Directrices para este momento histórico.
El Papa Francisco ha dirigido a los obispos de Argentina una carta, donde les insta a aplicar el documento del 2007 de Aparecida, que en un punto establece claramente que la santa comunión debe ser rechazada a cualquier persona que facilite el aborto, incluyendo a los políticos.
«Estas son las directrices que necesitamos para este momento de la historia», escribió el Papa a los obispos.
Según Life Site News, el Papa Francisco destacó el uso del documento de Aparecida como marco en una carta a la Asamblea de los Obispos argentinos enviada a finales de marzo.
En 2007, el entonces cardenal Jorge Bergoglio presentó por primera vez el documento en nombre de los obispos de América Latina.
El cardenal Bergoglio fue muy crítico a los promotores de la «sentencia de muerte» del aborto de niños no nacidos en Argentina. Su crítica alcanzó su punto máximo después de un aborto clandestino realizado en una mujer con discapacidad mental con la asistencia del ministro de Salud de la Nación.
En octubre de 2007, Bergoglio presentó la versión final del Documento de Aparecida, que fue aprobada por el Papa Benedicto XVI. El texto del documento párrafo 436 establece lo siguiente:
Esperamos que los legisladores, gobernantes y profesionales de la salud, conscientes de la dignidad de la vida humana y del arraigo de la familia en nuestros pueblos, la defiendan y protejan de los crímenes abominables del aborto y de la eutanasia; ésta es su responsabilidad. Por ello, ante leyes y disposiciones gubernamentales que son injustas a la luz de la fe y la razón, se debe favorecer la objeción de conciencia. Debemos atenernos a la “coherencia eucarística”, es decir, ser conscientes de que no pueden recibir la sagrada comunión y al mismo tiempo actuar con hechos o palabras contra los mandamientos, en particular cuando se propician el aborto, la eutanasia y otros delitos graves contra la vida y la familia. Esta responsabilidad pesa de manera particular sobre los legisladores, gobernantes, y los profesionales de la salud.
El Papa Francisco recomienda que la Iglesia debe practicar y compartir su fe abiertamente como premisa principal de la nueva evangelización. En su carta a los obispos de Argentina, el Papa escribió que si los católicos no proclaman a Jesús con sus vidas, entonces la Iglesia se convierte en «no la madre, sino en la niñera.»
Los primeros cristianos, el Papa subrayó, no tuvieron más que «el poder del bautismo», que «les dio valentía apostólica, la fuerza del Espíritu.»
El Papa Francisco hizo la pregunta, sin embargo: ¿Los cristianos de hoy realmente creen en el poder de su bautismo?
El Papa exhortó a los creyentes a ser «fieles al Espíritu, a anunciar a Jesús con nuestra vida, con nuestro testimonio y nuestras palabras.»
Fuentes: Big Pace, Signos de estos Tiempos