Lucifer se rebeló contra Dios y por eso fue condenado.

De la misma forma los satanistas se rebelan contra Dios al seguir al ángel caído.

Y las feministas también se rebelan contra Dios.

¿Por qué el feminismo se rebela contra Dios? ¿Y por qué se emparenta con el satanismo?

¿No es muy fuerte decir que el satanismo está vinculado con el feminismo?

Esto lo veremos en este artículo.

   

¿POR QUÉ LA REBELIÓN CONTRA DIOS?

El feminismo es una rebelión contra los mandamientos de Dios, más que contra la propia situación de las mujeres.

Muchos creen que el feminismo nació en el siglo XX por la aspiración de las mujeres a tener los mismos derechos en el voto y en los salarios que los hombres.

Pero sus raíces son más profundas y las podemos encontrar en el libro del Génesis de la Biblia.

Eva fue la feminista original que salió de la autoridad que Dios había impuesto en la cadena de mando, cuyo superior era Adán.

Ella actuó de manera independiente y llevó a toda la raza al pecado con el primer acto feminista de rebelarse contra los mandatos de Dios.

Dios le dijo Adán que no comiera del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal, pero sin embargo Eva lo comió y después convenció a Adán para que lo hiciera.

O sea que la mujer actuó independientemente de la autoridad del esposo y fue engañada por la “serpiente”.

Hoy el feminismo está empaquetado con un lenguaje de victimización de las mujeres, de igualdad de derechos.

Pero su agenda es más que el empoderamiento de las mujeres, sino que se dirige a la destrucción de los matrimonios, la familia y la sociedad.

La clave de esto hay que buscarlo en el gnosticismo, una corriente que actúa en la humanidad desde antes de Jesucristo.

Y que reclama que hay un conocimiento más alto que el de Dios y que lo puede obtener la humanidad.

Es exactamente lo que sedujo a Eva, la promesa de la “serpiente” de ser como dioses luego de comer el fruto del árbol.

Por eso es común en el lenguaje del feminismo actual decir a las mujeres que la mujer es el único Dios que existe, que tiene que sintonizar consigo misma, que debe trabajar su autoestima, su autoconocimiento, su autorrealización y dirigirse hacia lo que quiera.

En definitiva la propuesta es convertirte en tu propio dios y moldear tu propio deseo.

El gnosticismo sostiene que la humanidad está en estas circunstancias porque ignoramos el potencial humano y no por las ofensas que hemos realizado a Dios.

Incluso algunas corrientes afirman que el Dios de la Biblia teme al dios femenino superior.

Y ese Dios femenino superior es la feminización de la sabiduría,

Por eso las corrientes gnósticas ordenan a las mujeres como sacerdotes.

Y su meta es borrar la distinción entre hombres y mujeres, confundiendo los roles y tendiendo hacia una sociedad andrógina o sea sin sexos.

Es por eso que el Dios del Génesis tiene que desaparecer para el feminismo extremo, porque es masculino y tiránico de las libertades humanas de los deseos.

Y es por esto que en definitiva el objetivo último contra de las feministas es deshacerse del Dios judeocristiano.

Lo que ellas llaman la cultura patriarcal.

Esos valores son considerados masculinos, como el matrimonio, la fidelidad, la familia, la autoridad, la moral basada en el orden natural.

Algunos en la Nueva Era pretenden sustituir la religión judeocristiana por una religión feminista de la brujería.

Es por esto que ha crecido tanto la brujería femenina en el mundo en los últimos tiempos

Por lo tanto a pesar de sus afirmaciones constantes el feminismo ya no se trata de la búsqueda de igualdad o del derecho a votar o a tener el mismo salario.

Estas son solo consignas para darle respetabilidad al movimiento feminista.

Su objetivo central es la eliminación de la estructura de la creación y de la moral del judeocristianismo.

No en vano su argumento último es derribar lo que llaman la sociedad patriarcal, y ya no lo ocultan.

Veamos más en detalle cómo surgió esto.

   

TODO ESTO SUCEDIÓ EN EL JARDÍN DEL EDÉN

Dios creó a Adán y luego dijo que haría un ayudante, porque no es bueno que el hombre esté solo (Génesis 2: 18-20).

De modo que se entiende que Dios colocó la carga de la jefatura en el hombre, y a la mujer la creó como su ayudante.

Tanto el líder como el ayudante son esenciales objetivamente, no hay uno más importante que el otro.

E implica una distribución de roles, de funciones.

El paraíso entonces quedó completo con la creación de esta estructura de mando.

Pero el hombre y la mujer desobedecieron a Dios comiendo del Árbol de Conocimiento del Bien y del Mal, que Dios había prohibido.

En el Génesis 3: 14-19 se cuenta la caída del hombre y las consecuencias, que son las maldiciones sobre el hombre y la mujer.

Y luego presenta el plan que pergeñó Dios para la recuperación de la gracia en la humanidad (Génesis 3:15).

14 Entonces Yahveh Dios dijo a la serpiente: «Por haber hecho esto, maldita seas entre todas las bestias y entre todos los animales del campo. Sobre tu vientre caminarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.

15 Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: él te pisará la cabeza mientras acechas tú su calcañar

16 A la mujer le dijo: «Tantas haré tus fatigas cuantos sean tus embarazos: con dolor parirás los hijos. Hacia tu marido irá tu apetencia, y él te dominará.

17 Al hombre le dijo: «Por haber escuchado la voz de tu mujer y comido del árbol del que yo te había prohibido comer, maldito sea el suelo por tu causa: con fatiga sacarás de él el alimento todos los días de tu vida.

18 Espinas y abrojos te producirá, y comerás la hierba del campo.

19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan, hasta que vuelvas al suelo, pues de él fuiste tomado. Porque eres polvo y al polvo tornarás.»

Por lo que se lee en el Génesis 3: 1-6, Eva fue seducida por la mentira del diablo y comió primero el fruto del Árbol de Conocimiento, y luego lo convenció a Adán de hacerlo.

¿Porque el maligno habló con Eva y no con Adán para tentarlo?

Porque pensó que la mujer era estructuralmente el eslabón más débil de la cadena.

Dios había puesto a Adán como responsable del Jardín del Edén y de Eva.

Por lo tanto aunque no haya escuchado o presenciado la conversación del maligno con Eva, igual es el responsable, porque hay una cadena de mando en la familia.

Por eso Dios lo considera responsable a Adán.

Porque fue a él quien le había dado la prohibición de no comer del Árbol del Conocimiento.

Y además en el Génesis 3: 17 le recrimina de haber escuchado la voz de la mujer; o sea haberse dejado convencer contra los mandatos de Dios.

La tradición bíblica puso Adán como responsable de la caída.

En 1 Corintios 15 22 dice “en Adán todos mueren” y en Oseas 6: 7 dice “Israel transgredió el pacto al igual que Adán”.

Dios no recrimina a Eva porque piensa que ella fue también víctima de la negligencia de su marido, al no proteger la convenientemente.

Adán era el sacerdote del Jardín del Edén y su función era custodiar y mantener el santuario.

Sí Adán hubiera estado atento o si hubiera negado a comer de la fruta, Él habría actuado como fiel custodio del Edén.

Pero dejó de escuchar la voz de Dios y cuando se desatiende su voz vienen los problemas.

Lo mismo que cuando se intercambian los roles entre hombres y mujeres.

Pero mirado fríamente Eva fue culpable de aceptar la trampa del demonio y de convencer a Adán para que violara la orden de Dios.

Ella no fue forzada físicamente, sino simplemente fue seducida por la promesa de que sería como Dios.

O sea la promesa de estar al mando, que es lo que hoy aspiran las feministas respecto a la sociedad.

Hay algunos que dicen que en base a estos versículos Satán eran feminista, porque se dirigió directamente a la mujer y no al hombre.

Pero no necesariamente es así, porque puede haberse dirigido a la mujer porque la consideró el eslabón más débil simplemente, por estar más abajo en la cadena de mando.

Pero desde ese momento se puede considerar a la mujer como cómplice del diablo.

Y la tradición feminista lo afirma, al re conceptualizar a Lucifer como el liberador de la mujer, y a Eva como la primera heroína.

De modo que Lucifer es el aliado de las mujeres en la lucha contra el dúo formado por Dios y sus hombres sacerdotes.

Y se llega a exponer que las mujeres son rebeldes por naturaleza, porque desde el inicio se atrevieron a desobedecer a Dios y piensan que eso las liberó de la sujeción a los hombres.

Esa rebeldía pasa por el argumento de pensar por sí mismas, según sus expresiones.

Sea cual fuere la explicación, el satanismo y el feminismo radical son compañeros de ruta; tanto en teoría como en la práctica.

   

LA ESPIRAL DESCENDENTE

A partir de la orden de Dios, en la tradición judeocristiana se le otorga al hombre la autoridad del matrimonio, y a la esposa el deber de ayudarlo.

De modo que los hombres tienen la autoridad en la familia y la mujer debe ayudarlo.

Esto no implica desigualdades en términos espirituales o intelectuales, sino que por el contrario hay igualdad en todos los demás valores.

Pero el hombre tiene la responsabilidad de proteger, de nutrir, de proporcionar a la familia y a la esposa un estilo de liderazgo amoroso.

Mientras que la esposa se encarga de engendrar y cuidar de la procreación de los hijos.

Esto es parte de la maldición que Dios le da a la mujer luego de haber comido el fruto.

Mientras que al hombre lo condena a ganar el sustento de la familia con fatiga, como vimos.

Pero la rebeldía de Eva también se traslada al matrimonio cuando la mujer caída desea gobernar la vida familiar.

Lo cual se extiende luego a la vida laboral, a la vida social a la vida política, etc.

Esta es la plataforma de las feministas.

Y todo esto vino por influencia de satanás y entró por la rebeldía de las mujeres.

La Biblia nos muestra como esto es un espiral descendente.

A la primera rebeldía de la mujer le siguió en el Génesis la poligamia que está escrita en el capítulo 4: 23.

En el 9: 22 se puede ver las miradas lujuriosas y la pornografía.

En el capítulo 16: 1-3 se presenta el adulterio.

En el capítulo 19 entra la homosexualidad.

En el capítulo 34: 1-2 entra la fornicación.

En el 38, el incesto y la prostitución.

Este espiral es lo que hemos observado durante la revolución sexual que comenzó hace 50 años activamente.

Desde la reivindicación del amor libre se pasó a la fornicación, luego al divorcio, luego a la homosexualidad, y actualmente a la transexualidad.

De modo que el Génesis describe el asalto que iba a venir sobre la familia.

   

EL FEMINISMO RADICAL ES CONTRA DIOS

Como vimos el feminismo radical no empezó en los años 60 del siglo XX, sino que comenzó en el Jardín del Edén cuando la creación.

Y tuvo como impulsor al maligno.

Este feminismo trata de rebelarse contra las órdenes de Dios.

Es una protesta contra el diseño original que puso al mando a los hombres y a las mujeres como ayudantes.

Pero no se trata de una búsqueda de la igualdad con los hombres, sino de una lucha por la supremacía.

Ellas no quieren acatar la división de roles dentro de una familia, sino que quieren suprimir las funciones y las identidades.

Al punto que eso se traslada hasta la supresión de la identidad del sexo.

Y es así como esta revolución feminista ha llegado a suplantar a los hombres en el sacerdocio y a alentar cambiarse el sexo.

Y también a rebelarse contra la procreación, porque muchas feministas consideran el embarazo como una enfermedad que debilita a las mujeres.

Pero como contrapartida, piensan que la pornografía las empodera.

Sin embargo las mujeres y los hombres son constitutivamente diferentes en el físico, y el sexo con el que uno nace afecta también otras variables en la genética.

No se trata solamente que el hombre tenga pene y la mujer vagina, sino que hay otras características del sexo femenino y del sexo masculino que son incambiables.

Por esto hemos dicho que es una fantasía el cambio de sexo.

Esto está claramente impulsado por el feminismo satánico.

Si uno busca por internet va a encontrar cantidad de artículos y sitios que proclaman un feminismo satánico.

Esto no es por casualidad, sino que es llevar a sus últimas consecuencias la rebelión que sucedió en el Jardín del Edén.

Es así como hemos visto históricamente a las mujeres rebeldes ir profundizando el camino hacia el satanismo.

Donde el estadio anterior fue la brujería, y por eso en la Edad Media, sobre todos los protestantes (y también los católicos), se dedicaron a quemar a las brujas.

Las satanistas tienen claro que la civilización occidental tuvo su impulso creador por el sexo masculino.

Pero poco a poco las feministas radicales fueron tomando poder, y hoy están en una situación en que son una parte importante en la contra revolución sexual contra la cultura judeocristiana, basada en la familia.

Veamos algunas expresiones de feministas para darnos cuenta hasta donde el análisis que estamos haciendo es correcto.

La feminista Linda Gordon, profesora de historia en la Universidad de Nueva York dijo:

«La estructura central de la familia debe ser destruida, y la gente debe encontrar mejores formas de vivir juntas… Sea cual sea su significado final, la desintegración de las familias ahora es un proceso objetivamente revolucionario».

Vivian Gornick, en una carta para refugiados de Kosovo, dijo:

«Ser ama de casa es una profesión ilegítima… La elección de servir y estar protegida, es una elección que no debería ser. El corazón del feminismo radical es cambiar eso».

La popular portavoz del movimiento feminista del siglo XX, Andrea Dworkin, no dejó lugar a especulaciones cuando dijo:

«Quiero ver a un hombre golpeado sangrientamente con un tacón alto metido en la boca, como una manzana en la boca de un cerdo».

La autora feminista y profesora universitaria de teología en una universidad jesuita, Mary Daly, fallecida en el año 2010 dijo:

«Si la vida es para sobrevivir en este planeta, debe haber una descontaminación de la Tierra. Creo que esto irá acompañado de un proceso evolutivo que dará como resultado una reducción drástica de la población de hombres. La gente tiene miedo de decir ese tipo de cosas».

Valerie Solanas en el «Manifiesto SCUM» dijo:

«Ahora es técnicamente posible reproducir sin la ayuda de los machos y debemos comenzar de inmediato a hacerlo. Retener al hombre ni siquiera tiene el dudoso propósito de la reproducción.

El hombre es un accidente biológico: el gen y (masculino) es un gen incompleto x (femenino), es decir, tiene un conjunto incompleto de cromosomas.

En otras palabras, el macho es una hembra incompleta. Ser hombre es ser deficiente, emocionalmente limitado.

La masculinidad es una enfermedad de deficiencia y los hombres son lisiados emocionales».

Poco después de publicar sus quejas, Solanas entró en el estudio de Andy Warhol en Nueva York, le disparó a Warhol dos veces e intentó matar a su manager, pero el arma se atascó.

En definitiva el odio de las mujeres feministas radicales contra los hombres se debe a que los acusan de patriarcado.

Y esto como vimos se puede rastrear hasta la orden que vino de Dios cuando la creación del ser humano.

Lo que en definitiva supone que se trata de una rebelión contra el mandato de Dios en última instancia.

Es ni más ni menos lo que hicieron satanás y sus ángeles caídos.

Y ahora lo están replicando en la Tierra con uno de sus compañeros de ruta, que son las feministas radicales.

No estamos en condiciones de decir que todas las feministas tienen los mismos preconceptos y prejuicios con respecto a los hombres y a Dios.

Desde ya las feministas radicales tienen un grado de aversión y de agresividad muy superior a otras feministas.

Pero es posible que muchos grupos feministas – que no son radicales – compartan con los radicales esta ideología de rebelión contra el orden instituido, que es el que parece claro que los instauró Dios en la creación.

Aunque claro está de una manera menos virulenta.

Fuentes:

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