Un tema divisivo dentro de la Iglesia Salvadoreña.
En marzo de 2012 las pandillas salvadoreñas Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18 pusieron en marcha una tregua con la mediación de Monseñor Fabio Colindres, Capellán Castrense, abriendo así una esperanza de paz social en centroamérica, que hoy es la zona del planeta con más violencia del crimen organizado. Pero la tregua y el papel de la Iglesia católica en ella ha sido un tema que dividió a la jerarquía de la Iglesia desde incluso antes de que el pacto fuera aceptado.
Aunque el obispo Fabio Colindres fue uno de los principales mediadores de la tregua, sólo se unió al proceso después de que otras figuras de alto rango de la Iglesia rechazaran la oportunidad mostrando preocupaciones sobre el plan. Aún más, el papel de Colindres fue ampliamente percibido como un intento de los mediadores del gobierno para legitimar la tregua, al proporcior la imagen de apoyo de la Iglesia sin realmente haber obtenido la aprobación de la jerarquía. Vea más información aquí, aquí y aquí.
AHORA EL ARZOBISPO DECLARA EL FRACASO DE LA TREGUA
El importante líder de la Iglesia Católica en El Salvador dijo, luego de que pasara el mes más violento en los dos años desde que se firmó el pacto, que la tregua entre las dos principales pandillas del país no ha funcionado.
Hablando en una conferencia de prensa, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, dijo que la tregua entre las pandillas la Mara Salvatrucha (MS13) y Barrio 18, que fue negociada por el gobierno y por un obispo de la Iglesia,
“fue un intento (…) muy bien intencionado, pero que no funcionó”, informó El Mundo.
Escobar llamó al gobierno entrante del presidente Salvador Sánchez Cerén a aprender de los fracasos de la tregua y elaborar un nuevo plan de seguridad que sea «participativo» y «transparente», informó La Prensa Gráfica.
Los comentarios del arzobispo se presentan tras la noticia de que marzo fue el mes más violento en El Salvador – registrando 281 asesinatos en los primeros 30 días – desde que la tregua se firmó por primera vez en marzo de 2012.
Mientras que el nivel de violencia superó el récord mensual anterior de 256 asesinatos en los últimos dos años, éste sigue estando muy por debajo de los niveles previos a la tregua, que en el enero previo a la implementación del pacto llegó a alcanzar un máximo en cuatro años de 413 asesinatos.
El otro mediador, Raúl Mijango, negó que la tregua haya fracasado, señalando a ACAN-EFE que las pandillas todavía tienen «voluntad» para seguir con el acuerdo.
Los comentarios de Escobar significan que la Iglesia está del lado del creciente grupo de críticos que declaran que la tregua se ha muerto en todo menos en el nombre, esto en parte por los niveles de violencia que han ido en aumento desde hace algunos meses.
Sin embargo, Escobar también tomó un tono conciliador hacia los participantes de la tregua, elogiando sus intenciones, y sus palabras parecen estar dirigidas principalmente a alentar al nuevo gobierno de Sánchez Cerén para presionar el botón de reinicio y desarrollar nuevas soluciones a la crisis de seguridad del país, que sean más transparentes y orientadas a la comunidad.
Fuentes: Insight Crime, Signos de estos Tiempos