Oración y firmeza en la demanda de reciprocidad.
A esta altura nadie en occidente se puede engañar que se extingue la coexistencia pacífica entre el islam y el cristianismo en las zonas dominadas por los musulmanes, tal como existe en occidente. Y tampoco ya se puede argüir que la agresión contra los cristianos es sólo de parte de los fanáticos jihadistas y no de naciones musulmanas enteras, porque si bien una nota que presentamos noticia a milicianos jihadistas en Siria quemando libros cristianos y biblias, por otro lado, un tribunal legal de Irán, una representación oficial del estado, condenó a 4 cristianos a 80 latigazos por beber vino (la sangre de Cristo) durante una liturgia cristiana.
Estos hechos provocan radicalización, como es el caso de Noruega, en que el ministro de Asuntos Exteriores del gobierno socialdemócrata, Jonas Gahr Støre, manifiesta que el país se ha negado a que Arabia Saudita pague una mezquita-centro islámico, porque
“sería poco natural y paradójico que aceptásemos que lo financie un país que no acepta la libertad religiosa”, y recuerda que “una comunidad cristiana que se establece en Arabia estaría cometiendo un delito”.
Y anuncia que Noruega llevará el asunto al Consejo de Europa.
Obviamente no es bueno que las partes se radicalicen y se genere un círculo vicioso de conflictos ¿pero que hacer cuando el islam parece haber tomado el camino de crear un califato mundial por la fuerza, de conspirar contra las democracias occidentales y de maltratar a los cristianos que viven en sus territorios?
Lo primero es orar, para que se pueda recomponer una situación de armonía entre las religiones.
Y en segundo lugar, dejar de tener una visión ingenua sobre los planes islamistas, ser precavidos y firmes demandantes de reciprocidad.
LIBROS CRISTIANOS Y BIBLIAS A LA HOGUERA
Los milicianos del Estado Islámico de Iraq y del Levante (ISIL), la facción de Al-Qaeda que en varias regiones de Siria ha monopolizado la insurrección armada contra el régimen de Damasco, en los últimos días ha organizado una quema de Biblias y libros cristianos en frente de la Iglesia greco-católica de Nuestra Señora de la Anunciación en Raqqa, la ciudad siria que desde hace meses está bajo el control de las milicias anti-Assad.
La información sobre estas acciones ocurridas la ha proporcionado la Agencia curda independiente AraNews, conocida por su postura crítica contra el régimen sirio y en contacto con activistas e informadores que desde Raqqa filtran noticias a través de las redes sociales, y fue retomada por la agencia FIDES.
La región de Raqqa ha sido escenario de enfrentamientos entre el ejército de Assad y las milicias de la oposición, el pasado mes de marzo. Después de la retirada del ejército del gobierno, comenzaron los enfrentamientos internos de posicionamiento anti-régimen entre los batallones del Ejército Libre Sirio y los grupos quaedistas del Estado Islámico de Iraq y del Levante, que han salido ganando.
El objetivo declarado de esta facción es la creación de un califato islámico en las zonas sometidas bajo su control. Para ello, los civiles son objeto de campañas de adoctrinamiento y fanatización basadas en la ideología jiahdista. Ya en septiembre, varios vídeos que circulaban en la web han documentado los actos de vandalismo cometidos contra las dos iglesias de la ciudad de Raqqa por parte de los militantes del ISIL, con la destrucción de cruces, estatuas, e imágenes sagradas.
80 LATIGAZOS A CUATRO CRISTIANOS POR BEBER VINO EN LA EUCARISTÍA
Un tribunal de la ciudad iraní de Rasht ha condenado a cuatro miembros de la “Iglesia de Irán”, denominación cristiana protestante, a recibir 80 latigazos cada uno por beber el vino de la comunión durante la liturgia cristiana. Según la información de la agencia Fides la sentencia fue emitida el 20 de octubre y los cuatro cristianos, todos ciudadanos iraníes, tienen 10 días para apelar.
La Ong “Christian Solidarity Worldwide” (CSW) ha informado a dicha agencia de que el juicio está motivado por el “consumo de alcohol” y la “posesión de una antena parabólica”. Según fuentes de la agencia, la medida forma parte de la represión sobre las llamadas “iglesias domésticas” que no están autorizadas ni toleradas y contra de las comunidades que celebran el culto en lengua persa.
En un comunicado enviado a la agenica Fides, Mervyn Thomas, director ejecutivo de CSW, afirma:
“La intensidad de las penas aplicadas a estos miembros de la Iglesia de Irán criminalizan el sacramento cristiano de la comunión en la Cena del Señor, y representan una violación inaceptable del derecho a practicar su fe libre y pacíficamente. Instamos a las autoridades iraníes a garantizar que los procedimientos legales del país no contradigan su obligación internacional de garantizar el pleno disfrute de la libertad de religión o de credo”.
El pasado 23 de octubre se celebró una clamorosa manifestación por la libertad religiosa frente a la prisión de Evin, en Teherán. Según la información facilitada por la agencia, el pastor cristiano americano Eddie Romero La Puente ha realizado una protesta para exigir la liberación de los cinco cristianos encarcelados por motivos de conciencia: Farshid Fathi, pastor cristiano iraní; Saeed Abedini, un ciudadano iraní naturalizado como americano que había abierto un orfanato en Teherán; Mostafa BordBar, activista cristiano; Alireza Seyyedian, miembro de una de las iglesias domésticas; Mohammed Ali Dadkhah, un prominente abogado de Teherán, defensor y promotor de los derechos humanos. El pastor Eddie Romero La Puente ha sido detenido y expulsado del país inmediatamente.
Fuentes: Fides, Signos de estos Tiempos