Los cristianos son un tercio en el mundo, pero sufren el 80% de las persecuciones.
Y no es en medio de una guerra entre religiones, sino una persecución unilateral.
Porque en ninguna parte del mundo los cristianos persiguen a fieles de otras religiones.
No es raro que el mundo no preste atención a esta persecución.
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Pero sí es raro que los propios católicos no se den cuenta que su religión es actualmente la más perseguida.
Y mirando el mapa de tales persecuciones, se llega a la conclusión de que es un fenómeno global y no sólo circunscrito al mundo musulmán, que es donde es más fuerte y hace “más ruido”.
DEBEMOS RECONOCER QUE LA PERSECUCIÓN ES GLOBAL
La persecución se registra con diferentes modus operandi tanto en el mundo comunista, como en el mundo musulmán, como en occidente, en el mundo hindú y budista.
Los funcionarios de la Iglesia, los sacerdotes, deberían sensibilizar a sus parroquias sobre esto.
Pero lamentablemente no lo hacen.
Tímidamente mencionan alguna vez de la persecución mediáticamente más notoria, que es la que realiza el Estado Islámico, y piden oración.
Pero jamás mencionan la persecución de la Iglesia en occidente que es más sutil, no implica la violencia física, pero sí represalias legales.
El caso más típico de la persecución en occidente es por la presión del lobby gay, que se niega a permitir que se mencione la posición bíblica contra el estilo de vida homosexual.
Y utiliza los tribunales para sancionar económicamente a quienes osan hablar de ello, porque dicen que es un discurso de odio y discriminatorio.
Es así como gente pierde su trabajo, son relegados en ascensos, pierden sus empresas, se enfrentan a multas y cárcel.
El periodista católico John L. Allen Jr. escribió La Guerra Global contra los cristianos: Despachos desde las líneas del frente de la persecución contra los cristianos, donde explicita la tesis de la persecución global de los cristianos.
Aunque su libro no se ocupa de los asuntos de la libertad religiosa que se enfrentan los católicos americanos y europeos, sino de las “amenazas a la vida y la integridad física que enfrentan los cristianos en otros vecindarios globales.”
El libro tiene éxito en disipar la noción que la violencia anti-cristiana es “rara y excepcional.”
Desde el cambio de siglo, se ha estimado que 100-150.000 cristianos han sido martirizados anualmente.
Otras formas de acoso que los cristianos deben soportar, sobre todo en los países donde son una minoría, incluye:
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la discriminación social, la discriminación laboral, la discriminación legal, así como la supresión de la actividad misionera cristiana y de culto, y las conversiones forzadas.
Desde Irak a Nigeria, de China a la India, de Europa a EE.UU., los gritos de sufrimiento cristiano perforan los cielos:
“En Ramá se oyeron gritos, grandes sollozos y lamentos: es Raquel que llora a sus hijos: éstos ya no están, y no quiere que la consuelen”. (Mt 2:18)
En todo esto, nuestros propios corazones claman preguntando por qué. ¿Por qué está pasando esto? ¿Por qué los cristianos sufren tanta persecución hoy?
¿Por qué ha habido más mártires de la fe en el siglo XX que en los anterior 19 siglos juntos?
UNA PERSECUCIÓN QUE NO ES DE ESTE MUNDO
En el mundo occidental la mayoría de las religiones son toleradas.
El Budismo, el Hinduismo, la Nueva Era incluso son promocionadas como sustitutos del cristianismo.
Incluso el Islam, a pesar de los ataques terroristas y que es una ideología absolutamente opuesta al liberalismo occidental, es más tolerada que el cristianismo.
Objetivamente se puede ver como una reacción exagerada, porque no se trata solamente de desprecio, sino de una persecución activa a todas las manifestaciones cristianas.
En muchos lugares la Navidad se llama vacaciones, los pesebres están prohibidos, la Semana Santa es semana de turismo.
Sin embargo las fiestaS judías y musulmanes se llaman por su nombre.
Se acepta de buen grado que una persona esté orgullosa por ser pro aborto o pro LGTB pero se desprecia que sea cristiana.
Hay algo que a simple vista parece misterioso en la profundidad de la ira y el odio contra el cristianismo.
¿Porque es necesario que se opongan tan ferozmente al cristianismo?
¿Porque quieren borrar cualquier traza de sus manifestaciones?
Esta obsesividad parece excesiva y está más allá de una oposición racional.
Pero no nos debe sorprender porque esto ya está avisado por Jesús.
“Si el mundo os odia, sabed que a mí me ha odiado antes que a vosotros.
Su fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero, como no sois del mundo, porque yo al elegiros os he sacado del mundo, por eso os odia el mundo. Acordaos de la palabra que os he dicho: El siervo no es más que su señor.
Si a mí me han perseguido, también os perseguirán a vosotros” (Juan 15: 18-20).
En este pasaje se debe interpretar la palabra mundo cómo el conjunto de ideologías, poderes políticos y económicos alineados en contra de Dios y sus enseñanzas.
Sin embargo muchos cristianos no toleran que el mundo los odie y comprometen su fe ocultando cualquier práctica cristiana.
Se niegan a ser testigos (testigo = mártir en griego).
Esto es un signo pecaminoso de debilidad que la Biblia ya advirtió.
«¡Adúlteros!, ¿no sabéis que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Cualquiera, pues, que desee ser amigo del mundo se constituye en enemigo de Dios« (Santiago 4: 4).
Él sólo nombre de cristianos ya implica un nivel de persecución, pero el practicar la fe más profundamente es el gran motor que eleva fuertemente la persecución.
El mundo nos odia más cuando somos verdaderos cristianos.
Para las élites culturales y de poder del mundo Jesús y el cristianismo son el enemigo público número 1, lo mismo que para el maligno.
El maligno, el príncipe de este mundo, transmite su miedo al mundo.
Y a pesar que muchos católicos quieren reformar su doctrina para evitar la persecución, igual serán perseguidos, porque la Iglesia tiene la impronta del Señor y esto es intolerable para el “padre de la mentira”.
Pero en medio de esto hay una buena noticia.
Porque si Cristo no fuera el verdadero Salvador y la Iglesia Católica la única fe verdadera, no serían tan sistemáticamente perseguidos.
Veamos 10 explicaciones que engloban todas las fuentes de persecución.
LAS 10 RAZONES REALES POR LAS QUE EL CRISTIANISMO ES LA RELIGIÓN MÁS PERSEGUIDA
Hay aquí 10 razones profundas por las que los cristianos son perseguidos de manera desproporcionada.
1 – EL CRISTIANISMO ESTÁ CRECIENDO DE MANERA ESPECTACULAR EN LO QUE A MENUDO SE LLAMA EL SUR GLOBAL
Este crecimiento sólo es posible porque los cristianos evangelizan activamente, compartiendo el evangelio de la salvación con los demás.
Este impulso misionero es visto como una amenaza por los sistemas políticos y sociales especialmente estratificados de los países menos desarrollados y dirige la atención hacia los cristianos.
Los cristianos en general son ajenos a las estructuras de poder y dominación de esos países.
Y a menudo crece entre los marginados, como por ejemplo en la India, donde el crecimiento cristiano se da preferentemente entre los Dalit, que son los ‘intocables’ la casta más baja de la sociedad.
2 – EL CRISTIANISMO ESTÁ CRECIENDO RÁPIDAMENTE EN ALGUNAS DE LAS ZONAS MÁS PELIGROSAS DEL MUNDO
Sobre todo en partes de Asia, África subsahariana, e incluso en el Medio Oriente.
En estas áreas volátiles, cualquier alteración del frágil status quo es potencialmente desastrosa y los cristianos están sufriendo a causa de ello.
En estas naciones el cristianismo es un fenómeno nuevo que no tiene expresiones políticas ni culturales autóctonas, y por lo tanto es más desconfiable, está menos protegido y es más atacable.
3 – EL CRISTIANISMO ES A MENUDO VISTO COMO UNA FORMA DE IMPERIALISMO OCCIDENTAL Y SE IDENTIFICA CON «OCCIDENTE»
Esto hace de los cristianos un objetivo natural para muchos movimientos nacionalistas.
El nacionalismo siempre busca unificar la nación mediante la exclusión de las minorías.
Crean la unidad a través del odio y los cristianos, que viven para otro reino, son a menudo el blanco de este odio nacionalista.
Un ejemplo de esto es el nacionalismo hindú extremo que se refiere a los cristianos como anti-hindúes.
4 – LOS CRISTIANOS ESTÁN A MENUDO A LA VANGUARDIA DE LA PROMOCIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS Y LA DEMOCRACIA
Así como también los cristianos se oponen a la violencia, la corrupción y la explotación de los pobres.
Por tales hechos, suelen ser objetivo de los poderosos, ya sean gobiernos o grupos de la mafia, que no dudan en usar la violencia u otras fuerzas de coacción para conseguir lo que quieren.
Por ejemplo, los señores de la droga latinoamericanos asesinan sacerdotes católicos y otros líderes cristianos porque son los únicos que defienden los derechos de los pobres.
Y en China los obispos y pastores son encarcelados porque no se adhieren a la Iglesia Cristiana que ha fabricado el régimen.
5 – LOS CRISTIANOS TIENEN SU MÁXIMA LEALTAD AL REINO DE DIOS, QUE NO ES DE ESTE MUNDO
Como tales, son vistos con recelo por los gobiernos totalitarios que, como su nombre indica, quieren un control total sobre los cuerpos y las almas de las personas.
Las filosofías de vida distintas a las oficiales son consideradas el enemigo.
Y sobre todo si tienen la imagen de estar vinculadas a estilos de pensamientos de otras regiones, lo que sucede con la identificación cristianismo y occidente.
Esta es la razón detrás de gran parte de la persecución en lugares como China, y más aún en Corea del Norte.
6 – LOS CRISTIANOS, COMO UN TODO, RECHAZAN LA VIOLENCIA Y LAS REPRESALIAS
La persecución es invariablemente del fuerte oprimiendo al débil – o en el caso del cristianismo, los mansos.
De modo que persiguen a los cristianos simplemente porque pueden.
En cambio no se meten con los musulmanes porque saben que son usuarios consuetudinarios de la violencia.
Esta forma de actuar a través de la ausencia de miedo a los cristianos la vemos en occidente, en que muchos que no se atreven a criticar a los musulmanes, se la agarran con los cristianos.
Por ejemplo, los musulmanes fundamentalistas son extremadamente violentos contra los homosexuales, sin embargo en occidente el blanco predilecto del lobby gay son los cristianos y mantienen la boca llamativamente cerrada respecto a los musulmanes.
7 – EL CRISTIANISMO ES LA RELIGIÓN POR EXCELENCIA DEL MARTIRIO
Desde su creación, empezando por Jesús, seguido de sus discípulos y la Iglesia primitiva, muchos cristianos han aceptado el martirio antes que abjurar de su fe, en tiempos antiguos a manos de los romanos, en tiempos medievales y en tiempos modernos a manos de los musulmanes y otros.
Pocas otras religiones alientan a sus seguidores a abrazar la muerte en lugar de retractarse, como se recoge en las propias palabras de Cristo:
“Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 10:33, véase también Lucas 14:33).
Es por esta razón que los cristianos en general no rehúyen el martirio y lo enfrentan, por eso son un blanco predilecto.
8 – EL CRISTIANISMO ES UNA FE PROSELITISTA, QUE BUSCA GANAR ADEPTOS
Ninguna otra religión importante – incluyendo el budismo, el hinduismo, el judaísmo y también el propio Islam –, tiene este aspecto misionero (estas religiones tienden a ser colindantes con sus respectivos grupos étnicos: los budistas = asiáticos; el judaísmo = los judíos; el hinduismo = los hindúes).
De este modo el cristianismo es la única religión que va a los territorios que son ‘cotos de caza’ de otras religiones.
Por ejemplo en el mundo musulmán el cristianismo no sólo es la principal religión de ser acusada de hacer proselitismo, sino, al pronunciar públicamente enseñanzas que contradicen a Mahoma, los cristianos son acusados también de blasfemar.
9 – EL CRISTIANISMO ES LA RELIGIÓN MÁS EXTENDIDA EN EL MUNDO, ES MÁS VISIBLE
Hay cristianos prácticamente en todas partes alrededor del mundo, incluyendo en gran parte del mundo musulmán. Y los medios de comunicación difunden el temperamento de que los cristianos son atacables o perseguibles.
Además, dado que gran parte de la tierra que el Islam se apoderó fue originalmente cristiana – incluyendo el Medio Oriente y el Norte de África, la región que hoy se conoce como el “mundo árabe” – los musulmanes de todo el mundo están siendo confrontados con vestigios del cristianismo.
Por ejemplo, en Siria, donde muchas iglesias y monasterios antiguos están siendo destruidos por grupos vinculados a Al Qaeda.
Del mismo modo, en Egipto, donde Alejandría era un centro importante del cristianismo antiguo antes de las invasiones islámicas del siglo VII, aún quedan al menos 10 millones de cristianos coptos (aunque algunos ponen un número mucho más alto).
Debido a la enorme cantidad solamente, entonces, los cristianos autóctonos, por ejemplo, son mucho más visibles y expuestos a los ataques de los musulmanes que otros grupos religiosos de todo el mundo árabe.
10 – LOS CRISTIANOS SON PERSEGUIDOS PORQUE CRISTO ES PERSEGUIDO
Satanás “sabe que le queda poco tiempo” y por lo tanto, incapaz de llegar a Cristo o a su Madre (Apocalipsis 12:12), él hace la guerra “al resto de sus hijos, es decir, a los que observan los mandamientos de Dios y guardan el mensaje de Jesús” (Apocalipsis 12:17).
Esta es la realidad oculta detrás de toda persecución, la causa eficiente que mueve la maquinaria de persecución contra los cristianos.
El mundo y el diablo siguen persiguiendo a Cristo por medio de su pueblo (Hch 9: 4-5), así como Cristo dijo que: “Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán” (Juan 15:20)
Es lógico que la ‘herramienta’ de Dios para difundir su reino sea la más atacada, o sea la Iglesia y sus fieles
Sin embargo hay 7 mitos que andan circulando entre los cristianos que los inmovilizan frente a esta persecución.
7 MITOS EQUIVOCADOS SOBRE LA PERSECUCIÓN A LOS CRISTIANOS
1 – HAY PERSECUCIÓN SÓLO CUANDO HAY VIOLENCIA FÍSICA
La persecución de los cristianos incluye sin duda la violencia.
Basta recordar los terribles ataques a iglesias cristianas en Egipto durante el Domingo de Ramos
Pero la persecución también incluye el ostracismo lento y constante, la opresión a los ciudadanos cristianos y las presiones para que no puedan expresar su fe.
A esto le llamamos una política de “estrangulamiento”.
Muchas regiones imponen esfuerzos a largo plazo para impulsar a los cristianos a los márgenes de la sociedad, al quitarlas de la vida comunitaria, el acceso a las clínicas e incluso puestos de trabajo, tratándolos como ciudadanos marginales.
Esta es la persecución generalizada en lugares como Bután, Vietnam, India y muchas otras regiones del mundo.
Y también es persecución cuando no se permite que los cristianos puedan hablar públicamente de su fe, sostener un estilo de vida basado en los evangelios y llevar signos externos de su fe, como por ejemplo medallas y crucifijos.
Esto es lo que sucede en occidente.
2 – LOS CRISTIANOS MÁS PERSEGUIDOS ESTÁN EN EL MEDIO ORIENTE
El Oriente Medio es una región más difícil para los cristianos que viven su fe en público. Esto es verdad.
En lugares como Irán, Qatar y Eritrea, ser cristiano es peligroso y arriesgado, y podría costar la vida.
Sin embargo, si estamos hablando de la persecución a gran escala, tenemos que pensar en países como India, Corea del Norte, Nigeria e incluso China.
No vemos estas ubicaciones en las noticias tan a menudo, pero la persecución aquí, por su número, es abrumadora.
Y en occidente, la persecución pasa desapercibida porque es más sutil y basada en las leyes.
Pero trate un cristiano occidental de hablar por la televisión por ejemplo, sobre lo que dice el catecismo sobre el aborto o sobre la homosexualidad y verá si es perseguido o no.
3 – SI EL ISIS FUERA EXTERMINADO, LA PERSECUCIÓN EN LUGARES COMO IRAK Y SIRIA DESAPARECERÍA
De hecho el ISIS es un actor violento contra el cristianismo. Y fue casi destruido en Siria e Irak, y la violencia contra los cristianos no cesó.
Mientras los musulmanes sigan haciendo una interpretación supremacista del Corán, los cristianos se enfrentarán a la persecución en los lugares donde los musulmanes son mayoría.
Se trata de la teología islámica.
Mientras los musulmanes no modifiquen su teología o sean doblegados como sucedió en el pasado, la persecución musulmana persistirá.
4 – LA PERSECUCIÓN DE LOS CRISTIANOS ES SÓLO POR LA DIFERENCIA CULTURAL
Hay muchas complejidades culturales, esto es cierto.
Desde Somalia a Siria, las diferencias culturales están profundamente arraigadas, y contribuyen a la persecución, ya sea gubernamental, nacionalista o relacionada con la fe.
Sin embargo, la persecución es mucho más profunda.
Porque los laicistas que persiguen a los cristianos y estos, en occidente, son de la misma cultura.
En la raíz de todo esto, hay una guerra espiritual. En realidad no estamos luchando contra un adversario físico.
Como San Pablo dice en Efesios,
“Nuestra lucha no es contra la sangre y la carne, sino contra principados, contra potestades, contra los poderes de este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales de maldad en las regiones celestes”.
Son estos seres malignos que tientan y azuzan a algunos grupos contra los cristianos.
Esta es la verdadera persecución y no debería ser pasada por alto.
5 – LA PERSECUCIÓN HA SIDO PEOR EN EL PASADO
Falso. Estamos viviendo el momento en que la persecución está en su punto más alto.
Más de 200 millones de cristianos sufren persecución sobre una base regular.
Cada mes, 322 cristianos son asesinados por su fe; 214 iglesias son destruidas y 722 actos de violencia física son cometidos contra los cristianos.
Hemos pasado por períodos difíciles en el pasado, sin duda, pero en todo el mundo la persecución nunca ha sido más intensa de lo que es en este momento de la historia.
6 – DIOS USA LA PERSECUCIÓN PARA EL CASTIGO
Puede ser que sí. Dios usa la persecución como parte de su plan soberano para difundir el Evangelio y fortalecer a los creyentes.
La persecución era frecuente en la iglesia primitiva y a los apóstoles No siempre vamos a entender los caminos de Dios.
A lo largo de la historia, Dios la ha usado para purificar y difundir su iglesia.
Dios tiene su manera de aprovechar todas estas cosas para difundir el Evangelio
Pero eso no quiere decir que debemos abrazar la persecución o rezar por ella cuando sucede.
Porque la persecución priva de valiosos evangelistas y como sucede en occidente, está creando generaciones enteras que no han oído hablar de Dios.
7 – LA PERSECUCIÓN GLOBAL DE CRISTIANOS NO ME AFECTA EN MI PAÍS, Y ADEMÁS NO HAY MUCHO QUE HACER
Este es quizás uno de los mitos más peligrosos que hay.
Somos un solo cuerpo. Cuando un miembro sufre, todos sufrimos.
Es por eso que es tan importante mantenerse al tanto de lo que ocurre a nivel mundial en la iglesia.
La Iglesia triunfante (los que llegaron al cielo), la Iglesia purgante (los que se purifican en el purgatorio) y la Iglesia que peregrina en la tierra, somos un solo cuerpo unidos por el Espíritu Santo.
Cuando un hermano es herido, se está hiriendo una parte del cuerpo y eso lo sufrimos todos.
Es por eso que es necesario escuchar, aprender, comunicar, orar, ayunar, afligimos y adorar juntos. Somos un solo cuerpo.
Pero además, tal como están evolucionando las cosas, quizás el presente de los hermanos más perseguidos sea nuestro futuro.
Porque en la medida que no paremos esta oleada de persecución, se puede extender como mancha de aceite en el mar.
Es fácil desde occidente ver la persecución cristiana con violencia física como algo lejano, inmutable y demasiado complejo para cambiar.
Sin embargo, hay muchas cosas que podemos hacer, todos los días para entrar en batalla y ayudar a nuestros hermanos y hermanas que sufren en todo el mundo por su fe.
La oración es nuestra mejor arma.
También se puede ser voluntario creando conciencia, escribiendo cartas, firmando peticiones, haciendo grupos de oración.
Y por supuesto también podemos proporcionarles ayuda material.
Biblias, literatura cristiana, recursos legales y de comunicación y dinero para reconstruir las casas e iglesias.
UN CAPÍTULO ESPECIAL PARA OCCIDENTE
Nunca los cristianos han sido tan perseguidos en occidente como ahora, después del Edicto de Milán en el siglo IV, que legítimo al cristianismo.
La persecución a los cristianos en occidente tiene un formato distinto que la que se realiza en medio oriente por ejemplo.
Se realiza de tres maneras.
Por un lado a través de leyes que condenan lo que llaman discurso de odio.
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Por otro lado la persecución a través de la estigmatización de los cristianos en los medios de comunicación, el mundo del espectáculo y la educación.
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Y por otro coartando posibilidades laborales a los cristianos.
El caso más desequilibrado de esto fue la norma del gobierno canadiense de no otorgar trabajos de verano a los estudiantes cristianos.
A esto hay que agregar el crecimiento en Europa de los atentados contra iglesias.
Esta persecución varía según sea el continente y el país.
En Europa y el Norte de América la persecución es mayor que la que se ve en América Latina.
Pero en todos lados la persecución está creciendo.
Vemos por ejemplo que dueños negocios son multados y obligados a asistir a cursos de capacitación para sensibilizarlos hacia la homosexualidad porque se han negado hacer por ejemplo pasteles de bodas en bodas de personas del mismo sexo.
Y son penadas y cerradas las instituciones de adopción de niños, que creen que lo mejor para los niños es que la pareja de padres adoptivos sea un matrimonio de hombre y mujer.
El caso más extremo es la campaña permanente de Gobernadores de Estados, políticos y universidades contra la cadena de comidas rápidas Chick-fil-A en EE.UU., porque tiene institucionalmente la posición de que el matrimonio es entre un hombre y una mujer.
En cambio aplauden a las grandes empresas de tecnología por promocionar la cultura gay.
En las aulas hay libertad de expresión sobre todos los temas salvo cuando se trata el tema de Jesús.
Se puede hablar de cualquier religión de cualquier estilo de vida pero no se puede mencionar a Jesús, porque lo consideran un discurso de odio frente a aquellos que no creen en Jesús.
El pluralismo se aplica para todas las religiones, especialmente para el Islam, pero se le niega al cristianismo.
En Europa – especialmente en el norte de Europa – y en Canadá – que es uno de los abanderados de esta persecución – son encarcelados y multados quienes leen pasajes de la Biblia donde se condena por ejemplo la homosexualidad.
Y lo mismo pasa con la defensa de la vida.
Los críticos a las posiciones abortistas son fuertemente estigmatizados en los medios de comunicación en la mayoría de Occidente, incluso en América Latina.
Esto se inscribe dentro de una política deliberada de descristianizar Occidente.
Y en Europa occidental se nota además una política de las élites gobernantes de islamizar el continente.
Sin embargo esto último está siendo contrarrestado por el renacimiento de los nacionalismos y la defensa de la cultura autóctona europea.
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