos cuenta de ello le podemos pedir a Dios que nos libere, pero eso no es tan simple y tiene sus códigos.

Una dificultad es que Dios no siempre elimina el mal sino que lo deja permanecer a veces para atraer el bien.

Y además requiere de nuestra participación para combatir el mal; ese es el rol de las oraciones de liberación.

Qué son oraciones puestas bajo la protección y el gobierno de Dios.

Por ejemplo con cada oración del Padrenuestro los cristianos piden sean liberados del mal.

El Padrenuestro ya es una oración de liberación.

Pero hay oraciones de liberación mucho más específicas, como oraciones imperativas para que el demonio se aleje, u oración de súplica a una persona que sufre por las insidias del demonio, o directamente los exorcismos.

También hay que considerar que los sacramentos especialmente la Eucaristía y el Sacramento de la Confesión o Penitencia van en el mismo sentido.

Las oraciones de liberación tienen el fin de liberar a la persona de las influencias malignas, llevándolo a una plena Comunión con Dios.

En definitiva lo que tratan de hacer es apuntar a la santidad de la persona.

Y por eso el Padrenuestro, siendo una oración de liberación del mal, cubre también estos aspectos de adhesión a Dios y a la santidad.

Santo Tomás de Aquino dice que Dios libra al hombre del mal de 4 maneras.

La primera es no afligirlo, velar para que no aparezca el mal en él.

La segunda es ayudar a soportar el mal a través del don de Consuelo, evitando de alguna forma que el mal supere a la persona.

La tercera es hacerle olvidar al hombre del mal a través de la concesión de bendiciones.

La cuarta el liberar al hombre del mal produciendo el bien a través del mal mismo.

Esta es la forma más alta y a la que se dirigen las oraciones de petición, para cambiar la tribulación por un bien.

Las oraciones de liberación no sólo tratan que el demonio no se apodere la persona, sino que tratan de que la persona se vuelva invulnerable a sus insidias.

En definitiva tratan de cerrar las puertas que ha abierto esa persona hacía las influencias del mal.

Pero la cosa no es tan simple a veces.

También hay ciertos condicionamientos que hacen más vulnerable a la persona.

Una es el atavismo de un árbol familiar con la presencia de muchos pecados, como aborto, suicidios, adicciones, adulterios, etc., qué ocasionan sufrimientos que los descendientes tienen que soportar.

Otro condicionamiento son las heridas infantiles, por ejemplo un niño que no ha sido amado será un adulto herido.

Y las consecuencias muchas veces son depresión, violencia o tristeza insuperable, sentimientos de abandono.

Otro condicionamiento es estar atado fuertemente al mundo que lo rodea, que a veces se llama mediumnidad .

Estas personas desarrollan una imaginación desenfrenada, angustia recurrente sin causa, premoniciones y dificultades para llevar una vida social normal, debido a la excesiva permeabilidad a las influencias de la sociedad en la que viven.

De más está decir que el estado desordenado de la naturaleza humana induce a mucha confusión.

Es por eso que la liberación pasa por llevar a la persona a unirse cada vez más a Cristo.

Y también es por eso que toda liberación requiere de preguntar a Cristo en oración cual es el camino para la persona.

Fuentes:

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