La infiltración de falsos profetas busca torcer la misión de la Iglesia.

Una de las cosas más incomprendidas es la razón por la que la Santísima Virgen bajó a la Tierra, en Fátima, para hacer la advertencia del peligro del comunismo, que incluso todavía no había tomado el poder en Rusia.

Esto lleva a algunos a pensar que los católicos de derecha usan esta aparición para satanizar a los de izquierda.

Pero nada más lejos de la realidad, esto no tiene que ver con la política, sino que va mucho más allá.

La Virgen vino a combatir el plan del maligno para desestructurar la civilización cristiana y cambiar a la Iglesia.

Y puso a la jerarquía como la responsable de la lucha.

Pero la Iglesia fue neutralizada, mediante la infiltración por grupos externos y por el espíritu de la época.

Y a su vez hubo un ejército interno que lideró la metamorfosis.

Aquí hablaremos sobre cómo la Iglesia no respondió afirmativamente al pedido de la Virgen, y por el contrario ha ido cambiando el foco central de su misión en el último siglo, quienes fueron los agentes de ese cambio, y como se fue procesando la evolución a grandes rasgos.

El plan del maligno tuvo tres elementos centrales.

Introducir el materialismo sofocando lo espiritual.

Promover el conflicto a diversos niveles en lugar de la unidad.

Y establecer el cambio moral a través de elites que gobernaran autoritariamente.

Marx dijo que la religión es el opio de los pueblos, satanizando a las expresiones que ponen énfasis en lo espiritual.  

Y luego sus sucesores infiltraron las religiones alterando su centro, que es la salvación del alma, poniendo énfasis en la solución de los problemas materiales del hombre.

Del mismo modo, la lucha de clases promovida por el marxismo clásico, dio paso luego a la promoción del conflicto entre generaciones, entre esposo y esposa, entre blancos y negros, y a su vez con los indígenas, entre el cuerpo con que la persona nació y su fantasía, etc.

Es por eso que decimos que la cultura occidental hoy ha sido raptada por una evolución del comunismo, que probablemente estuviera en su mismo origen.

El Cielo quiso evitar que esto sucediera y le dio a la Iglesia la responsabilidad de liquidar el plan del maligno desde el principio, a través de las órdenes impartidas por la Virgen de Fátima.

Sobre sus hombros recayó el destino de muchas generaciones. 

Pero ya sabemos que los sucesivos Papas no consagraron en tiempo y forma a Rusia al Inmaculado Corazón de María, como había pedido la Virgen, no revelaron el 3er Secreto de Fátima, y no promovieron la comunión reparadora de los primeros sábados, entre otras cosas.

¿Y por qué sucedió esto?

Porque la Iglesia fue inmovilizada por la infiltración.

Tendemos a hacer una caricatura de la infiltración pensando en que, cuadros marxistas altamente entrenados entraron en los seminarios, se mantuvieron ocultos durante décadas, y así fueron subiendo en la estructura para inmovilizarla y cambiarla.

Si bien esto existió, no fue la forma principal de infiltración.

En 1953, la ex jerarca comunista convertida en católica, la Dra. Bella Dodd, detalló ante el Congreso de los Estados Unidos, el plan soviético para trabajar con los católicos.

Habló de la infiltración de más de 1100 jóvenes en los seminarios, pero dijo que éste no fue el principal método de infiltración, ni el que dio los mejores resultados.  

Dijo que el esfuerzo mayor, por lejos, se hizo simplemente apuntando a ciertos individuos, líderes de diversos grupos, a quienes se podía persuadir de que, al menos en muchas áreas, católicos y comunistas tenían objetivos comunes en los que podrían trabajar juntos para mejorar la humanidad.

La estrategia de desarrollar simpatizantes dio buenos resultados, reclutando simpatizantes a sus políticas, básicamente sociales, que podrían aprovechar en el futuro. 

Otros ex comunistas de aquellos primeros años de la década de 1950 testificaron lo mismo.

Por lo tanto la verdadera infiltración vino a través de convencer a figuras relevantes o en ascenso, de que tenían objetivos similares en algunas áreas y que debían trabajar juntos.

Así aparecieron los sacerdotes, que fueron persuadidos a pensar que lo principal del evangelio era liberar a los pobres de sus problemas económicos.

Y se consolidaron las tendencias progresistas en la Iglesia.

Y más adelante ese énfasis evolucionaría hacia poner foco en los inmigrantes, en el medio ambiente, en los supuestamente rechazados por la Iglesia, etc.

Dentro de estos progresistas hubo un ejército que lideró este proceso, los jesuitas.

No todos por cierto, porque podemos encontrar algunos muy apegados a la doctrina histórica de la Iglesia, aunque son relegados por la Compañía.

La otrora élite de soldados que llevaban almas para Cristo, se dedicó a deconstruir la religión cristiana.

El padre Malachi Martin, ex jesuita, en su libro “Los Jesuitas”, dice que ya en el siglo XIX una minoría muy pequeña de jesuitas tenía la sensación de que la ciencia no podía reconciliarse con la religión.

Y dice que en vista de la creciente importancia de la “cuestión social”, el creciente impacto del comunismo marxista y el enorme salto de las ciencias naturales, la Compañía decidió especializar a sus jóvenes en las nuevas ramas del conocimiento, como física, química, paleontología, antropología, fisiología, religiones orientales, sociología, biología.

Y comenzó a surgir una hermandad de especialistas académicos altamente capacitados.

A quienes les resultó cada vez más difícil conciliar los datos de su formación científica y académica con las doctrinas y la moralidad tradicionales propuestas por la Iglesia Católica Romana y defendidas oficialmente por la Compañía.

Pío XII vio que una falta de ortodoxia se estaba infiltrando lentamente entre los jesuitas en la década de 1940, y los reprendió por ello. 

Pero muchos jesuitas, que perdieron su amor por el Sagrado Corazón de Jesús, comenzaron a buscar lagunas en el legalismo para sortear la verdadera ortodoxia.

Y el cambio masivo de los jesuitas sucedió en la década de 1960, con la elección del vasco Pedro Arrupe como superior de la Compañía.

Confundieron el marxismo con el cristianismo, y dieron fuerza a la teología de la liberación.

Apoyaron a movimientos guerrilleros como los sandinistas y la ETA, entre otros.

Trabajaron para difundir que el Concilio Vaticano II fue un cambio radical de la Iglesia, en lugar de tratar de integrarlo a la doctrina tradicional, haciendo presión para imponer lo que se llamó el Espíritu del Concilio.

Trágicamente, los marines de Dios se transformaron en la década de 1960, al espíritu de la época.

El enemigo central era ahora económico, político y social: el sistema secular llamado capitalismo.

El objetivo principal era material: erradicar la pobreza y la injusticia causadas por el capitalismo y mejorar a los millones de personas que sufrían miseria e injusticia a causa de ese capitalismo.

Y las armas a utilizar ahora eran las de la agitación social, las relaciones laborales, los movimientos sociopolíticos.

Malachi Martin dice que el teólogo jesuita Karl Rahner trabajó para desestructurar todo el cuerpo de la doctrina católica concerniente a la fe y la moral, la ética comercial, la libertad humana, la piedad, etc., desarrolladas y enseñadas durante 19 siglos. 

Y el historiador Ricardo de la Cierva también hace un análisis muy agudo de los jesuitas, en la misma línea que Malachi Martin.

De los últimos 5 Papas, 4 amonestaron formalmente a los jesuitas por sus desviaciones: Pablo VI, Juan Pablo I y II, y Benedicto XVI.

¿Y por qué pasó esta deriva de los jesuitas? 

Quizás haya un defecto básico en su espiritualidad, que pone demasiado énfasis en el discernimiento personal y no el discernimiento de la Iglesia a través de la historia, que los hizo presa de este cambio.

Bueeeno hasta aquí cómo fue neutralizada la Iglesia para cumplir con el pedido de la Virgen de oponerse al comunismo, porque era un plan del maligno, y cuál fue la principal fuerza interna que lideró el proceso. 

Y me gustaría preguntarte si conoces jesuitas y si los que conoces son progresistas o son seguidores de la doctrina de los apóstoles.

MIRA ESTOS VIDEOS

LEE ESTOS ARTÍCULOS

¿Qué Pasa con los Jesuitas? ¿Porqué tanta Disidencia con la Doctrina Católica? https://forosdelavirgen.org/jesuitas-disidencia/

La Tentación de Negar al Demonio llega a los Cargos más Altos de la Iglesia https://forosdelavirgen.org/las-4-tacticas-principales-que-el-demonio-usa-contra-nosotros-y-como-defendernos/

El Impresionante Milagro del Santo Rosario en Hiroshima https://forosdelavirgen.org/uno-de-los-casos-mas-extraordinario-de-proteccion-por-el-santo-rosario-y-fatima-14-09-06/

La forma que han encontrado para Cambiar la Doctrina de la Iglesia, desde Adentro https://forosdelavirgen.org/cambiar-doctrina-iglesia-adentro/