En las apariciones de Fátima está la clave para entender la crisis por la que está pasando la Iglesia, y por lo tanto el mundo.
Sor Lucía de Fátima se lo reveló al Padre Fuentes en 1957, tres años antes de que el Papa debía hacer público el secreto de Fátima, que finalmente no fue publicado.
Y luego el padre Fuentes fue sancionado por revelar lo que le dijo Sor Lucía.
Aquí hablaremos de las revelaciones que le hizo Sor Lucía al padre Fuentes, sobre la razón central por la que la Iglesia y sus sacerdotes están en la crisis que hoy se ve nítidamente y afecta al mundo.
El 26 de diciembre de 1957 el mexicano padre Agustín Fuentes tuvo una reunión con Sor Lucía en su convento Coimbra, para hablar sobre las causas de beatificación de sus primos Francisco y Jacinta Marto, porque lo estaban designando como postulador de esas causas.
Y el 22 de mayo de 1958 dio una conferencia en México sobre el contenido de esa conversación y se publicó con el imprimatur del Obispo de Fátima.
Pero luego el padre Fuentes fue objeto de una operación en su contra por el contenido de su charla y destituido como postulador.
Como se sabe en el Vaticano hay poderosas fuerzas actuando y hubo algo que él divulgó, que estas fuerzas no querían que se supiera.
¿Y qué dijo Fuentes sobre lo que Sor Lucía le contó, que provocó que lo quitaran de en medio?
Veamos lo que divulgó el Padre Fuentes.
Sor Lucía comenzó diciéndole que la Virgen estaba triste porque nadie le había prestado atención a su mensaje.
Y que durante las apariciones nunca sonrió porque estaba angustiada por las ofensas contra Dios y los castigos que vendrían a los pecadores.
Le expresó en concreto,
«Padre, Dios castigará al mundo y esto será de una manera terrible, el castigo del cielo es inminente»
Esto sería refrendado por Juan Pablo II 20 años después cuando dijo,
«Debemos prepararnos a sufrir, dentro de no mucho tiempo, vendrán grandes pruebas..
Por vuestra oración y la mía es posible disminuir esta tribulación, pero ya no es posible evitarla, porque solamente así puede ser verdaderamente renovada la Iglesia».
Luego Sor Lucía diría que muchas naciones desaparecerán de la faz de la Tierra.
Le expresó en concreto,
«Rusia será el instrumento elegido por el cielo para castigar al mundo entero, si no conseguimos antes la conversión de esa pobre nación».
Y le admitió al padre Fuentes que en ese 1957 ella estaba preocupada además, porque faltaban sólo 3 años para 1960, cuando ella suponía que el Vaticano iba a revelar el contenido del tercer secreto, que al final nunca sucedió.
Dijo que sería un año muy triste para todos, porque nadie podrá sentir alegría si el mundo no reza y hace penitencia.
Posteriormente le anunció que satanás había entrado en una batalla decisiva contra la Santísima Virgen.
Y que su estrategia es corromper a los laicos, a través de la corrupción de los sacerdotes y consagrados.
Porque sabe que las almas de los fieles, dejadas sin guía, caerán más fácilmente en sus manos.
Y este posiblemente haya sido el punto urticante para el Vaticano.
Le dijo concretamente,
«El diablo sabe que por cada religioso o sacerdote que reniega de su santa vocación, muchas almas son arrastradas al infierno»
Por eso intenta corromperlos para adormecer las almas de los fieles y llevarlos a la peor impenitencia.
Esa corrupción de los sacerdotes y consagrados les genera esterilidad en la vida interior.
Y tiene como consecuencia la frialdad y falta de entusiasmo de los laicos para renunciar a los placeres terrenales y dedicarse a Dios.
Sor Lucía diría concretamente sobre los sacerdotes que han sido tomados por el mal,
«el diablo les ha logrado insinuar el mal bajo la apariencia del bien y ahora se comportan como el ciego guiando a otro ciego».
Pero la corrupción de parte del clero sería refrendada en 1972 por Pablo VI diciendo que «por alguna rendija entró el humo de satanás en la Iglesia».
Y las insinuaciones de corrupción de una parte del clero, sería una de las causas más importantes por las que un grupo de sacerdotes pidió al obispo la cancelación de las apariciones de Garabandal.
Por eso expresó luego Sor Lucía que los laicos no deben esperar que la llamada a la penitencia provenga de nuestros obispos en nuestra diócesis, ni de las congregaciones religiosas.
Y tampoco se debe esperar obediencia a esa llamada de muchos laicos, en caso que la hubiera, porque los laicos no están dispuestos a seguir las indicaciones de sus pastores cuando no le gustan.
Y entonces llamó a que cada uno se preocupe por salvar su propia alma y ayudar a las otras almas.
Y finalmente Sor Lucía le habló al Padre Fuentes sobre los últimos tiempos y las armas que el cielo nos ha dado para estos momentos.
Le dijo,
«Padre, la Santísima Virgen no me ha dicho explícitamente que hemos llegado al final de los tiempos, pero hay tres razones que me llevan a creerlo».
Y entonces menciona cada razón.
La primera es que la batalla decisiva que ha comenzado el demonio contra la Virgen es el choque final, en el que un bando saldrá victorioso y el otro derrotado.
Y por lo tanto ahora tenemos que elegir un bando, ya sea con Dios o con el diablo, no hay otra posibilidad.
La segunda razón es que la Virgen le dijo a los pastorcitos que el Señor había decidido dar al mundo los dos últimos remedios contra el mal, que son el Santo Rosario y la Devoción al Corazón Inmaculado de María.
Y que son los dos últimos remedios posibles, lo que significa que no habrá otros.
Y la tercera razón es que cuando Dios se ve obligado a castigar al mundo, antes de hacerlo intenta corregirlo con todos los remedios posibles.
Hoy nos está dando la última oportunidad de salvación a través de la intervención de Su Madre.
Pero si ni siquiera este último recurso tiene éxito, ya no podremos esperar ningún tipo de perdón del Cielo.
Porque habremos sido culpables de lo que el Evangelio llama un pecado contra el Espíritu Santo; un rechazo abierto, plenamente consciente y voluntario, de la posibilidad de salvación que se nos ofrece.
Y hoy la Virgen se está quejando que la humanidad no le hace caso y la Iglesia tampoco.
¿Y entonces qué nos queda?
Rezar el rosario y hacernos devotos del Inmaculado Corazón de María.
Respecto del rosario, Sor Lucía dice una cosa realmente trascendente y que quizás no hayamos notado.
Dice que la Santísima Virgen ha dado una nueva eficacia al rezo del rosario.
Lo que tal vez quiera decir que hoy es más eficaz rezar Rosario que hace varios siglos.
Concretamente sus palabras al padre Fuentes fueron las siguientes,
«Mire, Padre, la Santísima Virgen, en estos últimos tiempos en que vivimos, ha dado una nueva eficacia al rezo del Rosario.
De tal manera que no hay problema, no importa cuán difícil sea, ya sea temporal o sobre todo espiritual, en la vida personal de cada uno de nosotros, de nuestras familias, de las familias del mundo o de las comunidades religiosas, o incluso de la vida de pueblos y naciones, que no pueda ser resuelto por el Rosario»
Le recalcó que con el Santo Rosario nos consagraremos a Dios, nos santificaremos, nos salvaremos y obtendremos la salvación de muchas almas.
Y le dijo también al Padre Fuentes que la devoción al Inmaculado Corazón de María consiste en considerarla como la sede de la clemencia, de la bondad y del perdón, y como camino seguro para entrar en el cielo.
Finalmente le explicó al padre Fuentes la razón por la que ella había quedado en la Tierra mientras que Dios se había llevado rápidamente a sus primos.
Ella se quedó con una misión, que no es indicar al mundo los castigos materiales que vendrán si el mundo no reza y no hace penitencia.
Sino que su misión es indicar el peligro inminente en el que estamos, de perder nuestras almas por toda la eternidad, si permanecemos obstinados en el pecado.
En resumen, el padre Agustín Fuentes fue cancelado desde el Vaticano por publicar una entrevista que tuvo con Sor Lucía de Fátima en 1957.
Sor Lucía le contó que la Virgen estaba triste por el castigo que iba a llegar a la humanidad si no cambiaba.
Y que eso se vería más claramente cuando se publicara el tercer secreto tres años después, publicación que nunca sucedió.
Le dijo que el demonio había lanzado una ofensiva final contra la Santísima Virgen.
Su estrategia es corromper a los sacerdotes para adormecer a los fieles y así llevarlos a la impenitencia y este parece haber sido el tema urticante.
Y por lo tanto difícilmente haya un llamado masivo a la penitencia, y entonces cada alma que haya despertado deberá tratar de salvarse y salvar a los demás.
Le dijo que las últimas armas del cielo son el Rosario y la devoción al Inmaculado Corazón de María
Y que el rosario tiene ahora más eficacia que antes, que cualquier problema se puede solucionar con él.
Y le explicó, que la misión que le había encomendado la Virgen a ella, era indicar el peligro de perder nuestra alma por la eternidad, si permanecemos obstinados en el pecado.
Bueno hasta aquí lo que queríamos hablar sobre la revelación que hizo Sor Lucía sobre donde está la causa de la crisis de la Iglesia.
Y me gustaría preguntarte si estás percibiendo la corrupción de una parte de los sacerdotes que reveló Sor Lucía o no.
La separación de la Compañía de Jesús de la doctrina tradicional católica.
Basta estar atentos a las declaraciones públicas de connotados jesuitas, para advertir la heterodoxia doctrinal en que han entrado los principales referentes de la Compañía de Jesús, desde la época del Concilio Vaticano II.
Y esto ha llevado a que los 4 últimos Papas, antes del jesuíta Francisco, advirtieran directamente a la Compañía sobre sus desviaciones, que resultan en ambigüedad doctrinal, secularización, confusión entre fe y política, etc.
No son todos los jesuitas que reniegan de la doctrina de los apóstoles, de la verdad expresada en la Biblia, o de la moral sexual tradicional, por ejemplo.
Hay jesuitas que no siguen esta corriente y que por eso mismo han tenido problemas con sus compañeros.
Pero aunque no sean mayoría los heterodoxos, parece que son los más notorios públicamente, los que tienen más prensa, y más poder en la orden.
Y sus universidades han adoptado la moral del mundo, más que ningunas otras que se llaman católicas.
Aquí hablaremos sobre la deriva de la Compañía de Jesús, que los ha alejado de la moral tradicional católica, que los ha llevado a liderar esa desviación dentro de la Iglesia, y las amonestaciones que le hicieron los Papas desde el Concilio Vaticano II.
No se trata sólo del padre Antonio Spadaro, director de La Civiltá Cattólica, que dice que los mandamientos que están en la Biblia no son una exigencia de Jesús, sino sólo un ideal.
O del padre James Martin que aboga por el reconocimiento de la conducta no heterosexual dentro de la Iglesia y cambiar el catecismo de la Iglesia Católica.
O del General de la Compañía, Auturo Sosa Abascal, que no cree en la existencia del demonio y duda de lo que dijo Jesús en la Biblia, porque dice que en aquella época no había grabadoras.
Sino que eso está refrendado por cantidad de jesuitas que, por ejemplo, se volvieron teóricos y apoyo de la teología de la liberación, como Jon Sobrino y Juan Luis Segundo.
Y otros que formaron parte de las guerrillas en latinoamérica y en el País Vasco.
O que están a favor del aborto, cuyos coletazos se advierten en un informe que muestra, que el 80% de los congresistas norteamericanos educados en universidades jesuitas, votaron a favor legislaciones que favorecen el aborto.
Quizá por ser una orden de grandes intelectuales se han abierto demasiado al mundo y a doctrinas heterodoxas.
Pero lo cierto es que el modernismo, la teología de la liberación y las malas tendencias postconciliares han colonizado la Compañía.
La Compañía de Jesús fue fundada en 1534 por San Ignacio de Loyola junto con San Francisco Javier y otros, y aprobada por el papa Paulo III en 1540.
Se convirtieron en una orden cuasi militar en defensa del Papa.
Y desde esa época hasta su supresión amasaron un poder político, económico y espiritual incomparable.
Por lo que en el siglo XVIII la supuesta intromisión de los jesuitas en los asuntos nacionales europeos, llevó a que varias naciones exigieran a la Iglesia Católica la abolición de la orden.
La tarea de abolir la Compañía de Jesús cayó sobre el papa Clemente XIV, el 21 de julio de 1773 mediante el breve Dominus ac Redemptor.
Y hay una anécdota, parte de la leyenda negra de los Jesuitas, que cuenta que cuando Clemente XIV firmó el decreto aboliendo la Orden dijo: «He firmado mi orden de muerte…»
Y llamativamente nueve meses después estaba muerto.
Cuarenta años después Pío VII decidió restaurar a la Compañía.
Los jesuitas son reconocidos por su alto nivel intelectual y su preparación profesional.
Han fundado muchas universidades, pero en los últimos tiempos se han registrado denuncias de alejamiento de la doctrina, en el manejo de ellas.
Y también hay una leyenda negra sobre la Compañía, que les acusa de ser los mayores promotores de los masones.
Pero la realidad es que ha tenido connotadas figuras heterodoxas, comenzando por el jesuita francés Pierre Teilhard de Chardin, quien en la década de 1950 propuso un «meta-cristianismo», centrado en la noción de Cristo como el «Punto Omega» de la evolución cósmica.
Y el alemán Karl Rahner, inspirador y maestro de todos los teólogos de orientación modernista.
Quien hablando en un lenguaje ambiguo, que se ha hecho tradición entre los jesuitas heterodoxos, propuso una teología pastoral con la duda como guía.
Y luego el influyente Cardenal Carlo María Martini, promovió la crítica como método y la duda como virtud.
Y apalancó el empoderamiento de los no heterosexuales.
Que fue seguido por muchos otros como el padre James Martin, quien sostiene que la Iglesia ha entendido mal el plan de Dios para la sexualidad humana durante toda su historia.
Se puede citar entre muchos otros al colombiano Alfonso Llano Escobar, que dijo en el 2012 que María y José tuvieron varios hijos, y que es hora de dejar el cuento de que son primos hermanos de Jesús.
Tanto ha sido el escándalo de la heterodoxia, en que ha entrado la Compañía, que el ex jesuita Malachi Martin y el renombrado historiador Ricardo de la Cierva han escrito sendos libros sobre la deriva jesuita.
De la Cierva enfoca el tema de la vinculación de muchos connotados jesuitas con la Teología de la Liberación, y dice que a pesar de su vinculación con grupos guerrilleros, estos sacerdotes no fueron reprendidos por la Compañía.
Y Malachi Martin trata más bien el caso de Karl Rahner, el teólogo que tuvo especial relevancia en el Concilio Vaticano II.
Dice que Rahner trabajó para desestructurar todo el cuerpo de doctrina católica concerniente a la fe y la moral, la ética comercial, la libertad humana, la piedad, etc., desarrolladas y enseñadas durante 19 siglos.
Aquello que la Iglesia ha definido como fundamental y obligatorio para la fe católica, se convertía, según el plan de Rahner, en algo optativo.
La integridad de la persona de Cristo, el significado y valor de los siete Sacramentos, la existencia del Cielo y del Infierno, el carácter divino de la autoridad de los Obispos, la veracidad de la Biblia, la primacía e infalibilidad del Papa, el carácter del sacerdocio, la Inmaculada Concepción y la Asunción de María, todo quedaría a merced del ecumenismo.
Y ninguna autoridad de la Compañía frenó su prédica.
De los últimos 5 Papas, 4 amonestaron a la orden jesuita por su heterodoxia, salvo el salido de sus propias filas.
El primero fue Pablo VI, quien los llamó a evitar que su voluntad de servicio degenere en relativismo, en la asimilación con el mundo, y en secularismo.
En otra amonestación los llamó a enfrentar sus defectos, omisiones y ambigüedades.
Le siguió Juan Pablo I, quien a pesar de estar sólo 33 días en el pontificado, escribió un discurso, que debería haber pronunciado el 30 de septiembre de 1978, 2 días después de su muerte, donde renovaba la preocupación papal por la Compañía de Jesús.
Les decía que deben proclamar el mensaje cristiano, que en sus seminarios se debe enseñar una doctrina en conformidad con la Santa Sede y que no accedieran a comportamientos secularizantes.
Y menciona varias veces que deben enseñar la sana doctrina.
Posteriormente Juan Pablo II, los amonestó por sus tendencias pauperísticas y comunistas en la Compañía.
Y les dijo que la formación doctrinal debería estar sólidamente de acuerdo con las directrices de la Iglesia, o sea que no pueden cambiar la doctrina.
Fue el Papa que se enfrentó más a la Compañía, al punto que la intervino por un breve lapso.
Le siguió Benedicto XVI quien les pidió que declararan su total adhesión a la doctrina Católica, en particular en los puntos neurálgicos atacados por la cultura secular.
Mencionó la teología de la liberación y varios puntos de la moral sexual, especialmente en lo que se refiere a la indisolubilidad del matrimonio y a la pastoral de las personas no heterosexuales.
Y posteriormente llegamos a Francisco, del cual no es razonable esperar una amonestación a su propia orden.
Hablando ante jesuitas en Grecia dijo que en su juventud había el doble de sacerdotes en la Compañía, que hoy tiene 15 mil miembros en el mundo y que Dios está pidiendo a la Compañía que se humille, como al resto de la Iglesia.
En resumen, la Compañía de Jesús entró desde el Concilio Vaticano II, en una deriva que la ha llevado lejos de la doctrina y moral tradicional, sostenida por la Iglesia desde el principio de su fundación.
Y de ser un ejército de intelectuales bien formados al servicio del pontificado, pasó a ser la élite que lidera el modernismo en la Iglesia, que trata de desestructurar el catolicismo de 19 siglos.
Sus derivas más notorias han sido su vinculación con las diferentes vertientes de la Teología de la Liberación.
Establecer la duda como método en lugar de la fe.
Y la adopción de la moral del mundo secular.
Y cuatro de los últimos 5 Papas han llamado al orden a la Compañía con poco resultado.
Bueno, hasta aquí lo que queríamos hablar sobre la deriva heterodoxa de la Compañía de Jesús.
Y me gustaría preguntarte si has notado esta deriva de los jesuitas, hacia posiciones heterodoxas respecto al catolicismo tradicional, y en qué lo has notado.
Cuarenta años después, la corrección papal que el Papa San Juan Pablo II dirigió a la Compañía de Jesús aún no se ha afianzado.
Hace cuarenta años, en la víspera de Año Nuevo, hubo una gran anticipación en Roma, incluso tensión, por el canto del Te Deum , el tradicional himno de acción de gracias de la Iglesia a Dios, al final del año civil.
¿Qué diría San Juan Pablo II a finales de 1981? ¿Comentaría sobre el intento de asesinato en mayo o la declaración de la ley marcial en Polonia en diciembre?
Esos trágicos temas no fueron fuente de tensión. El problema que tenía a todos en ascuas era la confusión en la profundamente atribulada Compañía de Jesús.
Juan Pablo mantuvo la costumbre de viajar a la iglesia madre de los jesuitas en Roma para el Te Deum de fin de año . La iglesia, concebida por el mismo San Ignacio, se conoce comúnmente como Il Gesù , pero su título completo es El Santo Nombre de Jesús .
Antes de la reforma del calendario, el 1 de enero era la Fiesta del Santo Nombre de Jesús (ahora es el 3 de enero), por lo que Il Gesù era un lugar apropiado para vigilar el final de la Octava de Navidad y el comienzo de una nueva civilización. año. (El Papa Benedicto XVI trasladó el Te Deum de fin de año a la Basílica de San Pedro, y el Papa Francisco lo ha mantenido allí. Visita Il Gesù para la fiesta de San Ignacio en julio).
En 1980, el superior general de los jesuitas, el padre Pedro Arrupe, estaba contemplando la jubilación y la convocatoria de una congregación general de la Compañía de Jesús.
Juan Pablo estaba profundamente preocupado por la dirección de la sociedad, su alto número de deserciones sacerdotales, divisiones internas, confusión doctrinal, abusos litúrgicos y depravación moral.
El Santo Padre no quería que se llamara a una congregación hasta que se hiciera algún tipo de corrección.
En el Te Deum a finales de 1980, los asistentes del padre Arrupe arrinconaron a Juan Pablo en Il Gesù , exigiendo avances en su deseo de seguir adelante con una asamblea general y la elección de un nuevo superior general. John Paul puso reparos. Unos meses después le dispararon y en agosto de 1981 el padre Arrupe sufrió un derrame cerebral que le imposibilitó continuar como superior general.
Juan Pablo tuvo que actuar. En octubre de 1981 dio su decisión. Fue un terremoto. El Santo Padre suspendió el gobierno ordinario de la Compañía de Jesús. La autoridad del padre Arrupe fue otorgada a un delegado papal, el padre Paolo Dezza, quien gobernaría hasta que el Santo Padre diera permiso para una congregación general y la elección de un nuevo superior. Fue el mayor golpe para los jesuitas desde que la orden fue suprimida en 1773 por el Papa Clemente XIV.
“La vida de las órdenes religiosas estuvo en crisis en los años posteriores al Concilio Vaticano II, y aunque es posible que Juan Pablo no pensara que los jesuitas estaban peor que otros, creía que su influencia era tan grande que se requería un período de reflexión. ”, Escribió George Weigel en Witness to Hope . «La intervención fue una terapia de choque».
Así, los jesuitas quedaron traumatizados, muchos de ellos enfurecidos, cuando Juan Pablo llegó a Il Gesù el 31 de diciembre de 1981. La tradición dictaba que lo recibieran en su iglesia principal, que albergaba la tumba de San Ignacio y la preciosa reliquia de San Ignacio. Francis Xavier, pocos meses después de su atronador voto de desconfianza y evidente desconfianza en la propia capacidad de reformarse.
No hubo fuegos artificiales en el Te Deum . Juan Pablo no habló de los jesuitas. Se limitó a comentarios generales sobre el paso del tiempo, solo aludiendo al intento de asesinato y la declaración de la ley marcial:
“El año que llega a su fin hoy reafirma esta lucha [de muerte contra vida]”, dijo. “¿No lo reconfirma dentro de cada uno de nosotros? ¿No lo reconfirma en las dimensiones de la vida, las sociedades y las naciones? ¿No lo reconfirma en las dimensiones de todo el globo? «
El Te Deum anticlimático de finales de 1981 presagiaría la eventual resolución de la intervención de Juan Pablo. Había actuado con audacia, incluso con severidad, pero dejaría a los jesuitas seguir adelante por el camino de la reforma.
En la congregación general que finalmente se convocó en 1983, los jesuitas no cambiaron de dirección notablemente. Continuarían sufriendo hemorragias en los miembros y su ortodoxia y disciplina no mejoraron notablemente.
El Papa Francisco, reunido recientemente con los jesuitas en Grecia , señaló que había solo la mitad de los jesuitas que había en su juventud, y esto fue una «humillación» para la sociedad, una espiritualmente fructífera, esperaba, pero una humillación de todos modos.
“Tenemos que acostumbrarnos a la humillación”, dijo el Santo Padre a sus hermanos jesuitas.
Cuarenta años después de la terapia de choque, bajo un Papa jesuita, la humillación continúa mientras los jesuitas se encogen y abandonan sus apostolados. Aunque los jesuitas están dirigidos ahora por el padre Arturo Sosa, su miembro más destacado es el padre Antonio Spadaro y su personalidad de habla inglesa más notable es el padre James Martin. La reforma que tenía en mente San Juan Pablo II no se concretó.
Un epílogo de 1981, dado que las medidas significativas a menudo solo pueden verse en retrospectiva:
La gran corrección papal de octubre de 1981 fue un fracaso.
El maligno sabe que su tiempo se acaba y que Dios está por quitarle gran parte del poder de corrupción que ha tenido en el último siglo.
Y por eso ha lanzado una ‘revolución preventiva’, tratando de inmovilizar a la Iglesia, llevando a la apostasía a buena parte de los sacerdotes y la jerarquía.
Pero no a una simplemente pérdida de fe, sino a predicar un mensaje espiritual distinto al que Jesús predicó, cuando caminó sobre la tierra.
El cambio no será percibido por la mayoría de los católicos, mal catequizados, porque predicará la bondad, pero desmontará los dogmas y los mandamientos cristianos, relativizándolos.
Aquí hablaremos sobre cómo comprender esta batalla del fin de los tiempos, en la que estamos inmersos, y cuál es el esfuerzo que está realizando el maligno para complicar la remodelación del mundo, que Dios está comenzando a hacer.
El libro del Apocalipsis de la Biblia es una especie de compendio del itinerario que seguirá la guerra contra el mal en la tierra.
Que conducirá al triunfo definitivo de Dios.
Y además muestra su correlato en el cielo.
Señala tres grandes batallas: la que se produce en el cielo, la del final de los tiempos y la del fin del mundo.
La primera es la del cielo, entre el arcángel Miguel y sus ángeles por un lado, y lucifer con sus ángeles rebeldes por el otro.
Lucifer, que se convertirá en satanás, es derrotado y arrojado a la Tierra.
Y en la tierra dirige su ira contra los cristianos y contra la Iglesia, a la que intenta destruir con escándalos, divisiones y herejías.
Para evitar que complete la obra iniciada por Jesús, para el establecimiento progresivo del Reino de Dios, en el corazón de los hombres.
Y se vale de dos bestias, la ‘Bestia del mar’ y la ‘Bestia de la tierra’.
La Bestia del Mar, básicamente representa el poder político, que se traduce en el deseo de opresión y conquista; del hombre que somete al hombre.
Y la Bestia de la tierra, también llamada ‘Falso Profeta’, que tiene la tarea de flanquear a la otra Bestia y allanarle el camino.
El apocalipsis presenta a esta bestia de la tierra con dos cuernos como de cordero, pero dice que habla como un dragón.
O sea que pretende representar la voz de Dios, la de Jesucristo, pero en realidad conduce a la gente en sentido opuesto, hacia el mal.
Es el demonio de las ideologías que están inspiradas por los hombres, y de las desviaciones heréticas en la Iglesia.
Ambas bestias son engañadoras, especialmente el falso profeta, que utiliza una sutileza que resultará difícil discernir aún para los cristianos.
En esta batalla, que parecería transcurrir en nuestro tiempo histórico, aparece claramente un anticristo, tal vez como una persona o tal vez como un sistema.
Quien intentará eliminar los vestigios del mensaje real de Jesucristo, perseguirá a los verdaderos cristianos y esclavizará a las poblaciones.
Mientras que el falso profeta redefinirá la fe y convertirá el cristianismo en un humanismo, quitándole lo escatológico.
Habrá una tribulación y una intervención de Dios, lo que se llama la venida intermedia de Jesucristo, que se revelará en nuestro corazón, a través del aviso y del milagro profetizados.
Quien purificará la tierra quitándole gran parte de su maldad a través de lo que se llama el castigo, culminando en los 3 días de oscuridad.
Y se producirá el triunfo del Inmaculado Corazón de María y vendrá el Reino Eucarístico de Jesús, o sea velado como en la hostia consagrada.
Y el mundo vivirá una Era de Paz larga, como se profetizó en las apariciones de Fátima, que en el apocalipsis se simboliza con el término 1000 años, tiempo en que los demonios serán encarcelados.
Y la tercera batalla, la del fin del mundo, se desatará después de esos ‘mil años’, cuando satanás sea liberado.
Y logre encontrar personas dispuestas a seguirlo nuevamente.
Convocará a los hombres de las naciones de Gog y Magog, es decir, de las naciones paganas que se oponen al cristianismo.
Y entonces sucederá la segunda venida de Jesucristo en carne, o sea físicamente, y el demonio será derrotado y encerrado para siempre en el infierno.
Y luego sucederá la resurrección de los muertos, el juicio final, bajará la Jerusalén celestial y terminará el mundo anterior.
Ahora, debemos poner foco en la batalla del fin de los tiempos porque es la que está ocurriendo en nuestro tiempo histórico.
Según lo que le dijo Nuestra Señora a Conchita de Garabandal, después de la muerte de Juan XXIII quedaban solo 4 papas y luego vendría el Fin de los Tiempos.
Estos son Pablo VI, Juan Pablo I, Juan Pablo II y Benedicto XVI.
Por lo tanto en el pontificado de Francisco comenzó el final de los tiempos, que debe verse como un proceso de cambio de era.
¿Y qué sucederá allí?
En un tiempo de menos de una década, donde pueden transcurrir los pontificados de varios Papas, se desplegará la etapa final del gran engaño del maligno, para evitar perder el poder ante la intervención espiritual de Jesucristo.
Habrá lo que podemos llamar una ‘revolución preventiva’ del maligno, que incitará a sus secuaces a quitar definitivamente el mensaje cristiano del mundo.
Esto ya se ha venido haciendo, pero se acelerará más.
El maligno suscitará un cambio en la idea de lo que es el ser humano.
Por ejemplo redefiniendo lo que hasta ahora era un dogma sobre la inmutabilidad de la naturaleza humana.
Introduciendo la modificación de la naturaleza humana través de la ideología de género y el transhumanismo, o sea la hibridación humana con otras especies y con las máquinas.
Suscitará un cambio de los valores en la civilización, que fue creada a instancias del cristianismo, quitando de la mente de la gente los mandamientos de Dios y suplantándolos por otros.
Este es el proceso que se ha venido realizando a través de lo que la ONU llama los nuevos derechos, que están relacionados con la preservación de la vida, por ejemplo aborto y eutansia, y con los estilos de vida: educación de los niños, sexualidad, etc.
Y suscitará un cambio en la matriz espiritual del mundo.
Él sabe que debe dar una salida espiritual a la gente, porque el materialismo no cubre las necesidades de trascendencia del ser humano.
Por lo tanto el falso profeta satisfará el anhelo de trascendencia del hombre tratando de cambiar la matriz espiritual del cristianismo.
Proponiendo una «religión de la humanidad», en la que todos estén de acuerdo y donde se condenen las divergencias.
Hará que la gente no se sienta pecadora y que piense que irá fácilmente al cielo, porque no han sido grandes delincuentes.
Redefinirá el mensaje arguyendo que lo que quiso decir el Dios que se reveló en la Biblia, es que la gente debe centrarse en ayudar al prójimo y también al planeta.
Donde serán valores centrales la tolerancia de las otras espiritualidades y el indiferentismo, o sea que todas las religiones apuntan a lo mismo y se diferencian solamente por sus tradiciones y por la zona del planeta en que trabajan.
Esto es técnicamente una herejía, que ha venido impulsando el modernismo en la Iglesia desde hace más de un siglo, pero que adquirió más peso luego del Concilio Vaticano II y tomó preponderancia en la última década.
Esta herejía produce apostasía, o sea abandono generalizado de las verdades de la fe tradicional católica, por las verdades de la fe humanista.
Apostasía ha sido profetizada en la Biblia, por ejemplo en Lucas 18 encontramos que Jesús se pregunta si encontrará fe en la tierra cuando vuelva.
Y en Hechos de los Apóstoles 20 dice que aparecerán dentro de la Iglesia pastores que prediquen otro mensaje y arrastren muchos cristianos.
Y en muchas apariciones Nuestra Señora ha profetizado lo mismo.
En la Salette dijo que Roma perderá la fe y se convertirá en la sede del anticristo.
El Akita y en muchas otras, Ella repite que muchos sacerdotes perderán la fe y perseguirán a los que la conserven.
Y la interpretación de la visión del tercer secreto que Nuestra Señora le dio a Sor Lucía en Fátima, y que no fue revelada por el Vaticano, es precisamente que vendrá una gran apostasía en la Iglesia y que se consolidará en el vértice, según varios sacerdotes, obispos y cardenales que la leyeron.
En resumen, el libro del apocalipsis nos dice que habrá tres batallas centrales entre el bien y el mal a lo largo de la historia humana.
La del final de los tiempos es la que tenemos frente a nosotros y se produce debido a una revolución preventiva del demonio para no perder el poder.
Su objetivo es eliminar los frutos del mensaje de Jesucristo, suscitando el cambio de la naturaleza con que el hombre fue creado, el cambio de los mandamientos de la civilización y el cambio de la matriz espiritual del cristianismo para predicar el humanismo.
La apostasía dentro de la Iglesia, está diseñada por el demonio, para que la Iglesia no predique más el mensaje de Jesús y predique el señorío del hombre en la tierra.
Bueno hasta aquí lo que queríamos hablar sobre la apostasía en la Iglesia, teniendo en cuenta que no sabemos hasta donde el Señor la dejará llegar.
Y me gustaría preguntarte qué cosas has visto en la Iglesia que has interpretado como apostasía.
La pérdida de fe está cambiando la vida en el planeta y el papel de la Iglesia.
Hoy vemos que el mundo perdió la fe en Dios y que la mayoría de los dirigentes de las naciones militan para quitar la moral cristiana de la esfera pública.
Y no vemos una Iglesia oponiéndose en todos los frentes a esto.
Incluso se puede advertir que la jerarquía ve con buenos ojos la Agenda 2030 de la ONU, que consagra una moral reemplazante a la cristiana.
¿Cómo pudo suceder esto?
Aquí hablaremos sobre los avisos que los cristianos tuvieron de que vendría una apostasía en los tiempos finales, que se introduciría también dentro de la Iglesia, y cómo debemos protegernos.
Lo más destacable del siglo XXI hasta ahora, ha sido el arrasamiento de la civilización y la moral cristianas.
Y la llamativa impotencia de la jerarquía de la Iglesia, y de la mayoría de sus pastores: primero para prever esto, segundo para advertir a los fieles y tercero para combatirlo.
Y hay una reveladora entrevista del padre mexicano Agustín Fuentes a Sor Lucía de Fátima, años antes del Concilio Vaticano II, quien dice,
«La Santísima Virgen, le hizo comprender [a Sor Lucía] que estamos en los últimos días del mundo».
Esto es algo que la jerarquía de la Iglesia y la mayoría de los pastores siguen hasta hoy sin admitir, que estamos en los Tiempos Finales, algo que ellos ven muy lejano, que sucederá dentro de muchos siglos.
Y a pesar que la tribulación avanza, siguen sin comunicarlo a los fieles, salvo por supuesto, por algunos sacerdotes fieles.
También le dijo Sor Lucía al padre Fuentes,
«Que el demonio está librando una batalla decisiva contra la Virgen… de ahora en adelante, o pertenecemos a Dios o pertenecemos al diablo; no hay término medio».
Ni la jerarquía ni la mayoría de los pastores están hablando de esta batalla decisiva, ni de la urgencia de conversión.
Y en cambio hemos visto que la idea que ha prevalecido no es la de conversión sino de acompañamiento a los fieles.
Incluso desde la jerarquía se ha criticado la evangelización, como si fuera un mero proselitismo.
Tampoco se habla del demonio con frecuencia como el protagonista de este ataque.
Ni de la Virgen como su contendiente.
Porque la iglesia ha evolucionado hacia un minimismo mariano, contentándose los pastores solamente con hacer encendidas alocuciones sobre la fe y humildad de la Virgen cuando son sus fiestas, pero después la relegan durante todas sus prédicas.
Y la tercera cosa importante que le dijo, es que el demonio,
«Hace todo lo posible por ganar las almas consagradas a Dios, porque así deja desamparadas a las almas de los fieles, y las tomará más fácilmente».
Pero los pastores hoy no admiten que muchos consagrados son seducidos por el demonio.
Y en cambio hemos visto el crecimiento del clericalismo, que incluso hizo naufragar tempranamente la aprobación a las apariciones de Garabandal.
Porque el obispo contemporáneo de las apariciones, las veía con buenos ojos.
Pero cuando el arcángel Miguel le dio a Conchita el segundo mensaje en nombre de la Virgen, el 18 de junio de 1965, un grupo numeroso de sacerdotes se le presentó pidiendo que la condenara.
Aduciendo intolerable el pasaje donde decía «muchos cardenales, muchos obispos y muchos sacerdotes van camino de la perdición y se llevan muchas almas».
¿Cómo van a dudar de la fe, la devoción y la integridad de los consagrados?
Sin embargo desde ese momento hasta ahora hemos visto la defección de un gran número de sacerdotes, obispos y cardenales.
A través de gran cantidad que colgaron los hábitos al finalizar el Concilio Vaticano II, a través del horror de los abusos sexuales y el encubrimiento de algunos obispos, y de las herejías que hoy oímos decir a algunos sacerdotes, obispos y cardenales.
Y no ha sido sólo un mensaje de la Virgen, sino que además de Fátima y Garabandal, la Virgen lo volvió a repetir en las apariciones de Akita.
Donde dijo 2 cosas importantísimas que la mayoría de los pastores han negado, y militado en contra, convenciendo a los fieles de que no será así.
Primero, en el último mensaje, del 13 de octubre de 1973 dijo,
«si los hombres no se arrepienten y mejoran, el Padre infligirá un terrible castigo a toda la humanidad».
Gran cantidad de pastores han desestimado esto diciendo ¿cómo un Dios tan bueno va a castigar a los seres humanos?
Y con esto han quitado urgencia y fuerza al mensaje.
Incluso algunos pastores dirán románticamente que el miedo es un factor indigno para la conversión.
Sin embargo hemos visto que durante la pandemia ha sido el miedo el que ha logrado algo impensado, el confinamiento de toda la población del mundo.
Y segundo, han ignorado la otra parte del mensaje que dice,
«La obra del demonio se infiltrará hasta dentro de la Iglesia, de tal manera que se verán cardenales contra cardenales, obispos contra obispos.
Los sacerdotes que me veneran serán despreciados y encontrarán oposición de sus compañeros…
La Iglesia estará llena de aquellos que aceptan componendas».
Nuevamente la Virgen advierte de la degradación de la fe en buena parte de los consagrados.
Pero en definitiva, la realidad se ha encargado de mostrar que estamos ante una apostasía mayúscula en el mundo y dentro de la Iglesia.
Y eso es lo que muy probablemente predecía la hoja adicional al tercer secreto de Fátima, que sucesivos Papa no revelaron, ni en 1960 como estaba previsto, ni hasta ahora.
Algunos que han leído el secreto han avalado que ese era el contenido.
Por ejemplo el padre Malachi Martin, que fue secretario del Cardenal Bea, lo leyó de manos del propio Juan XXIII y luego expresó, que estaba consternado por la revelación de la apostasía, que se iba a generalizar en el mundo, y que iba a alcanzar a la Iglesia.
Y en agosto de 1984, Vittorio Messori le hizo una entrevista al Cardenal Ratzinger, y le preguntó por qué el secreto no se revelaba.
Y Ratzinger, con la sutileza que le caracteriza, dijo que
«según el juicio de los papas, no añade nada más a todo lo que un cristiano debe saber sobre la revelación: un llamado radical a la conversión, la gravedad absoluta de la historia, los peligros que pesan sobre la fe y la vida del cristiano, y por tanto del mundo.
Y luego la importancia de los «últimos tiempos».
Pero las cosas contenidas en este tercer secreto corresponden a lo que anuncian las Escrituras».
O sea que incluso lo anuncian las escrituras, pero esa no es la prédica de la mayoría de los pastores.
Ratzinger admite que el tercer secreto habla de tres cosas, aunque no dice verbalmente que la apostasía se iba a generalizar.
Dice que su contenido habla de «los peligros que pesan sobre la fe», y el gran peligro que pesa sobre la fe es naturalmente la pérdida de esta, o sea la apostasía.
Segundo, dice que habla sobre «la importancia de los últimos días», o sea de los eventos que involucran fuertes tribulaciones, algo de lo que no habla hoy la Iglesia ni la mayoría de los pastores.
Y tercero que las profecías «contenidas en el Tercer Secreto corresponden a lo que anuncian las Escrituras».
Lo que equivale a afirmar de otra manera, que el tercer secreto se refiere a los «últimos días», porque así está en la Biblia.
¿Y cuáles son las profecías de las Escrituras que aún no se han cumplido, y se refieren a «los últimos días»?
Especialmente las que se refieren al apocalipsis, que muchos pastores lo tratan como si fuera un texto solamente simbólico, otros dicen que describe eventos que ya sucedieron, y otros dicen que fue un texto para dar coraje a los primeros cristianos ante las persecuciones.
Pero no se trata solamente de la apertura de los sellos del apocalipsis y las tribulaciones que describe.
Porque San Pablo dice en la Segunda Carta a los Tesalonicenses capítulo 2, que Cristo,
«no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios»
O sea que anuncia que vendrá una apostasía y se desplegará el poder del anticristo con toda su crudeza.
Y en Hechos de los Apóstoles capítulo 20 Jesús dice,
«Yo sé que, después de mi partida, se introducirán entre vosotros lobos crueles que no perdonarán al rebaño.
Y también que de entre vosotros mismos se levantarán hombres que hablarán cosas perversas, para arrastrar a los discípulos detrás de sí».
¿Está claro el anuncio de la apostasía en la biblia de que será también en la Iglesia o no?
Hay muchos más pasajes, pero con estos basta.
En resumen, estamos ante una apostasía generalizada que fue profetizada por las escrituras y en las apariciones de la Virgen María.
Las autoridades vaticanas sabían de esas profecías, pero no le creyeron a su debido tiempo.
Y entonces el maligno se infiltró en la Iglesia produciendo pérdidas de fe y paralizando su poder de respuesta.
Y hoy vemos las señales de que la pérdida de fe se ha generalizado.
¿Y qué deben hacer los cristianos? Leer la biblia, escuchar los mensajes serios de la Virgen, saber discriminar quiénes son los pastores fieles y cuáles no, y apoyar a los fieles.
Bueno hasta aquí lo que queríamos contar sobre por qué la apostasía se introdujo en la Iglesia de manera masiva.
Y me gustaría preguntarte si conoces sacerdotes fieles a la palabra de Dios y otros que no lo son.
Muchos ven que se está produciendo una erosión de la fe entre los laicos, sacerdotes y jerarquía de la Iglesia.
Que ya no tienen la fortaleza en la fe que había hace 50 años o un siglo.
¿Qué explicación tiene esto?
Hay una serie de profecías en la Biblia, en las apariciones marianas y en las enseñanzas de los papas, que hablan de un período en que la fe se debilitará y corromperá.
Y las apariciones marianas la han profetizado para nuestro tiempo histórico.
Aquí hablaremos sobre que dice la Biblia y las profecías sobre la pérdida de fe en un momento histórico, por qué será en nuestro tiempo, qué indicadores hay de que ya está entre nosotros y cómo terminará todo esto.
La Gran Apostasía es una de las profecías católicas más extendidas, presente en la Biblia, en el Catecismo, en las apariciones marianas, en las enseñanzas papales, etc.
Y es asombrosa la coherencia y no contradicción entre todas estas fuentes.
Se pronostica un alejamiento masivo de la fe cristiana, que legó Jesucristo a los apóstoles, tanto en los fieles como en la jerarquía de la Iglesia.
Puede tomar la forma de la extinción de la fe, o sea ya no considerarse seguidor nominal de Jesucristo.
O puede tomar la forma de la corrupción de lo que nos legó Jesús, al punto que sea irreconocible como cristiana, la fe que practican algunos que se llaman a sí mismos seguidores de Cristo.
Y se le pone el adjetivo de grande, a esta apostasía, porque el abandono abarcará a muchos fieles, y además será profunda la corrupción que se hará a la verdadera fe.
Algunos dirán que esto no es posible que suceda porque el Señor dijo que la Iglesia Católica perdurará hasta el fin de los días: «Yo estaré con ustedes todos los días, hasta el final del mundo». Mateo 28:20.
Sin embargo, la idea errónea de que la Iglesia siempre tendrá un gran número de católicos fieles, no se afirma en la Sagrada Escritura ni en ningún otro lugar.
Muy al contrario, la Escritura nos dice: «cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?» Lucas 18: 8.
Por lo tanto una cosa es pensar en los cristianos de a pie, en los sacerdotes, obispos y cardenales suponiendo que no pueden defeccionar y otra cosa pensar que lo hagan hasta en masa.
Porque obliga a los católicos a cambiar la visión sobre donde está la guía para la fe verdadera.
Por ejemplo, significa dejar de suponer, que alguien de la jerarquía tendrá una fe correcta simplemente por su investidura.
Lo mismo vale para un sacerdote.
Y en su lugar hace necesario que los fieles disciernan que tipo de fe tiene el sacerdote o el jerarca que tienen en frente.
En 2 Tesalonicenses 2: 3, San Pablo deja en claro que el día del Señor, no sucederá hasta que suceda la gran apostasía.
Y Jesús advirtió a los discípulos que en los días finales muchos se enfriarán en la fe y se apartarán, y aparecerán falsos profetas que engañarán a mucha gente, Mateo 24: 10-12.
O sea que está hablando que en la gran apostasía muchos dejarán de llamarse cristianos y otros creerán y divulgarán una fe corrompida.
En los mensajes marianos la Santísima Virgen advierte que la verdadera Fe será abolida y extinguida.
Y que el número de verdaderos católicos será tan pequeño, que parecerá como si se hubieran extinguido.
A principios del siglo XVII, la Madre Mariana de Jesús Torres recibió apariciones de la Madre de Dios, que le dijo, que a partir de finales del siglo XIX y poco después de mediados del siglo XX, el espíritu católico decaerá rápidamente; la preciosa luz de la Fe se extinguirá gradualmente.
O sea que hace 4 siglos situaba en nuestra época que la fe se extingiría gradualmente.
Y mencionaba que habría un pequeño número de almas que conservarían la fe y las virtudes, pero que se deberían esconder y sufrirían martirio.
Más adelante, en el siglo XIX Nuestra Señora dijo en la aparición de La Salette que Lucifer y sus demonios gradualmente abolirán la Fe, incluso entre las personas consagradas a Dios.
Que Roma perdería la fe y muchos conventos serían tierra de pastoreo de los demonios.
En las apariciones de Fátima, Ella dijo que en Portugal siempre se conservará el dogma de la fe, que puede leerse como que países enteros perderían la Fe, siendo Portugal una excepción.
Pero en muchas de las versiones de la parte del tercer secreto que no se habría revelado aún, se dice que satanás logrará abrirse camino hasta las más altas cumbres de la Iglesia y gobernará incluso en las posiciones más altas, como es el caso del supuesto texto publicado en 1963 por el periódico alemán Neues Europa.
Y que fue reportado como verdadero por varios funcionarios de la Iglesia, que habían leído el texto original del tercer secreto escrito a mano por la hermana Lucía, entre ellos el respetado cardenal Ottaviani.
En 1973 Nuestra Señora se apareció en Akita, Japón y habló de que la obra del demonio se infiltraría en la Iglesia y se verían cardenales contra cardenales y obispos contra obispos.
Que los sacerdotes que la veneran serían despreciados y encontrarían oposición de sus compañeros.
Y la Iglesia estaría llena de aquellos que aceptan componendas.
Y para finalizar este repaso también podemos citar a los mensajes recibidos por el Padre Gobbi.
En 1988 Nuestra Señora le dijo, que los tiempos de confusión general habían llegado.
La gran apostasía se extendía cada vez más, incluso dentro de la Iglesia Católica.
Y que se enseñan errores y se niegan las verdades fundamentales de la fe.
De modo que no sólo es posible que haya una apostasía, una pérdida de fe entre los católicos y la jerarquía de la Iglesia, y que esto sería en nuestro tiempo histórico, sino que además Nuestra Señora dice que ya estaba ocurriendo hace 3 décadas.
Y como Ella ha dicho que el proceso será gradual, seguramente la pérdida de fe y la corrupción del legado de los apóstoles es mucho mayor en nuestro tiempo.
Pensemos en algo simple, no entremos en cosas más o menos sofisticadas de teología.
La misión que les Nuestro Señor les dio a los apóstoles fue, vayan por el mundo y prediquen el evangelio, hagan discípulos y bautícenlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Marcos 16 y Mateo 28.
Sin embargo hoy vemos a varios obispos que proclaman que la misión fundamental que tiene la Iglesia es luchar contra el cambio climático y asistir a los inmigrantes.
Esta es la tarea de una ONG, no la de una religión que tiene como misión evangelizar el mundo.
Y si queremos ver más indicadores de la erosión de la fe en el clero, pensemos en los abusos sexuales por parte de algunos sacerdotes y el encubrimiento por parte de algunos obispos.
Porque esto sólo puede ser explicable por la erosión de la fe y de los principios morales que emanan de ella.
Papas como León XIII, San Pío X y Pío XII han hablado del ataque interno que está recibiendo la Iglesia por la infiltración, especialmente por los masones.
Y la beata Ana Catalina Emmerich tuvo visiones de cómo una secta demolía la Iglesia por dentro.
Nuestra Señora le dijo que se debía orar para que la Iglesia de las tinieblas saliera de Roma.
Sin embargo las visiones aseguran que parecerá que la verdadera Iglesia Católica desaparecerá por completo durante un tiempo, pero sin embargo sobrevivirá entre los miembros fieles del clero y los laicos.
Pero luego volverá a su esplendor.
Nuestra Señora del Buen Suceso le dijo a la Madre Maria de Jesús Torres que la Iglesia renacerá luego que Ella ponga bajo sus pies a satanás.
Nuestra Señora de La Salette dice que el agua y el fuego limpiarán la tierra y las obras del orgullo humano serán destruidas y todo será renovado.
Y entonces todos servirán a Dios y le glorificarán.
Y Nuestra Señora de Fátima dijo, al final mi Inmaculado Corazón triunfará.
Bueno, hasta aquí lo que queríamos decir sobre que habrá una pérdida masiva de fe entre laicos, sacerdotes y jerarquía de la Iglesia, una apostasía, que será profunda, al punto que la Iglesia parecerá casi inexistente.
Las profecías la sitúan en nuestra época histórica y hay indicadores evidentes de que ya está sucediendo.
Pero llegará el momento en que Dios permitirá que la fe renazca y la Iglesia entonces clandestina recobre más esplendor que nunca, ya purificada.
El triunfo del Inmaculado Corazón de María nos llevará a una Era de Paz por un tiempo largo.
Y me gustaría preguntarte si tú está viendo indicadores de la pérdida de fe entre los fieles y el clero.
La abominación desoladora y la perversión de la fe están creciendo en la Iglesia por la prédica de obispos.
El caso más notorio es el cisma que se está insinuando en la Iglesia de Alemania, apoyado por la mayoría de los obispos y laicos.
Otro caso es la discusión que están teniendo los obispos de EE.UU., sobre si darle la comunión a políticos que se llaman católicos, pero que profesan una moral contraria a la católica.
Y seguramente cada de ustedes puede darnos ejemplos de lo que sucede en sus países con algunos obispos. Aquí hablaremos sobre las profanaciones que están promoviendo obispos y de qué modo nos debemos blindar para que esos errores no lleguen a nosotros.
En nuestra época está en discusión qué significa ser un católico devoto.
¿Es ir a misa, leer la Biblia, rezar el Rosario?
¿Compartir la doctrina teológica, moral y social de la Iglesia Católica?
Hoy parecería que compartir la doctrina teológica, moral y social de la Iglesia Católica no es condición para llamarse católico.
Parecería que el Catecismo de la Iglesia Católica es sólo un referente más, pero no obliga.
Es más, una persona puede estar en la vereda opuesta a la moral católica y aun así, ella misma puede considerarse legítimamente una persona católica devota.
Y varios obispos lo convalidarán.
Por ejemplo, actualmente los obispos de EE.UU. están discutiendo lo que llaman la coherencia eucarística.
O sea si para aquellas figuras notorias del país, especialmente políticos, es lícito tomar la eucaristía, cuando se llaman católicos y defienden principios morales contrarios a la fe católica, como el apoyo al aborto, a la ideología de género, a la eutanasia, etc.
La mayoría de los obispos parecen apoyar la tesis de que no la tomen, pero hay un grupo poderoso que acepta que la tomen.
Porque por ejemplo, el presidente de EE.UU. el político más poderoso del mundo, un católico bautizado, se opone a la Iglesia en las cuestiones morales más importantes y milita a favor de ellas haciendo leyes anti moral cristiana.
Y escandaliza pública y regularmente, a millones, al recibir la comunión en la misa católica para que todos lo vean.
Dando de esta forma un mensaje de que la cuestiones morales son secundarias para ser católico.
Veremos en los próximos días si prima la sana doctrina de la Iglesia o el criterio político, que es sostenido precisamente por aquellos empeñados en cambiar la doctrina heredada de los apóstoles.
Y esto se entronca con lo que sucedió en la Iglesia Católica Alemana en mayo de 2021.
En cientos de iglesias los sacerdotes impartieron la bendición a parejas no heterosexuales, se dispensó la comunión a los protestantes, y cuasi sacerdotisas vestidas con alba y estola como los sacerdotes, impartieron las homilías en misa.
La iglesia alemana es la más rica de occidente por los motivos que explicamos en ese video, pero está perdiendo fieles a gran velocidad.
Y los obispos se embarcaron en una serie de conversaciones en el 2018, con el objetivo de reformar las enseñanzas de la iglesia, a través del llamado camino sinodal.
En un esfuerzo por cambiar la doctrina sobre la sexualidad humana, el celibato sacerdotal, la ordenación de mujeres, quienes pueden tomar la comunión, etc.
Después de las bendiciones a parejas no heterosexuales del 10 de mayo, se celebró el 15 de mayo, en 12 iglesias importantes de Alemania, la predicación de las homilías por mujeres vestidas de sacerdotes.
Y esto dentro de misas blasfemas donde aparecieron mujeres jugando a ser sacerdotes, banderas arcoíris en el altar, y estatuas punk de la Santísima Virgen María.
La peor blasfemia fue la estatua colocada en el presbiterio en una de las Iglesias, a la izquierda del altar, que representa a la Virgen María con Jesús en sus brazos, pero en una versión punk o drag queen.
Una chica con jeans ajustados debajo de la cintura, cinturón negro con tachuelas, botas negras hasta la rodilla, cabeza calva con una cresta roja.
A esto se llama blasfemia y cisma.
Porque el Vaticano había advertido a los obispos alemanes que no hicieran esos movimientos y ellos no se dieron por enterados.
Además recientemente modificó el código de Derecho Canónico excomulgando a los obispos que ordenen mujeres como diáconos.
Y para complementar el mensaje, el cardenal Kasper, un progresista al igual que la mayoría de los obispos alemanes, y muy próximo a Francisco, ha criticado duramente el camino sinodal de la Iglesia Alemana diciendo que se han excedido.
¿Y por qué está pasando esto?
¿No hay un código en la Iglesia que sintetice las enseñanza bíblicas, la tradición y el magisterio papal, que diga lo que es doctrinalmente correcto y lo incorrecto, y que frene esto?
Si lo hay, es el Catecismo de la Iglesia Católica.
Aunque los más progresistas lo consideran obsoleto, porque hoy es un freno a los cambios que quieren hacer en la doctrina, a pesar que este catecismo es hijo del Concilio Vaticano II, que ellos dicen seguir.
Hay una discusión cada vez más abierta por lo modernistas que dicen:
«¡Hay que cambiar el Catecismo de la Iglesia Católica porque está fuera de época!»
«¡Es una cosa antigua, pasada de moda, de otro catolicismo, hay que modernizarlo!»
Entonces ¿es muy antiguo el Catecismo?
¿Es preconciliar como dicen algunos modernistas?
No es así, están muy desinformados.
Así surgió el Catecismo.
En 1985, Juan Pablo II convocó a una sesión extraordinaria del Sínodo de los Obispos, para conmemorar el 20º aniversario de la clausura del Concilio Vaticano II, que había concluido en 1965.
Para ver qué efecto había tenido el Concilio sobre la Iglesia universal.
En el curso de esa asamblea el cardenal Bernard Law, arzobispo de Boston, hizo la propuesta de confeccionar un catecismo universal, un compendio de la fe católica.
Entonces la Iglesia lo comenzó a elaborar en 1985 y quedó terminado en 1994.
En su lanzamiento Juan Pablo II llamó al Catecismo «una declaración de la fe de la Iglesia y de la doctrina católica, atestiguada por la Sagrada Escritura, la tradición apostólica y el magisterio de la Iglesia».
Debería ser la herramienta básica de todo cristiano para determinar si algo es aceptable o no para el catolicismo.
Porque es un documento que contiene las verdades católicas fundamentales, expresadas de manera que sean fáciles de entender.
Y por eso debe ser nuestra guía y debemos defenderlo contra los que quieren cambiar la doctrina de la Iglesia desde adentro.
Es el documento de mayor importancia para la Iglesia luego de la Biblia.
Y esto es más vital hoy que en ningún período, porque nuestra época es la más crítica en la historia del cristianismo.
La civilización humana está cambiando la relación con la religión cristiana y esto se reproduce en la crisis por la que está pasando la Iglesia Católica.
Que no sólo es atacada desde fuera, sino que es atacada la doctrina, desde adentro.
Hoy vemos una terrible confusión entre los católicos sobre las doctrinas más fundamentales de la fe y la moral.
Una confusión que ha llegado a los niveles más altos de la estructura institucional de la Iglesia, con Cardenales y Obispos manifestando herejías respecto a la doctrina tradicional católica.
Lo que pasa en la Iglesia de Alemania y la discusión sobre la coherencia eucarística que se está produciendo entre los obispos de EE.UU. es solo una muestra de la confusión.
Hay mucho más.
Y esto tiene dolorido a Jesús.
Quien le dijo en un mensaje a Monseñor Ottavio Michelini, que el rechazo del mensaje de Dios constituye una catástrofe espantosa, de gigantesca gravedad, cuyas destructivas consecuencias se perpetuarán hasta el fin de los tiempos.
O sea que en nuestro tiempo comenzará a levantarse la valla que parará las blasfemias.
Y específicamente le dijo,
«Los hombres, sobornados por los oscuros y misteriosos poderes del infierno, materializados como están, ya no tienen la percepción de esta enorme tragedia que ha trastornado la naturaleza humana, hiriéndola mortalmente, debilitándola y privándola de los dones maravillosos con que ella había sido creada».
Lo que nos indica que luego que suceda la purificación vendrán más dones, que no conocemos, sobre la humanidad.
Y concluyó diciendo,
«La copa está llena y rebosante; sólo mi paciencia y mi longanimidad, las oraciones de los buenos, la intercesión de mi Madre y las virtudes de los santos, han suspendido el curso de la justicia divina».
Todo esto le fue dicho hace medio siglo.
Bueno hasta aquí lo que te queríamos decir sobre las blasfemias y herejías que están sucediendo dentro de la Iglesia, y que nuestro refugio seguro para mantener la fe incorrupta es apegarnos al Catecismo de la Iglesia Católica, porque ahí está la verdad inalterada de nuestra fe.
Y me gustaría preguntarte si has recurrido alguna vez al Catecismo de la Iglesia Católica ante alguna duda y que te pareció.
Los obispos alemanes alentaron la profanación de sus iglesias con actos cismáticos a pesar de la advertencia del Vaticano.
Que les dijo que la Iglesia no está autorizada por Nuestro Señor a realizar esos actos.
Que son sacrílegos.
No obstante el espíritu de la época, el complacer a las demandas del mundo, les llevó a la desobediencia y a la profanación.
Este pecado se une al creciente pecado del mundo, que no cesa de crecer. Lo mismo que los ataques del maligno.
La situación que era delicada se está tornando muy delicada.
Y debemos hacer algo.
Por eso llamamos a realizar adoración eucarística para reparar los agravios a Nuestro Señor.
Para acompañarlo en su tristeza, consolarlo y pedir ayuda.
Aquí te contaremos el detalle de cómo hacerlo y por qué es necesario hacerlo así.
Finalmente se consumó en Alemania la desobediencia a las órdenes del Vaticano, dadas a través de la Congregación de la Doctrina de la Fe, con la anuencia de Francisco
Y la Iglesia Alemana realizó varias acciones cismáticas.
La Congregación para la Doctrina de la Fe había llamado a los obispos a no permitir la profanación de los templos ni de Nuestro Señor.
Sin embargo el 10 de mayo de 2021 en más de 100 parroquias se realizó una bendición sacerdotal de parejas del mismo sexo.
El 16 de mayo se abrió la comunión a los protestantes que quisieran tomarla.
Y el 17 de mayo 12 mujeres en distintas parroquias predicaron las homilías de las misas, cuando eso le corresponde a los diáconos y sacerdotes debidamente ordenados por la Iglesia.
En este movimiento cismático alemán están involucrados la Conferencia Episcopal de los Obispos alemanes, y la mayoría de los sacerdotes y laicos.
Pero la dificultad para reprimirlo es que se trata de un acto realizado en un momento específico, por lo que al día siguiente la desobediencia no siguió, aunque se profanó el templo y se agravió a Nuestro Señor.
Este el Camino Sinodal que emprendió la Iglesia en Alemania pretende institucionalizar permanentemente estas tres cosas, además de la ordenación de mujeres, por lo menos como diaconisas, para llegar a sacerdotisas.
Por lo que parecería que estamos frente a un cisma de mano de terciopelo, de avances y retrocesos, para lograr cambios significativos en la doctrina de a poco, sin entrar en conflicto total con las autoridades vaticanas.
Y aprovechan las diferentes opiniones en la Iglesia respecto a la atribución de las Conferencias de Obispos nacionales.
Tradicionalmente la Iglesia sostenía que las conferencias de obispos nacionales tenían sólo una función organizativa y no atribución doctrinal.
Pero últimamente se piensa que podrían también tener atribución doctrinal, la llamada sinodalidad.
Pero lo claro hoy es que se agravió a Nuestro Señor, presente en el templo en la hostia consagrada.
Él vio todo lo que sucedió, vio la rebelión hacia sus mandamientos.
Y estos actos de desobediencia hacen sangrar sus heridas.
A lo que se agregan los pecados del mundo, que cada vez son más cantidad y más profundos.
Al punto que se llega a la negación de la propia creación, tratan de cambiar el cuerpo que Dios nos asignó, desestimando que fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios.
De modo que estamos en un momento muy delicado.
La negación de Dios está por todos lados. Y el maligno no cesa de atacar.
Nuestro Señor lo ve y llora.
Por eso hoy es de suma importancia hacer reparación a su corazón herido.
Pedirle perdón por los pecados de la humanidad, de la Iglesia, de nuestra familia y de nosotros mismos.
Rogar ante Él para que se restauren las cosas a su condición de normalidad y pureza, a cómo estaban antes de que sucedieran estos hechos.
Recompensarlo con mayor amor y generosidad por los pecados que se están cometiendo.
Y la reparación por excelencia es la adoración al Santísimo Sacramento.
O sea pasar tiempo frente a la hostia consagrada expuesta en un custodia, pidiendo perdón, consolándolo y adorándolo.
Es preferible hacerlo presencialmente, hay muchas capillas que lo exponen e incluso tienen adoración permanente, las 24 hs. del día.
Pero ante la imposibilidad, una opción es hacerlo por internet, hay muchas capillas virtuales en vivo con el santísimo sacramento expuesto.
San Juan Pablo II era un ferviente adorador eucarístico.
Santa Teresa de Calcuta pasaba horas contemplando en silencio el Santísimo Sacramento.
San Pío X dijo que la Adoración Perpetua del Santísimo Sacramento es la devoción que supera a todas las demás.
¿Y por cuánto tiempo debo estar adorándolo?
Habitualmente se habla de una hora de reparación, a la que se le llama Hora Santa.
Y se puede hacer también en ella la oración que el ángel enseñó a los pastorcitos de Fátima “¡Dios mío, yo creo, adoro, espero y te amo! ¡Te pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan, no te aman!”
Esta adoración frente a santísimo sacramento no parece ser un acto diseñado por los humanos.
María Magdalena de la Encarnación una franciscana del siglo XVIII en la primavera de 1789 cayó en éxtasis y recibió una visión de Jesucristo.
La visión tomó la forma de una hostia consagrada en un trono rodeado por vírgenes que la adoraban.
Y le pidió que fundara una sociedad de religiosas de adoración perpetua a Jesús eucaristía, para reparar los pecados del mundo.
Concretamente,
“Yo te he elegido para establecer un trabajo perpetuo. Adoradores que día y noche me ofrecerán su humilde adoración…”.
Fue así que se fundó la congregación de Adoratrices Perpetuas del Santísimo Sacramento.
Y también le pidió a Santa Margarita María de Alacoque, en una aparición en Paray-le-Monial en 1674, que pasara una hora, desde el jueves a las 23hs a las 24 hs, ante el Santísimo Sacramento.
Y ella descubrió allí que la Hora Santa tiene tres características principales: la oración reparadora, la unión con Jesús sufriente en Getsemaní y los gestos de humillación.
Y tan poderosa es la adoración eucarística que modifica el entorno, además de modificarnos a nosotros mismos y a nuestra relación con Dios.
El Padre Patricio Hileman, ha dedicado su sacerdocio a implantar capillas de adoración perpetua, especialmente en Latinoamérica.
Y cuenta el caso de Ciudad Juárez, una de las ciudades más peligrosas de México, donde en el espacio de cinco años (2010-2015) las tasas de homicidios se redujeron de 3766 a 256 solamente.
En ese momento 40 personas al día estaban muriendo debido a que dos grupos de narcotraficantes estaban luchando contra la ciudad con el fin de transportar drogas a los Estados Unidos.
Al punto que entre el 2008 y 2010, Ciudad Juárez fue catalogada como una de las ciudades más peligrosas del mundo.
Y él atribuye el cambio, al aumento de la adoración eucarística.
Siempre dice que «Cuando una parroquia adora a Dios día y noche, la ciudad se transforma».
También relata un testimonio conmovedor de un niño mexicano.
Diego, un niño de 8 años transformó la realidad de su familia a través de la adoración eucarística, una familia marcada por problemas de maltrato, alcoholismo y pobreza.
La historia ocurrió en Mérida, capital del Estado de Yucatán, en la primera capilla de adoración perpetua que establecieron los Misioneros de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento en esa ciudad.
El P. Hileman relató que el pequeño escuchó, en una de sus charlas, que si se apuntaban en la madrugada Jesús los iba a bendecir cien veces más.
Las palabras del sacerdote hicieron que el niño decidiera apuntarse a las 3:00 de la madrugada, algo que llamó la atención de su madre.
Y el niño le explicó:
“Quiero que papá deje de tomar, deje de pegarte y dejemos de ser pobres”.
Durante la primera semana la mamá lo acompañó y en la segunda semana invitó a su papá.
“Al mes de que comenzaron a ir a la Adoración Perpetua, el papá dio el testimonio de que experimentó el amor de Jesús y se sanó”.
Y después “se volvió a enamorar de la mamá en esas horas santas”, señaló el P. Hileman.
“El papá dejó de tomar, dejó de pelearse con la mamá y dejaron de ser pobres.
Por la fe de un pequeñito de 8 años toda la familia se sanó”.
¿Y cómo se pasa esa hora ante el Santísimo Sacramento que estamos solicitando para reparar los pecados de la Iglesia y del mundo?
Porque no todos lo han hecho.
El Santo Cura de Ars se refirió a la forma diciendo “Él me mira y yo lo miro”.
En definitiva es hacer lo que hacen los amantes, que se contemplan con amor uno al otro.
Sin embargo puede suceder que haya personas que necesiten, de acuerdo a su mentalidad, un control del tiempo más estricto
Entonces se puede dividir el tiempo de adoración en cuatro.
En el primer cuarto permanecer frente a Él, decirle que vienes para amarlo y que quieres dejarte amar por Él.
En el segundo cuarto darle gracias por todo lo que te ha dado, como la vida, tu familia, la comida, la fe, etc.
En el tercer cuarto, que es el más importante hoy, hacer reparación por las cosas que pasan en el mundo y en la Iglesia, por los pecados, y por tus amigos que no lo conocen.
Y en el cuarto período puedes hacer las peticiones que desees.
Bueno hasta aquí lo que te queríamos contar sobre la necesidad urgente de hacer reparación a Nuestro Señor, a través de la adoración eucarística, debido a lo que está sucediendo en la Iglesia y en el mundo, e indicaciones sobre cómo hacerlo.
Y me gustaría preguntarte que estimas que va a suceder con la desobediencia de los obispos, sacerdotes y laicos alemanes.
Desde hace varios años hemos estado insistiendo en que Dios está purificando a su pueblo.
A algunos laicos y sacerdotes los está dejando apostatar, que pierdan la fe.
Y a otros los preserva para que sean un remanente fiel para Su gran reinicio del mundo.
Aquí hablaremos sobre por qué Dios está en tareas de poda, cómo está formando el remanente fiel y cuál es la misión de este remanente.
En un análisis de cómo será el remanente fiel de la Iglesia cuando se despliegue totalmente la apostasía, el Padre Juan Rivas, Legionario de Cristo, dice que es un hecho que actualmente en el pueblo de Dios hay divisiones entre la alta jerarquía y desconcierto entre los fieles.
Y que muchos fieles se sienten abandonados como ovejas sin pastor ante las cosas que escuchan y ven dentro de la iglesia.
Y otros son llevados a apostatar precisamente por la predicación apóstata de algunos pastores.
Por lo comentarios en nuestros videos hemos visto que algunos sacerdotes se niegan a bendecir al agua bendita, a tomar en serio al demonio, la mayoría no cree en las apariciones marianas, se niegan a hacer oraciones de liberación, etc.
Ellos y laicos apóstatas incluso acusan de fanáticos, apocalípticos y milenaristas a los laicos que citan profecías bíblicas.
Esta grieta confirma que estamos ya en la gran apostasía.
Y que Dios permite que la pérdida de fe crezca entre sacerdotes y laicos.
¿Y que nos dicen las escrituras sobre lo que hace Dios en estos casos?
Cuando hay una gran apostasía, como sucedió muchas veces en el pueblo de Israel, Dios convoca a un remanente fiel.
Cristo nos dice que la gran apostasía se manifestará en la pérdida de la fe y la caridad.
En Juan 10 Nuestro Señor dice que vendrán pastores ladrones y salteadores y que las ovejas no los seguirán, porque no reconocen en ellos la voz del buen pastor.
Y el cardenal Ratzinger dice que un remanente fiel aparecerá cuando haya una gran apostasía, antes de que llegue la gran purificación para el mundo y para la Iglesia.
Ezequiel nos muestra como hay pastores que destruyen y dispersan a las ovejas.
Y el Señor promete que castigará a estos pastores. Y no dejará que estos pastores vuelvan a pisotear al rebaño.
Por eso es que la primera apostasía en verse es la de dentro de la Iglesia y allí vendrá primero la purificación; es la que estamos viendo.
El Señor mostró como a los pastores de Israel, les fue quitando la autoridad, y de esa misma forma va a pasar con los apóstatas dentro de la Iglesia.
En el momento de la muerte de Jesús en el templo, el lugar de los sacerdotes, se rasgó el velo
Y de allí sale el Espíritu Santo, que luego se infundirá a los apóstoles y María el día de pentecostés; ellos eran el remanente fiel.
¿Y por qué Dios permite esta apostasía?
En varios pasajes de la historia y de la Biblia se ve cómo es Dios mismo quien reduce el rebaño.
Lo vemos cuando Yahveh reduce sistemáticamente el ejército de Gedeon, en Jueces 6, enviando a casa a los soldados que Él sabía que iban a defeccionar contra el ejército madianita.
Lo vemos también en la desaparición de las 10 tribus de Israel, etc.
Parece que es el mismo Dios que muestra el propósito de reducir sus filas.
Esto significa que Dios está purificando a Su pueblo, para quedarse con un remanente fiel de mucha fe y de mucha obediencia a su palabra.
Por eso la primera característica del remanente fiel es la profundidad de su fe.
Porque se necesitará una Iglesia más fuerte y pura para soportar el tsunami cultural que ha estado llegando.
Este remanente fiel es mariano como segunda característica, porque imita la fidelidad de la Santísima Virgen cuando incluso los apóstoles huyeron ante la crucifixión de Jesucristo.
Es convocado por la Inmaculada y ungido por el Espíritu Santo.
Estas personas viven intensamente en la fe y una ardiente caridad en medio de una gran apostasía y de un duro invierno eclesial.
Ellos irán formando sus propios grupos marianos, porque van a ver la necesidad urgente de prepararse para lo que dice el Catecismo de la Iglesia Católica.
Que señala que antes del advenimiento de Cristo la Iglesia deberá pasar por una prueba final, que sacudirá la fe de numerosos creyentes.
Y en Lucas 18 y Mateo 24, Jesús habla de la persecución que acompañará a la impostura religiosa.
Por lo que habrá una iglesia paralela que apostatará de la verdad y otra que será perseguida.
En tercer lugar, esta impostura religiosa es señal de que pronto va a llegar el anticristo que propondrá una salvación falsa.
En Fátima se habla que el brazo ejecutor será el comunismo, y ya lo vemos como un gran actor del nuevo orden en el mundo.
Esa falsa reforma contrasta con la verdadera, que sólo puede venir del interior del hombre, no puede venir de cosas exteriores.
El catecismo nos habla de una falsa iglesia, de dos evangelios, uno de la verdad y otro de la mentira.
Y en el libro del Apocalipsis menciona también a los que no se definen, a los que se cruzan de brazos, los tibios, quienes en definitiva son cómplices.
De modo que Dios preserva a un pequeño remanente fiel convocado por su Madre Santísima.
Utiliza a la Su madre para poder congregar a sus ovejas fieles, y es lo que justifica la cantidad de apariciones marianas registradas en el último siglo.
Por eso San Maximiliano Kolbe decía que estos tiempos eran los de la Inmaculada y del Espíritu Santo.
En cuarto lugar entonces, la Virgen no sólo va a triunfar a nivel global, sino que está triunfando ya en el corazón de cada uno que ha hecho su consagración y defiende la verdad en esta batalla cultural.
Y esto significa que los que se consagran a María entran en una batalla contra el maligno.
Porque no puedes afirmar que quieres Su triunfo, y no te enfrentas al enemigo.
Y la forma en que entrarás en batalla depende de la zona en que estés.
En algunos lados la batalla es para preservar la sana doctrina, en otras partes pasa por defender la vida, y en otros por mantener abiertas las iglesias, etc.
El pequeño remanente será pequeño, pero no estará sólo.
Porque lo que nos debe dar confianza es que somos ovejas de Cristo y Cristo no abandona.
Además está la Santísima Virgen para guiarnos, para protegernos y librarnos de todo mal.
En quinto lugar, la misión del remanente fiel es preservar la fe, y no juzgar a los pastores y a otros laicos que pierden la fe y difunden la fe apóstata como si fuera la deseable.
A ellos lo juzgará el dueño del rebaño: tendrán que dar cuentas a Dios de su conducta y del cumplimiento de su deber.
San Agustín decía que él era obispo y que tenía que dar cuenta a Dios porque era oveja de Cristo y tenía que obedecer.
En sexto lugar, ¿quiénes son los laicos y sacerdotes del remanente fiel?
No son los que más gritan y hacen shows de hombres.
Son sencillos y viven su vida y obligaciones con devoción y cumpliendo la palabra de Dios.
Son quienes disciernen entre la teología de los apóstoles y las falsas teologías, impregnadas de ideologías que han infestado a la Iglesia.
En definitiva, el remanente fiel se distingue por su fidelidad a la Escritura, a la Tradición, al Magisterio, por su amor a María, por dejarse llenar de alegría y de gozo en el Espíritu Santo.
Y en séptimo lugar, la buena noticia, cómo termina esto.
Dice Nuestro Señor, Yo mismo vendré a llevar a mis ovejas, yo me ocuparé de ustedes, yo me ocuparé de mis ovejas, yo te cuidaré.
Yo mismo reuniré el remanente de mis ovejas de todas las tierras donde las he echado y las haré volver a sus pastos y crecerán y se multiplicarán.
Pondré pastores que las apacentaran y nunca más tendrán temor.
Bueno hasta aquí lo que queríamos sobre la purificación del pueblo de Dios que se está produciendo en paralelo con la apostasía y cual es la función del remanente fiel.
Y me gustaría preguntarte si crees que efectivamente hay un remanente fiel actuando en este momento.
Los laicos y buena parte del clero están abandonando la fe de los apóstoles.
Lo que Jesucristo vino a pedir en su primera venida.
Esto no surgió sin previo aviso.
La Santísima Virgen bajó a la tierra para avisarlo varias veces. .
Y los últimos Papas también lo han dicho. .
La apostasía se ha acelerado en el último par años, de modo que el diagnóstico es cada vez más preciso. .
Mientras tanto la mayoría de los católicos parecen no darse cuenta.
¿Cómo continuará esto? Basta con seguir leyendo lo que dicen las profecías.
La punta más famosa de la madeja es la parte del tercer secreto de Fátima que supuestamente no se publicó.
En realidad parece claro que no sería una segunda parte sino un cuarto documento, que la Iglesia aparentemente ha considerado como una revelación privada.
Este es un material para discernir. Lo más importante de él es la información que maneja, de fuentes originales.
Capilla de San Toribio en el Colegio Pontificio Josephinum antes y después del Concilio Vaticano II
LOS PROTESTANTES FUERON LOS PRIMEROS EN APOSTATAR
Una aclaración que se debe hacer es que las primeras denominaciones que apostataron fueron las protestantes.
Es más, su apostasía comenzó con Lutero cuándo atentó contra la unidad de la iglesia en el cisma protestante.
Que luego la historia se encargó de demostrar que el divisionismo no era coyuntural, sino algo intrínseco en la ideología luterana, porque sus partidarios luego se han seguido desuniendo en miles de denominaciones permanentemente.
Pero además las denominaciones protestantes fueron las primeras en pactar con el mundo adoptando la anticoncepción, aprobando el aborto, ordenando pastores homosexuales, etc.
No sólo que Jesús nos es el hijo de Dios, sino que piensan que Dios no existe y que es una construcción humana.
Y estos pastores siguen al frente de sus pequeñas congregaciones bajo la tolerancia de sus iglesias madre.
La Iglesia Católica había resistido razonablemente bien los embates del mundo hasta la década de 1960.
Pero en esa década se produjo una conjunción de factores que la debilitaron y la hicieron más frágil para las apostasías.
Por un lado tenemos la revolución sexual de los años 60, que fue generalizada en toda la sociedad y en todas las instituciones.
Y esto coincidió con el Concilio Vaticano II qué fue una instancia en que la Iglesia intento que el aire fresco de la sociedad ingresara en la Iglesia.
El gesto de Juan XXIII de abrir las ventanas cuando proclamó el lanzamiento del Concilio muestra la intención.
Pero esa apertura coincidió en un momento de gran revolución en la sociedad.
Y esa movilización entró en la Iglesia de la mano de las corrientes modernistas que estaban actuando a su interior por lo menos desde el siglo XVIII.
El Papa San Pío X definió el modernismo, a fines del siglo XIX, como la síntesis de todas las herejías.
Y elaboró un manifiesto antimodernista para que fuera adoptado por toda la Iglesia.
El efecto que tubo esto fue que los modernistas se camuflaron aún más, pero no desaparecieron.
Y en el Concilio Vaticano II hicieron eclosión con más fuerza, apoyados por los medios de comunicación laicistas, que quieren reformar la doctrina tradicional que Cristo dio a la Iglesia.
De modo que el Concilio Vaticano II fue un gran campo de batalla entre la doctrina tradicional y el modernismo.
Y si bien los textos aprobados por el Concilio no demuestran una erosión decisiva de la doctrina, otra cosa sucedió a nivel de parroquias.
Por esos años por ejemplo surgió la Teología de la Liberación, que es un claro subproducto del modernismo, poniendo énfasis en que la iglesia debía poner su esfuerzo en cambiar la realidad material de este mundo, en especial apoyando a los sectores marginales de la sociedad.
Y un subproducto de esto fue la negación de los aspectos devocionales populares del catolicismo.
Hay cientos de anécdotas del fervor iconoclasta con que actuaron los modernistas en las parroquias no bien terminado el Concilio.
Por ejemplo escondiendo los nichos con imágenes de la Santísima Virgen y santos bajo muros de yeso.
Por ejemplo nos han contado un caso de una iglesia parroquial que se llamaba Nuestra Señora de Lourdes, dónde el nicho principal que estaba detrás del altar con una gran figura de Nuestra Señora de Lourdes fue cubierto con yeso y ocultada la imagen de la patrona de la parroquia.
Y esto fue descubierto años posteriores cuando tomaron posesión nuevos sacerdotes en esa iglesia parroquial.
Obviamente esto es una anécdota, pero muestra la punta de todas las cosas que sucedieron en ese momento.
Si bien luego fue refrenado ese fervor modernista, pero su prédica continúa dentro de la Iglesia.
Hoy la apostasía puede verse en la crisis de los abusos sexuales de parte de algunos sacerdotes.
Y en las propuestas que otros hacen sobre cambios doctrinales en la Iglesia, contradiciendo algunos de los mandamientos que Cristo nos dejó y que están estampados en la Biblia.
De modo que la apostasía no es algo que va a venir sino algo que ya está comenzando.
Y la Virgen lo anunció.
EL TERCER SECRETO DE FÁTIMA QUE REVELÓ EL VATICANO EN EL 2000
“Escribo en obediencia a Vos, Dios mío, que lo ordenáis por medio de Su Excelencia Reverendísima el Señor Obispo de Leiria y de la Santísima Madre vuestra y mía.
‘Después de las dos partes que ya he expuesto, hemos visto al lado izquierdo de Nuestra Señora un poco más en lo alto a un Ángel con una espada de fuego en la mano izquierda.
Centelleando emitía llamas que parecía iban a incendiar el mundo.
Pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él.
El Ángel señalando la tierra con su mano derecha, dijo con fuerte voz: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia!
Y vimos en una inmensa luz qué es Dios: ‘algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan ante él’ a un Obispo vestido de Blanco ‘hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre’.
También a otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza.
El Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad medio en ruinas y medio tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino.
Llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas.
Y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones.
Bajo los dos brazos de la Cruz había dos Ángeles cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios’”.
Se nos advierte sobre una guerra, el martirio y la persecución a los líderes de la Iglesia y los fieles, eventualmente el asesinato de una Papa. . Pero nada acerca de una apostasía dentro del catolicismo.
Sin embargo quienes han estudiado el tema y consideran que hay una parte que falta, son unánimes sobre cual sería su contenido.
–uno que aporta la visión del “obispo vestido de blanco” y que fue anunciado en el 2000 por el Vaticano
–y otro en que la hermana Lucía (más tarde) transcribe la interpretación de la visión misma hecha por Madonna.
Es la segunda versión que impresionó a Juan XXIII y que lo llevó a la creencia de que podría ser sólo un pensamiento de la vidente, y no de origen sobrenatural.
Es la parte que nunca se ha hecho pública y que, oficialmente, se niega su existencia.
Y Socci concluye:
Lo que sabemos con razonable claridad, porque resulta de varias informaciones de los últimos años por parte de clérigos y sacerdotes de alto rango muy cerca de la hermana Lucía, es que el texto de esta segunda parte hablaría de la apostasía en la Iglesia y del grave peligro que enfrenta la humanidad”.
Veamos otros testimonios.
MÁS TESTIMONIOS SOBRE UNA PARTE DEL TERCER SECRETO QUE FALTARÍA
“No tiene nada que ver con Gorbachov. La Santísima Virgen nos está alertando sobre la apostasía en la Iglesia.”
El fallecido padre Joaquín Alonso (+1981) quien por dieciséis años fue el archivista oficial de Fátima, y que había tenido numerosas entrevistas con la Sor Lucía, testifica lo siguiente:
“Por lo tanto es completamente probable que el texto haga referencias concretas a la crisis de fe dentro de la Iglesia y a la negligencia de los pastores mismos [y a las] luchas internas en el seno de la Iglesia y a una grave negligencia pastoral de la alta jerarquía…
En el período precedente al gran triunfo del Inmaculado Corazón de María han de suceder cosas terribles.
Esto es lo que forma parte del Secreto. ¿Cuáles son?
Si en ‘Portugal se preservara siempre el dogma de la Fe’… puede claramente deducirse que en otras partes de la Iglesia estos dogmas se oscurecerán o inclusive se perderán totalmente…
¿Acaso el texto no publicado habla de circunstancias concretas?
Es muy posible que hable no solo de una crisis en la fe en la Iglesia durante el período precedente, sino que como en el caso del Secreto de La Salette, por ejemplo, haya referencias más concretas a las luchas internas de los católicos o a la caída de los sacerdotes y la religión.
Quizás inclusive se refiera a las defecciones de la alta jerarquía de la Iglesia. Puesto que ese asunto no es para nada extraño a otras comunicaciones que Sor Lucía ha recibido en este tema.”
Mons. Amaral, tercer obispo de Fátima, dijo lo siguiente sobre el Secreto una conferencia en Viena, Austria, el 10 de septiembre de 1984:
“Su contenido concierne a la fe.
Identificar el [Tercer] Secreto con anuncios catastróficos o con un holocausto nuclear es deformar el sentido del mensaje.
La pérdida de la fe de un continente es peor que la aniquilación de una nación; y es verdad que la fe está continuamente disminuyendo en Europa.”
Está luego la cita famosa del Cardenal Luigi Ciappi, teólogo personal de cuatro papas, incluyendo a Juan Pablo II, que escribió en una carta en 1995:
“En el Tercer Secreto se anticipa, entre otras cosas, que la gran apostasía en la Iglesia comienza por lo más alto”.
Hay claras sospechas sobre el contenido del eventual tercer secreto de Fátima. Pero eso no queda ahí.
La Dra. Alice von Hildebrand confirmó que ella y su marido Dietrich, habían escuchado el mismo mensaje en 1965 de la boca de monseñor Mario Boehm, editor del diario oficial del Vaticano, L’Osservatore Romano.
Cuando afirmó que el Tercer secreto no había sido revelado a su tiempo (en 1960, como Nuestra Señora pidió) debido a su contenido “de miedo”.
Cuando se le preguntó qué era tan aterrador, Mons. Boehm respondió:
“¿Usted sabe, Gabriele? Es Satanás el que se ha introducido en el seno de la Iglesia y dentro de muy poco tiempo llegará a gobernar una Iglesia falsa.”
El P. Amorth llegó a decir,
“Nada de eso (castigos terrenales) le importaban (al Padre Pio), sin embargo era aterrador para él la gran apostasía en la Iglesia.
Este era el tema que realmente le atormentaba y por el que oraba y ofrecía una gran parte de su sufrimiento”.
“…Satanás reinará sobre los lugares más altos que dirigen el curso de los acontecimientos. Él (Satanás) realmente tendrá éxito en infiltrarse a la parte superior de la Iglesia”.
La Santísima Virgen acostumbra avisarnos sobre lo que va a pasar no una, sino muchas veces. .
Así que si el aviso de la apostasía dentro de la Iglesia es cierto, tendría que haber más mensajes avisando lo mismo.
DOS MENSAJES DE MARÍA QUE HABLARÍAN DE LO MISMO
Es interesante que en 1951, la mística Teresa Musco dijo que fue informada por la Virgen que:
“Verás muchos cambios en la Iglesia. Los cristianos que oran serán pocos. Muchas almas caminan al infierno…
Cuando Satanás llegue a la parte superior de la iglesia, es el momento en que será capaz de seducir a las mentes de los grandes científicos… . A partir de 1972 comenzará el tiempo de Satanás, los Cardenales se opondrán a cardenales y obispos contra obispos…”
Pero no fue sino hasta 12 años después – en 1963 – que una publicación alemana llamada Neues Europa salió con palabras muy similares en un artículo sobre lo que afirmaba era el texto del tercer secreto de Fátima.
En la parte que menciona a la Iglesia dice:
“También llegará un momento de las más difíciles pruebas para la Iglesia.
Los cardenales estarán contra los cardenales y los obispos contra los obispos, Satanás se pondrá en medio de ellos, y en Roma también habrá grandes cambios.
Y lo que caiga no debe ser mantenido.
La Iglesia se oscurecerá y el mundo se sumergirá en confusión”.
Sin embargo este “secreto” de Neues Europa fue denunciado como falso por la Hermana Lucía dos Santos.
Pero otra vez esto mismo se repitió casi palabra por palabra en una tercera revelación en Akita, Japón en 1973, dos décadas después de la predicción de la estigmatizada Teresa Musco y doce años después de Neues Europa.
“La obra del demonio se infiltrará hasta dentro de la Iglesia de tal manera que se verán cardenales contra cardenales, obispos contra obispos.
Los sacerdotes que me veneran serán despreciados y encontrarán oposición de sus compañeros…
Iglesias y altares saqueados; la Iglesia estará llena de aquellos que aceptan componendas.
Y el demonio presionará a muchos sacerdotes y almas consagradas a dejar el servicio del Señor.”
Además hay un gran cuerpo de profecías de Santos que hablan de la pérdida de fe del Clero en los tiempos finales, ver aquí.
CURIOSAMENTE ES UN TEMA RECURRENTE ENTRE LOS PAPAS
Si examinamos más o menos 130 años para atrás de la Iglesia, se encuentra un tema recurrente de los diversos papas, independiente de mensajes celestiales.
Dijo que lo único que lo que necesitaba era más poder y un centenar de años.
Jesucristo respondió que se le daría el tiempo y poder.
Fue debido a esta visión que el Papa compuso de inmediato la oración de San Miguel y ordenó que se orara después de cada misa.
A continuación, nos encontramos con el Papa San Pío X en 1907 con su encíclica Pascendi Dominici Gregis, donde advirtió a los obispos del mundo contra el modernismo y sus efectos corrosivos sobre la Fe, al que calificó de “la síntesis de todas las herejías”.
En 1977, el Papa Pablo VI, en el aniversario de la última aparición en Fátima donde ocurrió el Milagro del Sol dijo lo siguiente:
“La cola del diablo está obrando por la desintegración del mundo católico.
Las tinieblas de Satanás han entrado y se han extendido por toda la Iglesia católica hasta la cima.
La apostasía, la pérdida de la fe se está propagando por todo el mundo, hasta los más altos niveles de la Iglesia”.
Y aún antes, a poco de haber finalizado el Concilio Vaticano II había dicho que
“por alguna rendija el humo de Satanás ha entrado en el Templo de Dios”.
Y agregó
“A través de las ventanas, destinadas a dejar pasar la luz, hubo penetrado la duda en nuestra conciencia. Incluso en la Iglesia misma reinaba la inseguridad.
Después del Concilio, se habían esperado días soleados para la historia de la Iglesia, pero en vez de ello habían llegado días de nubes, de tormenta, de oscuridad, de dudas e inseguridad”.
Esto es debido a la intervención de un poder adverso.
“Su nombre es el Diablo, este ser misterioso al que se alude también en la carta de san Pedro”.
El papa estaba convencido que
“cierta cosa preternatural había venido al mundo para turbarlo”.
Según algunos demonólogos, Pablo VI tuvo dos motivos que orientaron sus catequesis sobre el demonio:
-ante todo, se iba formando una corriente teológica que prácticamente terminaba negando su existencia,
-por otra parte, se vivía – y se sigue viviendo – en un período en el que la presencia maléfica y pervertidora de Satanás indudablemente es más activa que en otros tiempos.
“Ahora estamos parados frente a la mayor confrontación histórica que la humanidad ha experimentado alguna vez…
Ahora nos enfrentamos a la confrontación final entre la Iglesia y la anti-iglesia, entre el Evangelio y el anti-evangelio, entre Cristo y el anticristo.
El enfrentamiento se encuentra dentro de los planes de la Divina Providencia. .
Está, por lo tanto, en el plan de Dios, y debe ser un juicio que la Iglesia debe asumir y afrontar con valentía…
Tenemos que estar preparados para someternos a grandes pruebas en un futuro no muy lejano…
A través de sus oraciones y la mía, es posible aliviar esta aflicción, pero ya no es posible evitar que suceda.
¡Cuántas veces la renovación de la Iglesia ha sido a través de la sangre!
Estamos viendo una enorme apostasía dentro del catolicismo que abarca a toda la iglesia que peregrina en la Tierra: laicos, sacerdotes, obispos, cardenales.
Y la tendencia es a que esta se acentúe, y cada a vez a mayor velocidad.
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En 1972, pocos años después de finalizado el Concilio Vaticano II, Pablo VI dijo una enigmática frase.
Que el “humo de satanás” se había infiltrado por alguna grieta del Vaticano.
¿Qué quiso decir Pablo VI refiriéndose al humo de satanás?
¿Hablaba de sectas satánicas actuando o de una influencia espiritual satánica, o era sólo alegoría?
Más de 4 décadas después la Iglesia ha perdido predicamento en occidente. .
Y las fuerzas modernistas parecen estar más activas que nunca haciendo lobby para cambiar aspectos doctrinales del catolicismo por la fuerza de los hechos.
¿Es una herejía pensar qué el maligno está involucrado en la iglesia?
Si leemos con atención las escrituras veremos que no, porque después de todo Judas iscariote era técnicamente un Obispo y traicionó a Jesús por influencia maligna.
Incluso Jesús lo pone claro cuándo les dice a los apóstoles “¿no los elegí yo a los 12 y uno de ustedes es un demonio?” (Juan 6: 70).
Además está el suceso en que Jesús le dijo a Pedro “aléjate de mí Satanás”(Mateo 16:23), porque Pedro reprendió el anuncio de que Jesús iba a sufrir y morir.
En este caso Jesús alude a que el diablo había entrado temporalmente San Pedro.
Cuando nosotros leemos en Mateo 16:18 que las puertas del infierno no prevalecerán contra la Iglesia, significa que no la van a vencer, pero no significa que no estén presentes constantemente y ganen en algunas batallas.
Significa que en última instancia el maligno lo aplastará a la Iglesia sino que él será vencido.
La iglesia no está fuera del alcance de la corrupción del maligno y esto lo podemos ver en algunas parábolas qué dijo Jesús.
Por un lado se describe como el maligno sembró malezas entre el trigo bueno y por otro como hay peces malos junto con los peces buenos (Mateo 13).
Lo malo subsistirá en la Iglesia hasta que el último día en que el señor separará lo bueno y lo malo.
Esto mismo lo podemos ver en la historia del pueblo de Israel desde Jacob, que engañó a su padre en su lecho de muerte, hasta David que era un adúltero y que hizo asesinar a un hombre para quedarse con su esposa.
Una de las alusiones más espeluznantes de un pontífice fue la afirmación del Papa Pablo VI en 1972, de que el “humo de satanás” se había infiltrado por una grieta del Vaticano.
Al respecto existen varias interpretaciones de esto. .
Una es que haya hablado en sentido real de una actividad de sectas satánicas en el Vaticano.
Y otra es que haya sido una alegoría para describir la influencia maligna en la iglesia de una mentalidad moderna que penetró a partir del Concilio Vaticano II.
Durante décadas se manejó que cuando el Papa Pablo VI hizo su famosa declaración se refería a las distorsiones del Concilio Vaticano II.
Especialmente en la forma de modernización de las devociones y las misas, o tal vez la omnipresencia del liberalismo.
Pero hay indicios que posiblemente se refiriera a algo más preciso y distinto.
MÁS QUE UN PROBLEMA DE MISAS Y DEVOCIONES POPULARES
Es posible que un curso modernista tras el Concilio Vaticano II fuera parte de su comentario sobre el humo de satanás.
Una traducción detallada de lo que dijo el Papa en ese fatídico día – el noveno aniversario de su asunción al pontificado, durante una misa de la solemnidad de San Pedro y San Pablo – proporciona la visión casi sorprendente.
Parece que Pablo VI hablaba en términos mucho más profundos que la simple preocupación por la forma en que Concilio Vaticano II podía ser interpretado, o cómo se celebraba la Misa a partir de ahí.
Se refería a la infiltración de la moderna psicología, la sociología y el cientificismo en las filas de su clero y de la jerarquía que servían como pastores.
El Papa, en la audiencia general del 15 de noviembre del mismo año, advierte que:
– una mentalidad científica impregna el catolicismo; . – que la Iglesia estaba sucumbiendo a las nociones modernas de la “investigación” y la “objetividad”, en vez de acentuar el genio de Dios; . – y que trataba de poner la duda en todo momento y negar las raíces mismas del cristianismo: misticismo y sobrenaturalidad.
“Ciertas corrientes sociológicas de hoy tienden a estudiar a la humanidad, mientras que prescinden de ese contacto con Dios.
Por el contrario, la sociología de San Pedro y la sociología de la Iglesia estudian a los hombres señalando precisamente este aspecto sagrado de la conversación con lo inefable – con Dios, con el mundo divino”.
EL CIENTIFICISMO CREANDO DUDA SOBRE LO SOBRENATURAL
El Papa tanto implícita como directamente dijo que la adopción de conceptos psicológicos modernos para reemplazar las teorías espirituales creaba una nueva actitud de escepticismo hacia los milagros.
Y comenzaba a contar que el mismo satanás era una “superstición”.
“Hay duda, incertidumbre, inquietud problemática, insatisfacción, confrontación”, dijo Pablo VI.
Para inmediatamente después decir que “de alguna fisura el humo ha entrado en el templo de Dios” en su famosa homilía, que a menudo es extraída fuera de contexto.
“Ya no hay confianza en la Iglesia”, añadió el Papa.
“Ellos confían en el primer profeta profano que habla en alguna revista o algún movimiento social, y corren tras él a preguntarle si tiene una fórmula para la verdadera vida”.
“La duda ha entrado en nuestras conciencias, y entró por una ventana que debería haber sido abierta a la luz”.
“La ciencia existe para darnos verdades que no nos separan de Dios, sino que nos hace que lo busquemos más y lo celebremos con mayor intensidad”.
“En cambio, la ciencia nos da la crítica y la duda.
Los científicos son los que más cuidadosamente y penosamente esfuerzan sus mentes.
Pero acaban enseñándonos: ‘No lo sé, no lo sabemos, no podemos saberlo’. La ‘academia’ se convierte en el gimnasio de la confusión y contradicciones a veces absurdas”.
Esta negación de lo sobrenatural – el “estado de incertidumbre” – está ahora ejerciendo su predominio en la Iglesia, se lamentó el pontífice en su discurso (el texto completo nunca fue registrado por el Vaticano).
“Hubo la creencia de que después del Concilio habría un día de sol para la historia de la Iglesia”, entonó el Papa. .
“En cambio, es la llegada de un día de nubes, de tempestad, de oscuridad, de investigación, de incertidumbre”.
En lugar de la fe, ahora hubo escepticismo.
En vez de exorcismo, hubo psicología.
Nada es aceptado a menos que pudiera cumplir con el protocolo estrecho de un laboratorio.
Cuando el Vaticano II abrió las ventanas de la iglesia, estaba buscando la luz del sol de la profunda fe cristiana del pasado.
Pero permitió que la ciencia y su filosofía de la duda, como el humo oscuro, entrara.
¿CÓMO HA SUCEDIDO ESTO?
El Papa dice a los que están presentes:
“Ha habido una intervención de un poder adverso, su nombre es el diablo, este misterioso ser al que la carta de San Pablo se refiere”.
Observó el Santo Padre:
“Creemos que algo preternatural ha venido al mundo precisamente para perturbar, para sofocar los frutos del Concilio ecuménico.
Y para impedir que la Iglesia irrumpa en un himno de alegría por haber renovado en plenitud su conocimiento de sí misma”.
Añadió que, una vez los obispos llevaban procesiones a sitios de un milagro de renombre, ahora, en un clima hiper-académico, ignoraban estas prácticas.
El Papa también mencionó la pérdida del hábito religioso y las manifestaciones exteriores de la vida religiosa.
Queda la idea de que se estaba refiriendo a una infiltración más grande, que eventualmente vaciaba los bancos, cuando los fieles ya no sentían lo sagrado.
Y esto nos lleva a las palabras de una llamada «profecía de 1990», donde supuestamente el Señor dijo:
“Mi mayor enemigo es la ciencia, incluso más que los medios de comunicación.
La ciencia que altera la vida, la ciencia que crea un cielo falso, la ciencia que labora con el vientre y los genes.
La ciencia que ha llenado el aire con el poder del enemigo, la ciencia que crea la brujería química y ensucia la tierra.
La ciencia que trata de crear vida, pero no puede, en realidad ni siquiera sostenerla, la ciencia que ha negado a Dios.
Esto caerá, y todas sus creaciones con ella”.
EL “HUMO DE SATANÁS” ESTÁ SIENDO ALIMENTADO DESDE DENTRO DE LAS PARROQUIAS
Esto lo vemos funcionando hoy en las Parroquias.
El éxito del trabajo de satanás, ha socavado a la iglesia, castrando su ministerio, saboteando los objetivos del Espíritu Santo y capturando a una multitud de almas.
Es la reinterpretación modernista de la fe católica de muchos sacerdotes.
Los resultados reduccionistas de los estudios bíblicos modernos y la infiltración de una mentalidad modernista, racionalista y materialista significa que lo sobrenatural se asumió que era imposible.
Y por lo tanto las historias de la Biblia (y también todos los elementos sobrenaturales de la fe) tenían que ser ‘des-mititologizados’.
Todo lo sobrenatural en el relato bíblico y en las vidas de los santos y en la enseñanza de la iglesia se supone que es imposible. .
Y tuvo que ser “reinterpretado” para que ello tuviera sentido para la gente moderna, gente con mentalidad científica.
Así que la alimentación de los cinco mil no fue un milagro.
En cambio, el “verdadero milagro” fue que todo el mundo compartiera su almuerzo.
Todo tenía que ser interrogado y “reinterpretado” de tal manera que pudiera ser aceptado y comprendido por la gente contemporánea.
Así que cuando llamamos a Jesucristo “Dios encarnado” lo que realmente quiere decir es que fue tan plenamente humano.
Y que al llegar a su potencial como un hombre nos muestra como luce la divinidad.
Cuando hablamos de la Santísima Virgen nos referimos a que ella era “una muy buena y santa mujer joven judía”.
Cuando hablamos de la ‘presencia real’ queremos decir que vemos “el Cristo que está dentro de cada uno de nosotros”.
Y ni que hablar de los relatos del Antiguo Testamento.
Cuando se refiere al milagro de la apertura en dos del Mar Rojo para que pasar el pueblo de Israel que huía de Egipto, la reacción es “tiene que haber sigo un signo mucho menor, que luego el paso del tiempo lo fue agrandando”.
Es el humo de satanás, y él está prácticamente triunfante dentro de las iglesias protestantes.
Y por desgracia, la Iglesia católica moderna está acribillada a través de la misma herejía nociva.
REVISTEN DE NUEVO SIGNIFICADO A LOS TÉRMINOS VIEJOS
La razón por la que es tan eficaz es porque esos sacerdotes siguen utilizando todo el lenguaje tradicional de la liturgia, las Escrituras y los credos. .
Pero han cambiado su significado por completo.
Ellos en realidad nunca se ponen de pie y dicen que han cambiado el significado, y que ya no creen en la fe de los apóstoles.
No discuten el hecho de que no sólo han cambiado el significado, sino que le robaron el sentido por completo.
En su lugar, permanecen semana tras semana recitando el credo como si ellos creyeran que es verdad.
Pero lo que quieren decir con “verdadero” es totalmente diferente de lo que su gente dice.
Así por ejemplo, lo que uno de estos sacerdotes dice el día de Pascua:
“¡Aleluya! Hoy nos regocijamos en la gloriosa resurrección de Nuestro Señor Jesucristo de entre los muertos”.
Su pueblo cree que él realmente piensa que el cuerpo muerto de Jesús volvió a la vida por el poder de Dios y que él se fue a vivir para siempre.
Pero de hecho para él realmente significa que “de alguna forma las hermosas enseñanzas de Jesús fueron recordadas y continuadas por sus seguidores mucho después de su trágica muerte”.
ESTOS SACERDOTES SON CONFUSOS Y SIEMBRAN LA CONFUSIÓN
Las personas no saben por qué la vida católica de estos sacerdotes es tan ligera y blanda.
Y no saben por qué su estilo es tan carente de sustancia, y siguen su camino confuso, pensando que realmente creen en la fe católica cuando, en realidad, no lo hacen en absoluto.
En consecuencia, realmente no tienen mucho que decir en el mensaje.
Porque ellos no creen en la veracidad fáctica de los evangelios.
Excepto como una especie de hermosa historia que inspira a la gente a ser más amable con los demás.
Todo lo que queda de su sacerdocio, por lo tanto, ha de ser del tipo para entretener a la gente con pensamientos inspiradores.
Y llevar a todos a ser más amables y tratar de salvar el planeta.
Los pobres fieles han tragado todo esto durante dos o tres generaciones.
Y ellos ni siquiera saben que están tragando veneno, porque las mentiras están todas vestidas con el mismo lenguaje tradicional que la Iglesia siempre ha usado.
Es como si alguien pusiera ácido de la batería en una botella de leche y se la da a un bebé, sin imaginar que hubiera algo malo en ello, de hecho pensó que era lo mejor para el bebé.
Los fieles no saben por qué su iglesia se ha convertido muchas veces como un cruce entre un concierto de Joan Baez y una reunión de activismo político.
Esta es la razón por lo que la evangelización de los católicos de banco de iglesia sea probablemente la tarea más difícil de todas. .
Ellos no saben lo que no se les ha dicho.
Durante tres generaciones, se les ha dado la leche aguada y se les dijo que era vino.
No se les ha hablado de doctrina ni de las luchas culturales.
Los católicos en realidad han retrocedido en las herramientas para comprender la fe y para juzgar que es herejía y que no.
En realidad creen que la luz Católica se trata de las varias banalidades y lugares comunes que se dicen desde el ambón.
Y se asombran al pensar que hay algunos de nosotros que piensan que han sido alimentados en realidad con una versión del cristianismo que es apenas parte muy incompleta del cristianismo.
¿Estoy equivocado? ¿Exagero? ¿Soy crítico? ¿Me olvido de algo? Espero comentarios.
LA PUERTA DEL PECADO SEXUAL POR LA QUE HA ENTRADO SATANÁS
No debemos olvidar tampoco que en 1968 el papa Pablo VI promulgó la encíclica Humanae Vitae, donde advirtió sobre los errores de la anticoncepción.
Esta encíclica fue rechazada por la cultura y también por buena cantidad de obispos, cardenales y clero dentro de la Iglesia.
Y lo que comenzó con una semilla demoníaca negando la enseñanza del Humanae Vitae sobre el sexo se ha convertido en una revolución sexual dentro de la Iglesia.
Hay una conexión directa entre el abuso sexual de sacerdotes y la homosexualidad, porque el 80% de los niños abusados por sacerdotes son de sexo masculino, lo que muestra una tendencia homosexual en ese acto.
Pero a su vez una encuesta realizada entre sacerdotes Católicos por los Angeles Times en el 2002 encontró que 44% de los sacerdotes decían que había una cultura homosexual en sus diocesis y su instituto religioso.
Cifra qué sube al 53% entre los sacerdotes recién ordenados refiriéndose al seminario al que asistieron.
El ex rector del seminario Donald Cozzens y el psicólogo Richard Sipe se ha referido también a esas subculturas.
Y el sacerdote polaco Dariusz Oko ha escrito un libro denunciando lobby gay dentro de la Iglesia Católica.
Pero esto además está asociado con una tendencia creciente dentro del clero a aceptar la homosexualidad como una expresión del sexo más o menos normal.
Hay toda una corriente entre los sacerdotes que propugnan cambiar el Catecismo de la Iglesia Católica donde dice que el acto sexual es intrínsecamente desordenado, quitándole la palabra desordenado; uno de cuyos exponentes más visibles es el jesuita James Martin, que incluso ha sido nombra asesor de comunicación del pontificado del Papa Francisco.
Equipo de Colaboradores de Foros de la Virgen María
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La idea de muchos católicos es que la Iglesia crecerá indefinidamente hasta la segunda venida de Jesucristo.
Sin embargo esto ya ha sido desmentido, porque la época de oro del cristianismo ya fue, fue en lo que se llama la cristiandad, en el medioevo.
A partir de lo cual el mundo se ha ido descristianizando y la Iglesia perdiendo pie en occidente, aunque creciendo en otros continentes.
Además, tanto las escrituras como la doctrina de la Iglesia estampada en su Catecismo, dicen que antes de la segunda venida la Iglesia pasará por una gran crisis, una gran tribulación.
Lo que está evidenciado en la frase de Jesús «Cuando el Hijo del hombre venga, ¿encontrará fe sobre la tierra?» (Lc 18: 8).
Y hoy estamos de cara ante esa posibilidad, debido a lo que se escucha, ve, y lee.
A pocos lectores medianamente atentos se les escapa el desconcierto en la fe que tienen, desde cardenales hasta humildes católicos en los bancos de las parroquias.
Y esto nos lleva a pensar si no estamos cerca de una apostasía muy importante dentro de la Iglesia.
Muchos católicos en los bancos están como anestesiados.
Otros han dejado de preocuparse porque piensan que la solución no está en sus manos.
Lo cierto es el la Iglesia Católica Romana está sufriendo una doble pinza.
Por un lado, la sociedad secular persigue a la Iglesia argumentando su posición respecto al aborto, la supuesta homofobia y demás pecados que la mayoría de los sacerdotes denuncian.
Pero por otro lado se ha gestado una revolución interna de aceptación creciente de la moral laicista. .
Que está desarmando y modificando la doctrina tradicional de la Iglesia.
Esto ya lo previó Nuestro Señor hace 2000 años.
LA PERSECUCIÓN DE LOS CRISTIANOS AL FINAL DE LOS TIEMPOS
Si el mundo os odia, sabed que a mí me ha odiado antes que a vosotros.
Su fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero, como no sois del mundo, porque yo al elegiros os he sacado del mundo, por eso os odia el mundo. (Juan 15: 18-19)
¿Y por qué es esto?
Siempre ha habido un conflicto entre el mundo y los fieles discípulos de Jesucristo.
Jesús nos enseñó a rechazar el pecado, y a amarnos unos a otros. El verdadero amor es incompatible con el pecado.
En la medida en que pecas, que has fracasado en el amor.
Pero el mundo ha abrazado el pecado.
Por lo tanto la sociedad secular pecaminosa siempre tendrá algo para oponerse al cristianismo verdadero y a los fieles.
¿Por qué? porque el amor y el pecado son incompatibles.
Entonces os entregarán a la tortura y os matarán, y seréis odiados de todas las naciones por causa de mi nombre. (Mateo 24: 9)
Esta oposición entre el mundo y los fieles se incrementa o incrementará durante la tribulación, que incluye un gran martirio de muchos cristianos. .
Se ve o se verá un fuerte aumento del odio por las enseñanzas de Jesús y de su Iglesia, y por todos los que creen y viven de acuerdo con esas enseñanzas.
Y al crecer cada vez más la iniquidad, la caridad de muchos se enfriará. Pero el que persevere hasta el fin, ése se salvará. (Mateo 24: 12-13)
Caridad es una palabra usada para referirse al verdadero amor espiritual, es diametralmente opuesta a iniquidad.
El amor y el pecado se oponen el uno al otro porque el pecado es maldad.
Por lo tanto cuando abunda la iniquidad, la caridad se enfría en muchas personas.
Y seréis odiados de todos por causa de mi nombre; pero el que persevere hasta el fin, ése se salvará. (Marcos 13:13)
No vamos a tener éxito en convencer a todo el mundo para convertirse en fieles discípulos de Cristo.
No podemos ganar la guerra cultural entre la sociedad secular de pecado y la fe cristiana. Sin embargo la Iglesia y los fieles no desaparecerán del mundo.
Podemos y vamos a perseverar hasta el final de la tribulación cuando Cristo regrese.
Y los fieles cristianos serán salvados por su perseverancia en la fe, a pesar de la oposición del mundo.
Bienaventurados seréis cuando los hombres os odien, cuando os expulsen, os injurien y proscriban vuestro nombre como malo por causa del Hijo del hombre.
Alegraos ese día y saltad de gozo, que vuestra recompensa será grande en el cielo.
Pues de ese modo trataban sus padres a los profetas. (Lucas 6: 22-23)
Es una bendición ser odiado por la sociedad secular de pecado, si somos odiados por nuestra fidelidad a Cristo.
Con el tiempo, los cristianos serán separados de la sociedad. .
Habrá muchas formas en las que los cristianos no podrán participar en la sociedad.
Por ejemplo, con el tiempo, quizás no haya hospitales cristianos, porque todos los hospitales se verán obligados por la ley y la cultura a cometer pecados graves: aborto, la anticoncepción abortiva, la eutanasia, los procedimientos de transición de género, la procreación artificial, y otros pecados graves.
Con el tiempo, los cristianos fieles no serán capaces de enseñar en las escuelas públicas, y no habrá escuelas privadas cristianas.
Porque todas las escuelas eventualmente serán obligadas por la ley y la cultura a enseñar doctrinas erróneas y fomentar un comportamiento ajeno a su moral, como el caso de la homosexualidad
Y lo mismo puede decirse de los otros tipos de participación en la sociedad.
Los cristianos ya son vituperados por la sociedad por sus creencias, como el rechazo del aborto y la anticoncepción, el matrimonio entre homosexuales, el cambio de sexo, y muchos otros pecados graves.
Y este reproche sólo va a empeorar a medida que la sociedad rechace más la fe en Dios y se haga cada vez más pecaminosa.
También Nuestro Señor dudaba de si encontraría fe cuando volviera en su Segunda Venida:
Pero, cuando el Hijo del hombre venga, ¿encontrará la fe sobre la tierra? (Lc 18:8).
Y eso es una acusación contra la propia Iglesia, que como vemos se irá deteriorando en su capacidad de mantener la fe a su interior.
EL PEOR ATAQUE CONTRA EL CRISTIANISMO VIENE DE ADENTRO DE LA IGLESIA
Los católicos estamos poniendo mucho énfasis en el ataque que estamos sufriendo de parte del mundo occidental laicista que está expulsando a las religiones del área pública.
Pero no tendría el efecto que vemos si el cristianismo estuviera compacto y tuviera la fe que tenían los primeros cristianos.
Aquí nos encontramos ante el dilema del huevo o la gallina, que es primero.
Porque esta actividad y actitud del mundo laicista occidental sólo sería posible en esta magnitud sí el cristianismo no está fuerte.
Sí cristianismo está fuerte y cree realmente en la doctrina, es capaz de salir a evangelizar de nuevo y crear los antídotos ante estos ataques; podría recomponer la cultura que se está perdiendo.
Pero el cristianismo está desvaneciéndose dentro de los propios cristianos.
Hay una herejía monumental en nuestro tiempo.
Que supera a la herejía más grande que ha sucedido en el catolicismo, que fue el arrianismo, la cual negaba abiertamente la divinidad de Cristo.
Ahora existe lo que llamamos un arrianismo sigiloso, que no niega abiertamente ni proclama a toda voz desde los púlpitos la no divinidad de Cristo en las palabras. .
Sino que la niega en sus acciones.
Durante por lo menos los últimos 50 años los arrianistas sigilosos dentro de la Iglesia Católica ya sean laicos, religiosos o sacerdotes, han hecho todo lo posible a su alcance para eliminar las cosas que apuntan a la divinidad de Cristo y a la sobrenaturalidad de nuestra fe.
Ejemplo de esto ha sido el despojamiento en las iglesias del arte sagrado, la arquitectura sagrada, la música sagrada e incluso de los elementos sagrados del santo sacrificio de la misa.
Se ha perdido la maravilla.
Y eso es lo que lleva a muchos católicos a presentarse a recibir la Eucaristía vestidos de manera inconvenientes, tomando la ostia como si estuvieran metiendo la mano en una bolsa de papas fritas y sin asombrarse del milagro.
Y esto se trasmite a todos a través del clima en el propio templo.
Pensemos en la transubstanciación, que aunque se diga que cristo está con su cuerpo y sangre en la hostia consagrada, en el fondo pocos creen en ello.
En el fondo, lo tratan de una explicación piadosa medieval, de algo simbólico.
Lo más sorprendente es que estos individuos asisten a misa y hasta la celebran.
Porque en realidad no tienen por qué participar en misa, ya que descreen de muchas de las cosas que hacen a la maravilla del regalo que nos hizo Jesucristo de vida eterna.
Estamos siguiendo lo que ha sucedido a muchos judíos.
Al que escribe este artículo le ha sucedido ir invitado a una sinagoga e informarse por los propios concurrentes que no creen en Dios, que los salmos que cantan son sólo una expresión folklórica de su pueblo, al cual sí aman.
Y esto es porque la iglesia se ha ido convirtiendo en una ONG que realiza obras de caridad y practica el buenismo, con reuniones sociales básicamente los domingos.
El énfasis no se pone en la evangelización sino en la justicia social la ecología, mejorar la vida de los pobres, etc.
Que es la idea de que lo sobrenatural no es creíble en esta época moderna y ha sido superado por los conocimientos científicos.
Habido una fantástica estrategia de desmitologización de las historia de la Biblia, eliminando los milagros y elementos sobrenaturales de los evangelios.
Lo que ha tenido una influencia muy grande los seminarios, que luego se ha transmitido a los púlpitos en todo el mundo.
El proceso se vendió como un pasaje desde un catolicismo infantil a un catolicismo maduro.
Las historias sobrenaturales tuvieron que ser eliminadas porque no encajaban con el mundo moderno.
Las doctrinas relativas con demonios, ángeles, cielo e infierno fueron extirpadas a través del silencio de los púlpitos.
Porque se consideraban primitivas y medievales y poco creíbles para gente moderna
Y lo peor que esto no partió de los laicistas presionando a la iglesia.
Sino que partió del propio seno de la iglesia, que vació este contenido sobrenatural.
Se llegó a la concepción de que la religión que profesamos es parte de una cultura y por lo tanto hecha por el hombre.
Así que puede ser cambiada su doctrina a los antojos y modas del momento.
Y que en realidad los milagros no ocurren.
De modo que católicos y protestantes por igual han estado creando de la religión cristiana una organización de buenas obras en la tierra.
En lugar de la alimentación de Jesús a los cinco mil que habla la Biblia, desde los púlpitos se ha hablado que el verdadero milagro es el hecho de que todo el mundo comparte la cena.
Y así muchos sacerdotes cuando hablan de la eucaristía se refieren a ella como la Cena del Señor.
Como si fuera un acontecimiento social y no un hecho sobrenatural en el que Cristo se da a nosotros con su sangre y su cuerpo.
Todo ha sido sigilosamente y secretamente reinterpretado por la eliminación de la explicación sobrenatural, dándole a las palabras otro significado que el que originalmente tenían.
Por ejemplo cuando algunos dicen “Aleluya Cristo ha resucitado” quieren decir que de alguna forma, las maravillosas enseñanzas de Jesús continúan siendo practicadas por sus fieles seguidores.
Y lo mismo puede decirse del rol de María en nuestra historia de salvación, cuando a María se la considera una chica judía silenciosa, que tuvo una crisis de embarazo, y dio a luz a un gran maestro.
Entonces la conclusión lógica es que son innecesarios los sacramentos y una vida de arrepentimiento y de fe.
Porque incluso sostienen que todos se salvan y que si el infierno existe, Dios es tan misericordioso que lo tiene vacío.
Del mismo modo se han reinterpretado en muchos casos la confesión, que es considerada para personas inseguras.
También el matrimonio, en el que el criterio actual es que se puede ser flexible porque la misericordia es todo.
Y además la sexualidad, porque Dios puede haber creado muchos sexos y no solo dos, y todos aceptables.
Pero la gente no es tonta y a la larga se da cuenta.
Su conclusión es que si la religión que practican se resume a la paz, la justicia y el trabajo social, entonces ¿qué sentido tiene levantarse temprano para ir a misa, escuchar himnos mal cantados y tristes, una homilía mal preparada y en bancos incómodos?
¿Por qué no quedarse a dormir o ir a disfrutar del buen día con amigos?
Esto nos lleva a la triste realidad.
De que el adoctrinamiento arrianista sigiloso dentro de la iglesia, que ha llevado al rechazo de lo sobrenatural, ha sido tan grave, que sólo permanece un remanente en la iglesia que confía en el poder sobrenatural de Dios.
Basta conversar con la persona que tenemos al lado en el banco para darnos cuenta de todo lo que se ha perdido en el campo sobrenatural.
Todo esto nos hace débiles en lugar de guerreros poderosos y fuertes, listos para enfrentarse a los poderes del mundo dominado por el hijo de la mentira.
Precisamente hablando sobre la necesidad de una nueva evangelización, el Papa Benedicto XVI dijo .
“el verdadero problema de nuestro tiempo es la crisis de Dios, la ausencia de Dios disfrazada por una religiosidad vacía”.
Esto termina derrumbándose por completo, por eso la disminución del número de cristianos en occidente.
Y lo que es peor aún, la disminución de la presencia de la fe en los que aún quedan.
Este ataque espiritual ha generado una epidemia de pereza espiritual que amortigua la vida divina que Dios nos da.
Por eso el camino más seguro para recomponer el cristianismo en occidente es volver a la maravilla de la sobrenaturalidad.
Volver a oír y creer en las maravillosas historias de milagros contadas por la Biblia y sentir y comprender que todo es gracia.
LAS APOSTASÍAS COMIENZAN SIEMPRE DE LO ALTO
La apostasía, o sea la pérdida de la fe o su abandono, es la constante en la historia que narra la Biblia, y por tanto una constante en nuestra historia de salvación.
Dios creó los coros angélicos y a la cabeza estaba Lucifer.
Era el ángel con un intelecto más agudo, el más hermoso y el que tenía la misión de dirigir a los demás.
Pero este ángel que estaba en la cima de todo se rebeló contra Dios y apostató, o sea que perdió la fe en Dios.
Junto con él, un tercio de los ángeles cayeron en la desobediencia.
Y como sabemos San Miguel Arcángel los enfrentó, los venció y luego Dios los envió al infierno.
Luego tenemos que Dios creó al hombre dotándolo de todo lo necesario para su subsistencia y la inmortalidad.
Y también le dio a una mujer como ayudante porque dijo que no era bueno que el hombre estuviera solo.
Los situó en el Jardín del Edén, un lugar paradisíaco, pero les advirtió qué podían comer de cualquier árbol salvo del árbol del conocimiento del bien y del mal.
Pero la mujer fue seducida por el maligno, comió del fruto del árbol, se lo dio de comer a su esposo y esto configuró la rebelión de los primeros humanos hacia Dios.
Y como consecuencia Dios los expulsó del Jardín del Edén y ya no pudieron comer más del árbol de la vida y entró en el mundo la enfermedad, la muerte y la necesidad de trabajar con el sudor de su frente para alimentarse.
Esto obligó a que Dios trazara un plan para recobrar la santidad de la humanidad.
Entonces eligió un pueblo en el que iba a nacer su hijo como Redentor.
En el Antiguo Testamento puede verse como el pueblo judío una y otra vez apostata, pierde la fe en Dios y se rebela contra sus emisarios.
Incluso comienza a adorar un becerro de oro y muchas otras situaciones que marcan su infidelidad constante, lo que Dios permanentemente corrige con intervenciones.
Estas rebeliones eran empujadas por los diferentes líderes judíos del momento.
Hasta que se llega al momento culminante en que ese pueblo elegido no reconoce y rechaza al hijo de Dios, que había sido enviado en misión redentora.
Los propios líderes religiosos del pueblo judío son los que conspiran para crucificar a Jesús.
De modo que tenemos dos comprobaciones en la Biblia.
La primera es que la historia es un camino de pérdidas constantes de la fe en Dios y de intervenciones suyas para recuperarla.
Y en segundo lugar, estas rebeliones que manifiestan la pérdida de fe, parten de la cúpula, o sea de lo más alto de la organización.
Esto sin duda es un patrón, entonces ¿por qué deberíamos descartar que se produzca una pérdida de fe o apostasía masiva en la Iglesia y que se irradie desde la cúpula?
El talante de muchos católicos es descartar esta posibilidad porque hay un pasaje de la escritura en Mateo 16: 18 que dice,
«Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi Iglesia; y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella».
Pero hay otro pasaje de Lucas 18: 8 que dice,
«… sin embargo, cuando el Hijo del hombre venga, ¿hallará fe en la tierra?»
Si bien Jesucristo promete que la Iglesia no desaparecerá, no promete que la Iglesia tendrá una gran estructura y muchos fieles en un futuro, más bien por el contrario.
Y si nos atenemos a esta promesa y a la historia de la creación y de la salvación, es más probable que haya una pérdida de fe importante en la Iglesia Católica en algún momento, que venga desde la cúpula, que lo contrario.
Es perfectamente razonable pensar entonces que la gran estructura actual de la Iglesia desaparezca o ella se transforme en una expresión de fe que no apunte a los mandamientos del Señor.
Mientras que subsistiría un pequeño remanente, dentro o fuera de la Iglesia apóstata, que conservaría la verdadera fe.
Pareciera que aún no hemos llegado a esta etapa pero quizás nos estemos acercando, de acuerdo a declaraciones que estamos leyendo de obispos y cardenales, a homilías que estamos escuchando y a las interpretaciones de la fe que se hacen en los bancos de la Iglesia.
DESDE FÁTIMA SE COMENZÓ A HABLAR INSISTENTEMENTE DE LA APOSTASÍA QUE VENDRÍA DESDE LA CÚPULA
Las últimas décadas ha mostrado un progresivo desvanecimiento de la fe que nos legaron los apóstoles.
Lo cual se aceleró luego del Concilio Vaticano II.
La posibilidad de una apostasía importante proveniente de la cúpula vaticana comenzó a hablarse con más insistencia luego de las apariciones de Fátima.
Todavía hoy se sigue discutiendo el contenido del Tercer secreto de Fátima, en el que los fatimistas aducen que contiene la información de que la Iglesia pasará por una gran apostasía que vendrá desde la cúpula.
Pareciera que efectivamente el Vaticano reveló el contenido que había en la hoja del Tercer Secreto de Fátima en el año 2000.
Pero que había otra hoja que lo complementaba, aunque es discutible si se trata de parte del Tercer secreto o de un cuarto secreto, como se le llama en este momento.
El contenido de esta hoja adicional entregada por su Lucía también al Papa para ser abierta en 1960, hablaría precisamente sobre la apostasía desde la cúpula.
Hay diversos testimonios sobre el contenido del Tercer secreto no revelado o cuarto secreto, como quiera llamársele, que se pueden leer aquí y aquí.
Pero hay algunos aportes de los principales protagonistas que son realmente llamativos sobre el proceso de una apostasía dentro de la Iglesia.
Uno es el contenido del discurso del papa Pablo VI el 13 de octubre de 1977, en el sexagésimo aniversario de las apariciones de Fátima.
El dijo,
«La cola del demonio está actuando para la desintegración del mundo católico.
La oscuridad de Satanás ha entrado y se ha extendido por toda la Iglesia Católica hasta su cumbre.
La apostasía, la pérdida de la fe, se está extendiendo por todo el mundo y en los niveles más altos dentro de la Iglesia.«
Probablemente no sea coincidencia que Pablo VI haya elegido el aniversario de Fátima para revelar lo que contenía esa cuarta hoja lo secretos.
También hay una pista dada por Sor Lucía en una entrevista con el padre Fuentes en 1957.
Lucía le preguntó al padre Fuentes,
«Padre, ¿cuánto tiempo hay antes de que llegue 1960?»
Y luego agregó,
«Será muy triste para todos, ni una sola persona se alegrará si de antemano el mundo no reza y no hace penitencia.
«No puedo dar ningún otro detalle porque todavía es un secreto.»
Esta declaración eso Lucía se produjo en la misma ventana de tiempo en que se estaba planificando el Concilio Vaticano II, que comenzó en el año 1962.
Otra pista la tenemos en el segundo secreto de Fátima donde se lee,
«En Portugal, el dogma de la fe siempre será preservado…»
Frase que entroncaría con el tercer secreto y que supone que habría otros lugares, distintos a Portugal, donde el dogma de la fe no sería preservado.
Hay otro dato importante que fue publicado por el Carmelo de Coímbra en el 2013 en un libro que habla sobre la biografía de la hermana Lucía (Um Caminho sollozo o Olhar de Maria: Biografía de Irmã Lúcia de Jesús y do Coração Imaculado, OCD).
En este pasaje se habla de la preocupación de Sor Lucía por la pérdida de fe en la Iglesia.
Por lo cual se le apareció Nuestra Señora el 31 de diciembre de 1979, quién le habría dicho según el libro,
«Dios ha escuchado tu oración y me ha enviado para decirte que es necesario intensificar tu oración y tu trabajo para la unión de la Iglesia, de los obispos con el Santo Padre y de los sacerdotes con los obispos, para guiar al pueblo de Dios en los caminos de la verdad, la fe, la esperanza y el amor, unidos en Cristo su Salvador.»
La preocupación de Sor Lucía y la recomendación de Nuestra Señora permiten pensar que algo no andaba bien en la fe de la Iglesia.
Pero si bien la idea de una apostasía importante proveniente de la cúpula se cataliza en Fátima, hay otras apariciones marianas y visiones de santos y místicos que hablan sobre una pérdida de fe masiva en la Iglesia Católica.
Nuestra Señora del Buen Suceso
OTRAS VISIONES SOBRE LA APOSTASÍA DENTRO DE LA IGLESIA
Hay varias apariciones marianas que se han referido a un fenómeno de apostasía masiva dentro de la Iglesia.
Unos son los mensajes de Nuestra Señora del Buen Suceso, dados a Sor Mariana de Jesús Torres en Ecuador, entre el siglo XVI y XVII, que dicen,
«Así les hago saber que desde finales del siglo XIX y poco después de la mitad del siglo XX… el espíritu católico decaerá rápidamente; la preciosa luz de la Fe se extinguirá gradualmente…»
Y agregó,
«Varias herejías se propagarán en esta tierra… El pequeño número de almas que, ocultas, preservarán el tesoro de la fe y las virtudes, sufrirán una martirio indescriptiblemente cruel y lento…»
En las apariciones de La Salette en el siglo XIX, aprobadas por la Iglesia, Nuestra Señora le dijo a los videntes,
«Lucifer, con una gran cantidad de demonios, será liberado del infierno. Gradualmente abolirán la fe, incluso entre las personas consagradas a Dios«.
Además especificó,
«La abominación se verá en lugares santos, en conventos, y entonces el demonio se hará rey de corazones».
Y sentenció algo difícil y que ésta relacionado con una apostasía que viene desde la cúpula,
«Roma perderá la fe y se convertirá en la sede del anticristo».
Esto no necesariamente se debiera interpretar literalmente sino como un indicador de la apostasía que vendría desde arriba.
Estos dichos han sido cuestionados por varios cardenales, pero en 1851 el obispo expresó en un escrito,
«[La aparición] tiene en sí todas las características de la verdad, que los fieles están justificados al creer que está más allá de toda duda y con certeza«.
Lo que fue enviado a Roma y recibió la aprobación del Papa Pío IX.
Luego están las apariciones de Fátima, cuyas evaluaciones del supuesto cuarto secreto se pueden leer en detalle aquí y aquí.
San Pío X
Hay otras apariciones marianas que hablan del mismo tema pero no las mencionaremos aquí porque no tienen la categoría de estas otras que manejamos.
Además de Pablo VI, también hay otros Papas que se han referido a este tema, pero en un lenguaje críptico ante esta eventualidad tan delicada.
El Papa León XIII dijo,
«Estos enemigos astutos [los demonios] han llenado y embriagado de hiel y amargura a la Iglesia, la esposa del Cordero Inmaculado, y han puesto manos impías en Sus posesiones más sagradas.
En el mismo lugar santo, donde se ha establecido la sede del más santo de los santos y la silla de la verdad para la luz del mundo, han elevado el trono de su abominable impiedad, con el diseño inicuo de que cuando el pastor haya sido golpeado, las ovejas puedan dispersarse».
El Papa San Pío X manifestó,
«Hay buenas razones para temer que esta gran perversidad sea como un anticipo, y tal vez el comienzo de esos males que están reservados para los últimos días«.
Y el Papa Pío XII declaró,
«Creemos que la hora presente es una fase terrible de los eventos contados por Cristo.
Parece que la oscuridad está por caer sobre el mundo. La humanidad está bajo una crisis suprema».
El punto no es si sobrevivirá una Iglesia llamada Católica sino cuál será su doctrina.
Porque la forma de defensa que está aplicando el catolicismo en muchas áreas, es una cuasi mimetización con las demandas de sus atacantes.
El catolicismo está en la mira de las élites seculares de Occidente. .
Que están decididas a quitar la sana doctrina católica de la esfera pública. .
Y los más radicales de terminar con su existencia por completo.
Los musulmanes radicales están exterminando a los cristianos en medio oriente. .
Y se van infiltrando en occidente, junto con una corriente inmigratoria a Europa en un formato ‘hijra’, que ha usado el Islam en forma exitosa a lo largo de su historia.
Y el Sínodo de la Familia ha demostrado fuertes fracturas entre cardenales y obispos que amenazan un cisma. .
Con una línea de falla en torno al aggiornamiento o no de los 10 mandamientos.
Pero no hay nada nuevo en esto, es la historia del legado de Jesús. .
Se lo dijo a sus discípulos en su despedida, ver capítulo 17 del evangelio de Juan, cuando habló de las persecuciones que iban a sufrir por su nombre. .
Muchas personas se han dado a la tarea de matar el mensaje católico a lo largo de los siglos, y sin embargo hasta ahora no han podido hacerlo. .
Pero eso no significa que otros no lo sigan intentando. Y que no logren reducirlo al testimonio de unas pocas personas.
Los católicos tienen la garantía de nada menos que el mismo Jesús que las puertas del infierno no prevalecerán sobre la Iglesia. .
Pero esas puertas infernales siempre parecen querer abrirse. .
Y no se sabe que porcentaje del catolicismo se podrán tragar.
ES DIFÍCIL ENFRENTAR A ENEMIGOS EXTERNOS CON UNA QUINTA COLUMNA DENTRO
Los últimos tiempos han mostrado operaciones encubiertas dentro de la Iglesia y relajación de la doctrina. .
Y todas las organizaciones y civilizaciones que desaparecieron lo han hecho precedidas por la debilidad interna. .
Hoy la Iglesia exhibe eso más que en ninguna otra época, bajo el signo de la apostasía.
Es relativamente común oír de organizaciones que se hacen llamar católicas que están financiadas por enemigos de la iglesia.
Para promocionar entre los fieles católicos que la Biblia acepta una doctrina disidente, como la homosexualidad, el aborto, la eutanasia, etc. Ver aquí.
La jugada es mostrar a los católicos que es legítimo seguirlo siendo a pesar que se esté a favor del aborto, la eutanasia, la homosexualidad, etc.. .
Con el fin de crear oposición interna que vaya minando la cohesión de la Iglesia. .
Las declaraciones de los últimos tiempos de algunos obispos y cardenales muestran ya la erosión de la doctrina de los apóstoles.
Estas operaciones tienen fuertes vínculos con políticos liberales e izquierdistas y con los gobiernos occidentales
Y sus declaraciones son levantadas con mucha prioridad por los grandes medios de comunicación del sistema.
Sin embargo, probablemente esta no sea la única razón por la que muchos católicos hayan tomado una dirección disidente con la doctrina tradicional de la iglesia.
Porque también analistas mencionan catequesis defectuosas, homilías permisivas y hacer la vista gorda a tendencias negativas desde hace muchas décadas, como la aceptación de los anticonceptivos, el divorcio, etc.
Repasemos algunas de estas tentativas históricas de quienes han tratado de destruir la Iglesia y hablemos también de las amenazas actuales.
EL IMPERIO ROMANO
Los romanos crucificaron a Jesucristo (bajo presión de los judíos).
Y no contentos con matar a Cristo, fueron después a aniquilar a sus seguidores, persiguiendo y matándolos durante cientos de años.
Los emperadores tenían como política pública la tentativa de erradicar a los cristianos, a través del foso de los leones y muchas más técnicas.
Pero ocurrió algo curioso. .
Cuanto más la Iglesia era perseguida, más personas querían saber lo que la Iglesia predicaba. .
Porque veían a los cristianos como se amaban unos a otros y como también perdonaban a sus perseguidores.
Hasta que el propio emperador romano, Constantino, se convirtió al cristianismo y esto puso freno a toda la diversión romana de matar a los católicos.
El Imperio Romano finalmente se disolvió y la Iglesia Católica no sólo sobrevivió sino que fue quien le sucedió.
Veamos un ícono de esto.
SAULO ¿POR QUÉ ME PERSIGUES?
Saulo (luego llamado San Pablo) fue un vigoroso anticristiano.
Como dice la Biblia: «Saulo aprobó la muerte de Esteban» (Hch 8:1).
La escritura habla de las andanzas de este chico malo de buena fe:
«Saulo, por su parte, perseguía a la Iglesia; iba de casa en casa y arrastraba a hombres y mujeres, llevándolos a la cárcel.
Los que se habían dispersado iban por todas partes anunciando la Palabra» (Hch 8:3-4).
Por lo tanto Saulo estaba en una campaña de aniquilar a los cristianos.
Pero eso hasta que una luz del cielo brilló a su alrededor.
Cayó al suelo y oyó una voz que le decía:
«Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?» (Hech 9:4)
Él se quedó ciego, sanó, y luego se convirtió en Pablo, uno de los más grandes evangelistas de la Iglesia que el mundo jamás haya conocido.
Así como de las ruinas del Imperio Romano emergió triunfante la Iglesia Católica, de las cenizas de Saulo emergió Pablo. .
Que algunos dicen, no sin falta total de razón, que fue quien dio forma al cristianismo.
EL CULTO DEL SER SUPREMO
El intento de descristianización de Francia, a partir de la Revolución Francesa en 1789, fue un espectáculo de horror que tuvo como objetivo la supresión de la religión en Francia.
El intento francés de destruir la Iglesia incluyó la confiscación de tierras de la Iglesia, la destrucción de estatuas y cruces.
Así que todos los sacerdotes católicos notorios se ocultaran por el peligro de muerte.
Y por supuesto mataron a muchos católicos.
Algo similar sucedió con la Segunda República en España, en 1936, donde se contabilizan más de 6 mil asesinatos de católicos y en la revolución Cristera de México 10 años antes.
Pero Robespierre, preocupado por la religiosidad de la gente introdujo en 1794 el Culto del Ser Supremo, que él creía que actuaría como una nueva religión del estado.
Era un anticatólico que desconfiaba del ateísmo porque no ofrecía ninguna razón para que la gente actuara moralmente.
Esperaba que el Culto del Ser Supremo alentara la conducta moral.
Robespierre quería la virtud de la gente pero no del gobierno porque él dijo,
«la virtud es la fuente de un gobierno popular en tiempos de paz, la fuente de ese gobierno durante una revolución es la virtud combinado con el terror.
La virtud, sin el terror es destructiva; el terror, sin la virtud es impotente«.
Robespierre estableció el Festival del Ser Supremo en junio de 1794 como un gran espectáculo, sobre todo en París, donde Robespierre habló a la multitud descendiendo de una montaña como Moisés.
Uno de sus colegas, Jacques-Alexis Thuriot, según los informes, fue escuchado decir:
«Mira el cabrón, no es suficiente para él ser maestro, tiene que ser Dios».
Desafortunadamente para Robespierre resultó no ser Dios y fue guillotinado en 1794. .
El culto del Ser Supremo no fue guillotinado pero sufrió la misma suerte. .
La Iglesia Católica sobrevivió institucionalmente y sin mayor cambio de su doctrina.
EL COMUNISMO REAL
La Revolución Bolchevique en Rusia instauró un régimen ateo e imperialista, que se expandió a través del Pacto de Varsovia.
Lenin y Stalin cerraron Iglesias, persiguieron a los cristianos y los enviaron a campos de trabajos forzados, cuando no los asesinaron directamente.
Creó tal peligro en el mundo que la Virgen María tuvo que aparecer en Portugal – bajo la advocación de Fátima – para pedir la Consagración de Rusia a su Inmaculado Corazón. .
Para prevenir que la Unión Soviética esparciera sus errores por el mundo.
Pero un pequeño sindicato polaco en Polonia, en los astilleros de Gdansk, liderado por católicos y apoyado por Juan Pablo II, logró abrir una brecha en el edificio soviético.
Y su imperio se derrumbó en 1989 sin un solo disparo.
Hoy Rusia es un país donde está renaciendo el cristianismo.
Y los valores morales cristianos parecen ser la base de la política moral del gobierno.
Otro tanto se puede decir de los países del ex pacto de Varsovia, que son los que frenan la agenda de reingeniería anticristiana de la Unión Europea.
También el gobierno de China ha perseguido durante mucho tiempo la Iglesia católica mediante la destrucción de iglesias, la eliminación de cruces, y arrestando o simplemente haciendo desaparecer a los cristianos.
Sin embargo, China dio un paso interesante creando una Iglesia Católica de simulación, bajo su propio control.
Querían deshacerse de la Iglesia Católica por lo que crearon una impostora Iglesia Católica.
Este es el caso más claro de la maniobra de preservar nominalmente al catolicismo, pero con un contenido distinto.
Lamentablemente, para China este realmente no ha funcionado.
Porque después de años de persecución, asesinato y la creación de una Iglesia impostora todavía hay millones y millones de católicos y evangélicos reales. .
Y el número sigue creciendo.
LOS TRES ENEMIGOS MAS FUERTES DEL CATOLICISMO ACTUALMENTE
Actualmente podemos ver tres grandes amenazas para la Iglesia Católica.
Que fue generado por la difusión que hizo la Unión Soviética de sus errores entre los sectores intelectuales de occidente.
La Iglesia Católica actualmente está siendo perseguida con una especie de ‘terrorismo de guante blanco’. .
A través de cercenar la libertad religiosa utilizando al lobby gay como punta de lanza. .
Y mediante leyes que van ‘santificando’ una moral alternativa a la judeo cristiana.
Específicamente la ONU tiene como eje de su política internacional el cambio moral extendiendo la homosexualidad y del aborto.
Del mismo modo, la falta de eficacia de la coalición que lidera la lucha contra el Estado Islámico en frenar su expansión territorial en Siria, a pesar de su poder bélico, muestra claramente que el objetivo no ha sido hasta ahora defender a los cristianos perseguidos y masacrados en la región.
Sino exacerbar las disputas entre chiitas y sunitas, definiendo a las comunidades cristianas de la zona como destinadas a ser ‘bajas de guerra’.
Todo esto tiene a los medios de comunicación como una base central de penetración, entre los cuales el diario New York Times es el buque insignia.
El Times ha hecho todo lo posible en los últimos años para atacar a la Iglesia.
Hace unos pocos años el Times se preguntó «¿Está el anticatolicismo muerto?» en realidad respondiéndose a sí mismo, ya que después de rechazar un anuncio por ser «anti-musulmán».
El Times no se preocupa de las iglesias, pero cuando se niegan a participar en la revolución sexual y en el aborto, sale su anti cristianismo.
EL ISLAM
Durante siglos y siglos, algunos líderes del Islam han tratado de destruir la Iglesia Católica.
Las Cruzadas han sido el mayor intento de contener el expansionismo militar musulmán en Tierra Santa,
En el siglo XVI optaron por el asalto a gran escala.
Pero una pequeña coalición de católicos derrotó a la flota del Imperio Otomano en la Batalla de Lepanto, a pesar de estar en inferioridad numérica.
Esa victoria increíble ha sido señalada como uno de los principales puntos de inflexión en la historia de las religiones.
Ahora, los terroristas islámicos radicales han regresado a su estrategia de matar a cada cristiano que se cruce en su camino. . Y el mundo se ha mantenido esencialmente en silencio durante este genocidio.
La Iglesia católica ha pasado por cuatro grandes crisis:
-el Arrianismo (que sostenía que Jesús no era Dios),
-el Cisma de Occidente (entre ortodoxos y católicos),
-la Reforma (separación de los Protestantes) y
-el Modernismo, al que San Pío X llamó la síntesis de todas las herejías.
La Iglesia ha estado luchando contra el Modernismo durante más de un siglo, y en el último medio siglo éste aprovechó las aperturas del Concilio Vaticano II.
Este movimiento ha trabajado en silencio y eficazmente a nivel de laicos y sacerdotes. . Socavando las bases sobrenaturales del cristianismo. . Y abogando por un mayor compromiso con el ‘mundo’.
Todos fuimos groseramente despertados por las campanas de alarma del Sínodo Extraordinario de la Familia.
El drama del Sínodo se puede apreciar en las noticias que dieron los medios de comunicación de un cardenal en oposición a otro cardenal, obispo contra obispo y conferencias nacionales de obispos resistiendo a otras conferencias nacionales.
Esto parece como un cumplimiento literal de la profecía hecha por Nuestra Señora de Akita el 13 de octubre de 1973:
«El trabajo del demonio se infiltrará aun dentro de la Iglesia en tal forma que uno verá cardenales oponiéndose a otros cardenales, obispos en contra de obispos. .
Los sacerdotes que me veneren serán ridiculizados y opuestos por otros sacerdotes… .
La Iglesia estará llena de aquellos que aceptan compromisos…».
Y para culminar el proceso, luego de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia las diferencias se han hecho aún más públicas.
¿EN ESTAS CIRCUNSTANCIAS LA IGLESIA PUEDE CAMBIAR DE NUEVO EL MUNDO?
Cuando la Iglesia cambió el mundo en los primeros siglos era una tarea imposible de realizar por manos humanas.
La Iglesia cambió el mundo para mejor porque los cristianos han hecho el mundo un mejor lugar.
Ha hecho revoluciones en la protección de la vida humana y en la protección de la dignidad y de la libertad de las personas.
Hoy la iglesia se ha extendido a todo el mundo y ha popularizado el plan que Dios plasmó en la Biblia, así como sus mandamientos y la forma de llegar al cielo.
Hoy se conocen masivamente aunque muchos no los acepten o no los vivan enteramente.
Pero además el cristianismo fue responsable del nacimiento y desarrollo de la ciencia y la tecnología tal cual la conocemos y de las artes que hoy disfrutamos.
Jesús prometió que las puertas del infierno no prevalecerán contra la Iglesia que Él ordenó que edificara Pedro (Mateo 16: 18).
Pero no prometió que en este proceso no iba a haber retrocesos.
Hoy el mundo está volviendo al paganismo de la época en qué nació el cristianismo.
Vuelven las matanzas de seres humanos a través del aborto, hay una rebelión contra la naturaleza creada y los cristianos están siendo perseguidos como ciudadanos de segunda categoría por la nueva religión laicista.
Y la ideología mundana ha penetrado en la Iglesia corrompiendo a varios sectores en ella, lo que es más visible por la eficacia de los medios de comunicación.
En todas las épocas hubo formas de corrupción, pero muchas veces estaban ocultas porque los medios de comunicación lo eran tan omnipresentes.
Hoy volver evangelizar el mundo es una tarea tan sobrehumana como lo fue en los primeros siglos.
Pero la Iglesia sigue siendo el instrumento porque es en el único lugar donde existe el evangelio que trajo Jesús, al menos en una parte de ella.
Los problemas internos y las corrupciones dentro de la Iglesia llevan a algunos a ser pesimistas y a sostener que si Jesús volviera de nuevo no la reconocería.
Pero a pesar de la lucha interna que hay dentro de ella, no podemos afirmar que se ha convertido en algo contrario a lo que Jesús quería.
No debemos tener la tentación purista de creer que todo en la Iglesia es Jesús personificado o debería serlo.
La Iglesia es una institución humana, con los propios defectos humanos, aunque es protegida y guiada el Espíritu Santo.
Si leemos la Biblia y estudiamos la historia de la iglesia veremos que siempre hubo una fuerte lucha interna contra las herejías, y hoy no es diferente.
Aunque podemos aceptar que la diferencia está en que los problemas son distintos hoy y que el mundo es mucho más agresivo que en los siglos anteriores.
Pero la persistencia de una núcleo de pureza cristiana dentro una mar de confusión y de herejías, es lo que justifica que es la Iglesia no sea un proyecto solamente humano.
Si la iglesia pudo evangelizar el mundo romano en los primeros siglos, no podemos dudar que puede volver a hacerlo, porque es la obra del Espíritu Santo la que permite esto y no el mero esfuerzo humano.
Todo depende cuando el Señor lo permita.
ORACIÓN Y TEMPLANZA
Una buena noticia es que el catolicismo ha sobrevivido a todos los enemigos a nivel histórico. . Pero a nivel de las vidas personales, los católicos han debido pasar momentos difíciles.
¿Qué deberían hacer los católicos hoy para rsistir?
En primer lugar, orar. . La batalla es del Señor. .
«Estén prevenidos y oren incesantemente, para quedar a salvo de todo lo que ha de ocurrir. .
Así podrán comparecer seguros ante el Hijo del hombre» (Lc 21:36).
En segundo lugar, fortalecerse con el estudio de las Escrituras. .
Los católicos deben conocer la fe, estar familiarizados con las Escrituras, conocer la enseñanza constante de la Iglesia.
En tercer lugar, transmitir la fe mediante la enseñanza dentro de la familia, mediante la práctica de orar juntos.
En cuarto lugar, que los católicos se apoyen mutuamente, solidifiquen su relación a nivel de las parroquias, orando y compartiendo en las casas, incluso apoyándose a nivel laboral.
En quinto lugar, asumir compromisos en actividades políticas y sociales para ampliar su influencia y marcar presencia.
En sexto lugar, prepararse para un posible martirio.