Los terremotos se suceden por la inestabilidad de la placa terrestre.
Y los tsunami se producen por terremotos submarinos.
Los huracanes son consecuencia de choques de agentes climáticos divergentes.
Pero hay que considerar que Dios creó todo el universo y las leyes la naturaleza.
Y que Él puede mantenerlas y modificarlas cuándo le parezca.
¿Después de todo, los milagros no son una intervención directa de Dios?
¿Podemos considerar entonces, que los desastres naturales son un castigo de Dios siempre?
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Seguramente no.
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Pero Dios permite que la Tierra manifieste las consecuencias del pecado original.
Cuando mencionamos el término castigo, lo estamos usando el sentido teológico, que implica una corrección, tal como el padre corrige la hijo por y con amor, y no una acción que implique venganza y odio.
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Por eso teológicamente se puede afirmar que Dios castiga, o sea que corrige como un padre a sus hijos.
Lo mismo puede decirse de las guerras, porque los mensajes dados en Fátima dicen claramente que las guerras son un castigo de Dios.
Dios diseñó la creación de una manera que los hombres la frustraron. Y lo continúan haciendo.
De modo que es razonable pensar que la creación se revele contra esa frustración y decadencia.
Entonces, los desastres naturales, lo mismo que la muerte la enfermedad y el sufrimiento, tienen su causa primigenia en el pecado.
Cuando Dios permite un desastre natural lo hace con un fin didáctico, de enseñanza.
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Para darnos el mensaje de que lo que estamos haciendo está mal.
Así lo hizo por ejemplo cuando el oscurecimiento y el temblor de tierra a la hora que murió Jesús en la cruz.
Cuando sucede un desastre natural, deberíamos humildemente discernir si se trata de un hecho absolutamente fortuito o hay un mensaje de Dios detrás de él.
Y en ese caso discernir a qué se refiere específicamente el mensaje.
En este artículo traemos el ejemplo del discernimiento de los terremotos que asolaron el centro de Italia en el año 2016.
Hay sin embargo muchos católicos ponen en duda que Dios esté detrás de una catástrofe natural.
Sin embargo la Biblia está llena menciones de que es así.
Exploremos las menciones bíblicas sobre los terremotos.
LA ESCRITURA ESTÁ LLENA DE TERREMOTOS PRODUCIDOS POR CAUSAS ESPIRITUALES
La escritura está llena de menciones de eventos de la naturaleza producidos por razones espirituales.
Es decir que producidos como reacción de la creación ante los pecados de los hombres.
Lo que desmiente lo que se está poniendo de moda opinar ahora, que lo terremotos y otros eventos son simplemente el cumplimiento de leyes de la naturaleza.
Hubo un terremoto cuando Jesús fue crucificado (Mateo 27:54).
Y la Biblia registra que hubo un gran terremoto que quitó la piedra de su tumba (Mateo 28: 2).
Y otro que liberó a Pablo y Silas de la prisión (Hechos 16:26).
Variados terremotos se mencionan y se profetizan en la Biblia.
Y en general están relacionados con la tribulación y la segunda venida de Jesucristo.
Veamos sólo algunos.
En la secuencia de Marcos 13: 7-8, 19
8 Pues se levantará nación contra nación y reino contra reino. Habrá terremotos en diversos lugares, habrá hambre: esto será el comienzo de los dolores de alumbramiento.
En la secuencia Mateo 24: 4-22 Jesús explicó que antes de la gran tribulación, durante un tiempo llamado «el principio de los dolores» habrá terremotos:
7 Pues se levantará nación contra nación y reino contra reino, y habrá en diversos lugares hambre y terremotos.
También en el evangelio de Lucas 21:11, 23-28 hay menciones claras de terremotos por causas espirituales:
11 Habrá grandes terremotos, peste y hambre en diversos lugares, habrá cosas espantosas, y grandes señales del cielo.
25 y 26 Habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas; y en la tierra, angustia de las gentes, perplejas por el estruendo del mar y de las olas, muriéndose los hombres de terror y de ansiedad por las cosas que vendrán sobre el mundo; porque las fuerzas de los cielos serán sacudidas.
En la secuencia de Apocalipsis 16: 17-20, suceden terremotos cuando el séptimo ángel derramó su copa,
18 a 20 Se produjeron relámpagos, fragor, truenos y un violento terremoto, como no lo hubo desde que existen hombres sobre la tierra, un terremoto tan violento.
La Gran Ciudad se abrió en tres partes, y las ciudades de las naciones se desplomaron; y Dios se acordó de la Gran Babilonia para darle la copa del vino del furor de su cólera.
Entonces todas las islas huyeron, y las montañas desaparecieron.
Por primera vez se menciona un terremoto en Apocalipsis 8: 5,
5 Y el Ángel tomó el badil y lo llenó con brasas del altar y las arrojó sobre la tierra. Entonces hubo truenos, fragor, relámpagos y temblor de tierra.
Luego se menciona uno referido a los dos testigos que Dios enviará para dar testimonio en la secuencia Apocalipsis 11: 11-13
13 En aquella hora se produjo un violento terremoto, y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y con el terremoto perecieron 7.000 personas. Los supervivientes, presa de espanto, dieron gloria al Dios del cielo.
Y también hay un terremoto e Apocalipsis 16: 19 cuando aparece el Arca de la Alianza,
19 Y se abrió el Santuario de Dios en el cielo, y apareció el arca de su alianza en el Santuario, y se produjeron relámpagos, y fragor, y truenos, y temblor de tierra y fuerte granizada.
También podemos hablar del Antiguo Testamento.
Hay una profecía de un terremoto que golpea la tierra de Israel en los «últimos días».
En Ezequiel 38: 18 se dice,
18-19 Aquel día, cuando Gog avance contra el suelo de Israel – oráculo del Señor Yahveh – estallará mi furor. En mi cólera, en mis celos, en el ardor de mi furia lo digo: Sí, aquel día habrá un gran terremoto en el suelo de Israel.
20 Temblarán entonces ante mí los peces del mar y los pájaros del cielo, las bestias del campo y todos los reptiles que serpean por el suelo, y todos los hombres de sobre la haz de la tierra. Se desplomarán los montes, caerán las rocas, todas las murallas caerán por tierra.
El profeta Isaías también habló de terremotos en la secuencia 24: 17-20,
19-20 Estalla, estalla la tierra, se hace pedazos la tierra, sacudida se bambolea la tierra, vacila, vacila la tierra como un beodo, se balancea como una cabaña; pesa sobre ella su rebeldía, cae, y no volverá a levantarse.
LOS VIDENTES RECIBEN MENSAJES SOBRE LA REBELIÓN DE LA NATURALEZA POR LOS PECADOS
Estos son unas pocas menciones sobre la relación entre los desastres naturales y los pecados del hombre.
Expresados en mensajes de Jesús y María recibidos por Luz de María.
8 de enero del 2018: La Tierra continúa estremeciéndose fuertemente, la naturaleza desea que el hombre sea cumplidor de la función para la que ha sido creado: adorador de la Trinidad Sacrosanta.
26 de enero del 2018: La naturaleza se rebela por causa de la inclinación del hombre que se ama a sí mismo y no a Mí.
Los hombres consienten el pecado y algunos colaboran con el pecado, esto es grave.
Así como el hombre se rebela contra lo natural, la naturaleza invade la Tierra lavando el pecado que esta Tierra posee a causa del hombre pervertido.
29 de enero del 2017: El egoísmo humano llegó a invadir la creación y la devastó.
En este instante, el hombre agresivo, cruel, hiriente, infame, despojado de amor y deshumanizado no es reconocido por la creación.
Ante este no reconocimiento de la creación, la humanidad aumentará su padecer.
14 de febrero del 2017: Amada, has mirado y escuchado cómo reacciona la creación ante el dolor causado por Mis hijos.
Piensa: cuando es tanto el mal que sale del hombre que nubla la tierra, cómo reacciona toda la creación.
No es Mi justicia sobre el hombre sino es el mal obrar y actuar del hombre que atrae como un imán la reacción contra el hombre mismo.
5 de setiembre del 2017: Hijos, la naturaleza avanza con gran fuerza sobre la Tierra.
Es la naturaleza que llama a la humanidad a volver la mirada hacia Dios.
El hombre es ajeno a su responsabilidad dentro de la purificación.
25 de setiembre de 2017: Por ello, el pueblo mexicano es purificado por la fuerza de la naturaleza debido a las leyes que han aprobado, leyes de pecado contrarias a Nuestra Voluntad y que hacen padecer al Inmaculado Corazón de Mi Madre.
16 de octubre del 2017 – Esta generación no ha guardado la dignidad como Hijos de Dios, sino viven en prisiones de pecado de las que no desean alejarse.
No creen en que el pecado se vuelva en contra del mismo hombre.
Han olvidado tiempos anteriores, generaciones anteriores, que fueron sepultadas bajo el agua o castigadas con fuego por haber vivido de los vicios contra la naturaleza humana.
Y ante todo esto que vimos ¿cuáles pueden ser las causas espirituales de un determinado terremoto?
Veamos un caso concreto.
EL CASO DE LOS TERREMOTOS DE ITALIA EN EL 2016
En el año 2016 Italia se vio conmovida por una serie de terremotos en el centro del país, y por manifestaciones del teólogo dominico Giovanni Cavalcoli interpretándolos.
Él dijo en su programa en Radio María que los terremotos que habían azotado el centro de Italia a partir de agosto fueron un castigo divino.
Y señaló que “los pecados humanos que probablemente los hayan suscitado son las uniones civiles de homosexuales y la revaluación del hereje Lutero”.
La reacción del Vaticano fue inmediata pidiendo perdón a los homosexuales por los dichos de Cavalcoli.
El arzobispo Angelo becciu dijo que las palabras del teólogo domínico no están de acuerdo con el evangelio o la teología de la Iglesia.
Y que “son ofensivas para los creyentes, escandalosas para los que no creen y contrarias a la visión de Dios que Cristo nos ofrece”.
Y continuó diciendo que “Cristo ha revelado el rostro del amor de Dios, no un Dios caprichoso y vengativo”.
Dijo que la de Cavalcoli era una visión pagana que data de la era precristiana.
Ante esto el dominico Cavalcoli respondió.
“Desde un punto de vista teológico estos desastres son el resultado del pecado original.
Estamos en la presencia de un castigo divino. El terremoto fue un castigo por los pecados del hombre.
Lea el catecismo. He sido doctor en teología durante 30 años y repito que los pecados como la homosexualidad merecen una retribución divina que puede ser manifestada en terremotos”.
Radio María también se deslindó de las opiniones de Cavalcoli, diciendo que no reflejan las opiniones de la radio y suspendió el programa del padre Cavalcoli.
Y en una entrevista publicada por la Fede Quotidiana, Cavalcoli dijo, “confirmo todo lo que dije sobre el terremoto”.
“Deberían excusarse y pedir perdón los que han revaluado al hereje Lutero”.
Y continuó diciendo,
“El catecismo, las escrituras y la doctrina son claras. Y nadie está autorizado a cambiarlos.
Dios envía castigos y este terremoto, como toda catástrofe, es por nuestros pecados.
Dios castiga al hombre cuando peca y no se arrepiente.
El castigo de Dios es una respuesta a la acción del hombre.
La sagrada escritura está llena de castigos de Dios”.
Y como ejemplo dijo,
“¿No registra el evangelio que un terremoto violento en el momento de la muerte de Nuestro Señor?”
Esto lo dijo refiriéndose a Mateo 27: 51 que menciona que el velo del templo se rasgó en dos y la tierra tembló cuando Jesús murió.
Y finalizó diciendo sarcásticamente,
“El sumo sacerdote Caifás probablemente no tenía una oficina de prensa, pero si la tuviera, hubiera estado ocupado diciendo que el terremoto no tuvo nada que ver con la ejecución de Jesús de Nazaret”.
Los dichos del Padre Calvalcoli se pueden complementar con la asociación entre desastres naturales y causas espirituales que han “visto” algunos videntes y algunos que han tenido experiencias cercanas a la muerte.
EXPERIENCIAS CERCANAS A LA MUERTE
En Hartesbeespoort, África del Sur, un joven que se dice que ha encontrado a Jesús cuando perdió el conocimiento y murió virtualmente, sufriendo daño cerebral durante un accidente grave, dice,
“Jesús te ama tanto, créeme. Eres la razón por la cual Él me envió de nuevo. Yo no quería volver, pero Él me envió de nuevo para que pueda estar listo para su regreso.
Juntos vamos a proclamar la Palabra de Dios porque Él nos ha elegido para el tiempo del fin” dijo el muchacho, Aldo, a su madre, Retha McPherson, quien escribió un libro sobre él.
“Tengo que ser un profeta que advierta a la gente que Jesús va a regresar por nosotros.
Vamos a experimentar el poder de Dios a quien servimos, a través de inundaciones y terremotos.
Mamá, ¿vas a advertir a todos de las inundaciones que están viniendo?”
Verdaderamente regiones dispares y situaciones.
La Madre Angélica solía decir lo mismo sobre el regreso de Jesús.
Una católica de Louisiana llamada Sondra Abrahams hace mucho tiempo apareció en un video durante el que discutió su paso a la muerte y el futuro que había visto, repleto de una serie de eventos terrenales desafortunados.
En Utah, Sarah Menet, que ‘murió’ y volvió después de un intento de suicidio, habla de lo mismo.
Según visiones durante sus supuestas experiencias, que detalla en un libro titulado La muerte no existe,
“Habrá el caos en todas las partes del mundo.
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Mucha gente me pregunta: ‘¿Dónde estaré seguro?’.
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Pero también le doy una gran esperanza.
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Vi focos de luz sobre la tierra.
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Sé que el poder de Dios es mayor que cualquier ejército de la tierra”.
Sin embargo, ella vio invasiones y desastres naturales nucleares en el futuro de occidente.
Estas visiones que nos recuerdan a otros que murieron y volvieron con profecías, como James Chauncey de Georgia.
Quien recientemente revisó su libro Testigo del Cielo con más detalles sobre sus profecías.
Entre esos detalles: revueltas en América del Sur y destrucción tremenda en las partes central y occidental de los EE.UU., así como en Australia.
¿CÓMO SE DESARROLLARÁN LOS ACONTECIMIENTOS?
Y en la propia Australia una vidente católica llamada Valentina Papagna ha estado advirtiendo de eventos muy similares.
Valentina afirma ver a María y le ha dicho muchas veces sobre drásticos eventos.
“Probablemente será la economía y desastres naturales a continuación”, ella alega.
«Una vez el Señor me tomó en un supermercado y dijo: ‘Toma una mirada hija mía’.
Al minuto siguiente estaba completamente vacío. Nada en los estantes.
Me dijo: ‘Esto es lo que va a pasar’. Algunas partes del mundo [parecían] como el desierto, otras inundadas”.
“Ciertamente parece que la élite sabe algo que el resto de nosotros no sabemos, ya que muchos huyen de las ciudades e incluso de países enteros”, señala WorldNetDaily.
“Las cosas, sobre las que las personas más ricas del mundo están más preocupadas son los disturbios civiles, la revolución, la inseguridad ciudadana y los desastres naturales” observó Carl Gallups [un pastor evangélico].
«Muchos de ellos creen que estas cosas pueden volverse más peligrosas que nunca.
Con el surgimiento del Estado islámico y sus atrocidades, los movimientos masivos de refugiados, superpotencias nucleares haciendo demostraciones, disturbios civiles y continuas predicciones de los principales medios de colapsos económicos y posibles desastres naturales ¿Quién podría culparlos?”
Sarah Menet detalla que habrá pequeñas «ciudades» de refugio, donde la gente ora, comparte con los demás, y se protege de los merodeadores que van a hacerse cargo de la tierra.
Esto es muy similar a un libro escrito por Julie Rowe, de California, que también ha escrito libros sobre su experiencia.
Ella «vio» una serie de lugares donde los cristianos se reunían para protegerse unos a otros y vivir en eventos en la oración mutuo del uno al otro.
“Vi que no debemos ‘bajar nuestras revoluciones’ para poner nuestra vida en orden”, escribió Julie.
“Ha llegado el momento de poner nuestra casa en orden y prepararse para los próximos días.
El tiempo es corto y hay que hacer todo en nuestro poder para prepararse en todos los sentidos necesarios”.
“Se me mostró próximos desastres naturales en una escala diferente de lo que todo el mundo ha experimentado alguna vez.
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Terremotos, huracanes, tornados, tsunamis, plagas, sequías, hambrunas, pestes, y toda clase de enfermedades estarán sobre la tierra.
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En una profundidad tal y tan amplia escala que la humanidad no puede ni siquiera imaginar cómo será”.
Se hace hincapié en los problemas a lo largo del “Anillo de Fuego”, donde se cree que un gran sismo será como el primer “petardo” en una serie de ellos, como si el mundo bajo nuestros pies (al menos cerca del Pacífico) fuera ‘empujado’.
Esto dará lugar a volcanes en muchos lugares, ella cree.
Mira, dice, cuando se produzca un evento a lo largo de la Cordillera de Wasatch (cerca de Idaho y Utah).
Hay que reconocer que Julie, cuyo marido es un abogado, y que es mormona ve prácticamente que todos los principales efectos negativos se producirán juntos.
En una especie de amalgama de muchas predicciones en otros lugares a través de los años.
Además de los fenómenos naturales, la contaminación nuclear de la central eléctrica de Japón, los microchips cuando los hombres malvados asuman el control, las armas biológicas utilizadas sobre la ciudadanía, los conflictos militares (uno comienza cuando Irán lance misiles desde Libia dirigidos a Israel), tremenda escasez de alimentos.
Ella es fuerte como ‘prepper’, e incluso hace una lista de lo que ella cree que cada familia debe tener.
Ella también ve un Papa asesinado, el Vaticano destruído (Chauncey vio personas que huyen del Vaticano).
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Y un tipo de anti-cristo que surge como un pacificador en Oriente Medio; algo que se mencionó hace mucho tiempo por un vidente mariano en Irlanda.
¿Se trata simplemente de la consecuencia de enseñanzas teológicas falsas, de milenarismo?
¿Una imaginación de nuestra actividad mental? ¿O hay algo que está pasando en este momento y que se está acelerando?
“He sido contactada por varias personas que han visto muchas de las mismas cosas que vi sobre el futuro”, escribe Julie.
“A algunos les mostraron estas cosas durante sus propias experiencias cercanas a la muerte, mientras que a otros se les han mostrado en sueños y visiones.
A muchas personas se les han dado algunos de estos conocimientos a través de otras formas de revelación personal, tales como pensamientos e impresiones que han llegado a su mente.
Gente de todos los ámbitos de la vida se han sentido llevadas a prepararse tanto espiritual como materialmente.
El Señor está advirtiendo de muchas maneras”.
En algún grado y de alguna manera, los acontecimientos parecen estar coincidiendo; esta concatenación ha estado ocurriendo durante mucho tiempo y por ahora, evidentemente, tiene mucho camino por recorrer.
Pero se mueve de una manera que podría describirse, si no como una ‘aceleración’, como un proceso ‘lento pero seguro’.
EL MENSAJE DE FÁTIMA DA UN PASO MÁS
El mensaje de Fátima va más allá todavía y dice que las guerras son consecuencia de los pecados de la humanidad, un castigo por la las ofensas a Dios.
Esto sale claramente del mensaje del 13 de julio de 1917, la tercera aparición de Fátima.
El mensaje del 13 de julio tiene dos partes. Una es el castigo a los pecadores individuales y otro es el castigo a las naciones.
De este mensaje Sor Lucía dirá sobre la visión del infierno que les dio Nuestra Señora,
“Nuestra Señora nos mostró un gran mar de fuego que parecía estar bajo la tierra.
Sumergidos en este fuego estaban los demonios y las almas en forma humana…”.
El objetivo de este mensaje es despertar el santo temor para que las personas no caigan en el infierno y regresen a la comunión con Dios.
Hoy este tipo de argumento no es popular entre el clero, porque consideran que el miedo es un motivo indigno para la conversión.
Sin embargo está presente en cantidad de enseñanzas católicas a través de la historia.
El énfasis en el castigo o en la misericordia es algo relacionado con las modas teológicas.
Pero lo más importante para el tema que estamos tratando es la segunda parte del mensaje que habla del castigo a la humanidad.
Sólo Lucía relata de esta forma lo que le dijo Nuestra Señora,
“Han visto el infierno donde van las almas de los pobres pecadores.
Para salvarlos, Dios desea establecer en el mundo la devoción a mi Corazón Inmaculado.
Si se hace lo que les digo, muchas almas se salvarán y habrá paz.
La guerra va a terminar: pero si la gente no deja de ofender a Dios, estallará una peor durante el Pontificado del Papa Pío XI.
Cuando vean una noche iluminada por una luz desconocida, sepan que esta es la gran señal que les dio Dios de que está a punto de castigar al mundo por sus crímenes, mediante la guerra, el hambre y las persecuciones a la Iglesia y al Santa Padre.
Para evitar esto, acudiré a pedir la Consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón, y la Comunión de reparación en los primeros sábados…”
Y termina diciendo que si se consagra Rusia a su Inmaculado Corazón se Dios dará al mundo un período de paz.
Pero también a la vidente de Fátima Santa Jacinta Marto, Nuestra Señora le dijo que las guerras “son un castigo por los pecados del mundo”.
Y eso coincide con una revelación que se le hizo al Santo sacerdote Père Lamy, de que la Primera Guerra Mundial era un castigo de Dios, específicamente por “la blasfemia la profanación del matrimonio y el trabajo del domingo”.
Esto que publicamos no es nuestra opinión sino que son los mensajes de Fátima.
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