Cómo fuerzas externas modificaron el rumbo de la Iglesia Católica en el Concilio Vaticano II y fue avisado previamente por Fátima.
¡Bienvenidos queridos hermanos!
A los que siguen diariamente el trabajo de este equipo y a los que se incorporan ahora.
Hoy queremos hablar sobre los llamados que aparecen en el vértice de la Iglesia, para construir una fraternidad universal de los hombres, y sobre las expresiones de que todas las religiones llevan a Dios.
Esto no surgió ahora, sino que es algo que se ha venido desarrollando desde hace décadas.
¿De dónde surgió? ¿Desde cuándo? ¿Y hacia dónde lleva a la Iglesia?
Muchos católicos no se dan cuenta del fuerte cambio ideológico que ha sufrido la Iglesia en este más de medio siglo.
Por mala formación doctrinal, o por distracción, o incluso porque apoyan esta metamorfosis que se está dando paso a paso.
Aquí hablaremos sobre el cambio revolucionario que ha sufrido la Iglesia desde el Concilio Vaticano II, por qué Nuestra Señora bajó en Fátima a advertirnos esto, y cómo este rumbo que está tomando la Iglesia es parte de un plan mayor de otros poderes en el mundo.
El Concilio Vaticano II marcó el inicio cronológico de una crisis espiritual en la Iglesia, que se alinea con las advertencias del Tercer Secreto de Fátima.
El espíritu del Concilio y la introducción de sus reformas, llevaron a una pérdida impresionante de las vocaciones, de la asistencia a misa, y del aflojamiento de la idea de que Jesucristo es el único camino a Dios.
Y esto se alinea con la gran apostasía o pérdida de fe, predicha en el Apocalipsis y en el Tercer Secreto de Fátima.
Hoy luego de 6 décadas, vemos que el Concilio Vaticano II fue una instancia para transformar a la Iglesia Católica en una herramienta del ecumenismo, diluyendo su carácter doctrinal.
Evidentemente la infiltración masónica dio sus frutos.
Porque en la declaración Nostra Aetate, promulgada por el Concilio, sobrevuela la idea de la «fraternidad universal».
Una visión centrada en la paz y no en la salvación.
Afirma que las otras religiones, como el islam, el budismo y el hinduismo, buscan a Dios y que en ellas se pueden encontrar elementos de bondad y verdad.
Llama a los cristianos a entrar en diálogo con las personas de otras religiones, buscando puntos en común y la colaboración en la construcción de un mundo más justo y pacífico.
Y reconoce que el cristianismo tiene sus raíces en el judaísmo y que los judíos siguen siendo el pueblo elegido de Dios.
Lo cual conecta al catolicismo con un plan más global de los judíos cabalistas, que es establecer la religión de Noé, como una religión naturalista, reservada para los no judíos, mientras los judíos se reservan el papel del sacerdocio.
La reconstrucción del Templo de Jerusalén sería un paso clave para este nuevo orden religioso.
Donde la Iglesia Católica suavizaría sus dogmas, en especial que Jesucristo es el único camino de salvación, para convertirse en una religión universalista, al servicio de la paz mundial y la fraternidad universal.
Por lo tanto el Concilio Vaticano II marcó un cambio profundo en la Iglesia.
El Papa Pablo VI habló explícitamente del «humanismo católico».
Este humanismo del Concilio buscó enfatizar la dignidad del hombre, eliminando los gestos que sugirieran subordinación.
Por esta razón, los modernistas rechazan la práctica tradicional de recibir la comunión de rodillas y en la boca.
Según la nueva teología, la gracia que Dios concede al hombre es un derecho y no un regalo inmerecido.
Es la «abominación de la desolación», mencionada en el libro de Daniel y por Nuestro Señor en el Evangelio, significando el culto al hombre, reemplazando el culto a Dios.
Muy pocos católicos se dan cuenta de lo que se puso en marcha y de que eso trajo las crisis en la que está la Iglesia y el mundo hoy.
Este cambio de visión se refleja en la liturgia que emergió del Concilio.
Cuyo artífice central fue Monseñor Annibale Bugnini, reconocido luego como masón.
Y en cuyo diseño participaron públicamente pastores luteranos para darle un tinte ecumenista.
Esta reforma litúrgica post-conciliar, eliminó la profunda conexión entre la celebración de la Eucaristía y el sacrificio de Jesucristo en la cruz, transformándola en una «cena del Señor».
Muchos que leyeron el Tercer Secreto de Fátima, como el Cardenal Ratzinger, Malachi Martin y otros, coincidieron en que se refería a una crisis interna en la Iglesia.
La que se ha manifestado con la pérdida de fe y la confusión doctrinal entre los fieles y el clero.
El Tercer Secreto de Fátima es, en esencia, una advertencia sobre la apostasía en la Iglesia, que se manifestaría claramente en los frutos del Concilio Vaticano II.
Es por esto, que Nuestra Señora dio instrucciones de que el Tercer Secreto debía hacerse público en 1960.
Pero Juan XXIII decidió no hacerlo y prefirió llamar al Concilio, que comenzó en 1962.
Según el Padre Ingo Dollinger, el Cardenal Ratzinger le confesó privadamente, que el Tercer Secreto hablaba de un «mal Concilio y una mala Misa».
De modo que el Tercer Secreto de Fátima es, en última instancia, una advertencia contra esta transformación global de la Iglesia.
Y buscaba evitar este camino de perdición.
Señalaba la apostasía como el mayor peligro para la Iglesia, pero también indicaba que habría una resistencia.
Según el profesor brasileño Carlos Bezerra, esta resistencia se personifica en la figura del «obispo vestido de blanco», en la visión del Tercer Secreto, que podría representar, según él, a un líder fiel a la doctrina original.
Allí se menciona una cruz «como de corcho», que simboliza la resistencia a las llamas de la apostasía.
Y los fieles que mueren a los pies de esa cruz, representan mártires espirituales purificados por la sangre de los primeros mártires.
Por lo tanto, el texto del Tercer Secreto destaca el papel de los mártires en la renovación de la fe.
Un martirio no necesariamente físico, sino espiritual, reflejando la lucha contra la apostasía y la confusión doctrinal dentro de la Iglesia.
Estos mártires espirituales serán la base para la renovación de la fe después de las pruebas finales.
Y el mensaje de Fátima advierte que, sin conversión, la humanidad enfrentará un castigo.
Sin embargo, el Vaticano al publicar parte del Tercer Secreto en el año 2000, presentó una interpretación que desvió la atención de la crisis de fe.
La narrativa oficial, vinculando el secreto al atentado contra Juan Pablo II, fue una simplificación que evitó abordar la crisis de fe, desviando la atención sobre el comunismo.
Pero a pesar de las pruebas anunciadas, el mensaje de Fátima termina con una promesa de victoria: «Al final, mi Inmaculado Corazón triunfará».
Este triunfo vendrá a través de la fidelidad de los pequeños remanentes de fe.
Y asegura que, a pesar de los desafíos, el plan de Dios prevalecerá y la Iglesia será restaurada.
Nuestra Señora de Fátima hizo un llamado a los fieles para que se conviertan en instrumentos de este triunfo mediante:
El rezo del Rosario como arma espiritual contra el mal.
La devoción al Inmaculado Corazón, como medio de consagración personal y colectiva.
Y la penitencia y reparación por los pecados de la humanidad.
Mientras el mensaje de Fátima se conecta con otras profecías marianas, como las de Garabandal, que anuncian un «Gran Aviso».
Que será una oportunidad de conversión antes de los castigos finales y el triunfo del Inmaculado Corazón.
Bueno, hasta aquí las consecuencias del cambio ideológico introducido en el Concilio Vaticano II, los esfuerzos que hizo Nuestra Señora en Fátima para que no se produjera, y las consecuencias que esto tendrá en la gravedad de la tribulación.
Y me gustaría preguntarte si crees que efectivamente el Tercer Secreto de Fátima se refería a la pérdida de fe en el vértice de la Iglesia o crees que no hay nada de esto en el Tercer Secreto.
Quizás la cosa más importante que está sucediendo en este momento en la iglesia es la generalización de la apostasía.
O sea la pérdida de la fe.
Es un secreto a voces que buena parte de los católicos no veneran adecuadamente la presencia real de Jesucristo en la hostia consagrada.
Desestiman la existencia del infierno y del purgatorio.
Y hasta a veces la vida eterna.
Como si se estuviera construyendo una religión cuyo objetivo central es mejorar la vida humana en la tierra. .
Relegando cualquier elemento sobrenatural. .
Basada en las ideas simbólicas de un rabino revisionista que vivió hace 2000 años y fue crucificado.
Esto está a la vista de todos y no necesitamos abundar más en lo que sucede. El que tiene ojos que vea.
Y eso nos lleva directamente a las profecías de Fátima y a la gran interrogante de por qué el Papa Juan XXIII no publicó el 3º secreto en 1960 como lo había pedido la Santísima Virgen.
Comencemos por lo que vivimos hoy.
¿QUÉ ES LO QUE EXPLICA LA APOSTASÍA EN EL CRISTIANISMO?
El cristianismo está en declive en occidente básicamente porque ha perdido de vista el drama de la salvación eterna.
Se ha ido erosionando el temor de perder la salvación eterna.
Y es aquí entonces cuándo podemos reflexionar que la pérdida de credibilidad en la existencia del infierno ha llevado a que muchos cristianos no hagan esfuerzos de conversión.
Por un lado tenemos que la creencia en la existencia del infierno es un tema complicado, porque para muchos es difícil imaginar que un alma sea condenada para siempre.
Y el solo hecho de pensar en que esto puede pasar crea miedo, inseguridad y ansiedad en algunos.
Al punto que no quieren hablar del tema.
Y se aferran muchas veces a quienes les abren puertas a una seguridad ficticia.
Sugiriéndoles que lo que la Iglesia opina sobre la existencia del infierno y sobre la condenación eterna no es tan así.
O simplemente callando ante sus temores; sin explicar el fundamento de la doctrina.
Esto entonces se abre la puerta para que dejen de creer en la totalidad de las enseñanzas de la Iglesia y empiecen a ser selectivos.
Arman así su menú de cosas en las que creen y en las que no creen.
Lo que se llama cristianismo de baja intensidad.
Y con el tiempo las cosas en las que no creen sobre la doctrina van aumentando y se llega al final a la pérdida total de fe.
Esto no es un invento teórico. Es ni más ni menos lo que ha sucedido y está sucediendo con las denominaciones más liberales de los protestantes en Europa.
Que poco a poco dejado de lado creencias básicas del cristianismo.
Hasta que al final algunas de ellas han terminado primero negando que Jesús sea el hijo de Dios y luego dejando de creer en la propia existencia de un Dios.
Por otro lado sienten en los funerales que los pastores dicen siempre que el fallecido “se ha ido a un lugar mejor”, de modo que no hay riesgo de ir a un lugar peor que la Tierra.
Y los católicos también han oído decir a teólogos y sacerdotes que si bien el infierno existe, es razonable esperar que esté vacío, porque Dios es tan misericordioso que no enviaría a nadie a allí.
En los hechos esto significa que se entienda que no hay riesgo de caer en el infierno.
Entonces, se haya conocido y aceptado o no a Jesús, al final del túnel hay una vida espléndida.
En segundo lugar la prosperidad material que ha penetrado en occidente hace difícil vender la idea de la necesidad de Dios para vivir en la Tierra.
Ya no es tan necesario aferrarse a Dios en esta vida ni apostar todo a otra vida para pasarla razonablemente bien.
De modo que ya sea porque se tenga miedo al infierno y no se quiere hablar de él, o porque se crea que no existe o que está vacío, o porque no se tenga necesidad de Dios en esta vida, entonces no tiene real sentido hablar sobre el pecado y del juicio de Dios.
¿Qué sentido tiene ir a misa donde se repite siempre lo mismo?
¿Qué sentido tiene rememorar el santo sacrificio de Jesús por nuestra salvación, si nadie será condenado al infierno?
¿De qué nos salvó realmente Jesús?
¿Qué sentido tiene confesar los pecados sin ningún pecado que hagamos nos hará perder la vida eterna?
Si la Iglesia no está orientada a salvar almas ante el riesgo del infierno, entonces simplemente es un club de amigos para compartir buenos momentos.
Y eventualmente para hacer contactos o buscar orientación para solucionar algunos problemas que se presentan en la vida en la Tierra, pero a unos pocos.
Si la gente deja de creer en el pecado, y sus consecuencias ¿porque va creer en el resto de la doctrina?
De modo que poco a poco esta presunción de que todos seremos salvados erosiona definitivamente el andamiaje general de la doctrina cristiana y produce pérdida de la fe tal como la estamos viendo en este momento.
Probablemente la insistencia que Nuestra Señora de Fátima hizo a los pastorcitos sobre la existencia del infierno, que incluso los llevó allí a visitarlo, sea la punta de la madeja para comprender que los mensajes de la Santísima Virgen nos han prevenido de la apostasía que luego iba a venir.
¿Y cuál es el momento en que estas cosas tuvieron su eclosión?
Parecería que fue en la década de 1960 donde coincidieron tres hechos muy significativos.
Por un lado la revolución sexual y liberal simbolizada a través del Mayo de París de 1968.
En segundo lugar el culmen de la influencia Comunista Soviética en el mundo, a través de la Guerra Fría y la guerra de sunversión en diversos continentes.
Y por otro lado el Concilio Vaticano II qué dio inició en 1962 y culminó en 1965.
Estas cosas marcaron al mundo e influyeron sobre la Iglesia católica.
Están muy relacionadas, porque a partir del Concilio Vaticano II las cosas que sucedían en el mundo empezaron a fluir mucho más intensamente en la Iglesia y parte del clero tomó una visión marxista, por ejemplo a través de la Teología de la Liberación.
Ante todo esto hay una cosa que llama la atención.
¿PUEDE SER POSIBLE QUE LA SANTÍSIMA VIRGEN NO NOS HAYA AVISADO?
¿Cómo las principales apariciones de la Santísima Virgen no nos hayan advertido que esto, tan importante iba a pasar dentro de la Iglesia y a la fe?
¿O sí lo hizo?
Posiblemente la Santísima Virgen si nos advirtió y en la principal aparición moderna qué fue la de Fátima.
Allí Nuestra Señora dio tres secretos.
El último casualmente debería haber sido revelado precisamente en 1960.
Pero Juan XXIII no lo hizo y ningún otro Papa lo hizo hasta el año 2000.
En el pontificado de Juan Pablo II se publicó el tercer secreto de Fátima.
Pero llamativamente el texto no habla directamente de gran tema de la iglesia hoy, que es la apostasía.
¿O si habló?
Hoy todavía hay una la polémica sobre la existencia de un texto oculto del tercer secreto que nunca se publicó o de un cuarto secreto.
Y llamativamente, el contenido de no revelado hablaría precisamente de esta apostasía.
Recientemente Maicke Hickson hace referencia a un artículo sobre la muerte del cardenal Silvio Oddi (en el año 2001) en el periódico The Telegraph.
El diario hace mención de una entrevista al cardenal Oddi publicada en 1990, sobre su relación con el papa Juan XXIII.
Él dice que a principios de la década de 1960, cuando actuaba como secretario de Juan XXIII, le dijo “santo padre hay una cosa por la cual no puedo perdonarle”.
Y el Papa le preguntó que era, respondiendo Oddi “que no haya revelado el tercer secreto de Fátima”.
El Papa le respondió “no hablemos de eso, te dije que no lo mencionaras”.
La interpretación del cardenal Oddi de esa contestación de Juan XXIII es que:
“De la actitud que el Papa Juan mostró durante nuestra conversación, deduje, pero es solo una hipótesis, que el Secreto podría contener una parte que podría tener un tono bastante desagradable.
Juan XXIII había convocado al Concilio con la intención precisa de dirigir las fuerzas de la Iglesia hacia la solución de los problemas que preocupan a toda la humanidad, comenzando desde adentro.
Es decir, tenía la intención de que el trabajo comenzara con la perfección evangélica perseguida por las personas consagradas…
Pero todos sabemos que, a pesar de los grandes méritos del Concilio, muchas cosas tristes también han tenido lugar.
Estas cosas tristes no se deben al Concilio, pero se llevaron a cabo junto con el Concilio.
Estoy pensando, por ejemplo, en el número de sacerdotes que abandonaron el sacerdocio: se dice que ha habido 80,000.”
El cardenal Silvio Oddi, que sirvió a 6 papas como diplomático y luego como Prefecto de la Congregación para el Clero, no creía que el tercer secreto se tratara de los acontecimientos de Rusia y la Perestroika como se ha dicho popularmente.
Y lo dice de esta manera
“Creo que conocí a Juan XXIII bastante bien, ya que pasé varios años a su lado cuando estaba en la nunciatura de París.
Si el Secreto se hubiera referido a realidades que consuelan a la Iglesia como la conversión de Rusia o el renacimiento religioso de Europa del Este, creo que habría ejercido presión para hacer público el Secreto.
Por temperamento, no dudó en comunicar cosas alegres (se ha revelado que el Cardenal Roncalli en una serie de cartas a amigos prácticamente anunció su elección al papado).
Pero cuando le pregunté durante una audiencia por qué en 1960, cuando la obligación de guardar el secreto había llegado a su fin, no había hecho pública la última parte del mensaje de Fátima, respondió con un suspiro de cansancio. Luego dijo: ‘No traigan ese tema conmigo, por favor…’”
Y abunda en su teoría sobre el tercer secreto de Fátima de la siguiente forma:
“¿Qué sucedió en 1960 que se pudo haber visto en relación con el Secreto de Fátima?
El evento más importante es sin duda el lanzamiento de la fase preparatoria del Concilio Vaticano II.
Por lo tanto, no me sorprendería si el Secreto tuviera algo que ver con la convocación del Vaticano II…”.
Y todavía avanza más diciendo:
“No me sorprendería si el Tercer Secreto aludiera a tiempos oscuros para la Iglesia: graves confusiones y apostasías problemáticas dentro del catolicismo mismo…
Si consideramos la grave crisis que hemos vivido desde el Concilio, las señales de que esta profecía ha sido cumplida no parecen faltar”.
“En su carta, Sor Lucía habló sobre una «revuelta diabólica» que estaba siendo «promovida por los poderes de las tinieblas» con «errores» cometidos contra Dios, su Iglesia, sus doctrinas y dogmas.
Ella dijo que la Iglesia atravesaba una «agonía en Getsemaní» y que había una «desorientación mundial que martirizaba a la Iglesia»”.
Agrega aún más:
“La discusión de la Hna. Lucía sobre la «agonía de la Iglesia en Getsemaní» y su martirio por una «desorientación mundial» parecía similar a la tercera parte del secreto, que describe un martirio global de la Iglesia mientras hace su camino hacia una cruz.
¿Qué causa este martirio?
En la segunda parte del secreto, Nuestra Señora advirtió acerca de la propagación de los «errores» de Rusia.
Esos errores causaron exactamente lo que Nuestra Señora predijo: guerras, persecuciones de la Iglesia y sufrimiento para el Santo Padre que fueron provocados por el Comunismo y su haciendo ascender el ateísmo a través de la revolución.
En junio de 1958, Sor Lucía le escribió al Papa Pío XII y le dijo que el comunismo alcanzaría su apogeo en la década de 1960.
Los errores del Comunismo hicieron infectar al mundo, llevando a la gente a rebelarse contra Dios y todo lo que es santo”.
Papa Juan XXIII
¿QUÉ RAZONES PUEDE HABER PARA QUE JUAN XXIII NO HAYA PUBLICADO EL TERCER SECRETO EN 1960?
Una de las cosas más perturbadoras en la historia de la iglesia reciente es por qué el Papa Juan XXIII no reveló el 3º Secreto de Fátima, como había pedido Nuestra Señora a los videntes de Fátima.
Y en cambio, 7 meses después, anunció que abriría el Concilio Vaticano II.
No quiere decir que necesariamente haya una conexión de algún tipo entre ellos, pero llama la atención su cercanía en el tiempo.
Luego de esos años ‘60, la historia nos muestra una caída sistemática de la Iglesia en varios aspectos.
Un fuerte crecimiento de los sacerdotes que dejaron su ministerio, la caída de las vocaciones.
Y junto con esto la caída de la concurrencia a misa y una creciente apostasía, o sea pérdida de fe.
Que en los últimos tiempos se ha materializado en la crisis de los abusos sexuales por parte de algunos sacerdotes y en el caos doctrinal en la Iglesia, producido por declaraciones de obispos y cardenales que todos podemos leer.
A simple vista parecería que hoy la Iglesia Católica está en peor situación que en la década de 1960.
Aunque obviamente también se puede argumentar que podría haber estado peor.
Claro que es imposible saber qué hubiera pasado si todo hubiera sido diferente.
En ese mismo año de 1960 Juan XXIII lee el 3º secreto, decide no publicarlo y convocar al el Concilio Vaticano II.
Esto no fue una sorpresa porque desde 1944, Angelo Roncalli el futuro Juan XXIII, había pedido un futuro Concilio para cambiar a la Iglesia Católica.
El objetivo del Concilio Vaticano II era acercar la Iglesia al mundo moderno en una relación positiva.
¿Había alguna incompatibilidad con la política de la Iglesia?
Si miramos ambas realidades podemos intuir objetivamente que la dirección en que estaba enfocado el Concilio Vaticano II era diferente a la dirección que llevaron las apariciones de Fátima.
En el 3º secreto publicado por el Vaticano en el 2000 hay una visión que muestra un ángel con una espada de fuego centellando que emitía llamas, que intentaban incendiar el mundo.
Mientras decía penitencia, penitencia, penitencia.
Eso implica un juicio divino negativo sobre la marcha del mundo.
Y por tanto va en sentido inverso a la nueva idea de alcanzar una relación positiva con el mundo moderno de parte de la Iglesia, de acercar la Iglesia al mundo.
La óptica de las revelaciones de Fátima eran demasiado de vieja escuela para la apertura de los nuevos tiempos que pretendía Juan XXIII.
Juan XXIII tenía la intención de abrir las ventanas de la Iglesia al mundo y encontrarse con el mundo en sus propios términos.
Lo que implicaba no poner tanto énfasis en ciertos dogmas y doctrinas que lo alejaban del mundo.
Pero finalmente la realidad es la que manda.
No bien terminado el Concilio Vaticano II el Papa Pablo VI dijo que por alguna hendija había entrado el humo de Satanás en el Vaticano.
Y el Papa Juan Pablo II mencionó, en una rueda de prensa en Fulda, Alemania, algunos aspectos del 3º secreto que se corrían bajo cuerda como verdaderos.
Diciendo que hubiera sido un peligro revelarlos y que lo único que quedaba es rezar porque va a haber una purificación en la Iglesia y en el mundo.
¿CUÁL ES LA HISTORIA DEL TERCER SECRETO?
El 13 de julio de 1917 Nuestra Señora le dijo a los videntes de Fátima un mensaje que no deberían revelar a nadie, estaba compuesto por tres partes.
Los pastorcitos fueron preguntados varias veces sobre su contenido y respondían que era un secreto y no lo podían divulgar.
Obviamente Nuestra Señora quería crear expectativa y atraer la atención del mundo sobre algo importante que tenía que decir.
Y además, quería hacerlo público cuando la Divina Providencia lo considerara adecuado.
Todo esto creó un aura de misterio alrededor del secreto de Fátima y valorizó su importancia.
Las dos primeras partes del secreto fueron reveladas por la hermana Lucía a pedido de Nuestra Señora en la tercera memoria escrita por la vidente, el 31 de agosto de 1941.
Sobre fines de 1943 el obispo de la Leiría le pidió a la hermana Lucía que escribiera la tercera parte del secreto.
La hermana Lucía comenzó a escribirlo en obediencia a principios de 1944.
Pero fue tal su angustia, debido al contenido perturbador del tercer secreto, que tuvo que aparecérsele Nuestra Señora diciendo que el cielo quería que lo escribiera.
El 17 de junio de 1944 el texto del tercer secreto escrito por Sor Lucía fue entregado en manos del obispo da Silva.
El sobre estaba cerrado y tenía una nota externa que decía que no podía ser revelado antes de 1960.
Y el obispo da Silva colocó el sobre que recibió de la hermana Lucía dentro de otro sobre que selló y guardó en la bóveda de la curia episcopal
Cuando se le preguntaba a la hermana Lucía porque era la fecha de 1960 ella contestaba “porque la Santísima Virgen así lo quiere”.
Incluso en 1955 el cardenal Ottaviani le preguntó por qué no debía revelarse antes de 1960.
Y ella respondió “porque entonces en esa fecha será más claro».
Las apariciones de Fátima y el tercer secreto crearon expectativa dentro de pueblo católico, las apariciones habían sido aprobadas por Pio XII en 1942.
Y en la medida que se acercaba 1960 la expectativa aumentaba.
A principios de 1957 el Santo Oficio, ahora Congregación para la Doctrina de la Fe, pidió que el documento del tercer secreto fuera enviado a Roma.
Entonces se le entregó al Nuncio Apostólico de Lisboa quien lo llevó al Vaticano y fue archivado en los archivos secretos del Vaticano el 4 de abril de 1957.
En agosto de 1959 el papa Juan XXIII solicitó el documento al comisario del santo oficio y le fue entregado el 17 de agosto de 1959.
Juan XXIII lo abrió y como estaba en portugués tuvo que buscar la ayuda de un traductor portugués de la secretaría de estado.
Junto con el traductor leyeron el texto y ahí decidió no publicarlo y devolverlo al Santo Oficio, diciendo que no se trataba de un tema de su pontificado.
Ese año hubo un comunicado impersonal del Vaticano que informó que nunca se iba a publicar, y con esto se pretendió cerrar el caso.
Según Anne Roche Muggeridge, la nuera del famoso católico británico Malcolm Muggeridge, éste informó que cuando el Papa se dio cuenta de que había perdido el control del proceso, intentó organizar un grupo de obispos para intentar forzarlo. Según lo escrito en este libro.
Malcolm Muggeridge, quien informaba sobre el Concilio Vaticano II para la BBC, consideró a Juan XXIII “políticamente ingenuo e indebidamente influenciado por el puñado de clérigos liberales con los que tenía contacto cercano”.
Los pontífices que siguieron a Juan XXIII se refirieron al 3º secreto aunque sin mencionarlo, porque estaban sucediendo cosas que hacían recordar sus profecías.
¿Pero que contenía en realidad el 3º secreto?
Esto nos lleva a las evidencias presentadas por el periodista Antonio Socci en su libro El cuarto secreto de Fátima.
La posición de Antonio Socci es que en la revelación vaticana del año 2000 faltó una parte del tercer secreto.
O más seguramente hay una parte que era un anexo al tercer secreto, entregado por Sor Lucía, que él llama cuarto secreto.
CÓMO SURGIÓ LA HIPÓTESIS DE UN CUARTO SECRETO
Socci escribe en la introducción de su libro que fue movido a la duda por un artículo del periodista italiano Vittorio Messori a propósito de la muerte de Sor Lucia.
Allí Messori hablaba de los numerosos escritos y “Cartas a los papas” que Sor Lucía habría dejado en su celda.
Messori aludía a la revelación vaticana del Tercer Secreto del 26 de junio de 2000 diciendo:
“Que en lugar de resolver el misterio, ha abierto otros: en lo referido a sus interpretaciones, sus contenidos y sobre la integridad del texto revelado”.
Esto desató una vorágine de preguntas en la mente de Socci.
¿Por qué insinuaría un hombre como Messori, “un gran periodista, extremadamente preciso… el columnista católico más traducido en todo el mundo”, una sospecha tal sobre el Vaticano?
¿Cómo podría una persona como Messori, tan cercana al ambiente del Vaticano, estar persuadido que la versión oficial del Tercer Secreto no es convincente?
Esto era especialmente incomprensible porque cinco años antes, cuando la publicación de la Visión del Secreto, Messori no expresó reserva alguna sobre lo que el Vaticano había dicho.
Ahora parece tener dudas. Ahora parece tener cuestionamientos que formular.
Socci respondió tomando parte en una amable disputa con Messori defendiendo la posición del Vaticano.
Pero luego, dice Socci,
“Fui golpeado por un artículo escrito por un joven autor católico, Solideo Paolini”.
Que fue publicado en una revista tradicionalista, la cual participó del debate entre Socci y Messori.
Paolini, dice Socci,
“Proponía una lista de argumentos contra la versión oficial del Vaticano (que era la mía también, en ese momento)”.
Él argumentaba que el Vaticano estaba reteniendo la parte principal del Tercer Secreto “debido a su contenido explosivo”.
Paolini había investigado el tema de Fátima intensamente, y había escrito un libro sobre el Tercer Secreto, “Fátima: no despreciéis las Profecías”, que fue publicado en Italia.
Para su propia sorpresa, Socci encontró los argumentos de Paolini dignos de consideración.
Socci expresa que fue un error que la Curia y los medios ignorasen el desafío de los católicos tradicionalistas que sostenían que el Tercer Secreto no había sido revelado en su totalidad.
“Por ejemplo, en el libro editado por el padre Paul Kramer [La Batalla Final del Diablo] que reunía los trabajos y artículos de varios autores, hay una denuncia de que el Vaticano no ha cumplido con los pedidos de Nuestra Señora de Fátima.
Y se afirma que ‘el precio de la indecisión del Vaticano bien puede ser extremadamente alto y que será pagado por toda la humanidad’”.
En síntesis, Socci reconocía que había muchas preguntas sin respuestas, muchos puntos enigmáticos en torno al Secreto.
Y en su libro menciona muchas pruebas.
HABLAN LOS EXPERTOS
El fallecido padre Joaquín Alonso (+1981), quien por dieciséis años fue el archivista oficial de Fátima, y que había tenido numerosas entrevistas con la Sor Lucía, testifica lo siguiente:
“Por lo tanto es completamente probable que el texto haga referencias concretas a la crisis de fe dentro de la Iglesia y a la negligencia de los pastores mismos [y a las] luchas internas en el seno de la Iglesia y a una grave negligencia pastoral de la alta jerarquía…
En el período precedente al gran triunfo del Inmaculado Corazón de María han de suceder cosas terribles. Esto es lo que forma parte del Secreto.
¿Cuáles son?
Si en ‘Portugal se preservara siempre el dogma de la Fe’… puede claramente deducirse que en otras partes de la Iglesia estos dogmas se oscurecerán o inclusive se perderán totalmente…
¿Acaso el texto no publicado habla de circunstancias concretas?
Es muy posible que hable no solo de una crisis en la fe en la Iglesia durante el período precedente, sino que como en el caso del Secreto de La Salette, por ejemplo, haya referencias más concretas a las luchas internas de los católicos o a la caída de los sacerdotes y la religión.
Quizás inclusive se refiera a las defecciones de la alta jerarquía de la Iglesia. Puesto que ese asunto no es para nada extraño a otras comunicaciones que Sor Lucía ha recibido en este tema.”
Mons. Amaral, tercer obispo de Fátima, dijo lo siguiente sobre el Secreto en una conferencia en Viena, Austria, el 10 de septiembre de 1984:
“Su contenido concierne a la fe. Identificar el [Tercer] Secreto con anuncios catastróficos o con un holocausto nuclear es deformar el sentido del mensaje.
La pérdida de la fe de un continente es peor que la aniquilación de una nación; y es verdad que la fe está continuamente disminuyendo en Europa.”
Está luego la cita famosa del Cardenal Luigi Ciappi, teólogo personal de cuatro papas, incluyendo a Juan Pablo II:
“En el Tercer Secreto se anticipa, entre otras cosas, que la gran apostasía en la Iglesia comienza por lo más alto”.
EL SEGUNDO TEXTO O CUARTO SECRETO
Los católicos también tienen buenas razones para sospechar la existencia de un segundo texto por la evidencia que presenta Mons. Venancio en Fátima.
En 1957, cuando el Santo Oficio del Cardenal Ottaviani solicitó al obispo de Fátima se enviara el Secreto al Vaticano, el obispo de Fátima, Mons. da Silva confió la tarea a su obispo auxiliar, Mons. Venancio.
En determinado momento, cuando Mons. Venancio estuvo solo con el Secreto, miró el sobre al trasluz.
Pudo reconocer dentro del sobre grande del obispo otro más pequeño, de Sor Lucía.
Y dentro de este sobre había una hoja de papel común con márgenes en sus cuatro costados de unos tres cuartos de centímetro.
Mons. Venancio se tomó el trabajo de anotar el tamaño de todo.
Es Mons. Venancio quien nos revela que el Secreto final estaba escrito en una pequeña hoja de papel en la que había unas 25 a 30 líneas.
Sin embargo el Tercer Secreto del Vaticano, revelado el 26 de junio estaba escrito por la Sor Lucía en cuatro hojas de papel que contienen 62 líneas de texto.
Aquí, nuevamente, se puede encontrar evidencia de dos textos del Secreto.
“AUNQUE YO SUPIERA MÁS SOBRE ESTO…”
El Arzobispo Capovilla admitió la existencia de dos textos.
Paolini le entregó generosamente a Socci todos los descubrimientos sobre el Secreto provenientes del ex secretario de Juan XXIII, Arzobispo Loris Francesco Capovilla.
Solideo Pasolini visitó a Capovilla el 5 de julio de 2006 en la casa que el Arzobispo tiene en Sotto il Monta.
“Dado que Ud. es una fuente de información de primer nivel”, le dijo Paolini, “me gustaría preguntarle algunas cosas”, particularmente sobre el Tercer Secreto.
El Arzobispo Capovilla respondió inicialmente:
“Aunque yo supiera más sobre esto, debemos atenernos a lo que se ha dicho en documentos oficiales”.
Esto es considerado por Paolini como una pista del Arzobispo insinuando, “Si, yo sé más sobre esto pero no hablo”.
El Arzobispo luego de la conversación sonrió y dijo: “Por favor, escríbame sus preguntas y yo las responderé”.
Dijo que buscaría entre sus papeles, si es que todavía conservaba alguno.
Tres días más tarde, Paolini remitió por correo electrónico una lista de preguntas al Arzobispo Capovilla.
El 18 de julio Paolini recibió un paquete de su parte en el que estaban las respuestas y algunos papeles de sus archivos.
Y Paolini encontró una bomba de tiempo en los documentos.
“Comparando el folleto publicado por el Vaticano con los documentos de los archivos enviados por el secretario de Juan XXIII”, afirma Paolini, “aparece inmediatamente una contradicción muy significativa en las ‘notas reservadas’ a los ojos del investigador.
Con el sello de autenticidad bien impreso sobre el papel queda certificado que el Papa Paulo VI leyó el Secreto la tarde del 27 de junio de 1963, mientras que el documento oficial del Vaticano afirma que ‘Paulo VI leyó el contenido el 27 de marzo de 1965 y envió el sobre a los archivos del Santo Oficio, después de decidir que no se publicaría el texto’”
Tenemos pue, una discrepancia de fechas.
Los documentos oficiales de Capovilla dicen que Paulo VI leyó el secreto el 27 de junio de 1963, mientras que el documento del Vaticano del 26 de junio de 2000 afirma que el mismo papa leyó el Secreto el 27 de marzo de 1965.
Paolini telefoneó inmediatamente al Arzobispo Capovilla para pedir una explicación de esta contradicción de fechas.
Capovilla, un poco evasivo al principio, respondió con frases como “no estamos hablando de las Escrituras”.
A lo cual Paolini respondió inmediatamente,
“Si, Excelencia, pero mi referencia es un texto oficial escrito (el documento oficial del Vaticano), ¡que es claro y se basa en otro documento de archivo!”.
Mons. Capovilla respondió,
“Bien, puede ser que el paquete Bertone [documento del 26 de junio] no sea el mismo que el paquete Capovilla…”
En este punto brilló una luz en la mente de Paolini y aventuró la pregunta del millón:
“¿Entonces ambas fechas son correctas porque hay dos textos del Tercer Secreto?”
Después de una breve pausa, el Arzobispo Capovila respondió
“¡Eso es exactamente!”.
¿COMO PUDO HABER OCURRIDO?
Socci plantea una hipótesis de lo que puede haber pasado en el 2000 tras los muros vaticanos.
Afirma que Juan Pablo II y el Cardenal Ratzinger querían revelar el Tercer Secreto en su totalidad, pero que el Cardenal Sodano, por entonces Secretario de Estado, se opuso a la idea.
La oposición del Secretario de Estado significa una presión formidable.
Se llegó pues a una solución de compromiso.
La visión del “Obispo vestido de blanco” que está reproducida en las cuatro páginas escritas por la Hermana Lucía sería revelada inicialmente por el Cardenal Sodano, en conjunto con la interpretación de que el Secreto no es nada más que una predicción del intento de asesinato del Papa Juan Pablo II en 1981.
Al mismo tiempo, el 13 de mayo de 2000, durante la ceremonia de beatificación de Jacinta y Francisco, el Papa Juan Pablo II “revelaría” la otra parte, la “terrorífica”, del Tercer Secreto oblicuamente, en su sermón.
Es por eso que Juan Pablo II habló en su sermón del Apocalipsis:
“Otro portento apareció en el Cielo; un gran dragón” (Ap. 12, 3). Estas palabras tomadas de la primera lectura de la Misa nos hacen pensar sobre una gran batalla entre el bien y el mal, mostrándonos como, cuando el hombre deja de lado a Dios, no puede alcanzar la felicidad, sino que termina destruyéndose a sí mismo…
El mensaje de Fátima es una llamada a la conversión, una alerta a la humanidad para que no tenga relación alguna con el “dragón”, cuya “cola barrió un tercio de las estrellas del Cielo, y las precipitó a la tierra”. (Ap. 12:4).
Los Padres de la Iglesia han interpretado siempre a “las estrellas del cielo” como el clero, y las estrellas barridas por la cola del dragón indican un gran número de miembros del clero que caen bajo la influencia del Demonio.
Este habría sido el modo en que Juan Pablo explicó que el Tercer Secreto también predice una gran apostasía.
Fue una revelación implícita del secreto.
Así, el Vaticano y el Papa mismo, no podrían ser acusados de mentir ante la pregunta directa:
“¿Se ha revelado completamente el Tercer Secreto”? Respuesta: “Si, ha sido completamente revelado”.
Algunos podrán juzgar esta hipótesis traída de los pelos.
Pero hay otras revelaciones que hace Socci.
Tenemos el testimonio de Mons. Williamson, de la FSSPX que relata que un sacerdote austríaco de su amistad le dijo que el Cardenal Ratzinger le había confiado (al sacerdote austríaco) que tenía dos pesos en su conciencia.
Uno era el mal manejo del Mensaje de Fátima del 26 de junio, el otro el problema con Mons. Lefebvre en 1988.
“Me equivoqué”, habría dicho con respecto a Mons. Lefebvre. “Me torcieron la mano”, respecto a Fátima.
La hipótesis de Socci es coherente con la confesión atribuida al Cardenal Ratzinger de haberse dejado “torcer la mano”.
El libro de Socci contiene muchos otros puntos demasiado numerosos como para enumerar aquí.
Por ejemplo Socci dice que la parte no publicada del texto del Secreto muy probablemente contenga advertencias sobre catástrofes naturales inmensas.
La Virgen María muestra una y otra vez a sus profetas lo que habrá de venir.
Ha repetido una y otra vez, y de diferentes formas, el llamado a la conversión.
Y las consecuencias de no hacerlo.
Algunos creen que lo que avisó cuando se apareció en Fátima fue una novedad, incluso los detalles que dio a los pastorcitos y luego a Sor Lucía unos años después. .
Pero no es así.
Aquí traemos su comparación con lo que ‘vió’ una célebre mística del siglo XVIII, Juana Le Royer, conocida por Sor de la Nativité de Bretaña (1731-1798).
Cuyas visiones se publicaron en la obra «Vie et Revelations de la Soeur de la Nativité»
Sus visiones son similares a la visión de Sor Lucía en Tuy, en 1944, cuando durante una aparición, Nuestra Señora le indicó escribir el contenido del Tercer Secreto.
Como la mayoría de lectores ya sabrán, esta visión fue recién publicada en la biografía de Sor Lucía, Un Camino bajo la Mirada de María.
Veamos cuatro coincidencias por lo menos.
LA TIERRA SACUDIDA POR TERREMOTOS ANTES DE LA VENIDA DEL ANTICRISTO
La parte relevante de la profecía de la Hermana Le Royer, que puede ser comparada con la aparición en Tuy a Sor Lucía en 1944 es:
«… Además que puedo ver que la tierra será sacudida en diferentes lugares por terremotos espantosos. .
Veo montañas enteras agrietándose y separándose con un terrible estruendo. .
Uno sería feliz si pudiese escapar con no más que una herida. .
Pero no veo salida de estas enormes montañas, torbellinos de humo, fuego, azufre y alquitrán que reducen pueblos enteros a desgarros. .
Todo esto y otros miles desastres deben llegar antes que el hombre de pecado (anticristo)…» (Sor Jeanne Le Royer).
Compara las palabras anteriores de Sor Le Royer con la visión de Sor Lucía a continuación:
«Sentí mi espíritu inundado por un misterio lleno de luz que es Dios y en Él vi y oí: .
la punta de la lanza como llama, la cual se separa, toca el eje de la tierra y ésta [la tierra] se sacude; .
montañas, ciudades, pueblos y aldeas con sus habitantes son enterrados. .
El mar, los ríos y las nubes dejan sus límites, se desbordan, se inundan y arrastran con ellos casas y personas en un número incontable a un remolino. .
Es la purificación del mundo, del pecado en que está inmerso. .
El odio, la ambición, provocan guerras destructivas». (Aparición de Tuy del 3 de enero, 1944)
Las profecías de Sor Juana Le Royer se registraron en el libro de 1817«Vie et Revelations de la Soeur de la Nativité»(La Vida y Revelaciones de la hermana de la Natividad) de Charles Genet.
Las profecías de Sor Le Royer mencionan «agrietamiento y separación» de montañas, después de una serie de grandes terremotos, que ella manifiesta, se llevará a cabo justo antes de la venida del Anticristo.
EL JUICIO A LA LUZ DE DIOS A FINALES DEL SIGLO XX Y PRINCIPIOS DEL SIGLO XXI
De manera interesante, las profecías de la hermana de la Natividad parecen estar relacionadas a las primeras décadas del siglo XXI:
«… Un día me encontré a mí misma en una vasta llanura a solas con Dios.
Jesús se me apareció desde lo alto de una pequeña colina, mostrándome un hermoso sol en el horizonte, Él dijo tristemente:
‘El mundo está muriendo y el tiempo de mi venida se acerca. .
Cuando el sol está a punto de ponerse, uno sabe que el día está por terminary que la noche caerá pronto. . Los siglos son como días para mí. . Mira este sol; ve lo mucho que aún tiene que viajar y estima el tiempo que queda en el mundo’.
Miré fijamente y me pareció que el sol se ponía en aproximadamente 2 horas.
Jesús dijo:
‘No hay que olvidar que esos no son milenios, sino sólo siglos y, son pocos en número’.
Pero, comprendí que Jesús reservó para sí mismo el conocimiento del número exacto y no quise preguntarle más.
Me bastó conocer que la paz de la iglesia y la restauración de la disciplina iban a durar un tiempo razonablemente largo…»
Escribiendo hacia el final del siglo XVIII, a la hermana Le Royer le fue dicho que «el sol se ponía en aproximadamente 2 horas». .
Y que estas horas representaban siglos. .
Colocando la cristalización de sus profecías a algún momento alrededor al cambio de milenio.
Sin embargo, antes de esta «puesta del sol», en que el mundo se acabará, a la hermana Le Royer se le mostró que la Iglesia sería restaurada durante una era de paz que duraría «un tiempo razonablemente largo».
Dado que sus profecías se centran en el cambio de milenio, parece que la época de paz dada al mundo antes de la venida del Anticristo está relacionada con este período de tiempo exacto.
Las anteriores profecías de la hermana Jeanne Le Royer son bastante bien conocidas, habiendo sido citadas en los libros Profecía Católica por Yves Dupont, Los Profetas y Nuestros Tiempos por el Rev. Gerard Fulton y, El Juicio, Tribulación y Triunfo de Desmond Birch.
Pero hay otra profecía menos conocida de la hermana de la Natividad, aún más específica sobre la segunda década del siglo XXI:
«¡Ay! ¡Ay! ¡Ay del siglo pasado!
Aquí está lo que Dios quería mostrarme en su Luz.
Comencé a ver en la luz de Dios, el siglo que debe comenzar en 1800.
Vi por esta Luz que el juicio no estaba allí, y que no iba a ser el último siglo.
Consideré, gracias a la misma Luz el siglo de 1900, hasta el final para ver si sería el último.
Nuestro Señor me hizo conocer, y al mismo tiempo me hizo dudar si sería al final del siglo de 1900, o en el de 2000.
Pero, lo que vi, es que si la sentencia llega en el 1900, vendría sólo hacia el final. .
Y que si el mundo supera este siglo, el del 2000 no pasará sin que el juicio venga, como lo vi en la luz de Dios.» (Vida y Revelaciones de la hermana de la Natividad, Charles Genet, libro IV, pp. 125-126)
Aquí, la hermana Le Royer nos dice que el juicio que se le mostró en «la luz de Dios» se llevaría a cabo antes del siglo XXI o en transcurso del mismo.
Pero, ¿a qué se podría referir este juicio en particular?
El hecho de que a la vidente se le mostrara un juicio que tiene lugar a «la Luz de Dios» suena muy similar a las palabras del Tercer Secreto de Fátima:
«Después de las dos partes que ya he explicado, a la izquierda de la Virgen y un poquito arriba, vimos un Ángel con una espada de fuego en la mano izquierda.
Brillante, emitía llamas que parecían como que iban a incendiar el mundo; pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba de su mano derecha hacia él.
Señalando la tierra con su mano derecha, el Ángel clamó a gran voz: ‘¡Penitencia, Penitencia, Penitencia! ‘.
Y vimos en una inmensa luz que es Dios: algo semejante a cómo la gente aparece en un espejo cuando pasan ante él.
Un Obispo vestido de Blanco que teníamos el presentimiento que era el Santo Padre.
Otros obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subiendo una montaña empinada, que en su parte alta había una gran cruz de maderos toscos como de alcornoque con la corteza»…
En el Tercer Secreto de Fátima, a los pastorcillos se les mostró también un juicio que tiene lugar en «una inmensa Luz qué es Dios».
En la forma de la pascua final de la Iglesia, que tendrá lugar durante la persecución del Anticristo.
Pero, a los niños se les mostró además que esta luz era «algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan frente a él».
El gran espejo como la «luz»que se muestra a los pastorcillos de Fátima (que tiene lugar justo antes de la pascua final de la Iglesia) está relacionado con la aparición de la Gran Señal predicha por Santa Faustina y Nuestra Señora de Akita. . Que muchos comentaristas creen que está directamente relacionada con la profecía de la iluminación de las conciencias. . Cuando la gente va a ver el estado de su alma reflejada en ellos como si se mostrara en un espejo.
Pero también parecería que es la aparición de la gran señal (que posiblemente sea algo así como una supernova en forma de cruz espectacular), hará que la gente reflexione y examine profundamente el estado de sus conciencias, y ayude a establecer plenamente el Segundo Pentecostés.
En el Tercer Secreto, el aspecto de la «inmensa luz que es Dios» como un espejo tiene lugar en respuesta directa al llamado triple del Ángel de penitencia, antes que la tierra sea golpeada por la espada de fuego.
Este llamado al arrepentimiento se une con la llegada del Segundo Pentecostés.
Cuando Nuestra Señora intervenga para apagar las llamas que amenazan con consumir el planeta a través del triunfo de su Corazón Inmaculado.
¿Es posible entonces que el «juicio» visto por la hermana Le Royer que tiene lugar en la luz de Dios es uno y el mismo de la inmensa luz vista por los pastorcillos de Fátima?
Si es así, entonces la llegada de este evento, según la hermana de la Nativité, es posible que se produzca en los principios de XXI, los cual es otra notable convergencia en este período de tiempo determinado.
EL ANTICRISTO MATA AL PAPA
Una última similitud de las profecías de la hermana Jeanne Le Royer con la aparición de Fátima, es el Papa mártir visto por varios videntes católicos.
«… El anticristo matará al Papa, probablemente por crucifixión.
Como un niño de diez años que va a saber más que nadie en el mundo y cuando sea de treinta comenzará su trabajo real.
Quince días después de la ascensión de Enoc y Elias al Cielo, terribles catástrofes vendrán sobre la tierra.
Los terremotos y maremotos inundando gran parte de la superficie terrestre culminarán en densas tinieblas sobre toda la tierra«.
Aquí, la hermana Le Royer predice el martirio de un Papa, bajo los auspicios del Anticristo, que parece hacer eco deliberadamente de la muerte de los dos testigos por la bestia que sube del abismo:
«Y cuando ellos hubieren acabado su testimonio, la bestia que sube del abismo hará la guerra contra ellos y los vencerá y los matará.
Sus cadáveres estarán en la plaza de la gran ciudad que simbólicamente es llamada Sodoma y Egipto, donde su Señor fue crucificado». (Apocalipsis 11: 7-8)
La mención del Papa siendo «crucificado» es un enlace simbólico al martirio del primer Papa, San Pedro. . Y también otros lazos al Tercer Secreto. . Donde el «obispo vestido de blanco» se embarca en su propia vía dolorosa, siendo antes martirizado a los pies de la Cruz en Jerusalén.
Mira esta parte del secreto de Fátima:
«Vimos también a otros Obispos, Sacerdotes, religiosos y religiosas, subir esa montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza.
El Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad en medio de ruinas y un poco tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino.
Llegado a la cima del monte, postrado a los pies de la gran Cruz, fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de armas de fuego y flechas.
Y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, de diversas clases y posiciones«.
Lo dicho al principio: la Virgen María no sólo está repitiendo el mismo llamado a través de los siglos, sino también avisando los mismos hechos que sucederán.
LA IGLESIA DEL TIEMPO DE PAZ
Nuestra Señora de Fátima dijo a los videntes que luego del Triunfo de su Inmaculado Corazón de María vendrá una época de paz.
Esto tiene su contraparte también en las visiones de Jeanne Le Royer.
Ella ve que luego de la catástrofe de los últimos tiempos la Iglesia subsistirá en una gran paz y tranquilidad.
No sólo no será destruida sino que crecerá.
Sor Jeanne Le Royer
Los pecadores que mantuvieron algo de fe sentirán que la gracia les hace renacer sus corazones y serán convertidos.
Tanto así que algunos estarán tan arrepentidos que morirán de dolor, y muchos de ellos morirán en olor de santidad y serán alabados como santos.
También se bautizará gran cantidad de gente.
La comunidad de hijos de la Iglesia formarán una especie de república que será la más perfecta jamás vista en la tierra.
No habrá leyes civiles, ni policía externa, y sólo se conocerá la autoridad de Dios, que será seguida por amor.
La hermana de la Natividad está describiendo una teocracia, donde los bienes estarán en común, de la misma forma en que se esbozó en la iglesia primitiva.
Cada persona trabajará de manera moderada para mantener su cuerpo, pero el mayor cuidado será la adoración en los altares.
Los fieles construirán templos y ella dice que el mismo Dios suministrará los materiales y dirá cómo hacerlos.
Los sacerdotes restaurarán el servicio de adoración y predicaran e instruirán como nunca, preparando los corazones para regreso del Mesías.
El fervor será mucho mayor que en la iglesia primitiva.
Esto sucederá después de la tribulación de una gran apostasía.
Ella dice que los hombres de confianza de satanás escondidos en las sombras habían hecho aparecer libros y profetas que dañaron mucho la fe.
Pero todo esto fue en secreto, como un fuego ardiendo por debajo, extendiéndose poco a poco.
Y la Santa Iglesia Católica no se dio cuenta hasta que los fuegos sean un verdadero incendio.
Sin embargo hubo algunos sacerdotes que vieron los humos de este fuego y se alzaron contra los enemigos internos de la Iglesia.
En este artículo traemos la tesis del Padre Kramer, que fue un estudioso de los secretos de Fátima.
Llega a la conclusión que el mundo atravesará una serie de fuertes tribulaciones.
Incluyendo una Tercera Guerra Mundial.
Este impresionante y detallado análisis lo dijo en una entrevista que se le realizó al inicio del pontificado de Benedicto XVI.
Su análisis parte de su investigación sobre el tercer secreto de Fátima, sobre el que subsiste la polémica sobre si se reveló todo – en el año 2000 – de lo que la Virgen dijo en Fátima.
Naturalmente toda esta información es para tu discernimiento.
Primero pongamos en un marco global lo que significa el triunfo del Inmaculado Corazón de María.
QUÉ ES EXACTAMENTE EL TRIUNFO DEL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA
Después de terminar la misa en el Vaticano tuvo una visión de Jesús hablando con satanás,
Satanás: “Puedo destruir tu Iglesia”.
Nuestro Señor: “¿Puedes? Adelante, hazlo”.
Satanás: “Para hacerlo, necesito más tiempo y más poder”.
Nuestro Señor: “¿Cuánto tiempo? ¿Cuánto poder? “
Satanás: “75 a 100 años, y un mayor poder sobre aquellos que se entregarán a mi servicio”.
Nuestro Señor: “Tienes el tiempo, tendrás el poder. Haz con ellos lo que quieras”.
El Papa entonces compuso una oración pidiendo a San Miguel Arcángel protección para que se orara después de las misas en toda la Iglesia.
Papa León XIII
Pero 33 años después, en 1917, Nuestra Señora se aparece en Fátima hablando sobre una Segunda Guerra Mundial y el futuro de la Iglesia.
Allí habló sobre el triunfo de su Inmaculado Corazón en ésta alocución,
“Si mis peticiones son atendidas, Rusia se convertirá y habrá paz.
Si no, ella difundirá sus errores por todo el mundo, causando guerras y persecuciones de la Iglesia.
Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir, varias naciones serán aniquiladas.
Al final, mi Corazón Inmaculado triunfará.
El Santo Padre me consagrará a Rusia, y ella se convertirá, y se otorgará un período de paz al mundo”.
Lo cierto que sucesivos Papas no consagraron Rusia al Inmaculado Corazón de María y los errores del comunismo se esparcieron por todo occidente.
Es el núcleo que hoy promueve el laicismo agresivo en occidente y el abandono de la ley natural.
Está profecía de la Santísima Virgen augura grandes tribulaciones y un período de paz en el mundo luego del triunfo del Inmaculado Corazón de María.
No se está refiriendo a la segunda venida de Cristo al final de la historia, cuando se producirá el juicio final.
Esto se entronca con la profecía del venerable Bartolomé Holzhauser del siglo XVII, quién dijo que estamos al final de una tumultuosa quinta época de la Iglesia, que comenzó alrededor de 1520 y que está llegando a su fin.
Esta quinta época será de aflicción, desolación y humillación para la iglesia, donde aparecerán muchas herejías y deserciones.
Y Jesucristo purificara a su pueblo a través de guerras, plagas, hambrunas y otras calamidades en la naturaleza.
Este castigo dará pasó a una sexta época de paz.
Esa época de paz estará liderada por dos figuras conocidas como el “santo papa” y el “gran monarca católico”.
En las apariciones de Nuestra Señora del Buen Exito en Ecuador en el siglo XVII Nuestra Señora prometió la “restauración completa” de la Iglesia.
Esto significa el pasaje de la quinta época a la pacífica época sexta según Holzhauser.
Y luego de esta sexta época de paz vendrá la tribulación final en la séptima época, donde aparecerá el último gran anticristo.
Una buena descripción de esta quinta época la da el mensaje del 13 de octubre de 1973 de Nuestra Señora de Akita a la hermana Agnes Sasagawa,
“El trabajo del diablo se infiltrará incluso en la Iglesia de tal manera que uno verá cardenales opuestos a cardenales, obispos contra obispos.
Los sacerdotes que me veneran serán despreciados y rechazados por sus cohermanos…
La Iglesia estará llena de aquellos que aceptan compromisos…”.
Es sintomático que también el 13 de octubre sea el día en que el papa León XIII recibió la visión del diálogo entre Jesús y satanás.
Y que haya sido la última aparición de Nuestra Señora en Fátima, donde se produjo la danza del sol, que fue vivida como una gran tribulación para los que estaban presentes.
Estos también está contemplado en ese mensaje de Akita del 13 de octubre de 1973,
“Como les dije, si los hombres no se arrepienten y se mejoran a sí mismos, el Padre infligirá un terrible castigo a toda la humanidad.
Será un castigo más grande que el diluvio, como nunca se ha visto antes.
El fuego caerá del cielo y borrará a gran parte de la humanidad, tanto a los bueno como a los malos, sin escatimar ni a los sacerdotes ni a los fieles.
Los sobrevivientes se encontrarán tan desolados que envidiarán a los muertos.
Las únicas armas que quedarán para ti serán el Rosario y la Señal dejada por Mi Hijo”.
Padre Paul Kramer
LAS DUDAS SOBRE EL CONTENIDO DEL TERCER SECRETO DE FÁTIMA
Este secreto había sido entregado por Sor Lucía para ser abierto en la década de los ’60, y sucesivos papas lo leyeron y no consideraron oportuno publicar.
Los “fatimistas” no consideraron que lo que leyó el Cardenal Bertone en el año 2000 fuera todo lo que el Vaticano tenía en su poder.
También muchos católicos recuerdan las observaciones sorprendentemente cándidas de la Madre Angélica en EWTN referidas a la visión del Tercer Secreto revelado por el Vaticano el 26 de junio de 2000.
La Madre Angélica dijo a su audiencia el 16 de mayo de 2001:
“En cuanto al Secreto, se me ocurre ser una de esas personas que piensan que no hemos recibido todo…
Porque pienso que es espantoso…”
La Madre Angélica, así otros Católicos en el mundo entero, encuentran difícil de creer que el texto haya sido guardado por el Vaticano durante más de cuarenta años simplemente por la visión de un “obispo vestido de blanco”.
Este obispo, que se piensa es el Papa, pasa sobre cadáveres de obispos, sacerdotes y laicos, en las afueras de una ciudad semi-destruida, y luego es ejecutado por una banda de soldados.
¿Fue guardado por esto?
¿Dónde están las “palabras de la Virgen” – mencionadas por el mismo Vaticano en su anuncio de 1960 ocultando el secreto – que explicarían esa visión?
¿No es Roma la ciudad semi-destruida, de la que el Papa huye sobre los cadáveres, como San Pío X habría visto en visiones proféticas?
El Papa San Pío X tuvo dos visiones similares a la visión de Sor Lucía de Fátima antes que ésta.
En 1909, durante una audiencia con los miembros de la orden franciscana, San Pío X tuvo una visión de un futuro Papa huyendo de Roma. Él dijo:
“¡Lo que he visto es aterrador!
¿Voy a ser yo, o será un sucesor?
¡Lo que es seguro es que el Papa abandonará Roma y, al dejar el Vaticano, tendrá que pasar por encima de los cadáveres de sus sacerdotes!”
Y justo antes de morir el Papa San Pío X tuvo otra visión similar, en la que vio a un futuro Papa, del mismo nombre, que huye sobre los cuerpos de sus hermanos, antes de ser asesinado.
“He visto a uno de mis sucesores, del mismo nombre, que huía sobre los cuerpos de sus hermanos. .
Él se refugió en algún escondite. .
Pero después de un breve respiro, morirá de una muerte cruel”.
San Pío X
El Padre Paul Kramer, quien ha estudiado los hechos del Tercer Secreto durante décadas, coincide que el Tercer Secreto es más espantoso de lo que los católicos generalmente pueden suponer.
Dice que el Tercer Secreto profetiza mucho más que la apostasía en la Iglesia, que comienza “en la cima”.
Esto fue revelado por el Cardenal Ciappi, el teólogo personal de cinco Papas consecutivos (desde Pío XII a Juan Pablo II), quien dijo haber leído el Secreto.
Los estudiosos de Fátima concuerdan que lo leído por el Vaticano es el principio del Tercer Secreto, que comienza con las “palabras de la Virgen”:
“En Portugal, el dogma de la fe será siempre preservado”, a lo que la Hermana Lucía agregó “etc”, para indicar que seguían más palabras de Nuestra Señora en el Tercer Secreto.
El Padre Kramer, dice que las “palabras de la Virgen” ocultadas explicarían verdaderamente cómo el Papa es ejecutado fuera de la ciudad semi-derruida.
Y ese hecho es la culminación de una serie de sucesos catastróficos. .
Incluyendo no solo el llamado Vaticano II y el asalto de la Iglesia por los liberales modernistas dentro de sus estructuras, lo que nosotros ahora estamos viviendo.
También profetiza que la III Guerra Mundial posiblemente deje Roma en ruinas.
Esto lo ha analizado el Padre Kramer en una famosa entrevista que The Fatima Crusader (El Cruzado de Fátima) le realizó, donde éste trata de armar el rompecabezas.
Haremos un resumen del resto de lo que ha dicho el padre Kramer.
LA EVIDENCIA QUE SURGE DE LAS PALABRAS DE RATZINGER
La visión del Tercer Secreto publicada por el Vaticano en junio de 2000 revela una catástrofe tanto material como espiritual.
Asesinato de obispos, sacerdotes, religiosos y laicos, una ciudad semi-destruída, y el Papa que está siendo ejecutado por soldados al pie de una gran cruz de madera fuera de esa ciudad semi-destruída.
Recordemos la reveladora entrevista de 1984 del Cardenal Ratzinger (hoy Papa Benedicto XVI) con la revista Jesús, en la cual él trató sobre el Tercer Secreto, que reconoció haber leído.
En esa entrevista, el Cardenal reveló más de lo que tal vez quiso decir.
El conectó tres elementos a la vez: el Tercer Secreto, la Sagrada Escritura y otras apariciones marianas aprobadas por la Iglesia como auténticas.
Como él dijo en 1984 – y lo cito exactamente –
“el contenido de ese ‘Tercer Secreto’ corresponde a lo que ha sido anunciado en la Escritura, y lo que ha sido dicho una y otra vez en muchas otras apariciones marianas…”
Así, no puede haber duda, nosotros sabemos de la propia boca del Papa, que lo que está en el Tercer Secreto corresponde a lo que está en la Escritura y también a lo que ha sido revelado una y otra vez en otras apariciones marianas. Esa es nuestra clave.
Es obvio que la visión del “obispo vestido de blanco” está lejos de contener, en forma lo suficientemente explícita y por si misma – sin ninguna palabra explicativa de la Virgen María – los elementos de la Sagrada Escritura y de las “muchas otras apariciones Marianas” que el Papa aludió cuando era aún el Cardenal Ratzinger.
Verdaderamente, ninguna de las apariciones marianas reconocidas incluye una visión del Papa siendo ejecutado fuera de una ciudad semi-destruida.
Así que nosotros ya sabemos que algo más grande está faltando en la revelación del Vaticano de junio de 2000.
Malachi Martin, ex sacerdote
LO QUE MALACHI MARTIN HA DICHO
Nosotros comenzamos nuestra investigación estudiando los indicios que otros que habían leído del Tercer Secreto y habían dicho sobre él.
Por ejemplo, el fallecido Malachi Martin leyó el Secreto. Yo escuché la historia contada por uno de sus íntimos amigos.
Un día de 1960, Martin, quien era entonces secretario personal del Cardenal Bea en Roma, se encontró viajando en un automóvil con él y con el Papa Juan XXIII.
Había cuatro personas presentes en el vehículo: el conductor, el Papa Juan, el Cardenal Bea y Malachi Martin.
Como Malachi Martin era secretario personal del Cardenal Bea y fue también un estrecho colaborador de Juan XXIII, no resulta sorprendente que Malachi se encontrara en esa situación.
Y durante ese viaje en automóvil, el mismo Papa Juan, en ese día de 1960, le dio el Secreto a Malachi.
Estaba escrito en una hoja de papel, no en las cuatro hojas de papel presentadas por el Vaticano en 2000.
Malachi leyó el Secreto inmediatamente, y en muchas ocasiones posteriores él habló del Tercer Secreto, aun cuando estaba bajo juramento de no divulgar explícitamente su contenido.
Pero cuando otra persona tocaba cuestiones del Secreto, él diría sí o no, si estaba en el Secreto o no, para cumplir con no divulgarlo.
Por ejemplo, en su última entrevista en vivo en los pasados años 90 en el show Art Bell, ante millones de oyentes, Malachi dijo que hay algo terriblemente horroroso en el Tercer Secreto.
Admitió que habrá una guerra mundial y un gran desastre en el cual morirán muchas personas.
Pero agregó que hay algo aún más horripilante que eso en el Secreto, aunque él no afirma explícitamente de que se trata.
LAS PALABRAS DE JUAN PABLO II
El Papa Juan Pablo II nos dio un indicio de cuáles son los contenidos.
En noviembre de 1980 él visitó la Catedral de Fulda, en Alemania, y allí habló del Tercer Secreto a un pequeño grupo.
Se le preguntó por qué aún no había sido revelado el Secreto, y él dio algunas respuestas.
Primero, el Papa dijo que no había sido revelado porque de su conocimiento surgen responsabilidades y mucha gente solo quiere conocerlo por razones de curiosidad.
Así, para evitar el sensacionalismo, él no quiso revelar el contenido del Tercer Secreto.
Pero luego – y aquí comenzamos a ver que el Secreto incluye aún más que la apostasía en la Iglesia – él también dijo que:
“es suficiente para usted saber que regiones íntegras de la tierra serán inundadas, con agua desbordando grandes regiones de la tierra, y que millones morirán de un momento al siguiente”.
Pero dijo que hay otra razón por la que él no quiso revelar el Tercer Secreto – y esa fue una clave en mi investigación de la cuestión – y es que él no quiso alentar a los comunistas a dar ciertos pasos.
Ahora ¿a qué pasos pudo referirse? Nosotros podemos conjeturar muy claramente que una cosa que podría alentar a los comunistas es la revelación que ellos podrían ganar la Guerra Mundial a la que Malachi Martin se refirió en la entrevista en Art Bell.
Alguna gente cuestionó si el Papa Juan Pablo II verdaderamente hizo en Fulda esas declaraciones sobre el Tercer Secreto. Pero esa objeción no puede ser sostenida.
En primer lugar, hubo una mujer periodista que tomó nota de todas las palabras del Santo Padre y publicó una trascripción en una revista llamada Stimme des Glaubens (La Voz de la Fe).
El Vaticano nunca ha cuestionado la exactitud de las citas en ese artículo.
Luego hubo un segundo testigo, un sacerdote alemán, que escribió palabra por palabra lo que dijo el Papa en esa ocasión; y más tarde dijo al Papa que había hecho eso, y el Papa se lo agradeció.
Ahora bien, hablo y leo alemán por mí mismo, y leí el texto en alemán preparado entonces por ese sacerdote, cuando viajaba cerca de Fulda, en 1983.
La Madre Superiora de una comunidad alemana de religiosas me mostró el texto y era idéntico al que había publicado la mujer periodista.
Por lo tanto, el sacerdote alemán y la mujer periodista dieron idéntico testimonio respecto de lo que el Papa había dicho en Fulda.
Palabra por palabra los textos fueron idénticos. Por eso, pienso que no puede haber dudas sobre la autenticidad de las declaraciones del Papa en Fulda.
Sor Mariana de Jesús Torres y Berriochoa
LO QUE AGREGA LA APARICIÓN DE NUESTRA SEÑORA DEL BUEN SUCESO
Allí es donde las piezas del rompecabezas del Tercer Secreto comienzan a encajar una con otra.
Primero, en lo que se refiere a las “otras apariciones marianas” de las que habló el Cardenal Ratzinger, tenemos la aparición mariana de Nuestra Señora del Buen Suceso en Quito, aprobada, en Ecuador de 1634.
En esa aparición, Nuestra Señora advirtió lo que precisamente el Tercer Secreto predice: una gran apostasía en la Iglesia.
Nuestra Señora dijo a la Venerable Madre Mariana de Jesús Torres que en el pasado siglo XIX y a lo largo de la mayor parte del siglo XX, la Iglesia cedería a una gran herejía.
El Sacramento del Matrimonio “será atacado y profanado” y la Masonería, que entonces estará en el poder, promulgaría leyes inicuas con el objetivo de abolir ese Sacramento, haciendo fácil a cualquiera vivir en pecado, fomentando la procreación de hijos ilegítimos sin la bendición de la Iglesia.
Entonces, Nuestra Señora advirtió,
“el espíritu cristiano decaerá rápidamente, extinguiendo la preciosa luz de la Fe, hasta alcanzar el punto que habrá una casi total y general corrupción de las costumbres (de la moral), y eso resultará en la falta de vocaciones sacerdotales y religiosas…”
Nuestra Señora del Buen Suceso advirtió además que durante ese tiempo:
“ya no se encontrará inocencia en los niños, ni modestia en las mujeres” y que “el clero secular (diocesano) dejará mucho que desear porque los sacerdotes se volverán negligentes en sus sagrados deberes…
Faltando un Prelado y Padre para guiarlos con amor paternal, bondad, fortaleza, sabiduría y prudencia, muchos sacerdotes perderán su espíritu, poniendo sus almas en gran peligro.”
Pero luego, en un paralelo directo con el Triunfo del Inmaculado Corazón, Nuestra Señora del Buen Suceso declaró que ese tiempo, el más oscuro en la historia de la Iglesia:
“marcará el arribo de Mi hora” y que Dios finalmente “pondrá fin a aquellos tiempos siniestros, enviando a esta Iglesia al Prelado que restaurará el espíritu de sus sacerdotes”.
Así, nosotros vemos aquí un estrecho paralelo con lo que indudablemente está revelado en el Tercer Secreto respecto a la apostasía en la Iglesia. .
Que seguirá en algún punto a la Consagración de Rusia, a la conversión de Rusia. .
Y “al fin” al triunfo del Inmaculado Corazón.
Muchos estudiosos de Fátima ya han conjeturado esto respecto al Tercer Secreto.
Hermana Agnes Katsuko Sasagawa
LAS APARICIONES DE AKITA SON UNA CONTINUACIÓN DE LAS DE FÁTIMA
Allí es donde precisamente las apariciones marianas completan el rompecabezas, al agregar al castigo espiritual el elemento de un castigo material.
En 1973 y durante varios años posteriores, en Akita, Japón, Nuestra Señora obró una serie de apariciones, aprobadas como auténticas por el obispo local luego de ocho años de investigaciones.
De lo más expresivamente, el propio Cardenal Ratzinger, como Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, juzgó esas apariciones dignas de creencia en 1988. . Y estaba claramente al corriente de esas apariciones cuando dio la entrevista a la revista Jesús.
Catholic World News informó el 11 de octubre de 2001 que Howard Dee, antiguo embajador filipino ante el Vaticano, dijo en una entrevista a la revista Inside the Vatican en 1998 que:
“Monseñor Ito, [obispo local de Akita, hoy fallecido] estaba seguro que Akita fue una extensión de Fátima, y el Cardenal Ratzinger me confirmó personalmente que los mensajes de Fátima y Akita, son esencialmente lo mismo.”
La misma historia de Catholic World News citó más adelante que
“tanto el Obispo Ito como el Cardenal Ratzinger declararon los mensajes y eventos de Akita como de origen sobrenatural y los calificaron como ‘dignos de creencia’”.
Teniendo en cuenta esas sorprendentes declaraciones del Cardenal Ratzinger, nosotros podemos considerar lo que Nuestra Señora de Akita dijo a la Hermana Agnes Katsuko Sasagawa el 13 de octubre de 1973 – en el aniversario mismo del Milagro del Sol – y permítanme citar esto palabra por palabra:
“Como te digo, si los hombres no se arrepienten y mejoran por sí mismos, el Padre infligirá un terrible castigo a toda la humanidad.
Será un castigo más grande que el diluvio, tal como uno nunca ha visto antes.
Caerá fuego del cielo y borrará una gran parte de la humanidad, los buenos tanto como los malos, no librándose ni los sacerdotes ni los fieles.
Los sobrevivientes se encontrarán tan desolados que envidiarán a los muertos.
Las únicas armas que quedarán para vosotros serán el Rosario y el Signo dejado por Mi Hijo.
Cada día rezad las oraciones del Rosario. Con el Rosario, rezad por el Papa, los obispos y los sacerdotes”.
Y aún más,
“La obra del demonio se infiltrará incluso dentro de la Iglesia de tal manera, que uno verá cardenales oponiéndose a cardenales, obispos contra obispos.
Los sacerdotes que Me veneren serán despreciados y enfrentados por sus cofrades… las iglesias y los altares saqueados.
La Iglesia estará llena de aquellos que aceptan compromisos y el demonio presionará a muchos sacerdotes y almas consagradas a dejar el servicio al Señor.”
Nuestra Señora de Akita
Así, nosotros vemos la combinación, en una aparición mariana aprobada, de dos elementos: la catástrofe material y la catástrofe espiritual.
Vemos la apostasía en la Iglesia– también predicha por Nuestra Señora del Buen Suceso – acompañada por un evento cataclismo que castiga a todo el mundo.
Aquí, como recién anoté, el Cardenal Ratzinger admitió al antiguo embajador filipino en el Vaticano que el Mensaje de Fátima y el Mensaje de Akita son esencialmente lo mismo.
Sin embargo, ni las primeras dos partes del Secreto de Fátima ni la visión del Tercer Secreto publicada en el 2000 dice lo que dijo Nuestra Señora de Akita.
En realidad, no tenemos ninguna palabra de Nuestra Señora agregada a la visión del Tercer Secreto.
Sin embargo, nosotros vemos llamas descendiendo hacia la tierra de las manos de un ángel vengador, y a Nuestra Señora haciendo retroceder las llamas cuando el ángel grita “penitencia, penitencia, penitencia”.
Noto el paralelo con el ángel blandiendo una espada, en primer plano, en la aparición de Nuestra Señora de Knock.
Pero, ¿no vendrá un tiempo en que Nuestra Señora ya no pueda volver atrás el fuego consumidor [y la espada] de la venganza del Cielo?
Eso, aparentemente, es lo que Nuestra Señora de Akita nos advirtió en 1973, a 56 años del Milagro del Sol.
Claramente, entonces, lo que hace a las dos apariciones – Fátima y Akita – “esencialmente” iguales debe encontrarse en las palabras faltantes de Nuestra Señora de Fátima que corresponden a las de Nuestra Señora de Akita.
Esas deberían haber sido la mismas “palabras de la Virgen” que el Vaticano no reveló en 1960, cuando dijo al mundo que el Tercer Secreto no sería revelado, como todos esperaron que ocurriera.
Sor Elena Aiello
SOBRE LA TERCERA GUERRA MUNDIAL
Aquí nosotros encontramos algunas piezas más del rompecabezas en las apariciones marianas.
Me estoy refiriendo a los mensajes de Nuestra Señora a la Hermana Elena Aiello, quien murió en 1961.
Ella fue muy renombrada por las revelaciones que había recibido de Nuestra Señora y fue grandemente estimada por el Papa Pío XII, aunque tal vez muchos no hayan escuchado de ella.
Nuestra Señora le reveló que Rusia emprendería una guerra repentina, que desbordaría a toda Europa.
Eso parecería que es claramente lo que el Papa Juan Pablo II quiso evitar no divulgando el Tercer Secreto, como dijo en Fulda, porque eso incitaría a los comunistas a hacer ciertas movidas – en otras palabras, a emprender la guerra contra el Occidente.
¿Pero cuál es la evolución de Rusia actualmente?
Si usted lee las publicaciones rusas, como yo lo hago, usted ve que en la misma Rusia no hay ningún misterio en cuanto a lo que está ocurriendo.
Nosotros tenemos una dictadura neo-Stalinista tomando forma, nosotros tenemos periodistas rusos quejándose de la dictadura, preguntado abiertamente ¿por qué, si supuestamente hay una democracia en Rusia, el Sr. Putin está planificando patente y públicamente la guerra contra las democracias de Occidente?
Y así, claramente, toda la evidencia lleva a la conclusión que Rusia se está preparando para la guerra contra el Occidente.
Putin alardea abiertamente que los nuevos misiles rusos pueden cambiar de curso a mitad de vuelo y evitar todas las defensas anti-misiles.
Rusia ahora está muy asociada con China Comunista, con la que ha forjado una masiva alianza militar, y con otras naciones todavía comunistas en el mundo.
Incluso a nivel de gabinete de gobierno de los Estados Unidos, se ha reconocido que Rusia y China son los que están ayudando a los estados terroristas, porque el terrorismo es simplemente una táctica que está siendo usada para distraer, debilitar y adormecer al Occidente respecto a la amenaza real a su seguridad.
Sobre este punto, hay otra profecía asombrosa del siglo XIX que parece resumir lo que hay en el Tercer Secreto.
No sugiero que sea autorizada, pero encaja con el resto del panorama.
Hubo un libro escrito en francés, compilado por un sacerdote en Francia, de nombre Padre Fattecelli o Fatticioli, no he leído verdaderamente el texto, pero tengo lo que he escuchado en una grabación.
El nombre del Libro es Day of Wrath: The Hand of Got Upon An Empire / El Día de Ira: La Mano de Dios sobre un Imperio.
Las revelaciones fueron hechas a un judío armenio, un tal Zacarías, que fue luego bautizado católico.
Ese libro, publicado a principios de los 1850, contiene revelaciones (hechas a Zacarías en los 1840) referidas a las dimensiones precisas del imperio comunista, Rusia y China y sus satélites.
Dice que habría una detente (distensión); que se habría alcanzado un acuerdo entre el Occidente capitalista y el Oriente marxista.
Luego, dice la profecía, los comunistas habrían vencido al Occidente, disparando sus misiles – ellos habrían disparado sus misiles – (¡y usó la palabra “misiles” en los años 1840!).
Ellos habrían disparado sus misiles sobre las costas de Norteamérica – desde posiciones de Rusia y China – y el mundo occidental habría sido llevado a la esclavitud, después de lo cual, “el primogénito del infierno gobernará el mundo”.
Una vez más, no digo que la profecía sea autorizada, sino solo que es consistente con la otra evidencia que nosotros tenemos de grandes catástrofes profetizadas en el Tercer Secreto.
Y esa profecía de Zacarías explicaría lo que Malachi Martin dijo en el show Art Bell, como mencioné antes.
Malachi dijo entonces que había algo terriblemente horroroso en el Tercer Secreto – más horroroso que la III Guerra Mundial.
Y la cosa horrorosa que Malachi Martin refirió fue esto: después que Rusia gane la guerra, existiría la apariencia que el demonio habría derrotado a Cristo.
EL FUEGO CAYENDO DEL CIELO NO SON MISILES
Puede parecer lógico que ese disparo de misiles nucleares, es lo que nuestra Señora de Akita quiere significar por fuego cayendo del cielo y aniquilando una gran parte de la humanidad.
Pero no es realmente correcto.
El fuego cayendo del cielo será un evento sobrenatural, como está profetizado por Sor Elena Aiello y por la Beata Ana María Taiggi.
Pero ahora un detalle adicional para completar nuestro rompecabezas: las revelaciones a Ana Catalina Emmerich, quien vivió a principios del siglo XIX. Ella fue beatificada en octubre de 2004 por el Papa Juan Pablo II.
En las revelaciones hechas a la Beata Ana Catalina Emmerich, Nuestra Señora manifiesta que habrá una falsa iglesia de las tinieblas, mientras la verdadera Iglesia continuará existiendo.
Esa falsa iglesia será una iglesia ecuménica. Reunirá a todas las comunidades eclesiales y sectas. . Y habrá un falso papa y un verdadero papa reinantes al mismo tiempo, tal como fue durante el Gran Cisma de Occidente en siglo XIV.
Incluso las religiones no cristianas tendrán alguna afiliación a esa llamada gran iglesia mundial, universal.
Muy asombrosamente, en su carta apostólica sobre el Movimiento ‘Le Sillon’, en Francia, el Papa San Pío X predijo exactamente la aparición de esa falsa religión cuando habló sobre:
“El gran movimiento de apostasía que se está organizando en cada país para el establecimiento de una Unica Iglesia Mundialque no tendría dogmas, ni jerarquía, ni disciplina de pensamiento, ni freno para las pasiones.
Y que, bajo el pretexto de libertad y dignidad humana, traería al mundo (si tal iglesia pudiera triunfar) el reinado de la astucia y de la fuerza legalizadas, y la opresión de los débiles, y de todos aquellos que trabajan y sufren”.
Así, la conflagración global próxima estará relacionada con esa Única Iglesia Mundial que está apareciendo para oponerse a la verdadera Iglesia.
¿SERÁ REVELADO EL TERCER SECRETO ALGUNA VEZ?
Por supuesto que será revelado, pues el hombre no puede ocultar para siempre un secreto confiado por Dios mismo a Su Santísima Madre para beneficio de todo el mundo.
La cuestión no es si, sino cuándo será finalmente revelado.
Sin pretender ninguna clase de exactitud profética, puedo decir que cuando estuve en Fátima en 1991, fui informado que las carmelitas de Fátima habían recibido noticias de la Hermana Lucía y de sus hermanas del convento de Coimbra.
Nuestra Señora se había aparecido a la Hermana Lucía poco tiempo antes de mayo de 1991 y le había dicho que el Tercer Secreto iba a ser revelado durante el curso de una guerra de gran magnitud.
Así, la guerra estallará, será una guerra repentina, será una blitzkrieg (guerra relámpago), y la verdadera Iglesia será arrojada a las catacumbas.
Pero, al principio de esa guerra, cuando el Papa se dé cuenta que conservar oculto el Tercer Secreto ya no tiene sentido, porque los rusos ya habrán hecho su movimiento, él revelará el texto faltante del Tercer Secreto.
El papa que esté reinando para el tiempo de esa guerra querrá probablemente consagrar Rusia después de revelar íntegro el Tercer Secreto, pero como el Rey Luís XVI, él no podrá hacer la Consagración en tiempo porque las calamidades golpearán muy rápidamente.
No habrá suficiente previsión, por eso el Papa no podrá organizarla en tiempo. El deberá ir a ocultarse.
Y si eso ocurre, ese Papa será encontrado y muerto por las fuerzas armadas del enemigo, tal como nosotros vemos en la visión.
Sobre este punto, podría referirlo al testimonio del estigmatizado romano Antonio Ruffini.
El Papa Pío XII autorizó la bendición de una capilla en el lugar donde Ruffini recibió los estigmas en la Vía Apia, y el Padre Tomaselli, escribió un pequeño libro sobre él – un relato corto de la vida de Ruffini.
Yo mismo traté a Ruffini durante muchos años. A principios de los 1990 preguntaron a Ruffini a boca de jarro en su casa:
“¿Es Juan Pablo II el Papa que va a hacer la Consagración de Rusia?”
Él contestó: “No, no es Juan Pablo II. Tampoco va a ser su inmediato sucesor, sino uno después de ese.
El será quien consagrará Rusia”.
Eso es, el sucesor de Benedicto, durante ese tiempo de guerra mundial y persecución de la Iglesia, será el que finalmente haga la Consagración, y entonces comenzará la restauración y el triunfo del Inmaculado Corazón.
Padre Paul Kramer
EN RESUMEN: DEPENDE DE LA IGLESIA
Por la evidencia que hemos tratado, mucho de eso parece claro: la Iglesia sufrirá una gran apostasía entre muchos de Sus miembros, lo cual claramente ya está ocurriendo. . Luego habrá una guerra mundial en la cual morirá mucha de la población mundial, la Iglesia será perseguida como nunca antes y llevada a ocultarse, y Roma misma posiblemente pueda ser devastada.
Ese es el guion en el que encaja perfectamente la visión del Tercer Secreto, donde el Papa es ejecutado y prominentes hombres de iglesia y laicos han sido exterminados en una ciudad medio en ruinas.
Por eso, cuando el Cardenal Ratzinger habló del Tercer Secreto en 1984, mencionó los peligros “para la fe y la vida de los cristianos, y por lo tanto [la vida] del mundo”.
Tanto la Iglesia como el mundo sufrirán una catástrofe. Dada la admisión del Cardenal Ratzinger que Fátima y Akita son esencialmente el mismo mensaje, no parece razonable ninguna otra conclusión.
Por eso, cuando uno considera las apariciones de Nuestra Señora del Buen Suceso, de Nuestra Señora de Fátima, y de Nuestra Señora de Akita, las declaraciones de Juan Pablo II en Fulda, las admisiones del Cardenal Ratzinger, del Cardenal Ciappi y las revelaciones de Malachi Martin todo cierra.
Se suman a la misma conclusión: la apostasía en la Iglesia llevando a un horrible castigo global, con mucha de la población mundial extinguida casi instantáneamente.
¿No hay esperanza, entonces?
Al contrario, como dijo Nuestra Señora del Buen Suceso, hay una gran causa para la esperanza, aún si nosotros no evitamos el peor suceso.
Nuestra Señora de Fátima misma dijo que Su Inmaculado Corazón triunfará, no importa cuán tarde se haga finalmente la Consagración de Rusia.
Incluso, si ocurre lo peor, las naciones antaño católicas redescubrirán su fe bajo persecución y en medio de la desolación por la guerra. .
Entonces el Papa consagrará Rusia al Inmaculado Corazón y Rusia será convertida.
Los invasores asiáticos e islámicos serán expulsados de Europa, con la ayuda de los invasores rusos convertidos (ver Profecía de San Juan Bosco, como se explicó en Fatima: Tragedy and Triumph, pp. 319-355).
Dios intervendrá y veremos entonces el triunfo del Inmaculado Corazón de María.
Pero la pregunta se mantiene: ya que las profecías de Nuestra Señora son, sin embargo, condicionales, ¿evitaremos lo peor de esas profecías antes de que ocurra Su Triunfo, o tendremos que sufrir primero todas las consecuencias?
Eso depende íntegramente de que el Papa y los obispos hagan lo que pidió Nuestra Señora de Fátima. .
Y eso a su vez depende de que los obispos, sacerdotes, religiosos y laicos hagan suficiente oración y penitencia y reforma de sus propias vidas.
https://youtu.be/JQlR5oYicXc
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Las apariciones de 1917 de la Virgen María a tres niños en Fátima nos ofrecen un ejemplo formidable de intervención del amor de Nuestra Señora.
Para advertir al mundo las próximos amenazas.
Y ofrecer remedios eficaces para evitar las guerras y lograr la paz.
Pero Sus pedidos no los hemos podido operar razonablemente bien dentro de la Iglesia. .
Por un tema que ha estado en discusión por casi un siglo, sobre la Consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María.
Los llamados “fatimistas” han afirmado que los males que está sufriendo este mundo, y sobre todo la Iglesia, podrían evitarse.
Si sólo se realizara correctamente la consagración de Rusia por el Papa y los obispos del mundo, pedida por Nuestra Señora en la visión de la Hermana Lucía en Tuy.
Por «correctamente», significan mencionar a Rusia por su nombre y que estén involucrados todos los obispos del mundo.
EL PEDIDO
El 13 de Julio de 1917 Nuestra Señora dijo a los pastores de Fátima,
“Si la humanidad no se enmienda, entonces Dios va a castigar al mundo por sus crímenes por medio de la guerra, del hambre y de las persecuciones a la Iglesia y al Santo Padre.
Vendré a pedir la Consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión Reparadora de los Primeros Sábados”
La promesa hecha por la Virgen a Lucía se cumplió el 10 de diciembre de 1925.
Lucía era entonces una hermana postulante en el Convento de las Doroteas en Tuy, España.
En esta ocasión, apareció Nuestra Señora junto con el Niño Jesús, quien habló primero a Lucía:
«Ten compasión del Corazón de tu Santísima Madre, cubierto de espinas que los hombres ingratos colocan en él en cada momento, mientras que no hay nadie que haga un acto de reparación para retirarlos por ella».
Y le agregó:
«Dame consuelo, al menos, y haz saber en mi nombre que prometo asistir a la hora de la muerte, con las gracias necesarias para la salvación.
Todos los que en el primer sábado de cinco meses consecutivos confiesan sus pecados, reciben la Santa Comunión, reciten cinco décadas del Rosario y me acompañen durante quince minutos meditando sobre los misterios del Rosario con el propósito de reparar a mi Inmaculado Corazón”.
El 1 de noviembre de 1927, la hermana Lucía escribió una carta a doña María de Miranda, su madrina, explicando esta devoción:
“No sé si ya sabes acerca de la devoción reparadora de los cinco sábados al Inmaculado Corazón de María.
Como todavía es reciente, me gustaría inspirarte para que lo practiques, porque es solicitada por Nuestra querida Madre celestial y Jesús ha manifestado el deseo de que se practique.
Además, me parece que serías afortunada, querida madrina, no solo por saberlo y darle a Jesús el consuelo de practicarla, sino también para que otras personas la conozcan y la acepten.
Consiste en esto: durante cinco meses el primer sábado, recibir a Jesús en comunión, recitar un rosario, acompañar a Nuestra Señora durante quince minutos mientras medita en los misterios del rosario, y hacer una confesión.
La confesión se puede hacer unos días antes, y si en esta confesión anterior ha olvidado la intención (requerida), se puede ofrecer en la siguiente confesión, siempre que el primer sábado se reciba la Sagrada Comunión en estado de gracia, con la intención de reparaciones por ofensas contra la Santísima Virgen y que afligen a Su Corazón Inmaculado.
Me parece, mi querida madrina, que somos afortunados de poder darle a Nuestra querida Madre Celestial esta prueba de amor, porque sabemos que Ella desea que se la ofrezcan.
En cuanto a mí mismo, declaro que nunca estoy tan feliz como cuando llega el primer sábado.
¿No es cierto que nuestra mayor felicidad es pertenecer enteramente a Jesús y a María y amarlos a ellos solos, sin reservas?
Vemos esto claramente en la vida de los santos…
Estaban felices porque amaban, y nosotros, mi querida madrina, debemos buscar amar como ellos lo hicieron”.
Pero esto sigue siendo opacado por la polémica si se consagró o no Rusia al Inmaculado Corazón de María.
LA CONSAGRACIÓN DE JUAN PABLO II Y LA DECLARACIÓN DE SOR LUCÍA
En diciembre de 1983, el Papa Juan Pablo II celebró consultas con Sor Lucía, la única vidente de Fátima que aún vivía, sobre cumplimiento de los deseos de Nuestra Señora.
Envió cartas a todos los obispos del mundo para unirse a él en la consagración de Rusia y el mundo el 25 de marzo de 1984.
La consagración del mundo fue realizada, y el Papa mencionó diplomáticamente, tal vez con el fin de mitigar las continuas amenazas de la Unión Soviética al Movimiento Solidaridad en Polonia:
“En una manera especial confiamos y consagramos a aquellos hombres y aquellas naciones que tienen necesidad particular de esta consagración”.
Sin embargo en ese último intento en forma que un Papa realizó, San Juan Pablo II no mencionó explícitamente el nombre de Rusia. .
De modo que estrictamente y hablando al pie de la letra, la consagración no se había realizado tal como la Virgen le hubo pedido según Sor Lucía Dos santos.
Pero posteriormente, la Hermana Lucía escribió que el Papa había cumplido con las peticiones de la Virgen y que el “Cielo” había aceptado su consagración.
Varios años más tarde, el mundo fue testigo de la caída del muro de Berlín y el desmantelamiento de la Unión Soviética.
La prometida «conversión» de Rusia parece haber comenzado, con la libertad religiosa, una proliferación masiva de iglesias, monasterios y seminarios, y una asistencia a la iglesia casi comparable a la de Portugal , donde, como Nuestra Señora prometió a la Hermana Lucía, «se conservará siempre la fe.»
¿HA HABIDO UNA CONSPIRACIÓN EN LA QUE INCLUSO PARTICIPÓ SOR LUCÍA?
Sin embargo los fatimistas mantienen que la consagración se tiene que hacer mencionando a Rusia por su nombre.
Y que los cinco minutos que pasen haciendo esto traerán consigo una milagrosa conversión como el mundo nunca ha visto.
Incluso se ha publicado una novela al respecto, Russian Sunrise, en la que aparece el personaje Padre Nicholas Gottschalk, quien finalmente convence al Papa y sigue su consejo, lo que lleva a cambios milagrosos en Rusia.
La supuesta “conspiración de silencio” del Vaticano no termina ahí.
Porque de acuerdo a los Fatimistas, al Tercer Secreto de Fátima, revelado bajo el pontificado del Papa Juan Pablo II en 2000, le falta una segunda parte esencial.
Sor Lucía misma, cuando reveló el tercer secreto en 1944 y lo envió al Vaticano en 1957, dijo que sólo pudo dar los detalles de lo que se le mostró en realidad.
Pero que no se le permitió dar la explicación que la Virgen le dio a conocer a ella.
Los Fatimistas sospechan que el “texto faltante” se refiere a una escena apocalíptica. .
O bien tal vez a la visión en la que la Virgen explica con sus propias palabras cómo una crisis interna de fe y disciplina en la Iglesia es acompañada de un castigo de todo el mundo.
Según ellos, el secreto preveía los cambios del Concilio Vaticano II, sobre todo en la liturgia y el diálogo ecuménico, como parte de la “gran apostasía” que líderes de la Iglesia aparentemente se niegan a reconocer.
ESTAS DISCUSIONES SOBRE UNA CONSPIRACIÓN DISTRAJERON CUMPLIR EL RESTO
Teorías conspirativas aparte, deberíamos centrarnos en el mensaje esencial y práctico de Fátima.
En las apariciones de mayo y junio 1917 en Fátima, se pidió a los tres niños rezar el rosario todos los días para el final de la Primera Guerra Mundial y la paz para el mundo. .
Esta es una petición tan importante como la de la Consagración a de Rusia al Inmaculado Corazón de María.
Y el 10 de diciembre de 1925, la Virgen también hizo otra petición extraordinaria de igual rango, con promesas: la de los Cinco Primeros Sábados.
“Yo prometo asistir en la hora de la muerte, con las gracias necesarias para la salvación. .
A todos los que, en el primer sábado de cinco consecutivos meses, se confiesen, reciban la Santa Comunión, reciten cinco décadas del Rosario. .
Y me hagan compañía durante 15 minutos meditando los 15 misterios del Rosario, con la intención de hacerme una reparación”.
¿Por qué cinco Primeros Sábados?
Para reparar las cinco blasfemias contra el Inmaculado Corazón de María.
El 29 de mayo de 1930, Nuestro Señor le explicó a Sor Lucíacuáles eran estas blasfemias:
1 – Contra la Inmaculada Concepción de María
Aunque el propio Martin Lutero sostuvo la ausencia de pecado en toda la vida de María y probablemente también su Inmaculada Concepción, los protestantes en general niegan esto.
Y lo hacen debido a lo que consideran la falta de confirmación bíblica explícita.
Muchos Ortodoxos dudan, porque implicaría una limpieza del pecado original antes de la llegada del Redentor, y no lo han podido solucionar teológicamente como los católicos.
2 – Contra la Virginidad Perpetua de María
Aunque Lutero, Calvino y Zwinglio afirmaron la virginidad perpetua de María, la mayoría de los protestantes ahora niegan esto.
Suponiendo que las referencias a los «hermanos» y «hermanas» de Jesús en los Evangelios tienen que ver con hermanos biológicos en lugar de, como se entendía en esa época a primos y otras relaciones.
¡Como si, después de dar a luz al mismo Hijo de Dios, María hubiera estado interesada en tener otros niños!
¡O como si María hubiera tenido otros hijos que ninguno de ellos estuvo dispuesto a cuidar de ella después de la crucifixión, porque al parecer sólo San Juan fue la única persona disponible¡.
3 – Contra Su divina maternidad y la maternidad de toda la humanidad
Aunque Lutero, Calvino y Zwinglio desalentaron la veneración de los santos, hicieron una excepción para la Virgen María.
Los Ortodoxos también han reverenciado tradicionalmente a la Theotokos (“portadora de Dios”).
Sin embargo, ahora muchos Protestantes ignoran a María y la posibilidad de su intercesión.
Incluso muchos fundamentalistas fervientes dedicados a la Biblia son hostiles, considerando que la honra a María es perjudicial para la fe en Cristo.
Y lo peor, esto se está extendiendo en el catolicismo, incluso entre el clero.
4 – Contra el intento de implantar públicamente en los corazones de los niños la indiferencia, el desprecio e incluso el odio hacia su Inmaculada Madre
Es triste contemplar la actitud de algunos protestantes que piensan que están haciendo un servicio a Dios, inculcando hostilidad a María en sus hijos.
Y aún más triste pensar en los católicos de tendencias liberales o feministas que tienen miedo de que cualquier exposición a María le daría a sus hijos conceptos ideológicamente inaceptables de la feminidad.
5 – Contra las ofensas de los que la insultan directamente profanando sus imágenes sagradas
Hemos visto numerosos casos de esto crecientemente en los últimos años, esto es sólo una pequeñísima muestra:
-una pintura en 1999, incluida en un programa del Brooklyn Museum, «Sensation«, que representa a la Virgen María manchada de estiércol de elefante;
-algunos neozelandeses en 2011 construyeron una valla publicitaria con la Santísima Virgen con una prueba de embarazo en una mano y tapándose la boca con sorpresa con la otra;
-protestantes de Belfast en 2012 colocaron una estatua de la Virgen María en la cima de una hoguera en sus celebraciones de Shankir;
-en 2014 un artista belga realizó una exposición blasfema denominada ‘Desflorando a la Madonna’, donde exponía una imagen congelada de la Virgen María que producía olores vaginales de mujer al descongelarse;
-también en 2014 el ISIL destruyó la estatua de María en la iglesia Virgen María en Mosul, y voló la iglesia;
-en Perugia, Italia, cinco musulmanes destruyeron la estatua de María en la capilla de San Bernabé, y orinaron sobre ella.
Estos incidentes son cada vez más frecuentes.
Pero es un fenómeno que se ha ido extendiendo especialmente por el lado de las feministas pro aborto, que ‘satanizan’ la figura de María.
¿QUÉ ESTÁ PASANDO CON LOS CATÓLICOS LOS SÁBADOS?
A pesar de ser un día en que mucha gente no trabaja, los sábados son de los días que los catolicos van menos a misa.
¿Pero están informados de este pedido de la Virgen María y del Señor?
¿O son pocos los católicos interesados en cumplir con la solicitud del cielo para la reparación de las múltiples ofensas contra la Santísima Virgen?
¿Cuántos han hecho incluso la secuencia de los Cinco Primeros Sábados una vez, con el fin de aprovechar las gracias extraordinarias prometidas por María?
Es más, ¿cuántos católicos dicen un rosario diario, que fue la primera y seguramente la petición más importante y sencilla de Nuestra Señora de Fátima?
Las cada vez más frecuentes blasfemias y ofensas contra la Santísima Virgen hacen más urgente ahora cumplir el mandato del cielo para reparar los insultos al Inmaculado Corazón de María.
Lamentablemente la discusión sobre la conspiración o no sobre el tercer secreto de Fátima ha hecho perder de vista la necesidad de hacer la Comunión Reparadora de los Cinco Primeros Sábados y recitar el rosario, aunque sobre estos pedidos no hay ninguna discusión.
LA TEORÍA DE LA CONSPIRACIÓN A QUE ALUDEN LOS FATIMISTAS ES UN TEMA MÁS COMPLICADO
Los fatimistas están enfrascados en una reivindicación que actualmente hace agua por lo menos por varios lugares.
El principal es que en 1984 el Papa Juan Pablo II hizo una consagración, pero aunque imperfecta, Sor Lucía dice que fue aceptada por el cielo. . Y la prueba de su eficacia es que en 1989 cayó el comunismo real sin disparar un solo tiro, se desintegró.
A pesar de esto los fatimistas siguen afirmando que la Virgen lo pidió de una manera y no se hizo así, por lo que habría que hacerlo bien, como Dios manda.
Y en esto radica su fortaleza formal, porque objetivamente nunca se realizó la consagración tal como la pidió María.
Pero deben admitir que las cosas han cambiado políticamente en estos 100 años en el mundo.
Y que no es la lógica del “cielo” pedir que creamos en soluciones mágicas, o sea que haciendo algo que no está directamente relacionado con lo que queremos solucionar, se logre solucionarlo.
La Rusia de hoy no aparece como el “reservorio del mal”, hasta quizás para algunos sea lo contrario. .
Y es dudoso que consagrándole Rusia al Inmaculado Corazón de María se logre que los cristianos de occidente abandonen su vida pecadora, que los gobiernos occidentales dejen de expulsar al cristianismo de sus sociedades y los islamistas dejen de matar cristianos.
Las crisis espirituales son claras, de la misma forma que los enemigos están localizados, y la solución para la época de la Unión Soviética probablemente no sea pertinente ahora.
Pero la solución que María ofreció en Fátima, sobre la comunión reparadora, que lamentablemente fue en el mismo paquete que la consagración de Rusia, sigue siendo totalmente pertinente y sin discusión.
No deberíamos seguir poniendo como centro no resuelto de las apariciones de Fátima la existencia o no de una conspiración sobre el tercer secreto.
Con esto no decimos de no seguirlo discutiendo, sino quitarle su centralidad.
O sea, poner énfasis en promover lo que ha quedado escondido por la otra discusión: el rosario todos los días y la comunión reparadora de los cinco primeros sábados.
Y en este sentido habría que felicitar a los Heraldos del Evangelio que se preocupan explícitamente de convocar a los fieles en todos los países donde están a la Comunión Reparadora de los 5 Primeros Sábados.
Naturalmente todo lo dicho es un tema discutible y merece discernimiento.
En Agosto de 1931, Jesús aparece a la hermana Lucía.
Para volver a pedir la Consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María.
Como había pedido Su Madre en las apariciones de Fátima.
Esta parte del secreto de Fátima es la más controvertida en la actualidad. .
Porque hay una corriente, la de los fatimistas, que dicen que no se realizó la consagración de Rusia. .
Mientras que en el Vaticano dice que la Consagración realizada por Juan Pablo II tuvo ese efecto y el Cielo la aceptó.
En agosto de 1931, debido a una enfermedad, la Hermana Lucía estaba pasando una temporada en una casa amiga en Rianjo, España, una pequeña ciudad marítima cercana a Pontevedra, para descansar y recobrarse.
Fue en la capilla de allí que la Mensajera de Fátima iba a recibir una vez más una comunicación del Cielo.
Nuestro Señor se quejó a la Hermana Lucía por la tardanza de Sus ministros, quienes demoraban la Consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María.
Como había pedido Nuestra Señora de Fátima el 13 de junio de 1929, dos años y dos meses antes.
El 13 de junio de 1929 María de aparece a Sor Lucía en Tuy, España y le dice lo que Lucía anotó por escrito de las palabras utilizadas por Nuestra Señora para pedir la Consagración de Rusia:
“Ha llegado el momento en que Dios pide que el Santo Padre, en unión con todos los obispos del mundo, realice la consagración de Rusia a Mi Corazón Inmaculado, prometiendo la salvación por este medio”.
La Hermana Lucía informó a su Obispo la importante revelación: 29 de agosto de 1931.
Señor Obispo: mi confesor me manda que participe a V. Ex.cia lo que hace poco ocurrió entre mí y Nuestro Buen Dios: pidiendo a Dios la conversión de Rusia, de España y Portugal, me pareció que su Divina Majestad me dijo:
‘Me consuelas mucho pidiéndome la conversión de esas pobres naciones.
Pídelo también a mi Madre, diciendo muchas veces: Dulce Corazón de María, sed la salvación de Rusia, de España y de Portugal, de Europa y del mundo entero.
‘Y otras veces: por vuestra pura e Inmaculada Concepción, oh María, alcanzadme la conversión de Rusia, de España, de Portugal, de Europa y del mundo entero.
‘Participa a Mis ministros que, en vista de que siguen el ejemplo del Rey de Francia, en la dilación de la ejecución de mi petición, también lo han de seguir en la aflicción. Nunca será tarde para recurrir a Jesús y a María.’
En otro texto ella escribió,
Mas tarde, por medio de una comunicación íntima, Nuestro Señor me dijo, quejándose:
-No han querido atender Mi petición… Al igual que el Rey de Francia se arrepentirán, y la harán, pero ya será tarde. Rusia habrá ya esparcido sus errores por el mundo, provocando guerras y persecuciones a la Iglesia.
¡El Santo Padre tendrá que sufrir mucho!.
Nuestro Señor estaba haciendo aquí una referencia explícita a los pedidos del Sagrado Corazón hechos el 17 de junio de 1689 al Rey de Francia, por intermedio de Santa Margarita María de Alacoque.
Como resultado del rechazo del Rey Luis XIV -al igual que del rechazo tanto de su hijo como de su nieto, los reyes Luis XV y Luis XVI- a consagrar públicamente Francia al Sagrado Corazón de Jesús, como fue pedido por el Cielo por intermedio de un reconocido santo francés de aquel tiempo, la Contra-Iglesia, protestante y masónica, llevó a cabo el gran alzamiento de la Revolución Francesa.
El 17 de junio de 1789, (Fiesta del Sagrado Corazón) exactamente a cien años del día en que Santa Margarita María había escrito el gran designio del Cielo para el Rey, se alzó el Tercer Estado y se proclamó una Asamblea Nacional, despojando al Rey Luis XVI de su poder legislativo.
El 21 de enero de 1793, Francia, ingrata y rebelde contra su Dios, se atrevió a decapitar a su Rey cristiano como si fuera un criminal.
En Rianjo, Jesús nos advierte que ese oscuro capítulo de la historia se repetirá, y esta vez los ministros de Su Iglesia -los Obispos, y tal vez incluso el Papa mismo-, estarán entre sus desventuradas víctimas.
Pareciera que esa ejecución del Papa, “el Obispo vestido de blanco”, junto con otros obispos, sacerdotes, religiosos y laicos – como si fueran criminales – es lo que está previsto en la visión de Fátima revelada el 26 de junio de 2000.
LA REVELACIÓN Y PEDIDOS QUE SE CIERRAN EN RIANJO
Las dos visiones de Jacinta sobre el Santo Padre, tal como las transmite Lucía al comienzo de sus Terceras Memorias, están en relación estrecha con el secreto del 13 de julio de 1917.
Como lo muestran claramente las preguntas que hace Jacinta a su prima, después de habérselas anunciado: he aquí las visiones tal como Sor Lucía nos las relata al principio de sus Terceras Memorias (op. cit. p. 113-114).
Primera visión:
«… Jacinta me llamó». (la de la derecha en la foto)
–¿Tu no has visto al Santo Padre?
– “No» – «Yo no sé cómo sucedió, he visto al Santo Padre en una casa muy grande, arrodillado ante una mesa, con las manos en la cara y llorando.
En el exterior de la casa había mucha gente y algunos le arrojaban piedras, otros lo maldecían y le decían muchas palabras feas.
¡Pobrecito el Santo Padre!
¡Tenemos que rezar mucho por él! Ya he dicho cómo un día dos sacerdotes nos pidieron que rezáramos por el Santo Padre y nos explicaron quién era el Papa.»
«Jacinta me preguntó enseguida:»
–“¿Es el mismo que vi llorar y del cual esta Señora nos habló en el secreto?”
– «Es el mismo«, respondí».
Esta visión hace pensar en una rebelión proveniente del interior de la Iglesia, por parte del rebaño, movido por orgullo y odio. .
En violenta ruptura de la autoridad doctrinal de la Santa Iglesia. .
Lo que hace pensar inmediatamente en el progresismo y el modernismo.
Segunda visión:
«En otra ocasión, íbamos a Lapa do Cabeço.
Al llegar, nos arrodillamos para rezar las oraciones del Ángel, pasado un cierto tiempo, Jacinta se puso de pié, y me llamó:
– «¿No ves todas esas rutas, todos esos caminos y campos llenos de gente que llora de hambre y no tiene nada que comer?
¿Y al Santo Padre, en la Iglesia, rezando ante el Corazón Inmaculado de María?
¿Y toda esa gente que reza con él?
– Varios días más tarde, me preguntó:
– «¿Puedo decir que he visto al Santo Padre y a toda esa gente?»
– «¡No! ¿no ves que eso forma parte del secreto y que así pronto se descubriría todo?»
– «Está bien, no diré nada».
Parece necesario, para comprender la doble significación de esta visión, releer algunos extractos de una carta de Sor Lucía del 12 de abril de 1970, a su amiga María Tersa da Cunha.
Allí escribe:
«Nuestra Señora pidió y exigió que recemos el Rosario todos los días, repitiendo lo mismo en todas sus apariciones. .
Como para prevenirnos a fin de que, en estos tiempos de desorientación diabólica, no nos dejemos engañar por falsas doctrinas, que disminuyen la elevación del alma a Dios, por la oración… “ (¡el texto publicado está cortado en este lugar!).
“El Rosario es, para la mayor parte de las almas que viven en el mundo, como el pan espiritual de cada día, y quitarles esta oración o apartarlas de ella, es decir, disminuir en los espíritus la estima y buena fe con que lo rezan es, en el campo espiritual, lo mismo o peor aún, ya que la parte espiritual es superior a la material.
Yo diría que como sí en el campo material se privara del alimento necesario para la vida física”
(Padre Antonio María Martins, S.J.: «Documentos de Fátima.», Porto, 1976, p. 453, traducción personal según el original portugués).
Según esta carta de Lucía (cuya publicación en el documento del Cardenal Ratzinger que ha sido severamente censurada: ¡está cortada en tres lugares!), parece que la terrible hambruna descrita en la visión de Jacinta, puede tomarse no solamente en sentido físico, sino también en sentido espiritual.
Debido a la desorientación diabólica, el rebaño se encuentra abandonado por sus pastores legítimos, infieles a su vocación, y ya no es alimentado espiritualmente.
“Los niños pidieron pan, y no había nadie para partírselo” (Tren. IV, 4).
El castigo de esta infidelidad es una gran hambruna física, sin duda en el cuadro de una gran guerra todavía por venir, dirigida ante todo contra la Iglesia y las almas consagradas.
Por otra parte es cierto que Lucia, en una copia del texto de esta visión destinada a uno de sus directores espirituales, el padre Gonçalves, ofrece una variante al hablar de
«…todas esas rutas, todos esos caminos y campos llenos de gente muerta, perdiendo sangre».
Comparemos esto con la visión divulgada el 26 de junio: todas las almas consagradas son asesinadas por un grupo de soldados al pie de la gran cruz de troncos rústicos.
La situación será entonces tan terrible que el Papa se someterá finalmente al pedido de Nuestra Señora de Fátima consagrando Rusia al Corazón Inmaculado.
Capilla de la Aparición de Fátima
Llegamos así a la revelación de Rianjo de agosto de 1931, que Lucía relató a su obispo por carta el 29 de agosto de 1931:
«( …) Como pedía a Dios la conversión de Rusia, de España y de Portugal, me ha parecido que su Divina Majestad me decía: (…). .
Haz saber a mis ministros que están siguiendo el ejemplo del rey de Francia retrasando la ejecución de mi pedido y que lo seguirán también en la desgracia. . Pero jamás será demasiado tarde para recurrir a Jesús y a María».
En 1936, cuando Lucía redactó, para el padre Gonçalves, el relato detallado de la aparición de Tuy que tuvo lugar el 13 de junio de 1929, durante la cual Nuestra Señora había pedido formalmente la consagración de Rusia a su Corazón Inmaculado, ella recuerda la revelación capital de Rianjo en términos diferentes:
«Más tarde, por medio de una comunicación íntima, Nuestro Señor me dijo, lamentándose:
¡No han querido escuchar mi pedido!… .
Como el rey de Francia, se arrepentirán, y lo harán, aunque será tarde. .
Rusia habrá ya propagado sus errores al mundo, provocando guerras y persecuciones contra la Iglesia. .
El Santo Padre tendrá mucho que sufrir».
Es gracias a la revelación de Rianjo que se comprenden las dos visiones de Jacinta:
El Cielo, previendo que los pedidos de Nuestra Señora no serían escuchados, ha querido ciertamente mostrar a Jacinta en qué situación extremadamente trágica sería finalmente realizada la consagración de Rusia. .
Por un Papa completamente solo y abandonado por todos, asediado en su palacio, y en medio de una guerra terrible, flagelo de la cólera de Dios para castigar la infidelidad de los hombres y ante todo de sus ministros sagrados. .
Así Jacinta vio un Papa al borde de la —desgracia—, resolviendo muy tarde, pero no demasiado tarde, realizar la consagración de Rusia.
Siendo la beata Jacinta, la que hizo más sacrificios por el Santo Padre de los tres pastorcitos, el Cielo, recompensándola con estas visiones, quiso sin ninguna duda, hacer que redoblase su generosidad en sus oraciones y sacrificios por Él.
UNA PROFECÍA SOBRE EL CUMPLIMIENTO DE LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA
Varios han sido los papas que han intentado la consagración tal como la pidió exactamente la Virgen según Lucía.
Pero nadie la ha hecho estrictamente de esa forma.
Hay una profecía según relata el Padre salesiasno Giuseppe Tomaselli, quien a principios de 1990, le preguntó al estigmatizado italiano Antonio Ruffini, (1907-1999), muy venerado y bendecidos por Pío XII y Paulo VI, si sería Juan Pablo II el Papa que consagraría Rusia al Corazón Inmaculado de María, a lo que respondió que
“No, no es Juan Pablo II. No será su sucesor inmediato tampoco, sino el siguiente. .
Él es quién consagrará finalmente a Rusia.” -Interview P. Kramer Crusader # 82-.
Es decir, será el sucesor de Benedicto XVI, durante un tiempo de guerra mundial y persecución a la iglesia, quien finalmente podrá hacer la consagración.
Quien procederá a hacerla y comenzará entonces la restauración y el triunfo del Corazón Inmaculado.
Posteriormente, al final de su vida, aparentemente Sor Lucía habría manifestado que “el Cielo” aceptó la consagración realizada en 1984 por Juan Pablo II (que consagró el Mundo al Inmaculado Corazón de María). .
Y una prueba de ello, según los partidarios de que hubo tal consagración correcta, es que en 1989 cayó milagrosamente el muro de Berlín sin disparar un solo tiro.
En las apariciones de Fátima la Virgen María pidió que el Papa consagrara Rusia.
Esto debía ser al Inmaculado Corazón de María y junto con todos los obispos del mundo.
Formalmente no se hizo así, aunque sustancialmente tal vez sí. Eso se discute hoy. . Porque Sor Lucía, la vidente de Fátima que recibió el encargo, ha dicho que el Cielo aceptó la consagración hecha por Juan Pablo II.
¿QUE QUISO EVITAR LA VIRGEN CON LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA?
Durante casi 1000 años el rechazo de la Santísima Voluntad de Dios, y de Dios mismo, había ido escalando.
En 1054 el cisma ortodoxocomenzó cuando ellos dijeron “sí” a Dios, “sí a Cristo”, “sí” a Su Iglesia, pero “no” al Papa, Vicario de Jesucristo.
Ellos lo reconocen como “el primero entre iguales”, pero no reconocen su primacía de jurisdicción sobre todos los Patriarcas, Cardenales y obispos de la Iglesia.
En 1517, Martín Lutero dijo “sí” a Dios, “sí” a Cristo, “no” a la Iglesia Católica y “no” al Papa.
Él proclamó tener fidelidad a Dios y a Nuestro Señor, pero rechazó a la Iglesia.
Por lo que, es imposible permanecer fiel a Cristo cuando se rechaza a Su Esposa, la Iglesia.
En 1717 la Francmasonería dijo “sí” a Dios, “no” a Cristo, “no” a la Iglesia Católica y “no” al Papa.
Ellos pretendieron reconocer a Dios (no al verdadero Dios, sino a su propia concepción de Dios).
Pero ya no quisieron a Cristo y a Su Iglesia.
De nuevo, es imposible servir a Dios mientras se rechaza a Su Hijo: “Yo y el Padre somos uno,” dijo Nuestro Señor.
Finalmente, en 1917 Lenín en Rusia dijo “no” a Dios, ni a Cristo, ni a la Iglesia Católica, ni al Papa.
Con el Comunismo, vemos la culminación de lo que había comenzado con el cisma ortodoxo y con la herejía luterana.
O sea el rechazo descarado no solo de la Iglesia Católica, sino también el rechazo de Jesucristo e incluso de toda noción de un Dios Todopoderoso.
La Consagración de Rusia revertiría el alzamiento y la rebelión contra Dios, iniciada con el cisma ortodoxo de 1054.
Que había sido favorecida por la herejía de Lutero de la sola scriptura, incrementada por la apostasía de la Francmasonería e intensificada por el Comunismo.
Son estos “No” los que serían revertidos por la consagración de Rusia.
Porque como dijo Nuestro Señor, la Iglesia es Su Esposa.
Lo encontrarás en la Carta a los Efesios.
No podemos estar con Cristo y contra Su Iglesia, como predicó Lutero.
No podemos estar con Dios y contra Cristo, como dijo Nuestro Señor a los Fariseos:
“Si Dios fuera vuestro Padre, vosotros me aceptaríais porque Yo soy la imagen de Mi Padre. Yo y el Padre somos Uno. No, vuestro padre es el diablo”.
Así, en cierto sentido, Marx lo estaba cumpliendo al decir “No” a Dios.
Ese “No” es inseparable del “No” a Cristo, “No” a Su Iglesia y “No” a Su Vicario sobre la tierra.
Pero todas estas cosas serían revertidas por la consagración y la conversión de Rusia.
Incluso el “No” de los ortodoxos, negando la primacía del Papa en 1054.
Es así que este pedido de Consagración de Rusia se desató con las apariciones Fátima a partir de 1917.
EL PEDIDO DE LA CONSAGRACIÓN A RUSIA
El 13 de junio de 1929, mientras la Hermana Lucía estaba en el noviciado de las Hermanas Doroteas en Tuy, España, Nuestra Señora cumplió Su promesa del 13 de julio de 1917 en que había dicho:
“…para prevenir esto, vendré a pedir la consagración de Rusia a Mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los Primeros Sábados.
Si atendieran mis peticiones, Rusia se convertirá y habrá paz.
Si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia.
Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir, varias naciones serán aniquiladas.
Al final, mi Inmaculado Corazón triunfará.
El Santo Padre consagrará Rusia a mí, y se convertirá, y un período de paz será otorgado al mundo.
En Portugal se conservará siempre el dogma de la fe…”
De modo que el 13 de junio de 1929, escribe la Hermana Lucía que, estando ella una noche sola… en medio de la capilla… cuando la única luz era la de la lámpara:
“De repente, se iluminó toda la capilla con una luz sobrenatural y sobre el altar apareció una cruz de luz que llegaba hasta el techo.
En una luz más clara se veía, en la parte superior de la cruz, un rostro de un Hombre y Su Cuerpo hasta la cintura.
Sobre su pecho había una paloma igualmente luminosa.
Y clavado en la cruz, el cuerpo de otro hombre.
Un poco por debajo de la cintura, suspendido en el aire, se veía un Cáliz y una Hostia grande sobre la cual caían unas gotas de Sangre que corrían a lo largo del Rostro del Crucificado y una herida en Su pecho.
Escurriendo por la Hostia, esas gotas caían dentro del Cáliz.”
“Bajo el brazo derecho de la Cruz estaba Nuestra Señora con Su Inmaculado Corazón en Su Mano…
(Era Nuestra Señora de Fátima con Su Inmaculado Corazón… en Su mano izquierda… sin espada ni rosas, pero con una corona de espinas y llamas).
Bajo el brazo izquierdo (de la Cruz), unas grandes letras, como si fueran de agua clara cristalina, que corrían hacia el altar, formaban estas palabras: ‘Gracia y Misericordia’.
Comprendí que me era mostrado el misterio de la Santísima Trinidad y recibí luces sobre este misterio que no me es permitido revelar”.
Luego Nuestra Señora dijo a la Hermana Lucía:
“Ha llegado el momento en que Dios pide al Santo Padre que haga, en unión con todos los Obispos del mundo, la Consagración de Rusia a Mi Inmaculado Corazón; prometiendo salvarla por este medio.
Son tantas las almas que la justicia de Dios condena por pecados cometidos contra Mí, que vengo a pedir Reparación.
Sacrifícate por esta intención y reza”.
En otro texto Sor Lucía escribió más tarde, que por medio de una comunicación íntima Nuestro Señor le dijo, quejándose:
“No han querido atender Mi petición… . Al igual que el Rey de Francia se arrepentirán, y lo harán, pero ya será tarde. . Rusia habrá ya esparcido sus errores por el mundo, provocando guerras y persecuciones a la Iglesia.
¡El Santo Padre tendrá que sufrir mucho!”.
CUALES SON LOS ERRORES QUE RUSIA COMUNISTA ESPARCIÓ POR EL MUNDO
La gente a veces hace la pregunta: “¿Cuáles son los errores de Rusia?”
Estos son algunos de los errores que Rusia ha esparcido por el mundo, los que siguen operando hoy:
Una visión del mundo materialista- ateoque tiene por objeto socavar todo lo cristiano de la sociedad.
Una ideología que es desconectada de la verdad y la realidad.
Un marxismo cultural que más tarde también impregnó Occidente con la ayuda de las ideas de la escuela de Frankfurt y de Antonio Gramsci.
Un espíritu socialista revolucionario que socava especialmente importantes aspectos de la vida familiar, especialmente con la ayuda del feminismo, el divorcio, el aborto y la homosexualidad.
Una filosofía dialéctica, que afirma que las luchas y contiendas en curso en la sociedad son necesarias con el fin de lograr que se desarrollen formas más altas y eficaces de vida.
Una forma de gobernar, “centralismo democrático”, que significa que las cosas tienen la apariencia de ser abiertamente democráticas, sin embargo, están organizados y administrados centralmente en el fondo.
Un desconocimiento de la tradición y de las instituciones tradicionales de la sociedad y la estigmatización como “fuerzas contrarrevolucionarias”.
Y también un cada vez mayor desconocimiento de lo natural y del valor de la vida.
Un mal uso y engañoso del lenguaje con la intención de manipular a la opinión pública.
Un método de descalificar a los oponentes con epítetos degradantes que abstractamente categorizan como “derecha” o “contra-revolucionarios”.
Una aproximación a los cambios revolucionarios en curso donde hay un camino lento y una vía rápida por la Revolución.
Tratar de incorporar a los oponentes más moderados en el nuevo sistema con el fin de utilizarlos como “tontos útiles”.
Una constante sensación de desconfianza y miedo, hasta el encarcelamiento y asesinato de los opositores intransigentes.
Estos efectos han sido percibidos por todos.
Y la Iglesia intentó varias veces consagrar a Rusia; aquí hay una lista de los intentos.
LISTA PAPAL DE CONSAGRACIONES AL CORAZÓN INMACULADO
Ha habido por lo menos 7 consagraciones de papas al Corazón Inmaculado:
1 – El 31 de octubre de 1942, el Papa Pío XII realizó la Consagración al Inmaculado Corazón de María para el mundo entero.
2 – El 7 de julio de 1952, el Papa Pío XII consagró los pueblos de Rusia al Inmaculado Corazón de María por su carta apostólica Sacro vergente Anno Pío XII declaró:
“Al igual que hace unos años consagramos a toda la especie humana al Inmaculado Corazón de la Virgen María, Madre de Dios, hoy de una manera más especial Encomendamos a todos los pueblos de Rusia a este Inmaculado Corazón”.
3 – El 21 de noviembre de 1964, Pablo VI renueva la consagración, en presencia de los Padres del Concilio Vaticano II, pero sin su participación.
4 – El 13 de mayo 1982 el Papa Juan Pablo II invita a los obispos del mundo a unirse a él en la consagración del mundo y con él a Rusia al Inmaculado Corazón.
Muchos no reciben la invitación a tiempo para el viaje del Papa a Fátima, donde se lleva a cabo la consagración.
Sor Lucía después dice que no cumplía las condiciones.
5 – En octubre de 1983el Papa Juan Pablo II, en el Sínodo de los Obispos, renueva la Consagración 1982.
6 – El 25 de marzo 1984 el Papa Juan Pablo II, “unido con todos los pastores de la Iglesia en un vínculo particular con lo que constituyen un cuerpo y una universidad consagra el mundo entero, especialmente a los pueblos”.
El 29 de agosto de 1989 Sor Lucía afirma en su correspondencia que la consagración de Rusia “se ha logrado”, y que “Dios cumplirá su palabra”.
Y esto está relacionado con acontecimientos posteriores:
9 de noviembre de 1989, caída del muro de Berlín
25 de diciembre de 1991, disolución de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas
26 de julio del año 2000, Tercer Secreto de Fátima revelado por los cardenales Bertone y Ratzinger
7 – El 13 de octubre de 2013, Francisco Consagra el Mundo al Inmaculado Corazón.
EL DEBATE SI SE CONSAGRÓ RUSIA O NO
A pesar de estas consagraciones distintas del mundo por Papas (una menciona a Rusia), la gente todavía debate si Rusia ha sido consagrada específicamente según las instrucciones de la Virgen María en Fátima.
Éstos son los dos lados del debate.
Los que dicen que Rusia ha no sido debidamente consagrada manejan especialmente dos problemas:
A – Los Papas no han consagrado “Rusia”, específicamente en unión con los obispos.
Es cierto que en el mundo ha sido consagrado y que Rusia pertenece al mundo.
Rusia se ha consagrado como parte del colectivo de las naciones, pero no específicamente.
Es la diferencia entre un sacerdote bendiciendo a una congregación en la que tu estás presente y el sacerdote bendiciéndote específicamente por tu nombre.
B – Rusia está lejos de estar “convertida” como María prometió que sucedería si se hiciera la consagración.
Si Rusia estuviera debidamente consagrada, hubiera sido convertida ¿no estaríamos viviendo en “un período de paz concedido al mundo” como fue prometido por María?
Dado que Rusia aún no se ha convertido y ya no estamos en un período de paz, la consagración de Rusia, dicen, no ha sucedido.
Los que dicen Rusia sí ha sido consagrada manejan dos pruebas centrales:
A – Sor Lucía declaró que la consagración de Rusia se llevó a cabo por la acción de Juan Pablo II el 25 de marzo de 1984.
La hermana Lucía recibió el mensaje de María diciendo esto.
B – La Santa Sede, en la revelación del Tercer Secreto el 26 de junio de 2000, indicó que la consagración había sido cumplida.
Sor Lucía, al parecer, expresó su acuerdo.
Como se puede ver, los que alegan que Rusia no ha sido consagrada correctamente suponen que la hermana Lucía, la destinataria del mensaje de María, estuvo equivocada o engañada, o realizó algún tipo de reserva mental para engañar a todo el mundo en la materia.
También hay que decir que el cardenal Ratzinger, el futuro Papa Benedicto XVI, utilizó su influencia para argumentar a favor de que Rusia había sido consagrada .
¿SERÁ FRANCISCO EL PAPA QUE CONSAGRE RUSIA?
Esto es según relata el Padre salesiano Giuseppe Tomaselli quien ha escrito numerosos artículos sobre temas religiosos y místicos.
A principios de 1990, le preguntó al estigmatizado italiano Antonio Ruffini, (1907-1999), muy venerado y bendecido por Pío XII y Paulo VI, si sería Juan Pablo II el Papa que consagraría Rusia al Corazón Inmaculado de María.
A lo que respondió que
“No, no es Juan Pablo II. . No será su sucesor inmediato tampoco, sino el siguiente. . Él es quién consagrará finalmente a Rusia”
Esto surge de la entrevista al P. Kramer en Crusader # 82.
De modo que será el sucesor de Benedicto XVI, o sea Francisco.
Y lo hará durante un tiempo de guerra mundial y persecución a la iglesia. . Las que finalmente se convertirán en las señales para hacer la consagración. . Al hacerla, comenzará entonces la restauración y el triunfo del Corazón Inmaculado.
Primero, habría que dilucidar si se estaba refiriendo a una calendario cronológico estricto, cuando habla que el siguiente Papa, al sucesor de Juan Pablo II será el consagrador.
Y en segundo término, se dice que la consagración se haría en un entorno de una guerra mundial, la que no está declarada en estos momento.
El 13 de junio de 1929, mientras la Hermana Lucía estaba en el noviciado de las Hermanas Doroteas en Tuy, España, Nuestra Señora cumplió Su promesa del 13 de julio de 1917: “Vendré a pedir la consagración de Rusia…” escribe la Hermana Lucía que, estando ella una noche sola… en medio de la capilla… cuando la única luz era la de la lámpara:
De repente, se iluminó toda la capilla con una luz sobrenatural y sobre el altar apareció una cruz de luz que llegaba hasta el techo. En una luz más clara se veía, en la parte superior de la cruz, un rostro de un Hombre y Su Cuerpo hasta la cintura. Sobre su pecho había una paloma igualmente luminosa. Y clavado en la cruz, el cuerpo de otro hombre. Un poco por debajo de la cintura, suspendido en el aire, se veía un Cáliz y una Hostia grande sobre la cual caían unas gotas de Sangre que corrían a lo largo del Rostro del Crucificado y de una herida en Su pecho. Escurriendo por la Hostia, esas gotas caían dentro del Cáliz.
Bajo el brazo derecho de la Cruz estaba Nuestra Señora con Su Inmaculado Corazón en Su Mano … (Era Nuestra Señora de Fátima con Su Inmaculado Corazón … en Su mano izquerda … sin espada ni rosas, pero con una corona de espinas y llamas). Bajo el brazo izquierdo (de la Cruz), unas grandes letras, como si fueran de agua clara cristalina, que corrían hacia el altar, formaban estas palabras: ‘Gracia y Misericordia’. Comprendí que me era mostrado el misterio de la Santísima Trinidad y recibí luces sobre este misterio que no me es permitido revelar.
Luego Nuestra Señora dijo a la Hermana Lucía:
«Ha llegado el momento en que Dios pide al Santo Padre que haga, en unión con todos los Obispos del mundo, la Consagración de Rusia a Mi Inmaculado Corazón; prometiendo salvarla por este medio. Son tantas las almas que la justicia de Dios condena por pecados cometidos contra Mí, que vengo a pedir Reparación. Sacrifícate por esta intención y reza».
El pedido de la solemne y pública Consagración de Rusia por el Papa y todos los obispos católicos, expresado por intermedio de Nuestra Señora a la Hermana Lucía, es un pedido hecho por Dios mismo. En Tuy, Nuestra Señora dijo a Lucía: “Ha llegado el momento en que Dios pide al Santo Padre que haga…”
Durante casi 1.000 años el rechazo de la Santísima Voluntad de Dios, y de Dios mismo, ha ido escalando. En 1054 el cisma ortodoxo comenzó cuando ellos dijeron “sí” a Dios, “sí a Cristo”, “sí” a Su Iglesia, pero “no” al Papa — Vicario de Jesucristo.
Ellos lo reconocen como “el primero entre iguales”, pero no reconocen su primacía de jurisdicción sobre todos los Patriarcas, Cardenales y obispos de la Iglesia.
En 1517, Martín Lutero dijo “sí” a Dios, “sí” a Cristo, “no” a la Iglesia Católica y “no” al Papa. Él proclamó tener fidelidad a Dios y a Nuestro Señor, pero rechazó a la Iglesia. Por lo que, es imposible permanecer fiel a Cristo cuando se rechaza a Su Esposa, la Iglesia.
En 1717 la Francmasonería dijo “sí” a Dios, “no” a Cristo, “no” a la Iglesia Católica y “no” al Papa. Ellos pretendieron reconocer a Dios (no al verdadero Dios, sino a su propia concepción de Dios), pero ya no quisieron a Cristo y a Su Iglesia. De nuevo, es imposible servir a Dios mientras se rechaza a Su Hijo: “Yo y el Padre somos uno,” dijo Nuestro Señor.
Finalmente, en 1917 Lenín dijo “no” a Dios, a Cristo, a la Iglesia Católica y al Papa. Con el Comunismo, vemos la culminación de lo que había comenzado con el cisma ortodoxo y con la herejía luterana: el rechazo descarado no solo de la Iglesia Católica, sino también el rechazo de Jesucristo e incluso de toda noción de un Dios Todopoderoso.
La Consagración de Rusia revertirá el alzamiento y la rebelión contra Dios, iniciada con el cisma ortodoxo de 1054, favorecida por la herejía de Lutero de la sola scriptura, incrementada por la apostasía de la Francmasonería e intensificada por el Comunismo.
Son estos “No” los que serán revertidos por la consagración de Rusia. Como dijo Nuestro Señor, la Iglesia es Su Esposa. Usted lo encontrará en la Carta a los Efesios. No podemos estar con Cristo y contra Su Iglesia, como enseñó Lutero. No podemos estar con Dios y contra Cristo, como dijo Nuestro Señor a los Fariseos: “Si Dios fuera vuestro Padre, vosotros me aceptaríais porque Yo soy la imagen de Mi Padre. Yo y el Padre somos Uno. No, vuestro padre es el diablo”. Dios Hijo es la imagen del Padre. “Felipe. ¿No sabes que Yo y el Padre somos Uno? Tú me has visto, tú has visto al Padre”.
Así, en cierto sentido, Marx lo estaba cumpliendo, al decir “No” a Dios, ese “No” es inseparable del “No” a Cristo, “No” a Su Iglesia y “No” a Su Vicario sobre la tierra. Pero todas estas cosas serán revertidas por la consagración y la conversión de Rusia. Incluso el “No” de los ortodoxos, negando la primacía del Papa en 1054, será revertido.
Así, cuando finalmente se logre la Consagración de Rusia y la paz mundial, deberíamos recordar que esta no vino por ninguno de los hombres, ni por todos ellos juntos. Ni siquiera por los méritos del Santo Padre, sino por los méritos de Nuestra Señora.
Al mismo tiempo, Dios quiere también que todo el mundo vea la importancia de la condición única del Santo Padre y de los obispos católicos y, en realidad, de la Iglesia Católica. Y es por eso que Él ha insistido que no solo sea el Santo Padre, sino los obispos católicos junto con el Santo Padre quienes realicen ese acto, para que el mundo vea la relación directa entre la Rusia convertida y el Papa y los obispos, que cumplieron ese acto de consagración al Inmaculado Corazón de María.
Dios ha dado a la Iglesia y al mundo este plan inmutable para obtener la paz mundial, solo por medio de la consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María a realizar por el Papa y los obispos católicos. El Dios Omnipotente ha decretado demostrar así, a la Iglesia y al mundo, no solo la necesidad y la importancia de la devoción a Nuestra Señora, sino también demostrar por esta consagración de Rusia y la paz mundial subsiguiente, que El ha fundado solo una Iglesia, la Iglesia Católica y que Él ha establecido dentro de ella esa jerarquía de la Iglesia Católica, y ha dado al Papa la primacía de autoridad en la Iglesia.
Como Dios ha sido insultado públicamente por el ateísmo comunista, error principal de Rusia del cual nos advirtió Nuestra Señora en 1917, Él pide que se haga reparación pública por esa grave blasfemia, por medio de una re-dedicación del país y de los pueblos de Rusia al servicio de Dios. Sin embargo, Él ha ordenado que se haga de una manera determinada.
Dios desea que la Consagración de Rusia venga de manos de Su Madre Santísima, quien no solo hará más agradable a Él esa consagración, sino que Ella atraerá al mundo a Su Inmaculado Corazón, por medio de la paz subsecuente que Ella le dará.
Poco antes de su muerte, la Beata Jacinta de Fátima le dijo a su prima Lucía, “Ya me falta poco para ir al Cielo. Tu quedas aquí para decir que Dios quiere establecer en el mundo la devoción al Inmaculado Corazón de María. Cuando sea el momento de decirlo, no te escondas. Di a toda la gente que Dios nos concede las gracias por medio del Inmaculado Corazón de María; que se las pidan a Ella; que el Corazón de Jesús quiere que, a su lado se venere el Inmaculado Corazón de María; que pidan la paz al Inmaculado Corazón de María, que Dios se la entregó a Ella.”
LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA: CONSECUENCIAS PARA EL MUNDO
Muchos no se dan cuenta que Dios ya nos ha dado una vislumbre de lo que sucederá cuando el Papa y todos los obispos católicos del mundo consagren Rusia al Inmaculado Corazón de María.
Eso ocurrió en Portugal, después de que los obispos portugueses consagraran solemnemente su país al Inmaculado Corazón de María el 13 de mayo de 1931.
Como resultado de esa consagración, Portugal experimentó un triple milagro:
1. Hubo un Renacimiento Católico magnificente, durante el cual ocurrió un notable resurgimiento de la vida católica;
2. Tuvo lugar una milagrosa reforma política y social, de acuerdo con los principios sociales católicos; y
3. Hubo un doble milagro de paz, durante el cual Portugal fue librada tanto de la Guerra Civil Española como de la Segunda Guerra Mundial.
El Cardenal Cerejeira, Patriarca de Portugal, afirmó que las gracias arriba mencionadas, que transformaron completamente la nación, se debieron a Nuestra Señora de Fátima. El afirmó: “Para expresar lo que ha estado ocurriendo aquí durante veinticinco años, el vocabulario portugués no tiene sino una palabra: milagro. Sí, estamos convencidos que debemos la maravillosa transformación de Portugal a la protección de la Santísima Virgen”.
El Cardenal afirmó también, que las múltiples bendiciones que Nuestra Señora obtuvo para Portugal son una muestra de lo que Ella obtendrá para el mundo entero, una vez que Rusia sea consagrada debidamente a Su Inmaculado Corazón. “Lo que ha estado ocurriendo en Portugal proclama el milagro”, afirmó. “Y prefigura lo que el Inmaculado Corazón de María ha preparado para el mundo.”
Con la Consagración de Rusia al Inmaculado Corazón, y el Triunfo del Inmaculado Corazón, el mundo entero experimentará las gracias que Portugal experimentó luego de su consagración. Pero, estas serán a escala mundial, y, necesariamente, ¡mucho más notables! Habrá paz a lo largo del mundo. Las naciones aceptarán el reinado de Cristo Rey, y basarán así sus leyes en Sus Leyes. Y la Iglesia Católica será renovada, y todas las gentes y todas las naciones se convertirán a la práctica ferviente de la Fe Católica.
Para una descripción más detallada de la transformación milagrosa de Portugal, que fue la vista previa de lo que el mundo entero experimentará cuando se haga la Consagración Colegial de Rusia.
POR EL NO CUMPLIMIENTO
La historia ha demostrado los resultados de la omisión de consagrar Rusia por parte del Papa y los obispos. Hemos visto guerras incontables y conflictos: la 2a. Guerra Mundial; las guerras de Corea y de Vietnam; incontables revoluciones sangrientas en África, América Latina y el Sudeste Asiático, la reciente Guerra de Iraq, etc. También tenemos la guerra que se está librando contra los no-nacidos, en la que son asesinados 50 millones de bebés cada año en el mundo.
Por todo lo que ocurre a nuestro alrededor, tenemos la evidencia que no estamos viviendo en el período de paz prometido por Nuestra Señora de Fátima. Sin embargo, todos estos horribles castigos podrían haber sido evitados, y los futuros problemas se evitarán, por la Consagración de Rusia. Ha sido la demora del Papa y los obispos en el cumplimiento de la orden de Dios de realizar la Consagración Colegial de Rusia al Inmaculado Corazón de María, lo que ha permitido que hubieran ocurrido las terribles devastaciones del siglo pasado — después de 1929, cuando fue dada la orden formal para la Consagración. La destrucción continuará intensificándose si no se obtiene la conversión de Rusia; veremos la predicha esclavización de todo el mundo, y la aniquilación real de varias naciones.
Así, las consecuencias de no cumplir con la realización de ese simple acto de consagración son inconmensurables. Debemos rezar para que se haga pronto, y nos veamos librados de la esclavización y la aniquilación. Tal como el primer Papa, San Pedro, fue liberado de la prisión por las oraciones de los primeros cristianos, nuestro Papa actual puede ser igualmente ayudado por nuestras oraciones, para que finalmente obedezca los pedidos del Cielo y consagre Rusia al Inmaculado Corazón de María.
13 DE MAYO: EL SECRETO DE FÁTIMA, CLARIFICACIONES.
En la tercera aparición de 1917, la Virgen dio a los niños un secreto que hoy se conoce como «El Secreto de Fátima». En agosto 1941, Lucía mencionó por primera vez la división de este secreto en tres partes. Dijo Lucía: El secreto esta compuesto de tres temas diferentes y voy a revelar dos de ellos:
1 – El primero es la visión del infierno y la designación del Corazón Inmaculado de María como el remedio supremo ofrecido por Dios a la humanidad para la salvación de las almas….
…CONTIENE VIDEOS…
2 – El segundo, es la profecía concerniente a una paz milagrosa que Dios desea otorgar al mundo a través de la consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María y la práctica de la comunión de los primeros cinco sábados de mes»
Lucía no hizo pública la tercera parte del secreto que se mantuvo en el archivo Vaticano hasta que el Papa, con Lucía presente, finalmente, el 13 de mayo del 2000 lo promulgó durante la beatificación de los otros dos pastorcitos, Francisco y Jacinta.
EN LA REDACCIÓN HECHA POR SOR LUCÍA, EN LA «TERCERA MEMORIA» DEL 31 DE AGOSTO DE 1941DESTINADA AL OBISPO DE LEIRIA-FÁTIMA
Tendré que hablar algo del secreto, y responder al primer punto interrogativo.
¿Qué es el secreto?
Me parece que lo puedo decir, pues ya tengo licencia del Cielo. Los representantes de Dios en la tierra me han autorizado a ello varias veces y en varias cartas; juzgo que V. Excia. Rvma. conserva una de ellas, del R. P. José Bernardo Gonçalves, aquella en que me manda escribir al Santo Padre.
Uno de los puntos que me indica es la revelación del secreto. Sí, ya dije algo; pero, para no alargar más ese escrito que debía ser breve, me limité a lo indispensable, dejando a Dios la oportunidad de un momento más favorable.
Pues bien; ya expuse en el segundo escrito, la duda que, desde el 13 de junio al 13 de julio, me atormentó; y cómo en esta aparición todo se desvaneció.
Ahora bien, el secreto consta de tres partes distintas, de las cuales voy a revelar dos.
LA PRIMERA PARTE fue, pues, la visión del infierno.
Nuestra Señora nos mostró un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra. Sumergidos en ese fuego, los demonios y las almas, como si fuesen brasas transparentes y negras o bronceadas, con forma humana que fluctuaban en el incendio, llevadas por las llamas que de ellas mismas salían, juntamente con nubes de humo que caían hacia todos los lados, parecidas al caer de las pavesas en los grandes incendios, sin equilibrio ni peso, entre gritos de dolor y gemidos de desesperación que horrorizaba y hacía estremecer de pavor.
Los demonios se distinguían por sus formas horribles y asquerosas de animales espantosos y desconocidos, pero transparentes y negros.
Esta visión fue durante un momento, y ¡gracias a nuestra Buena Madre del Cielo, que antes nos había prevenido con la promesa de llevarnos al Cielo! (en la primera aparición).
De no haber sido así, creo que hubiésemos muerto de susto y pavor.
Inmediatamente levantamos los ojos hacia Nuestra Señora que nos dijo con bondad y tristeza:
– Visteis el infierno a donde van las almas de los pobres pecadores; para salvarlas, Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón. Si se hace lo que os voy a decir, se salvarán muchas almas y tendrán paz.
SEGUNDA PARTE
La guerra pronto terminará. Pero si no dejaren de ofender a Dios, en el pontificado de Pío XI comenzará otra peor.
Cuando veáis una noche iluminada por una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que va a castigar al mundo por sus crímenes, por medio de la guerra, del hambre y de las persecuciones a la Iglesia y al Santo Padre.
Para impedirla, vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los Primeros Sábados. Si se atienden mis deseos, Rusia se convertirá y habrá paz; si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia.
Los buenos serán martirizados y el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán aniquiladas. Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará. El Santo Padre me consagrará a Rusia, que se convertirá, y será concedido al mundo algún tiempo de paz.
SÍNTESIS Y REFLEXIÓN
Primera parte
1- Problema: Pecado que conduce al infierno
2- Remedio: Devoción y obediencia al Inmaculado Corazón de María.
Segunda parte
1-Problema: Pecado que lleva a la guerra, hambre, persecución de la Iglesia y del Santo Padre.
2-Remedio: consagración de Rusia al Inmaculado Corazón y comunión reparadora de los primeros sábados.
Con la Virgen María (consagración a su Corazón Inmaculado) vamos a Jesús (Eucaristía).
El Santo Padre ha realizado varias consagraciones en comunión con los obispos: El 25 de Marzo de 1984. (Fiesta de la Anunciación) en la Plaza de San Pedro .
El Santo Padre, en unión espiritual con los obispos del mundo, quienes habían sido convocados, confió a todos los hombres y mujeres y todos los pueblos al Inmaculado Corazón de María. El Papa repitió la consagración en 1987 y en el año 2000.
Existe una controversia referente a si estas consagraciones satisfacen la petición de la Virgen hecha en el secreto de Fátima. Nos parece que debemos confiar en el Santo Padre que ha sido escogido por la Virgen y que nos sobrepasa en santidad y sabiduría.
3-Consecuencia de responder a la Virgen: Rusia se convertirá y habrá paz
4-Consecuencias de no responder: Rusia esparcirá sus errores por el mundo (comunismo y ateismo) promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Martirio.
5-Seguridad de victoria final:«Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará» El Papa consagrará a Rusia que se convertirá y habrá paz.
TERCERA PARTE DEL SECRETO DE FATIMA
Revelado el 13 de julio de 1917 a los tres pastorcitos en Cova de Iria, Fátima, transcrito por Sor Lucía el 3 de enero de 1944. La tercera parte del Secreto de Fátima se mantuvo en secreto hasta el año jubilar del 2000. Su promulgación fue anticipada el 13 de mayo del 2000 al final da la Santa Misa en Fátima, cuando el Papa Juan Pablo II beatificó los niños videntes Francisco y Jacinta. Finalmente fue dado a conocer por la Santa Sede el 26 de Junio del 2000 junto con varios comentarios.
«Escribo en obediencia a Vos, Dios mío, que lo ordenáis por medio de Su Excelencia Reverendísima el Señor Obispo de Leiria y de la Santísima Madre vuestra y mía.»
«Después de las dos partes que ya he expuesto, hemos visto al lado izquierdo de Nuestra Señora un poco más en lo alto a un Ángel con una espada de fuego en la mano izquierda; centelleando emitía llamas que parecía iban a incendiar el mundo; pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él; el Ángel señalando la tierra con su mano derecha, dijo con fuerte voz: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia! Y vimos en una inmensa luz qué es Dios: ‘algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan ante él’ a un Obispo vestido de Blanco ‘hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre’.
También a otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza; el Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad medio en ruinas y medio tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas; y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones.
Bajo los dos brazos de la Cruz había dos Angeles cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios».
Algunos dicen que, aunque el texto de arriba, promulgado por la Santa Sede en el año 2000, aunque verdadero, no es completo. Se fundamentan en varias publicaciones y supuestas declaraciones del Papa a la conferencia episcopal alemana en 1981. Aunque fuese cierto, nos parece que si el Papa, siendo el vicario de Cristo, estima que no deben darse a conocer, sería imprudente indagar sobre ello. Atendamos a lo que se nos ha dado y respondamos de todo corazón.
COMENTARIO TEOLÓGICO DEL CARDENAL RATZINGER A LA TERCERA PARTE DEL SECRETO
El Cardenal Ratzinger humildemente reconoce al principio del texto que su comentario es «intento de interpretación». No es por tanto a una interpretación definitiva de la iglesia.
Pero si se le debe una respetuosa consideración ya que el Papa ha querido que este comentario acompañe a la publicación de la tercera parte del secreto de Fátima.
RESUMEN
«La palabra clave de este ‘secreto’ es el triple grito: ‘¡Penitencia, Penitencia, Penitencia!’. Comprender los signos de los tiempos significa comprender la urgencia de la penitencia, de la conversión y de la fe.
«El ángel con la espada de fuego a la derecha de la Madre de Dios recuerda imágenes análogas en el Apocalipsis. Representa la amenaza del juicio que incumbe sobre el mundo. La perspectiva de que el mundo podría ser reducido a cenizas en un mar de llamas, hoy no es considerada absolutamente pura fantasía: el hombre mismo ha preparado con sus inventos la espada de fuego».
La visión muestra después la fuerza que se opone al poder de destrucción: el esplendor de la Madre de Dios.
El Papa parece que precede a los otros, temblando y sufriendo por todos los horrores que lo rodean… su camino pasa en medio de los cuerpos de los muertos. El camino de la Iglesia se describe así como un viacrucis, como camino en un tiempo de violencia, de destrucciones y de persecuciones. … en el via crucis de este siglo, la figura del Papa tiene un papel especial.
«Fue una mano materna la que guió la trayectoria de la bala y el Papa agonizante se detuvo en el umbral de la muerte’ (Juan Pablo habla el 13 de mayo de 1994)… muestra sólo una vez más que no existe un destino inmutable, que la fe y la oración son poderosas, que pueden influir en la historia y, que al final, la oración es más fuerte que las balas, la fe más potente que las divisiones».
Los ángeles recogen bajo los brazos de la cruz la sangre de los mártires y riegan con ella las almas que se acercan a Dios…ningún sufrimiento es vano y, precisamente una Iglesia sufriente, una Iglesia de mártires, se convierte en señal orientadora para la búsqueda de Dios por parte del hombre…del sufrimiento de los testigos deriva una fuerza de purificación y de renovación, porque es actualización del sufrimiento mismo de Cristo y transmite en el presente su eficacia salvífica».
Los acontecimientos a los que se refiere la tercera parte del ‘secreto’ de Fátima parecen pertenecer ya al pasado…
Lo que queda de válido…: la exhortación a la oración como camino para la ‘salvación de las almas’ y, en el mismo sentido, la llamada a la penitencia y a la conversión». “Mi Corazón Inmaculado triunfará”.
¿Qué quiere decir esto? Que el corazón abierto a Dios, purificado por la contemplación de Dios, es más fuerte que los fusiles y que cualquier tipo de arma.
COMENTARIOS DEL CARDENAL RATZINGER 15 AÑOS ANTES DE LA PUBLICACIÓN DEL SECRETO
Entrevista con Vittorio Messori (Publicada bajo el título «Informe Sobre la Fe», 1985, BAC, Madrid. pgs 118-119).
Sus palabras de entonces concuerdan perfectamente con su comentario arriba. Las publicamos porque nos ayudan a profundizar el significado del secreto:
-Messori: «Ha leído usted el llamado «tercer secreto de Fátima» el que sor Lucía, la única superviviente del grupo de videntes, hizo llegar a Juan XXIII, y que el Papa después de haberlo examinado, confió al predecesor de usted, cardenal Ottaviani, ordenándole que lo depositara en los archivos del Santo Oficio?
La respuesta es inmediata, seca: «Si, lo he leído».(Ratzinger)
-Messori: Circulan en el mundo versiones nunca desmentidas que describen el contenido de este «secreto» como inquietante, apocalíptico y anunciador de terribles sufrimientos. El mismo Juan Pablo II, en su visita pastoral a Alemania, pareció confirmar (si bien con prudentes rodeos, hablando privadamente con un grupo de invitados cualificados) el contenido, no precisamente alentador, de este escrito. Antes que él, Pablo VI, en su peregrinación a Fátima, parece haber aludido también a los temas apocalípticos del «secreto».
¿Por qué no se ha decidido nunca a publicarlo, aunque no fuera más que para evitar suposiciones aventuradas?.
-Ratzinger: «Si hasta ahora (1985) no se ha tomado esta decisión no es porque los papas quieran esconder algo terrible».
-Messori: Entonces, insisto, ¿hay «algo terrible» en el manuscrito de sor Lucía?
-Ratzinger: Aunque así fuera -replica, escogiendo las palabras-, esto no haría mas que confirmar la parte ya conocida del mensaje de Fátima.
Desde aquel lugar se lanzó al mundo una severa advertencia, que va en contra de la facilonería imperante; una llamada a la seriedad de la vida, de la historia, ante los peligros que se ciernen sobre la humanidad.
Es lo mismo que Jesús recuerda con harta frecuencia; no tuvo reparo en decir: «Si no os convertís, todos pereceréis» (Lc 13,3). La conversión -y Fátima nos lo recuerda sin ambages- es una exigencia constante de la vida cristiana. Deberíamos saberlo por la Escritura entera».
-Messori: ¿Quiere esto decir que no habrá publicación, al menos por ahora?
-Ratzinger: «El Santo Padre juzga que no añadiría nada a lo que un cristiano debe saber por la Revelación y, también, por las apariciones marianas aprobadas por la Iglesia, que no hacen sino confirmar la necesidad urgente de penitencia, de conversión, de perdón, de ayuno. Publicar el «tercer secreto» significaría también exponerse a los peligros de una utilización sensacionalista de su contenido».
Ratzinger enfatiza lo que podemos aprender del mensaje de Fátima:
-Un llamado radical a la conversión y a la penitencia.
-la gravedad absoluta del momento histórico
-los peligros que se presentan en la vida de la fe y del mundo
-la importancia y actualidad de los últimos tiempos.
CRONOLOGÍA RESUMIDA DEL SECRETO DE FÁTIMA
-1917: La Virgen Santísima revela un secreto a tres pastorcitos.
-1943: Lucía padece una enfermedad muy grave. El Obispo de Leiria, Mos. José Alves de Silva le insta a que escriba el secreto.
-1944: En Enero, la Virgen se manifiesta a Lucía y le confirma que escriba el secreto. Lucía lo escribe y lo mete en un sobre sellado. Hace entrega del texto a la jerarquía de la Iglesia en junio de 1944 y pide que el tercer secreto sea abierto y leído al mundo, al morir ella, o a mas tardar en el año 1960, lo que ocurriese primero.
-1946: el teólogo Barthas pregunta a Lucía por qué se habría de esperar hasta 1960 para revelar el secreto. Ella responde:»porque en ese momento será mas claro el contenido del secreto».
-1957: llega a Roma pedido por el Santo Oficio (Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe), se coloca en un pequeño cofre en la oficina del Papa Pío XII. -1958: muere el Papa Pío XII y el sobre estaba sin abrir.
-1959: el Papa Juan XXIII leyó el secreto en agosto, pero debido a las dificultades que surgieron por expresiones del idioma, se requirió la presencia del traductor portugués Mons. Paulo José Tavares. Mas tarde el Papa hizo que lo leyera el Cardenal Ottaviani, el Prefecto entonces, de la S.C. para la Doctrina de la Fe. No se divulgó.
-1960: se supo en comunicado que el tercer secreto no debía ser publicado.
-1967: Cardenal Ottaviani en nombre del Papa Pablo VI hizo una larga declaración explicando el porque no se había revelado.
-El Papa J.P.II y el Card. Joseph Ratzinger, PSCDF, conocían el contenido del secreto.A este respecto, JPII, en 1980, contestó a las preguntas de periodistas acerca de porque no se había revelado el secreto:
«Dada la gravedad del contenido, para no provocar a la potencia mundial del comunismo a tomar ciertas determinaciones, mis predecesores en el oficio de Pedro, han preferido aplazar su publicación…muchos quieren saber solo por curiosidad y por gusto sensacionalista, pero olvidan que el saber conlleva una responsabilidad….Aquí esta el remedio contra este mal: REZAD y confiad todo lo demás a la Madre de Dios».
-2000, 13 de Mayo: Fátima, al final de la beatificación de los videntes en Fátima, el Cardenal Sodano en nombre del Santo Padre reveló parte del secreto relacionado con su pontificado y afirmó, con la aprobación de Sor Lucía, allí presente, que Juan Pablo II es el Papa a que hace referencia el secreto.
Anunció además que todo el secreto será revelado junto con un comentario. Esto ocurre el 26 de junio del 2000.
VIDEO
El tercer secreto de Fátima no es sobre el fin del mundo