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¡El maligno no la soporta!

El agua bendita es un símbolo importante para los católicos y además es un sacramental de la Iglesia Católica. 

La mayoría de las veces la utilizamos para bendecir algo como nuestra casa, objetos, e incluso a nosotros mismos y la familia.

Y es especialmente eficaz para protegerse de los espíritus malignos. 

Constituyéndose en un arma particularmente eficaz en la batalla espiritual diaria del cristiano. 

Los exorcistas dan de beber agua bendita para alejar al demonio de nuestros cuerpos.

Cuando bebes agua bendita, estás invocando la gracia y la protección de Dios, al igual que cuando la rocías sobre las cosas. 

Pero dependiendo de cuán ferviente sea tu fe, es posible que recibas o no los resultados deseados.

Por lo tanto, beber o rociar agua bendita por sí solo no es suficiente. Debe ir acompañado de una fuerte fe en Dios. 

Después de todo es Su gracia la que hace que el agua sea santa. De lo contrario, es sólo agua corriente.

Aquí queremos hablar sobre la importancia del agua bendita contra el mal y el maligno, y además de darte varios testimonios, te diremos cómo bendecir y exorcizar el agua.

El agua bendita remite los pecados veniales y los dolores temporales debidos al pecado.

Y sucede cuando el alma está en estado de gracia; no tiene pecado mortal en la conciencia, que no haya sido confesado.

También proporciona salud al cuerpo, mantiene alejadas las epidemias y las plagas, expulsa al demonio y frustra sus trucos.

A través de las oraciones de la Iglesia y las de la propia persona que la usa, el intelecto se ilumina y la voluntad se aparta del mal.

Mientras impulsa a hacer el bien y de ese modo tanto el cuerpo como la mente se fortalecen y sanan.

¿Cómo se usa? Se usa rociándola o tomándola.

Algunos pueden dudar de tomar agua bendita o usarla en sus comidas, pero no hay ninguna base bíblica que diga que beber agua bendita sea un pecado. 

Y puede usarse para bendecir prácticamente cualquier cosa. 

Está perfectamente bien beber agua bendita siempre que provenga de una fuente higiénica.

Además los peregrinos y devotos beben agua de manantiales sagrados habitualmente. 

Y los cristianos ortodoxos orientales beben agua bendita como una forma de bendecirse.

Los exorcistas y carismáticos utilizan el agua bendita exorcizada que es una mezcla de sal bendita y agua bendecida. 

Santa Teresa de Ávila decía sobre el efecto del agua bendita: 

«Una vez estuve en un oratorio, y el diablo se me apareció en una forma abominable. 

Debido a que me habló, miré particularmente su boca, lo cual fue de lo más aterrador. 

Parecía que una gran llama, toda brillante sin sombras, brotaba de su cuerpo. 

Me dijo de una manera aterradora que realmente me había liberado de sus manos pero que volvería a atraparme con ellas. 

Me invadió un gran temor y me bendije lo mejor que pude.

Desapareció, pero regresó de inmediato. 

Esto me pasó dos veces. No sabía qué hacer. 

Había un poco de agua bendita allí, y la arrojé en esa dirección; nunca volvió»

Y por eso concluye,

«A menudo experimento que no hay nada de lo que los demonios huyan más – sin volver – que el agua bendita».

O sea que unas gotas de agua bendita bastaron para alejar al maligno definitivamente según la experiencia de esta santa.

El exorcista Stephen Rossetti cuenta el caso de una mujer que estaba pasando por sesiones de exorcismo, pero sentía al demonio en el estómago.

Ella testimonia,

«Cuando me sentí atacada por demonios en el área de mi estómago, bebí tres o cuatro grandes sorbos de agua bendita. El efecto fue casi inmediato. 

Me inundó una fuerte luz, muy clara desde arriba. 

La luz empujó toda la oscuridad lejos de mí en un momento, fue una sensación física notable. 

Entonces sentí mi mente clara y pude recuperarme.

De repente sentí que volvía a ser más yo misma. 

Me di cuenta de que había olvidado lo que eso es.

La niebla de mi mente se despejó. 

Tuve una nueva perspectiva. Parecía que mi cerebro estaba funcionando a nivel normal de nuevo. 

Todo parecía ligero, decir «bañado en luz» no sería una exageración. 

Una maravillosa sensación de paz y claridad llenó toda mi casa. 

Me sentí muy agradecida e impresionada de que sólo un sorbo de agua bendita podría ser tan poderoso contra el demonio».

Para algunos, esto puede parecer una exageración, pero es bueno recordar algunas cosas importantes sobre el agua bendita.

El agua es esencial para la vida y estimula la vida.

No hay agua en el infierno, pero sí en el cielo. 

El agua es una parte esencial del bautismo y el agua bendita debe recordarnos este sacramento fundamental. 

Es un sacramental y su poder proviene de la autoridad y el poder que Cristo da a su Iglesia y de la fe depositada en quien la usa.

¿No deberíamos todos tener agua bendita fácilmente accesible y usarla con frecuencia? 

Ciertamente pone a los demonios en fuga y refresca el alma.

Las tradiciones apostólicas más antiguas dan testimonio de su uso. 

Alrededor del 130 d.C., el Papa Alejandro en sus Constituciones Apostólicas escribió:

«Bendecimos la sal y el agua para el pueblo, para que todos los que sean rociados con ella sean purificados y santificados».

La oración sobre el agua nos dice que el agua bendita es un escudo contra los ataques de la maldad espiritual y una protección contra las tentaciones y, de hecho, contra el tentador. 

En el contexto de tales oraciones, el agua bendita a la entrada de cada iglesia,y bendecida también en frascos para llevar a casa, ahora comienza a aparecer bajo una luz completamente nueva.

No hay que guardar el agua bendita hay que usarla abundantemente.

Y cómo será su poder que en 2019, un obispo dejó dejar caer agua bendita desde un helicóptero sobre una ciudad plagada de violencia en un «exorcismo masivo».

Monseñor Rubén Darío Jaramillo, obispo de Buenaventura, Colombia, dijo primero una oración para «expulsar al diablo» y luego un tanque de agua bendita se derramó sobre la ciudad, asolada por el narcotráfico y la corrupción.

¿Cómo usar agua bendita en casa y cómo bendecir una casa con agua? Es simple

Haz una señal de cruz con el agua bendita y reza así:

«Sea esta agua una señal de Jesucristo y nuestro bautismo y nueva vida bajo el Reino de Dios». 

Y luego rocía mientras recitas las oraciones del Padre Nuestro, Ave María, Gloria,

Rocíate a ti mismo, a tu familia con el signo de la cruz en la frente, también tu casa, jardín, animales, cosas, tierra, huertos, etc.

Mucha gente cree que el agua bendita sólo puede ser verdaderamente bendecida por un sacerdote ordenado.

Pero un fiel puede bendecir su propia agua. Puede intentar hacer su propia agua bendita siguiendo los rituales y oraciones católicas tradicionales

La diferencia entre el agua bendita por un sacerdote y la bendecida por un laico es que la del sacerdote tiene detrás los méritos de la Iglesia y la del laico sólo sus propios méritos.

Por lo que siempre es preferible tener agua bendita por un sacerdote.

¿Y cómo lo puedes hacer tú?

Obtiene un poco de agua de una fuente natural si es posible.

Coloca el agua en un recipiente abierto como un tazón grande.

También puedes usar agua del grifo o agua embotellada si no dispones de una fuente natural. 

El agua de manantial también es una buena opción.

Una oración para bendecir el agua puede ser esta:

«Dios todopoderoso, fuente y origen de la vida del alma y del cuerpo bendice esta agua (hacer la señal de la cruz sobre el agua), que vamos a usar con fe para implorar el perdón de nuestros pecados y alcanzar la ayuda de tu gracia contra toda enfermedad y asechanza del enemigo.

Concédenos, Señor, por tu misericordia, que las aguas viven siempre broten salvadoras, para que podamos acercarnos a ti con el corazón limpio y evitemos todo peligro de alma y cuerpo.

Por Jesucristo, Nuestro Señor, Amén»

La oración para exorcizar el agua podría ser esta,

«Te exorcizo, creatura del agua, en el nombre de Dios, Padre omnipotente, en el nombre de Jesucristo, su Hijo, Nuestro Señor, y con el poder del Espíritu Santo, para que seas agua exorcizada para ahuyentar toda fuerza del enemigo y para que puedas erradicar y arrancar al mismo enemigo con sus ángeles apóstatas, por virtud del mismo Jesucristo nuestro Señor que ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos por el fuego. Amén».

El agua exorcizada tiene más poder.

También dijimos que el agua bendita es importante cuando epidemias y plagas, porque en ellas siempre esta presente el demonio.

Y un testimonio es que en el año 1402, San Vicente Ferrier estuvo cerca de Turín, y los habitantes acudieron a pedirle que curara sus viñas de una enfermedad rebelde, que durante varios años había endurecido la uva como un hueso impidiendo su maduración. 

El santo les dijo que regaran sus vides con agua bendita. 

Todos olvidaron este consejo excepto el caritativo habitante que le había brindado hospitalidad. 

Y su docilidad fue recompensada maravillosamente, porque la plaga no tocó sus viñas, mientras que todas las demás estaban tan afectadas, que ni una sola uva llegó a la madurez.

Y esto mismo vale para las epidemias entre humanos.

Bueno hasta aquí lo que te queríamos contar sobre la importancia del agua bendita para combatir los ataques del demonio

Y me gustaría preguntarte si tienes agua bendita en tu casa y cómo la usas.

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One Comment

  • tiziano ferio dice:

    es muy cierto, cuando se siente que algún espacio de la casa está como cargado, con intranquilidad, pesado, como si algo invisible estuviese ahí causando perturbación, al esparcir agua bendita el espacio físico recupera una bonanza y calma