Categories
Beatificación Canonización Catolicismo Foros de la Virgen María FOROS DE LA VIRGEN MARÍA NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Signos extraordinarios de la Iglesia

El Papa Francisco celebró desde el Vaticano a San Cayetano y mandó un video a Argentina

El Santo “del pan y del trabajo».

 

En el video que esá abajo fue pasado por el enviado a los peregrinos y emitido por Canal 21, del Arzobispado de Buenos Aires, a través de una pantalla instalada frente al templo.

 

El Papa y San Cayetano

 

«Como todos los años, después de recorrer la cola hablo con ustedes. Tal vez la cola la recorrí con el corazón. Estoy un poquito lejos. No puedo compartir con ustedes este momento tan lindo, en el que ustedes están caminando hacia la imagen de San Cayetano», destacó el Papa Francisco en su mensaje a los miles de devotos que hacen fila para entrar al santuario del barrio porteño de Liniers dedicado al llamado Santo de la Providencia.

Cuando Bergoglio todavía estaba en Buenos Aires nunca se perdía la fiesta del 7 de agosto en el santuario de San Cayetano, en el barrio Lieners. Incluso ahora como obispo de Roma, el ex arzobispo de la metrópolis porteña quiso participar de alguna manera.

Ya desde las 23.00 del martes 6, la multitud de peregrinos que desfilaba para ofrecer su homenaje a la pequeña estatua de San Cayetano de Thiene y pudieron escuchar el vídeo-mensaje que el Papa argentino grabó para ellos desde el otro lado del mundo. El mensaje fue retransmitido en las pantallas que pusieron alrededor del Santuario.

Palabras sencillas pero intensas, que conducen al dinamismo inconfundible de la caridad cristiana, pronunciadas siguiendo la fórmula-intención del peregrinaje, que este año exhortaba a ir con «Jesús y San Cayetano» al encuentro con los «más necesitados». «Lo más importante» repitió el Papa, «no es mirar desde lejos o ayudarlos desde lejos, sino ir a su encuentro». Ver a los ojos a la quien damos limosna, tocar sus manos, porque «si no has tocado, no has encontrado».

Un impulso gratuito, sugirió Francisco a sus compatriotas, que no nace de sí mismo, del esfuerzo de hacer cosas buenas y mucho menos de intenciones propagandísticas, sino como simple eco de las cosas buenas que Cristo puede operar en quien lo sigue: «¿Voy a convencer a otro que se haga católico?», preguntó Bergoglio. «No, no; vas a encontrarlo, es tu hermano, eso basta. Con eso lo vas a ayudar; lo demás lo hace Jesús, lo hace el Espíritu Santo».

Y por ello invitó a salir al encuentro de los más necesitados, de los que están pasando un momento más difícil que el que pasamos nosotros, porque «siempre hay alguien que la pasa peor, siempre, siempre hay alguien». De esta manera se podría dar que

«tu corazón, cuando te encuentres con aquél que más necesita, se va a empezar a agrandar, agrandar, agrandar, porque el encuentro multiplica la capacidad del amor, agranda el corazón».

El Santuario de San Cayetano es el Santuario más querido por la clase obrera desde los tiempos dorados del sindicalismo peronista. Al Santo, amigo de las prostitutas y de los desgraciados destrozados por los usureros, los argentinos siempre piden pan y trabajo.

Los sacerdotes mantienen abierta la Iglesia y los confesionarios durante doce horas. Y alrededor del santuario se recoge y crece una trama de vida cristiana arrolladora, en la que la gracia paladeada en las liturgias, en los sacramentos y en el consuelo de la oración florece inmediatamente en miles de obras de misericordia corporal y espiritual.

Los voluntarios juntan comida, medicinas y ropa para distribuirlas por todo el país. Hay un comedor parroquial y cursos de formación para los excluidos del circuito productivo. También hay una base de datos con los nombres de los que están buscando trabajo que funciona como una pequeña agencia de empleo.

Es un poco esa imagen de Iglesia que Bergoglio lleva en la mirada y en el corazón cuando, incluso como Papa, sugiere a todos una «conversión pastoral» y un impulso misionero que se configure completamente según los registros de la misericordia y de la cercanía, de la proximidad, del encuentro.

En sus 15 años como arzobispo, Bergoglio siempre celebró con alegría la misa en el Santuario el día de la fiesta del Santo. Sus homilías dejaban una huella en el corazón fría del invierno argentino.

«Hay dolores y dolores. Esos del salario negado, esos de la falta de trabajo, esos que gritan venganza», dijo el 7 de agosto de 2006, y añadió que «los dolores debidos a la injusticia gritan venganza, porque son dolores que se pueden evitar, simplemente siendo justos, ayudando a los que más lo necesitan, creando trabajo, sin robar, sin mentir, sin sacudir demasiado, sin aprovecharse».

Dos años después, en 2008, su homilía se disolvió en un diálogo con el pueblo de Dios.

«Entonces -dijo- les hago una pregunta: ¿la Iglesia es un lugar abierto solo para los buenos?». Y todos respondieron en coro: «¡Nooooo!». «¿Aquí corremos a alguien porque es malo? No, al contrario, lo acogemos con más afecto. Nos lo ha enseñado Jesús. Imagínense, entonces, cómo es paciente el corazón de Dios con cada uno de nosotros».

El año pasado el entonces cardenal Bergoglio volvió a pedir a San Cayetano la bendición de tener pan y trabajo para todos, «tan necesarios para una vida digna», y justificó incluso la indignación y la lucha justa para impedir que tales bienes sean robados al pueblo a quien han sido destinados.

Cada vez, al final de la misa, Bergoglio volvía a recorrer, al contrario, la fila de los fieles (cientos de miles) que esperaban pacientemente poder llegar a la imagen del Santo. Abrazaba y besaba a todos, uno por uno, platicaba, escuchaba historias y problemas, bendecía niños, rosarios, fotos de familiares enfermos y las barrigas de mujeres embarazadas, a las que siempre invitaba con delicadeza a qque bautizaran a sus hijos, porque «así el Señor se refuerza».

Acababa cansadísimo, pero su corazón de pastor volvía a florecer con alegría y paz de aquellas largas inmersiones en el «sensus fidei» del Pueblo de Dios. Y al final volvía a confirnar la certeza de que

«el Señor elige a los pobres porque los pobres no presumen de haber sido elegidos, no lo consideran un mérito propio, y así Su predilección puede convertirse en un don que todos agradecen». «Dios Padre Nuestro», dijo en una ocasión, «escucha el clamor de su pueblo. El clamor silencioso de la fila interminable que pasa delante de San Cayetano. Nuestro Padre en los cielos escucha el ruido de nuestros pasos, la oración que vamos susurrando en nuestro corazón, mientras nos vamos acercando».

QUIEN ES SAN CAYETANO

Gaetano Thiene, como se llamaba San Cayetano, nació en Vicenza, norte de Italia, en octubre de 1480, en el seno de una familia de nobles.

No obstante, abandonó el ambiente familiar y dedicó su vida a la atención de los enfermos y desvalidos.

Estudió derecho en Padua y, luego de recibida la ordenación sacerdotal, implementó en Roma la sociedad de Clérigos regulares o Teatinos, con el objetivo de promover el apostolado y la renovación espiritual del clero. Esta sociedad se propagó después por el territorio de Venecia y el reino de Nápoles. San Cayetano se caracterizó por su caridad con el prójimo.

Cayetano estudió cuatro años en la Universidad de Padua, donde se distinguió en la teología y se doctoró en derecho civil y canónico en 1504.  Luego fue nombrado senador en Vicenza.

No obstante, estaba decidido a continuar los estudios sacerdotales, por lo cual se trasladó a Roma en 1506. Decía que Dios lo llamaba para realizar una gran obra. Poco tiempo después fue nombrado secretario privado del Papa Julio II.

El Pontífice muere en 1513.  Cayetano decide abandonar en el cargo y se prepara durante 3 años para ser sacerdote. Fue ordenado en 1516, a los 36 años. Luego funda en Roma la «Cofradía del Amor Divino», una asociación de clérigos que se dedicaba a difundir la gloria de Dios. Su primera experiencia pastoral fue en la parroquia de Santa María de Malo, cerca de Vicenza, tras lo cual se dedicó a cuidar los santuarios ubicados por el monte Soratte.

Ingresó en el oratorio de San Jerónimo, que incluía a laicos pobres. Sus amigos se molestaron porque consideraban que eso era indigno para un hombre de gran nivel como él. A Cayetano no le importó. Ayudaba y servía personalmente a los pobres y enfermos de la ciudad y atendía a los pacientes de las enfermedades graves.

Luego fundó otro oratorio en Verona. Se trasladó a Venecia en 1520,  se hospedó en el hospital de la ciudad y siguió la misma forma de vida. Se lo consideraba fundador principal del hospital por todos los regalos que hizo.

Trabajó  además, con el Beato Juan Marinoni, para sacar de la miseria a los pobres y marginados. Esta obra fue aprobada poco antes del Concilio de Letrán. En sus últimos años de vida abrió hospicios para ancianos y fundó hospitales.

Implementó la bendición con el Santísimo Sacramento y promovió la comunión frecuente, en los tres años que vivió en Venecia. Escribió:

«No estaré satisfecho sino hasta que vea a los cristianos acercarse al Banquete Celestial con sencillez de niños hambrientos y gozosos, y no llenos de miedo y falsa vergüenza».

En tiempos en que la cristiandad pasaba por un período de crisis y la corrupción debilitaba a la Iglesia, Cayetano fue uno de los que más apoyaron la verdadera reforma de vida y de costumbres dentro de la Iglesia. Repetía a menudo: «Cristo espera, ninguno se mueve».

Cayó gravemente enfermo en el verano de 1547. Los médicos le recomendaron colocar un colchón sobre su cama de tablas, pero el se negó: «Mi salvador murió en la cruz; dejadme pues, morir también sobre un madero».

Murió en Nápoles a la edad de 77 años, el domingo 7 de agosto de 1547. Cayetano fue canonizado en 1671 después que la comisión encargada examinara rigurosamente los numerosos milagros entre quienes lo invocaron para pedir sanación, alimentos y trabajo.

Fuentes: Vatican Insider, ACI Prensa, Valores Religiosos, Signos de estos Tiempos

 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
ARTÍCULOS DESTACADOS Beatificación Canonización Catolicismo Comulgar Foros de la Virgen María FOROS DE LA VIRGEN MARÍA Milagro NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Noticias bis Religion e ideologías Sacramentos y sacramentales Signos Globales de estos Tiempos

El milagro eucarístico de la Beata Imelda

Ejemplo de amor por la eucaristía.

 

La beata Imelda Lambertini, siendo todavía niña entró en un convento de dominicas de la ciudad. Su mayor deseo era recibir a Jesús en la Sagrada Comunión, pero no tenía todavía la edad para hacerlo. Finalmente, mientras rezaba arrodillada, una hostia apareció flotando por encima de su cabeza, el capellán se la dio, y un rato más tarde, la priora la encontró muerta pero aún arrodillada ante el altar.

 

beata imelda

 

Por este ardiente deseo de recibir a Jesús en la eucaristía Imelda es la Patrona de los niños que hacen la Primera Comunión.

INCLINACIÓN DESDE PEQUEÑITA

Esta niña angelical nació en la ciudad de Bolonia en 1322. Era hija de los Condes de Lambertini, ilustres en nobleza y en virtud. La condesa, desconsolada porque no tenía hijos, había rogado fervorosamente para que le fuese concedida una hijita, y, según se dice, obtuvo tal merced del Cielo por medio del Santísimo Rosario, del cual era devotísima.

La pequeña Imelda pronto llamó la atención por sus celestiales inclinaciones. Cuando lloraba, se sentía consolada al oír los nombres de Jesús y de María; cuando comenzó a hablar, fueron estos nombres dulcísimos los que pronunció con más frecuencia. A veces, la encontraban con las manos levantadas al cielo, en oración, y con los ojos anegados en lágrimas de ternura.

Permanecía largos ratos sobre las rodillas de su madre, aprendiendo las primeras oraciones. Era muy devota de la Madre de Dios, y, sobre todo, de la Sagrada Eucaristía. Pasaba muchas horas delante del Sagrario, como extasiada, y, con mucha frecuencia, se alejaba de las fiestas de familia, y se iba al oratorio del palacio, prefiriendo a todo bullicio el encanto de aquel altarcito, que ella misma arreglaba y adornaba con flores.

Más de cuatro veces se habían preguntado sus parientes: «¿Qué llegará a ser, con el tiempo, esta niña?»

ENTRA AL CLAUSTRO A LOS 9 AÑOS

Apenas tenía nueve años cuando ya la voz de Dios se había dejado oír claramente en su alma, y la había invitado al recogimiento del claustro. Es cierto que era todavía muy jovencita para ser religiosa, pero su falta de edad era compensada por sus bellas cualidades y por su juicio de persona mayor. En aquella época, varios niños y niñas habían entrado en algunos conventos.

Así fue como Imelda pudo satisfacer pronto sus ansias de unirse con Jesucristo. Sin hacer caso de las advertencias de los parientes, ni de ninguna consideración humana, entró bien decidida y con el corazón lleno de alegría, en el monasterio dominico de Val di Pietra.

No había hecho aún la Primera Comunión, pues los niños, en aquel tiempo, no eran tan dichosos como ahora, cuando, por voluntad de la Santa Iglesia, pueden comulgar tan pronto. Por esta causa suspiraba siempre por el día más feliz de su vida, y era tan grande el concepto que tenía de la Eucaristía, que no podía entender cómo era posible no morir de amor al recibir el Pan de los Ángeles. Reiteradamente había suplicado al sacerdote que la dejase comulgar, pero no obtuvo esta gracia; su edad lo impedía; era demasiado pequeña.

EL MILAGRO DE LA HOSTIA FLOTANDO PARA IMELDA

Mas, he aquí que, el día 12 de mayo de 1333, cuando ya habían comulgado todas las monjas y cuando ya había sido cerrada la puerta del Sagrario y estaban apagados los cirios del altar, mientras las religiosas se dirigían a sus ocupaciones, Imelda se quedó postrada en tierra, en el coro, con gran desconsuelo. De repente, el coro se iluminó con una luz milagrosa y se llenó de un aroma suavísimo, que, esparciéndose por todo el convento, atrajo otra vez hacia la iglesia a todas las monjas.

Una Hostia se movía sola, en el aire, y parecía que quería ir hacia la monja-niña, que se derretía de amor, temblorosa y con las manos juntas, bajo la influencia del Sol de las almas. Al ver tal milagro, el sacerdote entendió claramente la voluntad de Dios, se revistió de nuevo, y tomando la Hostia que flotaba en el espacio, administró a Imelda la Sagrada Comunión.

Entonces Imelda cerró los ojos a toda cosa exterior, juntó las manos, inclinó la cabeza… y pareció quedar dormida. Pero pronto su color rosado se transformó en un color ligeramente blanquecino, y pasaron varias horas sin que se desvaneciera el encanto. Entonces las monjas presintieron lo que sucedía; se acercaron a ella, la llamaron, pero no respondió; estaba muerta, muerta de amor a Jesús, tal como se había imaginado

SE INICIA SU DEVOCIÓN

Un gran gentío acudió a Val-di-Pietra para ver el cuerpo de la joven novicia. Y nadie dudó en venerarla enseguida como bienaventurada.

Los restos, incorruptos, de la beata Imelda, se encuentran en la Iglesia de San Segismundo en Bolonia.

Fue beatificada en 1826 por el papa León XII, autorizando su oficio litúrgico y Misa propia. Fue declarada patrona de los niños de Primera Comunión en 1910 por el papa Pio X quien, en ese año, decreta que los niños podrían hacer su primera comunión a una edad menor a la establecida anteriormente.

Cada año, el día 12 de  mayo se celebra en el convento su fiesta con toda solemnidad

ORACIONES

ORACIÓN DE LA BEATA IMELDA

¡Oh Bienaventurada Imelda, amorosísima flor abierta al rayo del Sol Eucarístico!, henos aquí, amable protectora nuestra, postrados de hinojos en tu presencia y llenos de santa admiración y piadosos sentimientos por verte en tan tierna edad abrasada en los fervientes ardores del amor de Jesús, escondido en el Sagrario.

Pero si el recogimiento y el ardor de tu oración te pusieron bella y embalsamada, cual preciosísima flor, a sus divinos ojos, no nos sucede lo mismo a nosotros. ¡Grande es nuestra confusión al vernos tan ocupados con las mil vanidades del mundo, aun cuando queremos orar al pie de los altares! Nuestra alma, apenas en la primavera de la vida, aparece ya marchita y seca, como si no bastaran a reanimarla las aguas de la divina gracia. Préstanos tu ayuda, oh amabilísima Abogada nuestra, que cual rocío celestial refresques nuestro espíritu, que el mundo ha marchitado. Aprendan nuestros corazones, al contacto del tuyo, el amor a Jesús, y vuelvan amor por amor a quien nos ha amado hasta morir en la Cruz y quedarse en el Tabernáculo para llegar hasta nosotros.

V. Bienaventurada Imelda, Patrona de la Primera Comunión, ruega por nosotros.
R. Para que seamos dignos de las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.

Oración. Señor Jesús, que habiendo abrasado con el fuego de vuestro amor y recreado milagrosamente con el alimento de la Inmaculada Hostia a la Bienaventurada Imelda la recibisteis en el cielo, concedednos por su intercesión acercarnos a la sagrada Mesa con el mismo ardor de caridad que ella, de tal manera que ansiemos separarnos del cuerpo para unirnos a Vos, que vivís y reináis con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén.

ORACIÓN DE LOS NIÑOS A SU PATRONA, SANTA IMELDA

Niña querida del Niño Jesús, moriste de amor a El en la hora misma de recibir tu Primera Comunión; sé tú mi intercesora para con el divino Niño. Preséntale mi corazón; suple lo que a mí me falta para serle agradable; alcánzame la gracia de comulgar con las debidas disposiciones; tráemelo a mi lado a la hora de mi muerte para que mi alma expire abrazada a El y en compañía de ambos viva y reine en el cielo por los siglos de los siglos. Amén.

IMELDA por Jacinto Verdaguer 

De Jesús sacramentado
Imelda está enamorada:
ante él se pasa las noches
del atardecer al alba.
Mas, ¡ay!, las pasa llorando,
de mal de amor y añoranza.
De su sangre tiene sed,
y hambre de su carne santa;

y no puede todavía
comer el pan de las almas.
Le falta un abril a dos
para ser de El enramada:
muy linda tendrá que ser
si tan grande Amor la enrama.

A las plantas de Jesús
llora la pobre novicia:
– Me dicen que por pequeña
no comulgo todavía.
Pues vos, ¡mi amable Jesús!,
¿por ventura no decías:
«Dejad que los pequeñuelos
vengan en mi compañía?»
¿No amabais vos a los niños?
¿No lo eriais vos, mi delicia?
Jesús, ¡compasión de mi,
que de amor me siento herida!
Si no me acudís bien presto,
no me encontraréis ya viva.

El día de la Ascensión
despierta antes que la aurora:
sale al jardín del convento
a cortar lirios y rosas.
En cada flor que recoge
pone un beso de su boca.

Dice: Al lado de mi Amor
hoy exhalarás tu aroma:
¿y yo habré de estarme lejos
habiendo de ser su esposa?
La campana del convento
al templo llama a las monjas;
ella su ramito lleva
y en el altar lo coloca,
donde quisiera quedarse
para aspirar los aromas;
no los que exhalan las flores,
sino Aquel que la enamora.
Como abejas al panal
se acercan a Dios las monjas:
ella comulgar no puede
y se está detrás de todas.
Ve cuál fluye aquella fuente
y ardiente sed la devora;
de aquellas aguas del cielo
beber no puede una gota
y en lágrimas y Suspiros
su corazón desahoga.
De manos del sacerdote
de pronto vuela una hostia,
y va hasta Imelda volando,
como blanca mariposa.
El sacerdote la sigue
y el copón bajo coloca
para que retorne al nido
el pichoncito de gloria.
Mas él volando, volando,
nunca desciende a la copa,
pues no quiere Separarse
de Su celestial paloma.

El sacerdote, inspirado,
lo pone a Imelda en la boca…

Ya tiene lo que ella quiere;
nada en río de delicias.
No pudiendo soportarlas
cae al suelo amortecida,
y cual cristal que se rompe
su vida al romperse… expira.
Imelda muere de amor:
¡bien haya el que quiso herirla!
Quien de tal modo la hirió
bien será su medicina.
Hoy cuando asciende a los cielos
la lleva en su compañía.
¡La primera comunión
le es Viático a la niña!

Fuentes: Web Católico de Javier, Devocionario, Signos de estos Tiempos

 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
ARTÍCULOS DESTACADOS Beatificación Canonización Catolicismo Comulgar Milagro NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Noticias bis Religion e ideologías Sacramentos y sacramentales

La hostia con sangre que se conserva en Casia donde se ve la cara de Jesús

Dos milagros eucarísticos en uno.

 

Casia es un hermoso pueblecito en las montañas de la Umbría, conocido por ser la ciudad de Santa Rita, y conserva la reliquia de un insigne milagro eucarístico que tuvo lugar en 1330. En este pueblo descansa el cuerpo de Santa Rita en la basílica.

 

milagro-eucaristico-de-casia

 

Es el segundo milagro eucarístico de Siena. El primero, y más conocido se puede leer aquí.

DOS ACTORES DEL MILAGRO

En la capilla del milagro, debajo del tabernáculo hay una caja de cristal con los huesos del Beato Simone Fidati, quien estuvo envuelto en el Milagro Eucarístico. El Padre Simone fue sacerdote Agustino durante la mitad del siglo XIV.

Era conocido en la Umbría como un hombre sabio y santo, a pesar de que era muy joven. Otros sacerdotes le buscaban para confesarse.

El otro actor es un sacerdote al que el Beato confesó, de quien recibió el milagro eucarístico, y cuyo nombrte se ha perdido.

EL RELATO DEL MILAGRO

Durante el tiempo que el Beato Simone estuvo asignado al monasterio Agustino de Siena, un día un sacerdote vino a el para hacerle esta extraña confesión.

Había perdido su respeto por la Eucaristía. De esto nosotros podríamos deducir que el posiblemente no creía que en la Presencia Real de Jesús en la Eucaristía. En la vida de este sacerdote no quedaba entusiasmo. Hacía las cosas por rutina y porque tenia que hacerlo, pero cada vez se desprendía mas y mas de Dios y de su congregación.

Este sacerdote recibió una llamada de un enfermo. El sacerdote, en contra de las costumbres de la época, en que llevaban la comunión solememente tocando la campanilla por el camino, lo hizo de una manera oculta, dentro del Breviario y sin mayor devoción.

Cuando llegó a la casa del enfermo, lo preparó para recibir la Eucaristía. Abrió Breviario para tomar la Hostia y darle la comunión. Al abrir el libro, el sacerdote fue sacudido al encontrar en su lugar dos manchas redondas de sangre en las páginas, una frente a la otra. El sacerdote se fue de la casa con gran pánico, e inmediatamente buscó a Beato Simone, quien era conocido por su santidad.

El Beato Simone, escucho al sacerdote contarle su pecado y el milagro, y le dio la absolución. Pero obtuvo de el las dos páginas manchadas de sangre. Una fue puesta en un tabernáculo en Perugia y la otra, con la Santa Hostia adherida fue al monasterio Agustino en Casia.

LA VENERACIÓN DEL MILAGRO

El milagro Eucarístico ha sido venerado a través de los años en el monasterio Agustino de Casia. Fue verificado por el Obispo de allí. Ha sido llevado en procesión solemne durante la fiesta del Corpus Christi.

Esta fiesta del Corpus Christi fue instituida en Casia a raíz de este milagro eucarístico. Cada año era llevada la hostia del milagro en procesión por las calles de Casia. Se convocaba a toda la población a la iglesia de san Agustín y salía la procesión hasta la iglesia parroquial de Santa María della Pieve. Al regreso, tenía lugar en la iglesia de san Agustín una misa solemne, en la que elayuntamiento hacía la ofrenda de un cirio de diez libras.

El milagro Eucarístico ha sido venerado durante siglos por los fieles y su culto promovido por los Sumos Pontífices con la concesión de especiales e importantes indulgencias, como la de la Porciúncula, que le fue decretada por el Papa Bonifacio IX en 1401.

En 1930, hubo un Congreso Eucarístico en Norcia, cerca de Casia. En esta ocasión se hizo una hermosa Custodia para llevar el Milagro Eucarístico. Fue en honor del Sexto Centenario del milagro y fue publicada toda la documentación histórica disponible sobre el suceso. Cuando una nueva iglesia en honor de Santa Rita fue construida, al lado del monasterio Agustino, se construyo una capilla especial para el Milagro Eucarístico.

En la misma Iglesia donde está el cuerpo de Santa Rita, se ven alrededor del altar principal, los Milagros de Bolsena/Orvieto, Lanciano, San Antonio y el Burro, Santa Clara de Asis y los Sarracenos, y la Multiplicación de los Panes y los Peces. Otro vitral muestra un libro abierto, con dos manchas redondas rojas en las páginas una frente a la otra, este es el Milagro Eucarístico de Casia.

UN SEGUNDO MILAGRO

A este milagro se le atribuye un fenómeno muy extraño. ¿O podría ser un milagro dentro de un milagro?

A través de los años las personas empezaron a notar un cambio en la página con la mancha de sangre. Un rostro comenzó a aparecer en la página. Es casi como si un color más oscuro apareciera en ciertas partes de la página. Hay algunos que ven el rostro de Cristo. Cuando el sacerdote en el santuario abre el tabernáculo para mostrar a los fieles el Milagro Eucarístico, se pone sus vestimentas.

Cuando trae la Custodia al Altar, pone una linterna detrás de la página para mostrar el rostro. Es un perfil perfectamente formado de un hombre con barba y bigote.

Fuentes: Corazones, Signos de estos Tiempos

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo Normas NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Polémicas Signos extraordinarios de la Iglesia

La clamorosa decisión del papa Francisco de canonizar a Juan XXIII sin segundo milagro

Las razones que están detrás.

 

El papa Francisco tomó una decisión llamativa y criticada por algunos formalistas, al proceder a la canonización de Juan XXIII, sin que haya un milagro atribuido a su intercesión.

 

papa-juan-23

 

El papa Roncalli equilibrará así, de hecho, la otra canonización prevista, la de Juan Pablo II. Así se repetirá lo que aconteció en el año 2000, cuando la beatificación de Angelo Giuseppe Roncalli, el papa del Concilio Vaticano II, fue acompañada por la de Pío IX, a fin de equilibrar.

Francisco ha dispuesto que para Roncalli no sea necesario el milagro y que bastan la perseverante fama de santidad que rodea a su figura y la “fama signorum”, es decir, las gracias atribuidas a él, que siguen siendo testimoniadas (aunque ninguna de ellas ha sido certificada canónicamente como verdadero y auténtico milagro).

En la práctica, entonces, Francisco ha usufructuado al máximo el poder pontificio del que dispone en cuanto jefe de la Iglesia universal, para asumir una decisión que no parece tener precedentes en lo que se refiere a causas que no incluyen mártires.

De hecho en 1982, al forzar normas y praxis tradicionales, Juan Pablo II canonizó a Maximiliano Kolbe – quien había sido beatificado por Pablo VI como confesor inmediatamente después de los dos milagros requeridos en esa época –, proclamándolo mártir de la caridad.

Y luego en el año 2000 canonizó a 120 mártires de China, “eximiendo” a cada uno de ellos del milagro. Esa acción provocó una grave crisis con el gobierno de Beijing, también porque el rito se celebró el 1º de octubre, fiesta nacional de la República Popular China, una decisión ésta última que fue considerada como una “gaffe” del también combativo cardenal Joseph Zen.

En medio de las sesiones de trabajo del Concilio, el teólogo Yves Congar escribió en su diario que el cardenal belga Lèon Joseph Suenens quería concluir las modificaciones al esquema “De Ecclesia” con la petición de canonizar (por aclamación) a Juan XXIII. «Un objetivo que hay que obtener inmediatamente», escribió Congar.

Esta petición contaba con el apoyo de muchos otros padres conciliares y de una multitud de fieles. Como se recordará, el 5 de julio pasado, el Papa Francisco promulgó el decreto sobre el milagro por intercesión del Beato Juan Pablo II y al mismo tiempo aprobólos votos favorables que expresó la Sesión ordinaria de los cardenales y de los obispos para la canonización “pro gratia” del beato Juan XXIII.

Esto quiere decir –escribe “Avvenire” – que el Papa Bergoglio acogió favorablemente los motivos presentados por la Congregación de los santos sobre la instancia de la postulación de la causa de Juan XXIII, para poder proceder a su canonización incluso en ausencia de un milagro formalmente reconocido, como sucede normalmente para llegar a la proclamación de la santidad.

Según la actual normativa canónica, de hecho, se puede acceder a la canonización –explica el artículo– solo después de la aprobación de un milagro atribuido a la intercesión de un candidato al culto de la Iglesia universal, que sea mártir y confesor de la fe, ya beatificado. Sin embargo, no es ninguna novedad la proclamación de la santidad con base en otros elementos y motivos que pueden sustituir un milagro científica y teológicamente demostrado

No se trata, pues, ni de un atajo ni de ninguna simplificación o decisión arbitraria. Se trata, más bien, de una excepción que está contemplada en la normativa y que ha tenido varios antecedentes.

Las principales razones por las cuales se procedió a la canonización son, básicamente, dos:

La primera tiene que ver con la excepcional vastidad del culto litúrgico ya dedicado al beato, que, previa petición de autorización, fue concedido por la Santa Sede a diferentes diócesis del mundo, desde Asia hasta América. La memoria litúrgica de Juan XXIII, oficialmente inscrita en el calendario de las Iglesias particulares, se configura, de hecho, como algo semejante a la de un santo canonizado.

A este culto –recuerda “Avvenire”– se une el aumento de la fama y de los signos y milagros que acompaña en el pueblo de Dios la memoria del Papa bueno. A partir del día de su beatificación, el 3 de septiembre de 2000, llegaron a la postulación numerosas indicaciones de gracias y favores obtenidos por intercesión del beato en todo el mundo, a menudo acompañadas con documentación médica. Alrededor de unos veinte son los casos más interesantes.

La segunda de las razones fue justamente la petición de los padres del Concilio Vaticano II que, inmediatamente despuésd e la muerte de Juan XXIII,

esperaron su inmediata canonización, incluso como acto del Concilio. Ninguno de los candidatos a la canonización puede, pues, presumir actualmente de una excepcionalidad parecida: un culto litúrgico ya difundido en la Iglesia universal y una petición de canonización por aclamación expresada en un Concilio. Estas son las principales razones por las que Papa Francisco aprobó que se procediera a la canonización del beato Juan XXIII.

Fuentes: Vatican Insider, Avvenire, Sandro Magister, Signos de estos Tiempos  

 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Recuerdo de sucesos Sacerdotes Signos extraordinarios de la Iglesia Sociedad Vida

El Cardenal Dziwisz recuerda sus 40 anos de secretario de Juan Pablo II

Karol Wojtyla fue un santo y será canonizado este año.

 

Quien fuera secretario personal de Juan Pablo II por 40 años, Stanislaw Dziwisz, rememora al próximo Santo y se congratula que así sea.

 

juan pablo ii

 

Dziwisz también escribió un libro sobre estos 40 anos, Una vida con Karol, donde recuerda aquel intento fallido de impartir la bendición Urbi et Orbi pocos días antes de morir, que se nos aparece con una carga emotiva aún más dramática, cuando leemos que Juan Pablo II se había preparado con sumo cuidado para la ceremonia. Pero finalmente no pudo hacerlo: le falló la voz, se quedó sin fuerzas. Entonces dio paso a la resignación: «Hágase tu voluntad… Totus tuus».

HABÍA ALGO MÁS EN ÉL

Pasé casi cuarenta años junto a un santo, trabajando a su lado en Cracovia y el Vaticano. Me preguntaron varias veces cuando Juan Pablo II se convirtió en un santo. Creo que se ha convertido desde su juventud. Karol Wojtyla era un tipo normal, fuerte y sensible, lleno de energía y entusiasmo por la vida. Pero desde el principio había en él algo «más».

No es fácil de descifrar este misterio, pero no hay duda de que el centro de la existencia de Karol Wojty?a fue Dios, Jesucristo, fue su primer y gran amor. Y allí permaneció fiel hasta el final. Hasta el último aliento. La fidelidad en el amor manifestado en la oración y el servicio. Karol Wojty?a mantuvo un diálogo con su Creador y Redentor. Nos reunimos con él, sobre todo en el santuario de su corazón. Además, se solicitó a la creación, en la belleza de la naturaleza, pero sobre todo en los hombres. Eran legendarias sus vacaciones con los jóvenes, más allá de los lagos y las montañas.

La profundidad de la contemplación del futuro Papa dio el fruto de su celo en el servicio a la Iglesia.Fue puesto a disposición de Jesús. Y Jesús, conociendo sus cualidades de mente y corazón, le confió cada vez más responsabilidad hasta memorable 16 de octubre 1978. Desde ese día, la santidad del Obispo de Roma y Pastor de la Iglesia universal comenzó a hacerse visible para todo el mundo.

UN MAESTRO

Juan Pablo II tuvo que ampliar el tamaño de su corazón, para hacer lugar a todas las naciones, culturas y lenguas. Todo el mundo pudo verlo sumido en oración, con fervor proclamar la palabra de Dios, celebrar la Eucaristía con la mayor atención, enriquecer a la Iglesia con sus enseñanzas, ir en peregrinación a los rincones más lejanos de la tierra. La gente amaba a Juan Pablo II. Estaba fascinada por su personalidad, su humanidad. Vio la presencia de Dios.

Incluso el joven, sensible a la belleza, a la bondad y a la verdad, encuentró en Juan Pablo II un maestro. Que le enseñó la autenticidad de la vida. Era un maestro exigente. En la vida siempre apuntado alto y tenía la valentía de proponer al otro los más altos ideales de amor y servicio. El ideal de la santidad.

TEMPLADO POR EL SUFRIMIENTO

La santidad de Juan Pablo II también se manifestó a través del sufrimiento. Dios puso a prueba el oro en el crisol. Aceptó el sufrimiento con humildad y sumisión a la voluntad de Dios, con la Iglesia que Él compartió la experiencia del sufrimiento personal en un espíritu de fe. Sus palabras sobre el sentido del sufrimiento, su dimensión salvífica, fueron las palabras auténticas, que él mismo experimentó. 13 de mayo 1981, en la Plaza de San Pedro estuvo cerca de martirio. Dios le salvó la vida porque debía introducir a la Iglesia en el tercer milenio del cristianismo, para que nos ayudara a todos a «despegar».

Solemos contemplar las imágenes de aquella visita del Papa a Alí Agcá en la cárcel de Rebibbia como prueba de la redención del segundo ante el amor y el perdón del primero; pero don Stanislaw nos aparta un poco de esa impresión un tanto idílica. Agcá era un asesino profesional que sabía muy bien lo que hacía, y cuando apuntó y disparó no le cabía duda de que el Papa moriría. De hecho, su primera pregunta cuando éste fue a visitarle fue:

«¿Por qué no está usted muerto?».

Agcá no encontraba explicación racional al hecho de que su víctima siguiera viviendo; es más, estaba angustiado, obsesionado por la existencia de fuerzas poderosas que lo superaban, que él no conocía y que habían impedido que las cosas siguieran su curso. Ahora podían vengarse de él. «La diosa de Fátima», como él decía.

El criminal quería hablar con el Papa, sí, pero sólo para sonsacarle sobre esas «fuerzas» que le atemorizaban. Nunca jamás le pidió perdón. Cinco veces en cuatro páginas repite don Stanislaw, con dolor e indignación, que Agcá jamás pidió perdón a Juan Pablo II.

UN PAPA DE ESCALA MUNDIAL

Dice Stanislaw que estuve al lado de Juan Pablo II la mayoría de su servicio sacerdotal en la Iglesia. Y fue testigo todos los días de su oración y su trabajo, su descanso y su sufrimiento, sus viajes y sus muchas reuniones con la gente.

La santidad de Juan Pablo II era sencilla, humilde y servicial. Vivió para Dios y para llevar a otros a Dios, vio y escuchó a millones, estaba en boca de todo el mundo, aplaudido y criticado, convirtiéndose en un signo de contradicción como defensor de la vida y la dignidad humana.

Contribuyó a la caída de los sistemas totalitarios y a la apertura de muchas puertas a Cristo. Lo hizo con fuerza extraordinaria. Era un gigante de la fe. Un espíritu poderoso.

GRACIAS POR SU BEATIFICACIÓN Y CANONIZACIÓN

Damos las gracias a Benedicto XVI por haber iniciado el proceso de beatificación y canonización de Juan Pablo II, unos meses después de su muerte. Estamos muy agradecidos por la beatificación de hace dos años. Hoy damos gracias al Santo Padre Francisco por su decisión de la canonización del Beato Juan Pablo II. Este será el último sello de autenticidad de la santidad de este Papa, que llegó a Roma desde Polonia, «de un país lejano.»

Durante el funeral de Juan Pablo II, el 8 de abril de 2005, el momento más difícil para mí fue que cubrir con un paño de cara del difunto Pontífice. Esa cara tan cercana, tan amable, tan humana. Hoy estoy encantado por el hecho de que a partir de ahora en toda la Iglesia tendrá el rostro de un nuevo santo, St. John Paul II.

Fuentes: Libertad Digital, Tempi, Signos de estos Tiempos 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo Milagro NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Religion e ideologías Signos extraordinarios de la Iglesia

Revelación del milagro que permite la beatificación de Mons. Alvaro del Portillo

Entrevista a la madre del niño sobre el que actuó Mons. del Portillo.

 

El milagro fue hace diez años en Chile y el protagonista es el niño chileno José Ignacio Ureta Wilson, quien a los pocos días de nacer, sufrió un paro cardiaco de más de media hora y una hemorragia masiva. Su corazón estuvo treinta minutos sin latir,
“y sin mediar explicación -cuenta el médico que trataba infructuosamente de reanimarle-, el corazón de José Ignacio retomó el ritmo…”. El niño “no debería caminar, no debería correr, no debería saltar. Todo en él en su milagro”, dice su madre, Susana Wilson.

 

susana wilson su hijo y su esposo

 

Los padres de José Ignacio rezaron por su hijo pidiendo la intercesión del Venerable Siervo de Dios Álvaro del Portillo desde el embarazo, que presentó numerosas dificultades. Durante algún tiempo, la madre incluso llevó sobre su vientre una estampa de Don Álvaro. Después puso una estampa sobre la cuna del niño y pidió a sus amigos y familiares que encomendaran la salud de su hijo a Mons. del Portillo.

UNA ENTREVISTA A LA MADRE DE JOSÉ IGNACIO

¿Qué edad tiene actualmente José Ignacio?

El día 10 de julio va a cumplir diez años. Nació el 10 de julio de 2003.

Nació con problemas, ¿no es cierto?

Bueno, en realidad los problemas se manifestaron bastante antes del nacimiento. Ya en enero de 2003, cuando yo estaba esperando a José Ignacio, se nos señaló que su nacimiento no sería fácil ya que era muy probable que naciera con onfalocele (hernia intestinal). Desde ese momento nos encomendamos a don Álvaro y rezamos su estampita. Cuando me hicieron la ecografía, en marzo, el diagnóstico se confirmó.

A principios del mes de junio me debieron internar en la clínica para que el embarazo pudiera concluirse felizmente. La espera se nos hizo eterna, fueron momentos difíciles pues nuestro hijo mayor se quedaba en la casa y sentía el nerviosismo de sus padres.

Cuando por fin José Ignacio nació, pesaba 1 kilo y 750 gramos: eso para los doctores era un éxito, ya que de él se esperaba nada más que 1 kilo y medio.

¿No se había detectado ningún fallo en el corazón?

Antes del nacimiento, no. Pero después los doctores, para poder operar lo antes posible el onfalocele, hicieron varios exámenes, y enseguida detectaron que José Ignacio tenía una malformación cardiaca con consecuencias graves para la circulación de la sangre.

Las crisis del corazón fueron constantes desde el primer momento. El día sábado 12 de julio operaron a José Ignacio de onfalocele, pero todo se complicó, porque le bajó la temperatura, tuvo un paro cardiaco y hubo que terminar la operación de urgencia. En los días siguientes hubo nuevas crisis, y sufrió un daño en el cerebro: tenemos una ecografía del 28 de julio que muestra cambios en la masa cerebral, con lesiones en los dos hemisferios debidas a falta de irrigación.

Un día comencé a rezar en silencio, y me pareció que los índices de saturación de oxígeno reflejados en la pantalla de José Ignacio se estabilizaban poco a poco. Recuerdo que se lo dije a mi marido. En cierto momento, la enfermera de turno pasó a ver cómo estaba, y al ver que la saturación parecía mejor disminuyó el respirador para que José Ignacio fuera de a poco respirando por sí solo. Ese fue el momento clave para reafirmarnos en la convicción de que don Álvaro estaba ayudándonos y volví a insistir a más personas a que, por favor, siguieran rezando a don Álvaro por José Ignacio.

En un principio la idea era lograr estabilizar a José Ignacio, darlo de alta y al cabo de un año operarlo, pero en vista de la situación los doctores decidieron hacerle una operación paliativa, para poder después hacer su operación definitiva.

José Ignacio fue operado del corazón el 30 de julio, a 20 días de su nacimiento, y durante las primeras 48 horas de postoperatorio todo fue muy bien. Se veía contentos a los doctores.

Después, la situación cambió de golpe.

¿Qué sucedió?

El día 2 de agosto, cerca de las 14:30, nos pidieron que fuéramos de inmediato a la UCI pediátrica de la Universidad Católica, porque José Ignacio estaba muy mal. Nos imaginamos que la gravedad debía ser extrema. Rezamos a lo largo de todo el camino. Al llegar pedí ver a mi hijo y me dijeron que no era posible porque lo estaban reanimando. Salí casi sin poder caminar de los nervios, abracé a mi suegro que se encontraba ahí en ese minuto y comencé a rezar la estampita de don Álvaro sin parar. Terminaba y empezaba nuevamente, no hacíamos otra cosa.

Llamamos a varias personas y pedimos que le avisaran a todo el mundo que se rezara a don Álvaro del Portillo pidiendo por José Ignacio.

Una enfermera me contó luego que ese día ella vio a José Ignacio y le sorprendió lo raro que se veía, aunque sus índices eran normales. Decidieron hacerle un ecocardiograma, y fue entonces cuando se dieron cuenta del derrame en el pericardio y comenzaron de inmediato las maniobras para reducirlo. Luego sobrevino el paro.

¿Otro paro cardiaco, como los de antes de la operación?

No: este paro duró más de media hora. Los médicos ya lo daban por muerto, porque no reaccionaba ni al masaje cardiaco ni a nada. Pero cuando estaban empezando a desistir, el corazón de José Ignacio volvió a latir.

Aun así, la hemorragia había sido masiva. Recuerdo que fue el doctor Felipe Heusser, cardiólogo de la Universidad Católica, quien nos comunicó que José Ignacio había recobrado la frecuencia cardiaca, pero había sufrido un derrame en el sector del pericardio y también alrededor del riñón.

Entramos a verle y su color era fantasmal, nos dio mucha pena. Sus uñas se veían moradas: según me habían explicado, era una consecuencia de la falta de oxigenación.

Durante todo ese día los rezos fueron intensos.

¿Cuándo comenzó la recuperación?

Al día siguiente a primera hora nos informaron que José Ignacio había pasado bien la noche. Cuando lo fuimos a ver me sorprendió su color saludable como el de un niño recién nacido y que sus uñas ya no tenían aquel color morado.

Recuerdo que el doctor de turno nos comentó que el doctor Heusser había llegado preguntando a qué hora de la noche había muerto José Ignacio. Es un detalle que siempre me ha parecido sorprendente, porque es lo mismo que preguntó el doctor al padre de san Josemaría cuando tuvo una enfermedad grave, de niño.

El doctor Heusser me ha confirmado que jamás pensó que viviría. Constantemente me recalca lo sorprendente de la salvación de José Ignacio. Una vez nos preguntó a quién le habíamos rezado. Los demás doctores también estaban sorprendidos.

¿Ahora José Ignacio hace vida normal?

Hace la vida normal de un niño de su edad, aunque ha tenido que ir superando unas dificultades de partida con las que otros niños no se han encontrado. Después de todo lo que le sucedió, pensábamos que no le quedaba más alternativa que morir o, si sobrevivía, permanecer postrado en una cama. Por eso, para nosotros todo lo que José Ignacio hace solo tiene explicación a la luz de Dios y de la intercesión de don Álvaro.

Es un fanático futbolista. En cuanto tiene ocasión, se pone su polera de Alexis Sánchez, o de Messi, o la de su equipo, el Colo-Colo, y juega fútbol con sus amigos. También le gusta el tenis, y un profesor con el que ha jugado en nuestras estadías en el campo dice que es muy coordinado y entusiasta. Bailando es incansable: le gusta mucho la música, y se le puede ver en la casa cantando canciones inventadas por él y bailando todo tipo de ritmos. En el matrimonio de su tía bailó sin cesar hasta que terminó la fiesta.

¿No ha tenido secuelas de tipo neurológico?

José Ignacio toma remedio para la concentración y, como algunos de sus compañeros, tiene una psicopedagoga que lo ayuda a avanzar. O sea, se puede decir que las dificultades que ha tenido entran dentro de lo normal. En el colegio, la lectura y la escritura le han costado, pero ahora se las arregla bastante bien.

A juicio de la psicopedagoga, José Ignacio puede dar mucho de sí y es muy astuto. A veces cuando hace una tarea y no le resulta se enoja, pero luego recapacita y vuelve a trabajar. Tiene la perspicacia de captar todo rápidamente, y luego es capaz de utilizarlo como broma para reírse o como argumento para justificar algo. En las comidas nos hace reír mucho, pues siempre tiene el humor a flor de piel.

¿Cómo describiría el temperamento y la personalidad de su hijo?

Soy su madre, y reconozco que a veces puedo perder la objetividad. Pero intentaré apegarme lo más posible a la realidad, sin dejarme guiar por los sentimientos o por el orgullo de tener un hijo como él.

José Ignacio es un niño alegre, entusiasta, muy motivado. También destacan en él la perseverancia, la poca tolerancia a la frustración, una gran autoestima y la sociabilidad.

En el colegio tiene muchos amigos con los que se junta para hacer tareas, o para jugar wii o play station o fútbol. Lo invitan mucho a otras casas de compañeros, es un líder dentro del curso. También es amigo de muchos profesores, auxiliares y alumnos más grandes que él. En la fiesta del colegio participó en un concurso de baile, y no tuvo problema en pedirle el micrófono a los más grandes para cantar una canción.

Una anécdota que recordamos, de cuando tenía ocho años, es la de un profesor de religión que lo ve llegar al colegio con una rica colación en la mano. Con mucho entusiasmo le dice a José Ignacio que esa colación está muy rica para tomársela acompañada de un café, y él le responde: “mejor acompañada de una cervecita”. Ese humor rápido es permanente en él.

Pese a que el colegio no le ha salido fácil, ha sabido ser perseverante y jamás ha disminuido su autoestima por ello. Si algo le cuesta, pide ayuda y no se hace problema.

En familia es también un niño alegre, luchador y gozador de la vida. El nacimiento de su hermano pequeño, hace algo más de un año, lo llenó de felicidad: le canta, le conversa, lo toma en brazos, se preocupa si llora y está pendiente de quienes se acercan a él, para protegerlo.

¿Puedo preguntarle qué ha supuesto para usted y para su marido esta historia?

Ha supuesto mucho espiritualmente. También ha dejado huella en otros aspectos, pero sobre todo ha sido importante en el aspecto espiritual. Cuando analizamos nuestra vida de matrimonio, nos damos cuenta de que para nosotros la “aventura” de José Ignacio ha sido un proceso de conversión y de acercamiento muy profundo a Dios.

Fue en ese entonces cuando descubrimos nuestra vocación al Opus Dei. Yo mientras hacía reposo en la clínica, antes de que José Ignacio naciera, y mi marido al tiempo después. Esperamos que don Álvaro siga intercediendo por nosotros en el futuro, como hasta ahora.

¿Cree que el caso de José Ignacio encierra algún mensaje que pueda interesar a todos?

Es una llamada a la esperanza para todos los que viven en dificultades. José Ignacio es un recuerdo vivo del regalo que Dios nos ha hecho trayéndonos a este mundo, y su perseverancia nos muestra lo que significa luchar día a día y dar lo mejor de nosotros mismos en las circunstancias de la vida en que nos encontremos. En momentos en que las circunstancias son adversas, estar cerca de Dios es lo que da la fuerza para salir adelante.

Fuentes: Alfa y Omega, Signos de estos Tiempos

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
ARTÍCULOS DESTACADOS Beatificación Canonización Catolicismo Comulgar Eucaristía Milagro NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Noticias bis Religion e ideologías Sacramentos y sacramentales

El milagro eucarístico de Rímini: San Antonio y la Mula

La creación reconoce la presencia real de Dios en la Eucaristía.

 

La presencia de real de Jesús, en su carne y sangre, en la hostia consagrada por un sacerdote no sólo es un dogma de fé católico, sino que muchos milagros la han demostrado, como el más glamoroso hoy, que involucró a Jorge Bergoglio (papa Francisco) cuando era obispo auxiliar de Buenos Aires, denominado el “Milagro Eucarístico de Buenos Aires”; ver aquí su historia: El Papa Francisco fue protagonista de uno de los mayores milagros eucarísticos de la historia. (Esta hostia bonaerense que ha sido estudiada, es venerada todos los días jueves en la parroquia de Santa Maria en Buenos Aires).

 

san antonio y la mula

 

El caso que nos ocupa involucra a San Antonio de Padua que fue uno de los Santos más fervorosos amantes de Jesús Sacramentado. Y Jesús le recompensó este afecto eucarístico valiéndose de él para comprobar con un gran milagro el dogma de su presencia real en el Sacramento del Altar.

LOS HEREJES PATARINOS

Los herejes patarinos (así se denominaba a los cátaros en el norte de Italia)  habían, entre otros, desfigurado completamente el dogma de la presencia real, reduciendo la Eucaristía a una simple cena conmemorativa. Con esto herían a la Iglesia en lo que le era más vital, ya que la Eucaristía es precisamente el centro del corazón de la Iglesia, y de este Sagrado Corazón le fluye la sangre y la vida, se irradia la luz de la verdad, la llama del amor y se derivan todas las gracias.

Rímini, situada junto al Adriático, entre los ríos Marechia y Ansa, era una de las ciudades principales de Italia donde los mencionados herejes se habían hecho más fuertes. Allí fue a predicar San Antonio de Padua e ilustró tan plenamente la realidad de la presencia de Jesús en la Hostia Santa, que aquellos herejes se hubieran convertido con sólo la predicación del Santo de no haberlo impedido algunos jefes de aquella secta.

EL DESAFÍO DE UN MILAGRO QUE DEMUESTRE LA REAL PRESENCIA

En el año 1227, Bonvillo, que por su posición social, formación y elocuencia gozaba de gran prestigio entre ellos, levantando al aire el grito de protesta, dijo a San Antonio:

No queremos razones, queremos pruebas. Solamente creeremos que Jesucristo está real y verdaderamente presente en la hostia que tú dices santa si con un milagro lo pruebas.

¿Un milagro pides para creer? — contestó San Antonio —. Pues conforme. Elige el milagro que tú quieras.

– Mira — repuso Bonvillo —, yo tengo en casa una mula. La tendré tres días continuos sin comer ni beber. El tercer día nos juntaremos en la plaza: tú, con la eucaristía que dices está Cristo, y yo, con la mula y una ración de cebada. Si la mula, hambrienta, al presentarle la cebada deja el pienso y adora la eucaristía, entonces creeremos y nos convertiremos a vuestra fe.

– Acepto tu propuesta — contestó San Antonio de Padua, plenamente confiado en que Dios obraría el milagro pedido para hacer triunfar su Causa.

LA PREPARACIÓN

Talmente como si fuese un reguero de pólvora corrió la noticia de lo convenido entre Bonvillo y Antonio de Padua. Este se retiró inmediatamente a hacer penitencia y oración, para más obligar a Dios a realizar el milagro que los herejes pedían como condición para creer en la presencia real de Jesús en la Eucaristía. Aquél corrió a someter a su mula a riguroso ayuno.

Llegó el tercer día. La plaza la llenaba una multitud de gente sobre toda ponderación. Bonvillo entró en ella entre los gritos aclamadores de sus correligionarios, llevando a su mula ayuna de tres días y una ración de cebada. Antonio hizo su entrada acompañarlo de algunos religiosos y católicos, humilde, modesto, y llevando con reverencia y fervor en sus manos la custodia con la Eucaristía.

EL MILAGRO EUCARÍSTICO DE RÍMINI

Antonio y Bonvillo se acercan y se ponen frente a frente. Cesa el vocerío y se hace un silencio sepulcral. Todos los ojos están clavados en la custodia y en la mula

A una señal convenida, Bonvillo presenta la ración de cebada a la mula Entonces, San Antonio, rompiendo el silencio, y dirigiéndose al hambriento animal, le dice:

En el nombre del Señor, a quien yo tengo en mis manos, te mando que vengas a hacer reverencia a tu Creador, para que todos entiendan la verdad de este altísimo Sacramento y sepan que hasta las criaturas irracionales están sujetas a su Criador.

¡Cosa admirable! La mula olfatea el cesto del tan apetecido pienso, y, en vez de probar la cebada, se vuelve de repente hacia la parte de San Antonio, dobla las rodillas delanteras e inclina la cabeza en señal de adoración a la Eucaristía, en la que está su Creador.

Una verdadera tempestad de vítores y aplausos se levantó en medio de aquella plaza, mientras Bonvillo, los demás herejes y todos los concurrentes, cayeron de rodillas y adoraron con fe y con amor a Jesús Sacramentado.

Este milagro fue verdaderamente el golpe dado a la herejía por nuestro Santo. Para perpetuar su memoria, en 1518, se erigió un templete de forma octogonal, que aún se conserva, en la plaza donde tuvo lugar el suceso, llamada plaza del Mulo.

Fuentes: Fr. Pacífico Torres, ofm, Signos de estos Tiempos

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Signos extraordinarios de la Iglesia

Juan Pablo II y Juan XXIII serán declarados santos a fin de año

El papa Francisco ya aprobó los milagros.

 

Francisco firmó el decreto por el cual se canonizará a Juan Pablo II y Juan XXIII y se especula que ambos será declarados santos en noviembre o diciembre de este año.

 

juan pablo ii y juan xxiii

 

También aprobó el acta de martirio de 43 sacerdotes y religiosas españoles, y el milagro para la beatificación de Mons. Álvaro del Portillo, primer sucesor de San Josemaría Escrivá al frente del Opus Dei. Y finalizó el proceso diocesano para la beatificación del cardenal vietnamita François-Xavier Nguyen Van Thuân.

LOS DOS PAPAS JUAN PABLO II Y JUAN XXIII

El Papa Francisco ha aprobado el decreto por el que canonizará a los beatos Juan Pablo II y Juan XXIII, según ha explicado el portavoz de la Oficina de Prensa del Vaticano, el padre Federico Lombardi.

Los cardenales y obispos de la Congregación para las Causas de los Santos aprobaron este martes el segundo milagro atribuido al beato Juan Pablo II y que abre las puertas a su canonización, según informaban fuentes vaticanas.

Aunque todavía no había confirmación oficial, las mismas fuentes barajaban la fecha del 24 de noviembre, el término de la celebración del Año de la Fe, o el 8 de diciembre, como posibles fechas para la ceremonia de canonización de Juan Pablo II.

Además, la prensa italiana ya indicaba el martes que la ceremonia de canonización de Juan Pablo II podría realizarse junto con la de Juan XXIII, conocido como el ‘Papa bueno’.

Así, el diario italiano ‘La Stampa’ señalaba este martes que «inesperadamente, los cardenales y obispos también tendrán que discutir sobre otro caso, que se ha añadido en estos últimos días, el de la canonización de Juan XXIII», el Pontífice que convocó el Concilio Vaticano II, fallecido hace 50 años y cuya beatificación se produjo en el año 2000.

En esta línea, precisaba que este cambio «no previsto» demuestra «la voluntad para celebrar juntas» las dos ceremonias de canonización y señala que Wojtyla y Roncalli,

«podrían ser santificados es diciembre de 2013, inmediatamente después de que termine el Año de la Fe, dado que la hipótesis inicial de octubre parece cada vez menos plausible por la falta de tiempo y por problemas de organización».

Karol Wojtyla fue beatificado el 1 de mayo de 2011, tras aprobarse un primer milagro con la firma del ahora Papa emérito Benedicto XVI. En aquella ocasión, se trató de la curación, dos meses después de su muerte, de la monja francesa Marie Simon Pierre, que padecía desde 2001 la enfermedad de Parkinson, la misma que sufrió Juan Pablo II en sus últimos años.

Por su parte, Juan XXIII fue beatificado por Juan Pablo II en septiembre de 2000, durante el Jubileo, en la misma celebración de la beatificación de Pío IX. En aquella ocasión, el milagro aprobado para su beatificación la curación de sor Caterina Capitani en 1966.

El Papa Juan XXIII convocó el Concilio Vaticano II y murió mientras el Concilio seguía su curso, muchos obispos propusieron proclamar al ‘Papa bueno’ santo por aclamación, pero su sucesor, Pablo VI, prefirió seguir las vías canónicas, por lo que se puso en marcha un proceso canónico y después fue beatificado con su predecesor Pío XII.

Además de aprobar los decretos para la canonización de los beatos Juan Pablo II y Juan XXIII, el Papa Francisco también promulgó el acta de martirio de 42 sacerdotes y religiosas españoles que murieron por odio a la fe, y el acta que reconoce el milagro atribuido a la intercesión del Siervo de Dios Álvaro del Portillo, primer sucesor de San Josemaría Escrivá.

LOS 42 MÁRTIRES

Los 42 mártires se dividen en cuatro grupos y se unirán a la causa de los 480 mártires a ser beatificados el 13 de octubre en Tarragona (España).

Las actas de martirio aceptadas por Francisco son las del siervo de Dios José Guardiet y Pujol, sacerdote diocesano, nacido en Manlleu (España), y que murió el 3 de agosto de 1936 por odio a la fe. El Siervo de Dios Mauricio Íñiguez de Heredia y 23 compañeros mártires de la Orden de San Juan de Dios que fueron asesinados entre 1936 y 1937.

El Siervo de Dios Fortunato Velasco Tobar y 13 compañeros mártires de la Congregación de la Misión, que murieron entre 1934 y 1936; y la Sierva de Dios María Asunta y dos compañeras mártires, religiosas de la Congregación de las Hermanas Franciscanas de la Madre del Divino Pastor, que fueron asesinadas en 1936.

MONSEÑOR ÁLVARO DEL PORTILLO

También ha aprobado otro milagro atribuido a la intercesión del Venerable Álvaro del Portillo, primer sucesor de San Josemaría al frente del Opus Dei.

Para el obispo Javier Echevarría Prelado del Opus Dei estos informes son

«una fuente de gran alegría y una feliz coincidencia.» 

«Juan Pablo II – dijo el prelado -, ha invertido generosamente y sin reservas al servicio de la humanidad. Nos acercó a Dios con su magisterio fecundo: a través de sus discursos, escritos, imágenes y muchos gestos llenos de significado. Toda su vida se basa en una unión íntima con Jesucristo: fue suficiente para ver cómo él oró para comprender la fecundidad de su ministerio» 

El milagro aprobado por la Santa Sede por intercesiónm de Portillo se refiere a la curación instantánea del niño chileno José Ignacio Ureta Wilson, que, pocos días después del nacimiento, sufrió un paro cardíaco de más de media hora, y sangrado severo. Sus padres oraron con mucha fe a través de la intercesión del obispo Alvaro del Portillo, y cuando los médicos pensaban que el bebé estaba muerto, sin ningún tratamiento adicional y de forma inesperada, el corazón del recién nacido comenzó a latir de nuevo, para llegar a 130 latidos por minuto. A pesar de la gravedad del cuadro clínico, diez años después de José Ignacio vive una vida normal. La curación milagrosa se llevó a cabo en agosto de 2003.

El proceso de beatificación se abrió el 5 de marzo de 2004 y su primera fase se desarrolló en la diócesis de Roma -ciudad en la que vivió casi 50 años y murió en 1994- y en la Prelatura del Opus Dei.

EL CARDENAL VAN THUÂN HACIA LOS ALTARES

También este viernes concluyó la fase diocesana del proceso de beatificación del cardenal vietnamita François-Xavier Nguyen Van Thuân (1928 – 2002).

Obispo de Nha Trang y después consagrado arzobispo de Saigon, pocos días antes de que las tropas del general Ho Chi Ninh conquistaran la capital de Vietnam del Sur, Van Thuân fue durante 13 años uno de los prisioneros del régimen comunista; después habría sido exiliado. En el Vaticano, Van Thuân fue secretario y después presidente del Pontificio Consejo “Justicia y Paz”; Juan Pablo II lo creó cardenal y murió en 2002.

“La mayor ambición del cardenal Van Thuân, educador de su gente –dijo el cardenal Peter Appiah Turkson, presidente del dicasterio vaticano, durante la presentación del volumen–, era la de ser (como, por lo demás pretendía la Madre Teresa de Calcuta) un “lápiz en manos de Dios”, para que Él escribiera lo que quisiera”.

Según monseñor Mario Toso, secretario del Pontificio Consejo “Justicia y Paz” ante la crisis de la representación y de la política a nivel global, Van Thuan elaboró respuestas muy semejantes a las del cardenal Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco.

“En momentos de fuertes contrastes sociales y de degradación política […] los más fuertes son propensos a ver a los más débiles como vida de deshecho, tal y como ha recordado recientemente Papa Francisco”, indicó.

Y, qué mejor ejemplo de respuesta a esta cultura que el ejemplo del cardenal vietnamita, que,

“aún siendo prisionero, en condiciones de pobreza y de restricciones de su libertad, no perdió el ánimo, no se abandonó al odio hacia sus carceleros […] Mientras era “reeducado” por la fuerza, él educaba con otro método a sus enemigos. Los guardias se convirtieron en sus alumnos”.

 Fuentes: Vatican Insider, ACI Prensa, Korazym, Signos de estos Tiempos 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo Curación inexplicable Curaciones Milagro NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Religion e ideologías Salud Signos extraordinarios de la Iglesia

Conozca el milagro por el que se canonizará a Juan Pablo II

Será santo en octubre.
Hace 4 días informábamos que «la comisión de teólogos de la Congregación para la Causa de los Santos aprobó la curación “inexplicable” de una mujer» que significaría la canonización de Juan Pablo II, ver aquí.

 

altar en la casa de floribeth mora

 

Había trascendido que se trataba de «una mujer de Costa Rica afectada de una grave lesión cerebral». Y que la interesada había pedido a Juan Pablo II su curación, mientras que en cambio su familia había perdido la fe precisamente por el disgusto de la enfermedad. Como han recuperado la fe al ver la curación inexplicable, se trataría de un «doble milagro». La curación habría tenido lugar el 1º de mayo de 2011, el día de la beatificación de Juan Pablo II.

QUIEN ES LA SANADA

Floribeth Mora, de 50 años, madre de cuatro hijos, abuela cuatro veces y esposa de un ex oficial de la Fuerza Pública, que vive en la localidad de Tres Ríos de Cartago, Costa Rica,  es la protagonista del milagro que podría llevar a los altares al Papa polaco.

Sus vecinos la describen como una mujer buena, trabajadora, humilde y caritativa. Da comida a los más pobres y se apunta a las nobles causas.

No es de extrañar que su casa reciba a las visitas, con un altar, con flores, velas y una enorme imagen del beato. No es de extrañar, tampoco, que su familia recuperara la fe y que hoy su testimonio sorprenda a los incrédulos.

Su amor en Juan Pablo II hace que también le atribuya como milagro el embarazo de una de sus hijas, que no podía concebir.

Ella y su esposo se dedican ahora a una empresa de seguridad privada.

Flory –como la llaman sus familiares y amigos– superó un aneurisma cuando ya estaba desahuciada por los médicos, por la intercesión del beato  Juan Pablo II.

EL ANEURISMA COMENZÓ POR UN DOLOR DE CABEZA

Todo comenzó el 8 de abril de 2011 al despertar.

«Me dio un dolor de cabeza tan fuerte que pensé que me reventaría la cabeza. Le pedí a mi esposo que me llevara al hospital porque me sentía bastante mal. Cuando llegué me encontraba muy mal por los vómitos y el dolor de cabeza», relata esta mujer en un testimonio escrito por ella misma hace un año.

En aquella primera visita al médico, le diagnosticaron estrés y presión alta. Al comprobar a lo largo de los días posteriores que su estado de salud no mejoraba, decidió acudir a un hospital en San José, la capital del país.

DESCUBREN EL ANEURISMA

«Tras varios exámenes me dijeron que tenía un pequeño derrame de sangre en mi cerebro, luego me hicieron un TAC y descubrieron que se trataba de un aneurisma cerebral en el lado derecho».

De inmediato la trasladaron a otro centro, mientras los facultativos se mostraban sorprendidos por su aguante. Tras varios intentos por cerrar el goteo de sangre que sufría en su cerebro, el equipo médico que la atendió tuvo que desistir al encontrarse la dilatación en un lugar de difícil acceso

LE DAN UN MES DE VIDA

A partir de este momento, la situación empeoró sobremanera. Tras pasar unos días en observación, las limitaciones del sistema sanitario costarricense impidió llevar a cabo una operación.

«Se cerraban así mis posibilidad de sobrevivir a tan fatal diagnóstico», recuerda Floribeth.

Tal era la gravedad de su situación que regresó a casa con un aviso claro a su familia: sólo le quedaba un mes de vida. Sin embargo, a pesar de la desesperación que en un primer momento les generó pensar en el desenlace de la historia,

«nos llenamos de mucha fe, pero no puedo negar el miedo tan grande que sentía al ver lo que me estaba sucediendo».

EL DÍA DE LA BEATIFICACIÓN DE JUAN PABLO II

Cuando amanecía en Costa Rica el 1º de mayo de 2011, Juan Pablo II ya había sido beatificado.

No se cumplía ni un mes de aquella mañana en la que su vida se parecía truncada,  cuando tuvo lugar otro giro inesperado.

En la plaza de San Pedro, más de un millón de personas participan en la beatificación de Juan Pablo II. Benedicto XVI proclamaba beato al Papa polaco destacando en primera persona cómo vivió la santidad de su predecesor en la sede de Pedro:

«Durante 23 años pude estar cerca de él y venerar cada vez más su persona. Su profundidad espiritual y la riqueza de sus intuiciones sostenían mi servicio. El ejemplo de su oración siempre me ha impresionado y edificado: él se sumergía en el encuentro con Dios, aun en medio de las múltiples ocupaciones de su ministerio», dice Floribeth.

UNA ORACIÓN DE ESE DOMINGO LO CAMBIÓ TODO

Como todos los domingos, la familia de Floribeth acudió a misa a la parroquia. Con pocas fuerzas, pero de nuevo animada por su esposo, acudieron al centro del barrio porque se estaba celebrando una procesión.

«En ese momento estaba pasando una carroza con la imagen de Jesús Sacramentado y sentí un frío en el cuerpo. Me bajé del coche y fui hasta allí».

Entonces, el sacerdote que acompañaba a la procesión declamaba una oración:

«¡Oh, Señor! Hay una sanación».

La mujer se detuvo y se puso a rezar:

«Le pedimos a nuestro Papa Juan Pablo que nos ayudara a pedirle a Dios que me ayudara».

Y en ese preciso instante, algo empezó a cambiar.

«Salí de ese parque con la fe de que yo fui la sanada».

Y TAMBIÉN LO REFORZÓ UNA RELIQUIA DE JUAN PABLO II

Unos días después de aquel hecho, Floribeth, consciente de que al Santuario de la Virgen de Ujarrás –cercano a su domicilio– había recibido unas reliquias del Papa polaco, decidió acudir a rezar.

«De nuevo, un milagro», apostilla.

Se trataba de un relicario que contiene muestras de sangre de Juan Pablo II, extraídas un día antes de morir. Sin embargo, a pesar del esfuerzo realizado, cuando llegó ya había terminado la exposición. Aun así, el padre Donald Solano hizo una excepción.

«Me la enseñó y la toqué. Seis meses después me hicieron otro examen en el cerebro y me indicaron que el aneurisma había desaparecido para la honra y la gloria de mi Dios».

EL NEUROCIRUJANO DEL CASO NO ENCUENTRA EXPLICACIÓN DE LA CURACIÓN

Según publicó el diario «La Nación» de Costa Rica, el neurocirujano Alejandro Vargas Román, que atendió a Floribeth Mora durante su enfermedad, confirmó que no encontró explicación científica a la desaparición repentina del aneurisma que padecía cuando analizaron exámenes posteriores a aquel 1 de mayo de 2011.

Además, Vargas reveló que funcionarios de la Santa Sede le consultaron sobre los detalles del caso durante la fase diocesana del proceso de canonización, la primera antes de que los informes sean remitidos a Roma y examinados por las diferentes comisiones de la Congregación para la Causa de los Santos.

«Médicamente, en teoría, nunca les va a desaparecer un aneurisma a las personas porque es una dilatación. Científicamente yo no le tengo ninguna explicación del por qué desapareció», comenta el doctor, que vivió en primera persona lo ocurrido en el hospital Calderón Guardia.

Fuentes: La Razón, Monumental, La Nación, Signos de estos Tiempos 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Signos extraordinarios de la Iglesia

Confirmado, Juan Pablo II será santo este año; fue aprobado su segundo milagro [13-06-19]

Sería canonizado en octubre.
La comisión de teólogos de la Congregación para la Causa de los Santos aprobó la curación «inexplicable» de una mujer, que se divulgará esa misma tarde de la canonización de Juan Pablo II.

 

sor maria simon milagro para la beatificacion

 

Dicen que se trata de un milagro que asombrará al mundo y que habría ocurrido la tarde de su beatificación, el 1 de mayo de 2011.

La canonización convertirá a Juan Pablo II en el segundo Papa proclamado santo en el último siglo, tras Pío X. Otros dos Papas beatificados, pero no declarados santos, son Pío IX y Juan XXII.

JUAN PABLO II SERÁ PRONTO SANTO

La comisión de teólogos de la Congregación para las Causas de los Santos ha aprobado el segundo milagro atribuido a Juan Pablo II, el primero realizado después de la beatificación.

Llegados a este punto le falta el visto bueno de los cardenales y obispos de la Congregación para la proclamación de la santidad del Pontífice polaco; que se descuenta como un hecho, por lo que el Papa Juan Pablo II podría convertirse en santo sólo ocho años desde el día de su muerte, 2 de abril de 2005.

¿PROCLAMADO EN OCTUBRE? 

Fue en abril pasado que la consulta médica de la Congregación para las Causas de los Santos ha analizado la curación de una mujer, reconocida como inexplicable y atribuida al Beato Juan Pablo II.

Alguien ahora ya hace suposiciones sobre el día en que el anuncio podría ser; hablan del domingo 20 de octubre, a cavallo del 35 aniversario de la elección al papado (16 de octubre) y del inicio solemne del ministerio petrino (22 de octubre), el día en el que ya se celebra la designación de Beato a Juan Pablo II. A la aprobación de los cardenales y obispos debe seguir la última firma en el decreto del Papa Bergoglio.

SANACIÓN INEXPLICABLE

La noticia de que el consejo de médicos había reconocido como «inexplicable» la curación se conoció el 22 de abril, y se aceptó con mucho cuidado porque representa un paso importante hacia el proceso definitivo para la canonización.

La presentación del caso fue de monseñor Slawomir Oder, postulador de la causa, en enero a la Congregación vaticana para los santos.

Sobre la naturaleza de esta curación que ocurrió por la intercesión de Juan Pablo II, el Vaticano ha mantenido reserva, pero se habla de que «sorprenderá al mundo», un evento verdaderamente milagroso que se habría llevado a cabo en la tarde de la beatificación, que tuvo lugar el 1 de mayo de 2011.

Ha trascendido que se trata de la curación inexplicable de «una mujer de Costa Rica afectada de una grave lesión cerebral». Y que la interesada había pedido a Juan Pablo II su curación, mientras que en cambio su familia había perdido la fe precisamente por el disgusto de la enfermedad. Como han recuperado la fe al ver la curación inexplicable, se trataría de un «doble milagro».

Fuentes: Tempi, Signos de estos Tiempos 

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Actividad social ARTÍCULOS DESTACADOS Beatificación Canonización Catolicismo Doctrina Liturgia y Devociones NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Noticias bis notorio Papa Pastoral Prédica Sermones Homilías Relaciones Políticas Sacerdotes Teología de la Liberación Virgen María

La línea del papa Francisco es la de los santos sociales como Don Bosco y Don Orione [2013-05-24]

Exponente de la doctrina social tradicional de la Iglesia.
La semana pasada escribíamos sobre una tesis que hemos manejado desde la elección del papa Francisco en varios artículos, que no es una simpatizante de la teología de la liberación ni un “progresista” izquierdizante, ver aquí. Lo hicimos tratando de explicar las razones por las que los sectores conservadores no deben temerle.

 

bergoglio y chico en silla de ruedas

 

Porque ha sucedido, que desde el inicio de su pontificado, Francisco ha sido objeto de ataques temiendo que la iglesia vuelva a los excesos litúrgicos anteriores a Benedicto XVI, muchos de ellos promovidos por Juan Pablo II, y han aprovechado ciertas profecías para ir en su contra y utilizaron, o “fabricaron” mensajes de videntes poniéndolo como el anticristo.

MUCHAS COSAS PUEDE SER, PERO NO REBELDE IZQUIERDISTA

Lo cierto es que se pueden decir cosas de Francisco, pero nó que es afín a la teología de la liberación, o progres, o izquierdizante.

Aunque los verdaderamente izquierdizantes, los afines a la teología de la liberación, se han congratulado con Francisco y le siguen dando una carta de crédito, porque hace mucho que no se ve un Papa con tal énfasis social, y creen que el monopolio de ocuparse de los pobres es de ellos, por eso reflexionan ‘es de los nuestros’.

Ahora el reconocido periodista y vaticanista Vittorio Messori ha explicado por qué el papa Francisco no un «progresista», sino que se enmarca en una tradición de católicos doctrinal y espiritualmente conservadores volcados en el amor hacia los pobres. Estaría en la línea de los grandes santos sociales y fundadores de órdenes caritativas del siglo XIX.

LA EXPLICACIÓN DE VITTORIO MESSORI

El “catolicismo social” nace y florece en el siglo XIX y después en los primeros decenios del XX a manos de sacerdotes y de laicos marcados por los “progresistas” como “intransigentes”, “papistas”, “reaccionarios”. El compromiso extraordinario a favor de toda miseria humana que mueve a la Iglesia a partir del pontificado de Pío IX y continúa después hasta Pío XII, señala precisamente a los secuaces de la ortodoxia más rigurosa, los creyentes que se profesan fieles a la más estricta obediencia a la Jerarquía y, sobre todo, al papado. 

Por limitarnos a un ejemplo impresionante, el de la ciudad de Turín que, entre el siglo XIX y el XX conoció una explosión de santidad, aquí va un elenco sólo de los más conocidos, que ya son santos o beatos: 

-Cottolengo acoge a la escoria de la sociedad, a la que todos rechazan; 
-Bosco se da totalmente a favor de los hijos de los “proletarios”;
– Murialdo compite con él para transformar a los jóvenes ignorantes y hambrientos en buenos artesanos y ciudadanos; 
-Faà di Bruno sigue sus pasos para proteger a los últimos entre los últimos, las criadas explotadas, enfermas, despedidas porque ya son ancianas; 
-Cafasso gasta tesoros de caridad para aliviar la suerte de los más olvidados y despreciados, los presos; 
-Allamano se preocupa de los miserables más allá de Europa y envía a sus Misioneros de la Consolata; 
-Orione no pone límites al alivio de los más necesitados. 

Mientras los gobiernos liberales, a menudo inspirados por la masonería, no sólo se ocupan poco de los pobres, sino que les gravan incluso el pan (el “macinato”) y secuestran a los hijos durante años y años de servicio militar, mientras el naciente socialismo distribuye palabras y opúsculos, preocupándose más de la ideología que de la miseria concreta, he aquí que los católicos “papistas”, los despreciados “clericales reaccionarios” descienden al campo a ayudar en persona a los hambrientos, enfermos, ignorantes, abandonados. No sólo trabajando, sino levantando la voz contra tanta necesidad que los ricos quieren ignorar.

Pues bien, el Papa Francisco está entre los herederos de esta larga y admirable tradición del catolicismo llamado social. Por una serie de equivocaciones y de deformaciones propagandísticas se ha impuesto y está aún en vigor un esquematismo según el cual el compromiso a favor de los últimos estaría acompañado necesariamente de una perspectiva denominada “progresista”. Y, en el caso católico, “contestataria”, heterodoxa, polémica con relación a los dogmas y a las jerarquías. 

La historia dice lo contrario. Es significativa la confrontación polémica entre el padre Bergoglio y sus hermanos jesuitas atraídos por las ideologías de la teología de la liberación, inspirados por el Marx-leninismo. Su acción le llevó a los argentinos marginados, como a tantos santos de la caridad evangélica, que no necesitaban desafiar a la Iglesia y a los Papas, y proponer nuevas teologías y nuevas morales para poner en práctica la exhortación de Jesús a ser pobres entre los pobres.

Existe otra “marca católica” que señala a los sacerdotes y a los laicos del compromiso social: la devoción mariana. En las perspectivas cristianas “adultas” y “abiertas” se rechaza la devoción tradicional a la Virgen, con santuarios, peregrinaciones, rosarios; María, cuando es recordada, es a lo sumo una combatiente, una inspiradora para la lucha de clases, con su Magnificat, al que se le da una lectura política.

También en esto el Papa Francisco muestra su continuidad con los hermanos en la fe que han escalado las cimas de la santidad ensuciándose hasta el fondo las manos en los bajos fondos de la sociedad: todos, sin excepción, han sido partidarios ardientes de la que siempre han llamado “Nuestra Señora”.

La primera salida, la mañana después de la elección, ha querido que tuviera como meta la basílica de Santa María Maggiore, donde ha rezado delante de la imagen venerada desde siempre por el pueblo romano. En la tarde de ese mismo día ha querido ir a recitar el rosario a la gruta de Lourdes reproducida a tamaño natural en los jardínes vaticanos. Sus discursos espontáneos o leídos no se olvidan jamas de invocar a la Virgen. Precisamente el otro día ha anunciado que en cuanto pueda volará a Cagliari, a venerar al a Virgen de Bonaria que ha dado el nombre a su Buenos Aires.

Fuentes: Vittorio Messori, Signos de estos Tiempos

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis:
Categories
Beatificación Canonización Catolicismo Laicos NOTICIAS Noticias 2013 - enero - agosto Papa Religiosos Signos extraordinarios de la Iglesia

Milagros para la canonización de hoy de los mártires de Otranto, Laura Montoya y Madre Lupita [13-05-12]

Francisco canoniza a dos latinoamericanas y un grupo de italianos.
Publicamos los milagros que aprobó el Vaticano y que permitió que los 813 martires de Otranto, la madre Laura y la Madre Lupita sean los primeros santos que canoniza el papa Francisco.  

 

laura montoya primera santa colombiana

 

Hoy domingo 12 de mayo el Santo Padre canonizará a:

los beatos Antonio Primaldo y sus compañeros (mártires de Otranto, 1480, Italia);

Laura de Santa Catalina de Siena Montoya y Upegui (Madre Laura) (1874-1949, Colombia), fundadora de la Congregación de las Misioneras de la Bienaventurada Virgen María Inmaculada y de Santa Catalina de Siena;

y María Guadalupe García Zavala (Madre Lupita) (1878-1963, México), cofundadora de la Congregación de las Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres.

EL MILAGRO QUE PERMITE CANONIZACIÓN DE 813 MÁRTIRES ASESINADOS POR MUSULMANES (ITALIA)

La italiana Sor Francisca Levote es la religiosa clarisa cuya milagrosa curación permitirá que este domingo sean canonizados Antonio Primaldo y sus 800 compañeros asesinados por musulmanes del Imperio Otomano durante el asedio a la ciudad italiana de Otranto en 1480.

Silvia Mónica Corriale, la postuladora de la Causa de Canonización de los mártires, explicó que los médicos tuvieron muy claro desde el principio que solo podía tratarse de un milagro, ya que “la curación no tenía explicación científica”.

A finales de los años ‘70s Sor Francisca sufrió un tumor maligno en “un estado muy avanzado”, los médicos de la época la sometieron a la intervención quirúrgica de acuerdo a las normas de entonces, pero hoy día ese tipo de intervención sería impensable, porque se conoce que solo consigue propagar la metástasis, es decir, que el cáncer se extienda por todo el cuerpo.

La religiosa clarisa sufrió metástasis pero se encomendó a los mártires y milagrosamente sanó y pudo dar fe de ello durante treinta años hasta 2012, cuando murió a los 84 años de edad.

La religiosa pertenecía al Monasterio de las Clarisas de la Arquidiócesis del Salento, donde se ubica Otranto. Su monasterio empezó a derrumbarse y “el Obispo las trasladó a uno nuevo ubicado justo en la misma Colina donde ocurrió el martirio. Al lado de la Basílica Menor de los Mártires”, explica la postuladora.

“Increíblemente el Señor ya había elegido a una de ellas para manifestar el signo necesario para la canonización de los mártires, y las Clarisas de esa manera, quedan vinculadas un poco al Papa Francisco, porque el milagro ocurrió a una de las hijas de Santa Clara que están tan relacionadas con el Santo que da nombre al Papa, San Francisco”.

“Fue una alegría de que el señor eligiera a una monja consagrada para manifestarse”, añadió.

En 1480 los turcos otomanos invadieron Italia, el ejército italiano había dejado desprotegida Otranto, y la ciudad fue asediada por los musulmanes. Corriale explica que en ese episodio los musulmanes mataron al Obispo, a los sacerdotes y a los fieles que estaban en la catedral, y tomaron presos a todos los habitantes varones mayores de 15 años que se refugiaban en la colina de la ciudad.

“Los tuvieron allí unos días esperando a que se convirtieran al Islam, pero todos se negaron: ‘Somos hijos de Cristo, y le seremos fieles a Él aunque nos cueste la vida’”, contestaron ante la opresión musulmana.

Corriere explica que lo que mantuvo alta la moral del grupo hasta el último momento de vida fue un zapatero llamado Antonio, y a quien se recuerda hasta nuestros días como Antonio Primaldo, porque fue el primer de ellos en ser decapitado pero no en caer el suelo.

“Le cortaron la cabeza, pero él quedó en pie y no cayó hasta que no murió el último, antes de morir cada uno de ellos tomaba fuerzas mirando el cuerpo en pie de Antonio decapitado, y en ese gesto maravilloso de Dios, tomaban fuerza para mantenerse fieles al Señor hasta el martirio”, señala Corriale.

La historia demuestra que desde el primer momento se les tuvo una devoción tremenda y se les tomó como mártires, el primer Proceso de Canonización comenzó en el año 1700, y fueron declarados beatos en el 1771.

“Después de tantos siglos los mártires de Otranto tienen este reconocimiento de ser proclamados Santos y entrar en el árbol de los Santos de la Iglesia Universal”.

Corriale nació en Argentina y desde hace 25 años vive en Roma trabajando como postuladora para Causas de Canonización y Beatificación para la Congregación de las Causas de los Santos, precisamente, ella fue la primera laica de la historia que trabajó en esto.

La postuladora además lleva adelante la causa de canonización de la Madre Laura, la primera Santa colombiana que ascenderá el próximo fin de semana a los altares de la santidad, junto a los mártires y la religiosa mexicana Madre Lupita.

MILAGRO PARA LA CANONIZACIÓN DE LA MADRE LUPITA (MÉXICO)

Hoy es la canonización de María Guadalupe García Zavala, la «Madre Lupita», religiosa mexicana cofundadora de la Congregación de las Siervas de Santa Margarita María de los Pobres.

Hace casi tres décadas, las religiosas de su congregación, apoyadas en testimonios sobre la intercesión de García Zavala en curaciones, pidieron postular su fama de santidad ante la Arquidiócesis de Guadalajara.

Raquel Rodríguez Aguayo, religiosa de la hermandad e impulsora de la canonización, cuenta que «en 1984 se empieza a establecer un tribunal para la Causa de los Santos pero el trabajo anterior son las entrevistas con los testigos, se empiezan a recabar documentos de la Madre».

En ese año la Madre Lupita fue nombrada sierva de Dios y después de estudiar su aposición, el expediente traducido al italiano, le dan el cargo con decreto de virtudes heróicas que la volvió en calidad de venerable.

Son dos los milagros que El Vaticano ha acreditado a la religiosa zapopana, los cuales tuvieron lugar en Guadalajara.

El primer caso se trata de una curación de pancreatitis aguda a Abraham Arce Higareda, en 2004. El hombre llegó al hospital Santa Margarita María en estado grave. Los médicos le indicaron que lo operarían, sin darle garantías de que la intervención arrojara resultados favorables.

“El señor no podía ni caminar por el sólo, tenían que cogerlo, pesaba 134 kilos y quedó como de 42 kilos, haga de cuenta que era una muerte caminando”, relató la madre Imelda Maciel, superiora de la congregación Siervas de Santa Martha María y los Pobres, quien convivió con la esposa del paciente y atestiguó el milagro, pues su congregación labora en dicho nosocomio.

Un día antes de la operación, Abraham pidió a la Madre Lupita que lo “agarrara o lo soltara”, refiriéndose a su necesidad de salud. Momentos después entró por la ventana “un olor a rosas” y el paciente entendió que ella le estaba respondiendo.

“Llegó el doctor a decirle ‘te voy a preparar para mañana operarte’, y dijo ‘a mí ya no me vas a operar, a mí la madre ya me hizo el milagro’. En ese momento se abocaron a hacerle todos los estudios y, exactamente, el señor ya estaba sanando”, añadió la superiora.

Ese fue el testimonio que le valió a la Madre Lupita ser beatificada por Benedicto XVI en 2004.

Su segundo milagro fue para la señora Wvintila Godoy Salas, quien llegó al mismo hospital privado con un derrame cerebral, producto de una presión alta.

Luego de que los médicos informaron a sus familiares del estado grave de salud de la mujer y de la urgencia de una cirugía, decidieron trasladarla al Centro Médico de Occidente, pues no contaban con los recursos para hacerlo allí. Pero antes, acudieron a la capilla a encomendarla a la Madre Lupita.

“Una de sus hermanas que se llama Tomasa les dijo a la familia, ‘no lloren, vámonos todos a la capilla y vamos pidiéndole a nuestro señor que la Madre Lupita interceda por ella, y se va a aliviar’. (Después) la llevan al Centro Médico, le hicieron otra tomografía y ya no tenía nada, no la operaron”, atestigua la superiora, quien señala que ambos casos fueron exhaustivamente investigados por la Santa Sede antes de catalogarlos como milagros.

La madre superiora señala que, no obstante los milagros de la Madre Lupita, también hay testimonios de que se aparece a algunos pacientes del Hospital Civil y del Centro Médico, a quienes asiste con lo que necesitan, y no la vuelven a ver

MILAGROS PARA LA CANONIZACIÓN DE LAURA MONTOYA (COLOMBIA)

Laura de Jesús Montoya Upegui, Madre Laura, se convierte en la primera santa nacida en Colombia y la primera persona canonizada en el pontificado de Francisco.

Laura nació en 1874, fue maestra, y a los 39 años sintió el impulso de dedicarse a la evangelización de los indios y se lanzó a la selva con algunas compañeras.

Cuando murió, después de 32 años de apostolado, dejaba una congregación nueva, las «Misioneras de María Inmaculada y de Santa Catalina de Siena», con 467 religiosas, 93 novicias, 71 casas 71 casas en Colombia, 17 en El Ecuador y 2 en Venezuela. Hoy las «lauritas», como se las llama, están presentes en 21 países.

El médico milagrado de Antioquía de Colombia, Carlos Eduardo Restrepo Garcés, poco o nada sabía de esto el médico, cuando se curó milagrosamente por la intercesión de la entonces Beata Laura, en 2005. Es otro de esos milagros modernos, con abundante documentación, que suceden en un hospital del siglo XXI.

El doctor Restrepo tenía 33 años, y se estaba muriendo. Ya le habían administrado la Unción de los Enfermos. Una grave enfermedad en su sistema inmunológico había generado una infección en su corazón y daños renales.

“En algún momento había escuchado hablar de Madre Laura, aunque yo no sabía de su labor evangelizadora”, ha admitido después. Pero pidió su intercesión la noche antes de una grave operación. «Esa noche dormí plácidamente, ahí comenzó el milagro», explica a la prensa colombiana. «Al siguiente día, comienzan a pasar eventos que se salían de lo usual” y finalmente “no me operan y me recupero rápidamente. En tres meses”. Y cuando va a los medios de comunicación colombianos, añade: «no discuto si fue o no un milagro, solo sé que ella me curó».

Entonces, y hoy, el doctor Restrepo se considera un “católico normal”, que habitualmente iba (y va) a misa. Es anestesiólogo, le gusta viajar, le gusta leer, se especializó en Londres y estudió también en Canadá. Trabaja mucho y su madre bromea que su hijo médico no tiene tiempo para encontrar novia.

«Tengo que decir que no soy un puente con la Madre Laura aunque yo soy el parcero, el conocido. No quiero que se pierda la esencia de lo recibido. No soy un iluminado escogido», advierte el médico. Hay gente que le ha pedido que le imponga las manos a un ser querido enfermo. «Lo mejor que yo puedo dar a un paciente es lo que sé hacer y mis oraciones», remata.

Refiriéndose al milagro: «¿Quién en la vida piensa que con un favor que recibió a alguien lo van a nombrar santo en el Vaticano? Nadie. Este es un proceso único».

Colombia está entusiasmada con su primera santa, y especialmente en Medellín, Bogotá y Jericó (su ciudad natal) se han preparado festejos.

Fue beatificada en 2004, por la curación inexplicable de una señora mayor llamada Herminia González, un milagro que se empezó a estudiar en 2001.

Las virtudes heroicas de la santa las resume la superiora actual: “La Madre Laura supo hacer vida el Evangelio de Jesús de Nazareth, integrando de forma creativa el amor a Dios y el servicio a las poblaciones más discriminadas de su época, los indígenas, el palenque de Uré y sectores urbanos marginados”, resaltó la Hermana Ayda Orobio Granja, Madre Superiora General de la Comunidad Hermanas Misioneras Madre Laura.

De Madre Laura hay bastante información. Por ejemplo, su Autobiografía, redactada por mandato de sus confesores, es un libro apasionante, lleno de aventuras misioneras y espirituales, acompañada de textos como sus Cartas misionales, la Aventura Misional de Dabeiba, sus libros de meditaciones y de espiritualidad y cerca de tres mil cartas en gran parte inéditas que se conservan en el Archivo de sus Misioneras.

Nació en 1874, mataron a su padre en la guerra civil de 1876, y creció con su madre, una mujer devota que enseñó a sus 3 hijos a perdonar y orar por los asesinos de su padre.

Ya de niña tuvo dos experiencias místicas impactantes. A los 6 años, experimentó lo que describiría como «un conocimiento de Dios y de sus grandezas, tan hondo, tan magnífico, tan amoroso, que hoy, después de tanto estudiar y aprender no sé más de Dios que lo que supe entonces. Lo sentí por largo rato… Y terminé llorando y gritando recio. Lloré mucho rato de alegría, de opresión amorosa y grité».

A los 10 años, otra experiencia mística, trabajando con su madre. Como era ya costumbre suya, ofreció el trabajo a Dios y de súbito, como respuesta, “me infundió un vehemente deseo de comulgar. Hice la comunión espiritual y sé decir más. Como electrizada, como si no sintiera lo que alrededor pasaba, como si tuviera un dolor soberano, con una mezcla de amor extraordinario, como si la Santa Eucaristía pasara mi alma de parte en parte, me bañé en lágrimas sin sentirlo».

De niña leyó la vida de San Luis Gonzaga y la de San Pablo el ermitaño. Del primero aprendió el amor a la pureza y a la mortificación; del segundo, el gusto por la soledad. Tuvo para sus aprendizajes otro gran libro: la naturaleza, porque le gustaba pasear por el campo.

Fue en 1900 cuando por primera vez sintió un impulso de ir a las selvas a evangelizar,cuando le hablaron de indios que eran «asediados» por pastores protestantes.Intentó convencer a su hermana Carmela: «Viviríamos en ranchitos, como ellos, y trataríamos de hacerles el bien», le dijo.

Fue en 1908 cuando pudo hacer su primera expedición misionera, en compañía de su párroco, el padre Ezequiel Pérez, en la comarca indígena de Guapá:

con «tres señoritas, seducidas más por el deporte y hasta por el interés de hallar orquídeas y minas de oro que por pasión del apostolado», escribe un biógrafo.

De ahí, a las misioneras en 21 países, una vida de constancia y oración.

Ver una biografía de Madre Laura en PDF

Fuentes: ACI Prensa, El Informador, Religión en Libertad, Signos de estos Tiempos  

Haga click para ver las otras noticias

Entre su email para recibir nuestra Newsletter Semanal en modo seguro, es un servicio gratis: