El Papa esta desmontando sus negocios.
La labor emprendida por el Papa de sanear el funcionamiento del IOR y de otras entidades financieras vaticanas le está produciendo pérdidas económicas y de poder a la mafia, están preocupada por ello, y podría actuar, porque es de “gatillo fácil”.
Hasta ahora se habían nutrido del poder y de las riquezas que derivaban de la Iglesia generando negocios turbios, pero ahora están nerviosos. Bergoglio está desmontando los centros de poder económico a los que tenía acceso en el Vaticano.
Ocho meses después de su elección como Romano Pontífice, Francisco está revolucionando la Iglesia. En los centros de poder, la figura de Bergoglio es contemplada con recelo y temor. ¿Hasta el punto podrían querer acabar con su vida? La sospecha ha sido lanzada por el fiscal calabrés Nicola Gratteri, quien apunta nada más y nada menos que a la mafia.
En una entrevista con Il Foglio Quotidiano, Gratteri subraya que el Papa podría ser blanco de la mafia si continúa con su política de limpieza financiera en el Vaticano.
«(Francisco) está poniendo nerviosa a la mafia financiera», insiste el fiscal.
«Está en el camino justo, rema contra el lujo y ha dado de inmediato señales importantes» de que «apunta a hacer una limpieza total», una actitud que no puede sino disgustar a una mafia que «se ha alimentado de la convivencia con la Iglesia», que él expone en su libro.
«Quien hasta ahora se ha nutrido del poder y de las riquezas que derivan directamente de la Iglesia está nervioso, agitado. Bergoglio está desmontando centros de poder económico en el Vaticano» y «el mafioso que invierte, que recicla dinero, que tiene por lo tanto verdadero poder, es aquel que por años se ha nutrido de la connivencia con la Iglesia; son estos sujetos los que se están poniendo nerviosos», advierte.
¿Está entonces en peligro el Papa?, le preguntó el diario. Gratteri no tiene certeza acerca de «si la criminalidad organizada está en condiciones de hacer algo», pero sostiene que «seguro está pensando en ello». «Puede ser peligroso, a los capos no les gusta la limpieza de Bergoglio en el Vaticano», responde.
«El Papa Bergoglio está desmontando centros de poder económico en el Vaticano. Si los jefes mafiosos pudiesen ponerle una zancadilla, no lo dudarían».
El experto en crimen organizado aseguró que hoy en día mandan los «mafiosos inversores» que se dedican al lavado de dinero y han hecho grandes fortunas con la connivencia de la Iglesia.
El experto en la lucha contra la criminalidad organizada recuerda que
«los viejos padrinos con la gorra de visera dejaron de existir; están muertos o en la cárcel».
Según el fiscal,
«el 88 por ciento de los mafiosos se declaran creyentes. Antes de asesinar a alguien, un mafioso calabrés reza a la Virgen para pedir protección«. L
Los «capos» se muestran católicos devotos en público y en privado:
«No he encontrado ninguna guarida de jefe mafioso en que no hubiese imágenes de la Virgen o de San Miguel Arcángel«.
La mafia calabresa, la Ndrangheta, es menos conocida fuera de Italia, pero es más rica y violenta que la Cosa Nostra siciliana o la Camorra napolitana. En las últimas dos décadas, ha extendido sus tentáculos económicos por numerosos países como Alemania, el Reino Unido o Australia. En conjunto, las cuatro mafias, incluyendo la de Puglia, que es más pequeña, controlan una actividad económica equivalente a casi un cuarto del Producto Interior Bruto (PIB) italiano
Fuentes: Il Foglio Quotidiano, Signos de estos Tiempos