Después de la purificación.

En un video anterior hablamos sobre el tiempo histórico en que se realizará en la tierra la Era de Paz prometida por Nuestra Señora en Fátima.

Y dijimos que será luego de la tribulación que estamos pisando y vendrá luego del triunfo del Inmaculado Corazón de María. 

Y que es ni más ni menos que hacer realidad lo que pedimos habitualmente en el padrenuestro, de acuerdo a lo que nos enseñó Nuestro Señor «hágase tu voluntad es la tierra como en el cielo»

O sea que estamos pidiendo que se concrete en los hechos la voluntad que Dios tiene para con los seres humanos en la tierra.

Aquí avanzaremos sobre la Era de Paz y hablaremos sobre las características que tendrá y qué efecto tendrá sobre los seres humanos.

No debe escapar a nuestra comprensión que Dios creó a la humanidad para que fuera santa, libre e inmortal.

Y la puso en el Jardín del Edén como administradora de la naturaleza.

Allí no había ni muerte, ni dolor, ni envejecimiento, ni conflictos y el hombre no tenía que trabajar para comer.

Sin embargo el hombre se reveló por instigación del maligno y con ello trastornó todo el orden natural de la creación, de la que es el centro.

Y entró la mancha del pecado en su ADN. Nuestro ADN está afectado por el pecado original.

Entonces la humanidad fue expulsada al Jardín del Edén y puesta en la tierra para cumplir un largo proceso, visto en términos humanos, para restaurar el orden de la creación.

Quizás podemos asimilarlo a una especie de purgatorio global para toda la raza humana.

Que tuvo una fase primordial en la encarnación de Jesús hace 2000 años y su sacrificio para perdonar nuestros pecados y amigarnos con Dios de nuevo.

Pero San Pablo nos habla en su Carta a los Romanos 8:22 del aguardado día de la restauración de la creación, y dice que «la creación gime dolores de parto».

Utiliza el símil de una madre cuando va a dar a luz, que es una mezcla de alegría y dolor.

Y es eso mismo por lo que pasará a la humanidad en la tribulación que tenemos en puerta y que nos conducirá al parto de la era de paz.

¿Y de qué se trata esa era de paz?

Se trata del establecimiento entonces de las condiciones para que se cumpla el pedido que hacemos en el Padrenuestro «hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo».

Y para ello Dios está enviando a su madre, la Santísima Virgen, para predicar que nos apartemos del pecado y por lo tanto del maligno. 

Para guiarnos hacia su hijo, que es el que reinará durante la era de paz.

Y para decirnos que Dios tiene un plan para restaurar todas las cosas. 

El maligno sabe de este plan y conoce el tiempo histórico en que sucederán las etapas más importantes.

Y por eso ha lanzado una ofensiva total para evitar que se cumpla este plan.

Pero como no tiene el poder para enfrentar a Dios, lo único que puede hacer es crear caos como lo está haciendo.

Comenzó por destruir la armonía entre las personas, luego la moral del mundo y ahora está destruyendo las economías de los países y la sociabilidad entre las personas.

¿Y cómo Dios tiene previsto romper este accionar de satanás?

La vidente Mirjana de Medjugorje ha dicho que cuando se desplieguen los secretos que la Virgen le entregó, se comenzará a romper el poder de satanás.

Y una parte importante en el plan de Dios es darles a todos los seres humanos las razones por las que tienen que volver a Él.

La iluminación de conciencia, o sea el aviso, será ese momento, en que Dios revelará a cada uno que Él existe y cuáles son los pecados que lo mantienen alejado de Él.

Ahí sucederá masivamente la iluminación, pero se ha visto que cada vez hay más gente que lo está experimentando anticipadamente.

Cuando suceda el Aviso el maligno desatará una fuerte persecución contra los cristianos, que será el núcleo de la tribulación, y que ya vemos que se está perfilando.

Pero también Dios protegerá a sus elegidos, a los que se han entregado a él.

Por ejemplo, hemos realizado varios videos hablando sobre los refugios que establecerá.

¿Y cuál es el fin inevitable de todo esto?

El demonio y sus secuaces humanos serán derrotados y arrojados al abismo por un largo tiempo, que la Biblia simboliza con el término 1000 años.

Y a partir de ahí, libres de las tentaciones y los acosos de los demonios, los seres humanos serán capaces de adquirir, por la gracia de Dios, capacidades perdidas por el pecado.

Con esta restauración de la creación, los seres humanos vivirán en un anticipo de lo que tendrán en el cielo.

Habrá menos sufrimiento y enfermedades, tendremos una vida más prolongada, menos conflictos entre las personas y una extensión de las capacidades mentales y corporales.

Pero no será total, porque el pecado permanecerá en el ADN espiritual del hombre, aunque no en la misma intensidad que antes.

La humanidad recibirá un nuevo impulso de amor a través del Espíritu Santo. 

Y sólo antes del regreso final de Cristo en gloria, al final de la historia, las raíces del pecado serán definitivamente erradicadas.

Para que quede claro cómo será la era de paz luego de la tribulación intermedia de la que hablamos en un video anterior, cuyo link te dejo en la descripción de este video, escucha los siguientes signos.

Habrá una atenuación fuerte del mal, no su extinción porque eso sucederá sólo en la vida eterna en el Cielo.

Habrá una renovación de la creación que estará de nuevo al cuidado del hombre.

Habrá seguridad y paz. Y el hombre no vivirá en la incertidumbre y el miedo. Porque predominará la justicia de Dios.

La sociedad será más simple y agraria, con más contacto con la naturaleza.

Nuestro Señor le dijo a Luisa Picarreta que cuando se haga efectiva su Divina Voluntad, o sea «hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo», entonces se dará pleno cumplimiento de la segunda parte del padrenuestro que dice, «danos hoy nuestro pan de cada día».

De modo que la tierra abrirá su fecundidad como nunca antes.

Ya no habrá problemas con el exceso y la falta de lluvias.

Y las obras de las manos de los hombres se multiplicarán.

También sucederá lo que dice la escritura, que el lobo pacerá junto al cordero, o sea que no habrá más conflictos entre las especies y los animales serán mansos.

Los seres humanos tendrán cualidades físicas superiores que ahora, las cuales estarán al servicio de Dios.

Serán más parecidas a las que expusimos en otro video sobre las cualidades que tendremos en el cielo.

Las personas vivirán más tiempo, con menos enfermedades y habrá menos conflictos. 

También habrá modificaciones perceptibles en los astros.

El sol y la luna se verán más brillantes y estarán más al servicio del hombre, o sea produciéndole menos inconvenientes.

Los seres humanos de todas las culturas alabarán a Dios y habrá una única Iglesia, porque la Iglesia Católica será renovada para que sea sin mancha, y la mayoría se convertirá.

Y se hará efectivo el sacerdocio real de cada ser humano al servicio de Dios. 

El derramamiento del Espíritu Santo será perceptible.

La Iglesia se volverá Inmaculada, con obediencia perfecta a la voluntad de Dios, tal como fue la Santísima Virgen, inmaculada.

Porque el modelo de esta época, esbozado desde la Anunciación, será la Virgen María.

Ella es el prototipo de la santidad universal, como la presenta el Concilio Vaticano II.

Por eso San Luis Griñón de Monfort dijo que María producirá los mayores cambios que haya en los últimos tiempos. 

La formación y la educación de los grandes Santos que habrá hacia el fin del mundo, le están reservados a Ella.

A María de Ágreda se le reveló que a través de la intercesión de la Madre de Dios todas las herejías desaparecerán y María extenderá el reino de Cristo sobre los paganos y los musulmanes.

San Maximiliano Kolbe dice que la imagen de la Inmaculada reemplazará un día la gran estrella roja sobre el Kremlin.

Recordemos que La Virgen de Fátima les dijo a los pastorcitos que con el triunfo de su Inmaculado Corazón vendría una era de paz y que si se le consagraba Rusia, este país se convertiría.

Y el arzobispo Fulton Sheen tuvo una visión mientras estaba en Fátima, la visión lo trasladó a la Plaza Roja de Moscú.

Vio un gran cambio en la hoz y el martillo. Vio que el martillo se convertía en una cruz y la hoz se convertía en la luna bajo los pies de la mujer que describe el libro del Apocalipsis.   

Bueno, hasta aquí lo que queríamos contarte sobre los enormes cambios que traería la Era de Paz, que prometió la Virgen María en Fátima y que se haría efectiva luego de la tribulación que estamos pisando.

Quizás nuestra naturaleza caída nos haga dudar sobre si esto puede ser posible que suceda aquí en la Tierra, porque puede parecer un premio demasiado grande. 

Por eso me gustaría preguntarte si crees que lo que describimos sucederá en la Era de Paz es algo fantasioso o algo que puede realizarse.

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